Una Dama con un mal genio

1.6K 61 14
                                    

-       -          ¡Pero es que no entiendo!- me repitió Tyler por décima cuarta vez-. Enserio admiro toda tu paciencia y constancia pero ¡No entiendo!

Suspiré por décimo cuarta vez. Tyler y yo habíamos quedado en hacer un trabajo de química juntos en mi casa y el trabajo tenía defensa y bueno…explicarle a Tyler era algo…difícil. Aunque soy una persona paciente, Tyler comenzó a ponerme a prueba por que el pobre seguía sin entender cómo hacer enlaces y su reacción. Ya me dolía el trasero estar sentada tanto tiempo en la mesa del comedor.

-          Tyler- le hablé-. Respira…

-          Eso llevo haciendo desde hace dos horas- me respondió-. ¡Odio química! Todo fue culpa de esos viejos. Estoy casi seguro, Sue, que esos viejos barrigones no tenían nada que hacer y por eso inventaron estas cosas. Y ahora se ríen desde allá arriba por qué no podemos entender nada.

Carcajeé fuerte. Tyler cuando se enojaba o frustraba decía cosas muy divertidas y era mi gracia lo que también le hacía enojar también.

-          Si, búrlate, Wiltmore, búrlate- exclamó el rubio haciendo ademanes-. Que cuando reprobemos veremos quien ríe mejor.

-          Si, el profesor reirá mejor- respondí-. Te explicaré de nuevo.

Y ahí iba yo de nuevo. Volví a explicarle como se formaba el enlace y el por qué de la reacción. Cuando terminé de hablar, solo vi que Ty se quedó mirando nuestra hoja de práctica con una mueca.

-          ¿Entendiste?- pregunte esperanzada. Hasta crucé los dedos.

-          Entonces…el resumen de todo esto es que: los enlaces son los que se unen con la molécula y forman la…la…¿reacción?- me miró un poco inseguro.

-          ¿No entendiste nada, no?

Bufé. Ahora sí había perdido mi paciencia, la poca que me quedaba. Dejé caer mi cabeza sobre la mesa y solo me di un buen golpe, haciendo reír a Tyler.

-          Auch- aullé, frotándome mi frente.

-          Eso si lo entendí- reía Tyler.

-          Oh, cállate- le ordené dando un leve golpe en su brazo-. Es enserio Tyler, tienes que aprenderte esto muy bien. Sabes cómo es el profesor Theodore.

-          Eso ya lo sé- respondió Tyler cruzando los brazos-. Pero esto es imposible. Estoy seguro que un perico entendería mejor esto que yo.

-          Posiblemente, si.

-          Igualada- dijo Tyler haciéndose el ofendido.

La puerta de la entrada se abrió. Por el sonido de los tacones, supe que era Genevieve. Me parecía extraño que hoy llegase tan temprano. Tyler alzó la cabeza cuando Genevieve pasó frente a nosotros con un lindo abrigo azul cielo y tacones beige. Al parecer no se percató de nuestra presencia, por que pasó frente a nosotros y entró a la cocina. Tyler me miró maravillado.

-          ¿Y esa barbie quién es?

-          Mi hermana, Genevieve Wiltmore- le expliqué-. Creí que las barbies eran rubias.

-          No, ella es una barbie inglesa- insistió mi amigo.

Genevieve salió de la cocina con un vaso de jugo de naranja mientras gritaba:

-          ¡Ya legué!

Subió las escaleras, viendo si había alguien. Pues claro que lo había. ¿Acaso Tyler y yo somos muebles? Genevieve necesitaba lentes, enserio.

Different MindDonde viven las historias. Descúbrelo ahora