Recuerdos Dolorosos

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Acepté irme en el autobús con Tyler a pesar de mis intentos de hacerle ver que estaría bien caminando, pero era terco y prácticamente me arrastró hasta el bus amarillo. Era la primera vez me que montaba en uno. En mi antigua escuela no solía coger autobús, iba en bicicleta o caminando; así que… ¿Gimnasio para que lo quiero?

Tyler se sentó en uno de los puestos de adelante pero yo quería de los del medio, pero por alguna razón el negó con la cabeza. Me preguntaba por qué, pues el bus estaba prácticamente vacío.

-          Es mejor aquí- me dijo él, dando palmaditas al asiento que apartó para mí-. Es más fácil bajarse.

-          De acuerdo- me encogí de hombros-. Te noto algo nervioso ¿Por qué?

-          ¿Nervioso? ¿Yo?- se preguntó a sí mismo y se hechó a reír. No Tyler, no sabes mentir-. Claro que no. Es imposible que esté nervioso…

Apenas entraron otros chicos del equipo de futbol (lo supe por las chamarras azules con las iniciales de la escuela, sabía que había aprendido algo el día de hoy) Tyler se puso rígido y no pareció advertir su llegada hasta que uno de ellos, uno de cabellos negros le llamó:

-          Oigan muchachos- los chicos junto a él le miraron-. ¿Tyler Welch con esta lindura? No puedo creerlo.

Los demás se echaron a reír. Alcé una ceja hacia él. ¿Lindura, me llamó lindura? Con palabras bonitas no vas a ganarme, amigo. El chico se acercó a mí, su brazo apoyado del respaldo de mi asiento y su mirada cerca de la mía. ¿Te doy un puñetazo o qué?

-          Hola preciosa. Soy Donovan Hawkins, pero las nenas me llaman Don - me dijo con voz seductora-. ¿Qué haces aquí? Ven atrás con los hombres. No sé si habrás notado que Tyler es una chica en cuerpo de hombre, guapa.

Si, te llaman Don…Don Juan será, igualado. Más risas por parte de su grupo de amigotes. Ya vería lo que se llevaría este niño bonito.

-          Disculpa, guapo- le dije con mi cara angelical-. Pero creo que estoy mejor aquí. Sí, se quien es Tyler y estoy segura que es mucho más hombre que todos ustedes que solo están bien consigo mismos humillando a los demás.

Un “oh” y alaridos se escucharon de sus compañeros. Debían ver la cara del Don Juan, al parecer nunca había sido rechazado. Mejor cuéntame como la primera en tu lista, hombre.

-          Como quieras- me dijo rodando los ojos.

Me acomodé en mi asiento, triunfante. Me giré hacia Tyler, una sonrisa cruzando su rostro. No era una sonrisa común, era “la” sonrisa…y me gustaba verlo así.

Pude ver a Josh, su gemelo subirse al bus y mirar a su hermano con…como explicarlo ¿Asco?

Es enserio. Es tu hermano, idiota. Bueno, no lo conozco para decirle eso pero…!Es tu hermano! No diré que mi hermana y yo somos las mejores amigas, pero jamás le haría eso. Ya me preguntaba por qué se llevan mal.

-          Ty- le llamé y él me miró asombrado-. ¿Qué?

-          Me llamaste Ty- dijo aún con los ojos bien abiertos.

-          ¿Te ofendí?- pregunté apenada.

-          No, no, al contrario. Me alegraste- me calmó.

Vaya, de seguro era la primera vez que lo llamaban Ty. Me gusta así, Ty, es corto, fácil de recordar y lindo.

-          Ty ¿Por qué tu gemelo y tu se…odian?- le pregunté en voz baja.

Different MindDonde viven las historias. Descúbrelo ahora