Los Guardianes Elementales 1: La Princesa Lunar

Capítulo 10: Hermanos y la esfera del Caos

Desperté de un salto, inspeccione todo el lugar. Hasta darme cuenta que estaba en mi habitación, estaba sola lo cual duro sólo dos segundos pues después de despertar todos entraron, y por todos me refiero a Tristán, Serene y los otros cuatro.
-Diana, ¿Estas bien?- inquirió con preocupación Serene.
-Si, solo estaba cansada- dije con una sonrisa.
-Diana- llamo serio Tristán- dime que es mentira por favor...- yo me lo quede mirando sin decir nada- Diana, dime que era otra persona, que te confundiste, DIME QUE NO ERA Tomás- grito desesperado.
-¿Eso te hará sentir mejor?- pregunte.
-Creo que no- respondió cabizbajo.
-Mejor asi, porque si era él, no sé qué le pasó pero era él.
-Oí rumores de que ya sabes quién lo había contaminado- me explico.
-Genial eso explica su poder chocando con mi cuerpo.
-Así que devoró tu energía- hablo con diversión, olvidándose completamente de su desesperación.
-Eres más bipolar que yo- le regañe con una sonrisa- ahora ustedes- señalé a los 4 guardianes- salga de mi habitación y de mi casa- ordene fríamente.
-No sin respuestas- dijeron los cuatro a la vez con firmeza.
-No me interesan sus dudas... no estoy de humor para soportarlos- tomé mi ropa para después entrar al baño- y espero que se hallan ido cuando salga- les advertí.

A pesar de estar en el baño con la puerta cerrada y la ducha encendida pude escuchar con claridad lo que decían en mi habitación.
-Es algo rencorosa- reconoció Tristán.
-¿Algo nomás?- sentenció Emily.
-¿Quién es Tomás?- inquirió Endimion.
-Él hermano mayor de Diana- respondió Tristán.
-Medio hermano- sentencie con molestia desde el baño, "no podía creer lo que Tristán había dicho me negaba a creerlo a pesar de que tenía pruebas suficientes jamás aceptaría que él no quisiera protegerme"- ahora salgan de mi habitación- grite mientras me sacaba el shampoo.
-Cálmate Diana ya se van- me trato de tranquilizar Tristán.
-Cómo sea- solté harta.
-Si lo ven, Alejense de él. Si con Diana no tienen oportunidad con Tomás estarán muertos antes de que muevan un dedo...- yo había salido de la ducha y antes de cambiarme al escuchar sus palabras tome la toalla me la puse y salí con expresión molesta.
-No quiero escuchar más su nombre- ordene dejando a todos paralizados, entre al baño y comencé a cambiarme, salí cuando me faltaban las zapatillas. Si pensaba que mi vida no se podía poner peor, lo hizo, en la habitación detrás de mi apareció él.
-Hola hermanita- saludó abrazándome por detrás, no parecía estar armado pero con él nunca nada era seguro.
-Hablando de bipolaridad- se quejó Serene cansada.
Sin darle tiempo a reaccionar, pise su pie, le di un codazo en el estómago y cuando me soltó gire para darle una rodillazo en sus partes íntimas. Para luego apartarme poniéndome en posición de ataque.
-Siempre tan a la defensiva- hablo él algo Cansado.
-Siempre con golpes bajos- respondí, causando su risa- ¿Qué haces aquí?
-Vine a ver como estaba mi hermanita- respondió tranquilo - Creí que estarías inconsciente aún- se sincero.
-Venías por Serene, Eres un idiota- le reproche con asco- Nunca fui tu objetivo.
-Nunca lo serás- habló frente a mi acariciando mi mejilla, en cualquier momento eso me hubiera calmado pero no dejaría que nadie saliera herido por qué mí hermano era un estúpido, con todas las letras.
-Tristán saca a todos de aquí- ordene sin mirarlo- llévalos a un lugar seguro- él asintió y los saco de allí. Tomás los iba a seguir pero lo retuve por su mano - Tenemos que hablar ¿No te parece?- Él sonrío con diversión- ¿Qué es realmente lo que deseas?
-Fue un muy buen movimiento- dijo apartándose de mi- ya no los puedo sentir ¿Donde están?- me encogí de hombros sentándome en la cama para calzarme.
-La verdad es que no lo se- Reí- ¿Porque la quieres?
-No puedo decirte - respondió con ese tono gélido que odiaba, fui al baño y para tratar de mantener mi indiferencia comencé a peinarme mientras Él se recostó sobre el umbral de la puerta.
-Recuerdas cuando venías a mi habitación y me mirabas mientras me preparaba, para poder estar juntos todo el tiempo posible- traje el recuerde con melancolia en mi voz.
-Lo recuerdo- respondio cabizbajo, pero pude notar una pequeña gota de dolor en su voz.
-¿Qué te pasó? De la noche a la mañana desapareciste, todos decían que habías andado por las calles matando personas, no lo entiendo Tomás, ¿Qué te hizo?- deje el cepillo y fui hasta él- se que detrás de todo ese caos que no tengo idea de dónde salió, esta mi hermano y si en algún momento puede salir, espero ser la primera a la que valla a buscar para darle una explicación- sin decir más salí de la habitación para después comenzar a salir de la casa pero antes de que pudieran cruzar la puerta Tomás se interpuso.
-Diana por favor no te vallas- rogó desesperado en sus ojos pude ver a mí hermano, pero era un manipulador nato así que tuve que mantenerme difícil.
-Dime él porqué- ordene.
-Tu olor esta más fuerte que nunca, se siente a kilómetros.
-Gracias, eres muy tierno, ¿sabes? me acabo de bañar- dije irritada, a lo que él me miró mal.
-Diana actúa con seriedad por favor- me regaño, hice un gesto con la mano para que continuará- Él ya esta aquí y no viene por los elementos, ni por los humanos, ni por los reinos de a luz, ni mucho menos por la princesa de la luna. Sino por ti y no va a descansar hasta verte muerta- finalizo.
-Qué noticia más alentadora- comente riendo- lo derrote una vez puedo volver a hacerlo- le asegure volviendo a intentar salir.
-La última vez eras la reina del caos y la....- tape su boca.
-Entiendo tu punto, no es necesario que hables de eso- me queje algo histérica.
-¿Porque no quieres ni que lo mencione?- indago confundido.
-No me gusta- remarque seca.
-Como sea, entiendes que tu poder esta a un 50% por el simple hecho de estar atrapado en la esfera y si contamos que estas cansada lo que lo reduce a la mitad, tu poder es solo una cuarta parte, tal vez sea suficiente para igualar el poder del resto de los guardianes juntos pero con eso no puedes ni acercarte a él- recordó con seriedad.
-¿Qué propones? Te recuerdo que aún no confío en ti- estaba molesta y no se lo iba a ocultar, aunque era todo una mentira, siempre confiaría en él. Estaba por contestar pero una voz a mis espaldas nos interrumpió.
-Sabía que el caos no puede devorar al caos, es una lástima no deseaba matarlos, al menos no a Tomás...- al escuchar esa voz sentí como todo mi cuerpo se paralizaba, Tomás me tomo del brazo con demasiada fuerza colocándome detrás de él.
-No dejaré que la toques- amenazó mi Hermano.
-El caos y la...
-Cállate...- ordene molesta mientras todo el miedo se iba.
-Eres igual con lo de la última guerra- Tomás asintió con un suspiro- pero dejemos la charla- Me transforme, en ese mismo instante Él nos atacó una y otra vez, con mi hermano luchamos como antaño atrás codo a codo.
Luego de un par de horas nuestros cuerpos estaban repletos de heridas. Estaba casi agotada, era verdad, lo que había dicho con mis energías bajas y mis poderes reducidos en la esfera no podía hacerle frente.

