LOS GATOS GUERREROS - Más allá de los Clanes - Dos Caminos (Segundo Libro)

Capítulo 4

Sigilosos corrían los gatos del Clan del Vergel al borde del sendero atronador. – El rio en esta época es más caudaloso de lo normal, las piedras que usamos para saltar están casi cubiertas, será mejor cruzar por el puente de los dos patas – les dijo Estrella Cano. Uno a uno fueron cruzando el sendero atronador y en una línea corrieron por el puente todos uno tras otro, a la saga quedo Luz de Aurora que fue la última en cruzar.

– Ya estamos todos, es momento de subir la Loma de las Peñas – les dijo la lugarteniente a sus compañeros.

Subieron la colina rápidamente y al acercarse a la cima sobrepasaron al ver que no eran los primeros en llegar, ya estaban allí ubicados en sus respectivas peñas los gatos de los clanes de las nubes y de la tierra; Estrella de Plata al verlos les dedico un saludo amable, a su lado estaba un atigrado naranja ya conocido, Lanza de Fuego, que repitió el gesto de su líder, los demás gatos del Clan de la Tierra estaban distraídos pero conforme se fueron dando cuenta de la llegada del Clan del Vergel respondieron cordialmente; distinta era la actitud de los gatos del Clan de las Nubes, su saludo fue un seco movimiento de cabeza que hizo el líder Estrella Tifón mientras que la lugarteniente Viento de Alba apenas volteo la mirada, los demás, incluso su curandero Ronronero, mantenían una frialdad poco común en ellos.

– Saludos a todos – dijo en voz alta Estrella Cano mientras trepaba a la peña que correspondía al Clan del Vergel.

Estrella de Plata se le acerco caminando desde su lugar, al líder al verla salto de su peña para alcanzarla – Esta será una asamblea de muchos anuncios – le dijo la gata.

– Así es, ambos tenemos nuevos lugartenientes y ni que decir de los demás cambios en mi clan, la última asamblea fue muy accidentada. – le respondió Estrella Cano.

– ¿No los acompaña Jazmín? – pregunto Estrella de Plata.

Estrella Cano no esperaba esa pregunta pero no le parecía impropia, Jazmín se comportó como una líder en la asamblea de la luna anterior y debió generar extrañeza entre quienes la conocían y mucho más entre los que solo la vieron como una minina casera entrometida. – No, ella no está aquí ni vive con nosotros, volvió con sus dos patas pero la apreciamos como una miembro del clan. – Dijo Estrella Cano que luego al ver una bulliciosa llegada agrego - Mira allá, ya están aquí los gatos del Clan de las Rocas.

Un enorme atigrado rojizo junto a una imponente gata negra y blanco de pelaje largo encabezaban a un grupo de gatos que llegaron maullando el nombre de su clan.

– ¿Por qué tanto escándalo Estrella Llameante? – le pregunto Estrella de Plata.

El líder del Clan de las Rocas burlonamente le respondió – No podemos contener el orgullo de ser los más fuertes de este lugar.

– Son tan desagradables... en fin, es momento de comenzar la asamblea – bufo Viento de Alba, la lugarteniente del Clan de las Nubes mientras se ponía al pie de la peña de su clan sobre la que ya se encontraba su líder.

En la estación de la hoja verde el cielo se encontraba muy despejado, ninguna nube opacaba esa iluminada noche que era también cálida, apenas una fresca brisa soplaba en la loma cuando todos los gatos asistentes se ubicaron en sus posiciones, los cuatro líderes estaban sobre las peñas que les correspondía y rodeándolos los gatos de sus clanes, todos atentos a los temas que se tratarían.

El primero en tomar la palabra fue Estrella Cano que sentía la atención de todos presionándolo a él y su clan, la irregular presencia del Clan del Vergel en las últimas asambleas hacia natural la expectativa.