Estaba por perder mi último aliento cuando un ataque venía directo hasta nosotros, Tomás trato de resivirlo, pero cuando analice el ataque supe que nos acabaría a los dos de cualquier forma así que con todas las fuerzas que me quedaban lance a mi hermano fuera de su alcance y en lo único que pensé cuando aquel poder oscuro recorrió todo mi cuerpo fue agradecer que salimos de la casa y evitamos causarle grandes daños, lo que costaría mucho dinero y tiempo que al parecer no tenía.
Cuando su ataque desapareció mi cuerpo cayó al suelo y me hubiera dado la cabeza en el piso si Tomás no me hubiera atrapado. En ese momento mi trasformación se rompió, tenia la esfera en mi mano y pude notar que casi no tenia poder dentro, tardaría demasiado en recuperarse si es que en algún momento lo hacía.
-¿Quien iba a pensar que acabaría de esta forma tan deprorable? Al menos cuando estés en mi tumba no digas que fue por salvarte- pedi con gracia.
-¿Quien dijo que ibas a morir?- pregunto mi hermano dejándome sobre un árbol del parque en el que habíamos terminado.
-Que lindo, casi hacen que una lágrima se me caiga- comentó burlón. No recuerdo mucho de lo que paso después porque estaba luchando por no caer inconciente pero si recuerdo que en un momento note las energías de mi hermano bajas, no tan bajas como estaban las mías pero para él si que era preocupante, ya que sus ataques requerían poder y energía, en grandes cantidades​.
A los pocos instantes note como algo se acercaba hasta él, trate de gritar en advertencia pero no pude, así que con unas energías​ que no era mía me puso en pie y me interpuso en el camino de la daga, que fue a dar a mi corazón o al menos su punta porque fue lo único que llego después de atravesar la esfera al ver eso comencé a gritar, enloquecida​, sentí como mi cordura se escapaba e iba a caer pero mi hermano me atrapó y me escondió en su pecho cuando las lágrimas comenzaron a caer de mis ojos, lágrima de irá, frustración, Lágrimas que se escapaban de mi alma rota.
-Creo que será todo por ahora, los guardianes se acercan y no es el momento aún de que nos veamos- dijo antes de irse. Mire a mi hermano el cual me dio una sonrisa reconfortante. A los pocos segundos todos llegaron preocupados.
-¿Qué sucedió?- preguntaron todos.
-Mi esfera del Caos se rompió- reconoci antes de caer inconciente en los brazos de mi hermano.

Son las tres y media de la mañana y no revise el cap así que si hay alguna falta de ortografía me avisan. Gracias a lxs chicxs de wsp por ser los primeros en conocer la historia y bueno no me matén por la intriga pero trataré de subir más es que tengo final el viernes y voy por la mitad pero si puedo el finde subo.

Los quiero, saludos desde el inframundo ♥♥♥