Un mes con el príncipe

Para: Mamá

Querida mamita:
Nunca me olvidaré de tí, no importa cuantos años pasen siempre estarás en mi mente.

Se que a pesar de la distancia, todo, absolutamente todo el tiempo estás a mi lado y por eso sé, que nunca estoy sola.

No le había contado esto a nadie, mucho menos a papá; porque, estoy segura que lo destrozaría por completo, pero creo que es hora de que lo sepas.

Cuando papá descubrió que era el adiós, no hizo más que intentar por todos los medios que yo no me enterara de lo que estaba pasando, hasta que ya fuera demasiado tarde.

Creo que una parte de él, deseaba aferrarse a la felicidad e inocencia de la pequeña Megara, que aún no estaba lista para la cruel realidad que debería vivir.

Pero, no le hice caso, no quería que mi último recuerdo fuera verte enferma en cama. No quería que tu último momento fuera sin mí.

Así que cuando finalmente se dió por vencido y decidió alejarse de tu lado para dejarte descansar, yo me escabullí por la ventana para llegar junto a tí.

Tomé tu mano y te dí un dulce beso en la frente, antes de comenzar a tararearte tu canción favorita. Y seguí, hasta que deje de sentirte.

Me escondí, volví corriendo a mi habitación y me aguanté las lágrimas, hasta que papá, finalmente encontró las fuerzas para decirme lo que ya sabía.

Le mentí. Pero lo hice por él, creo que algunas mentiras duelen menos que la verdad, pero no por eso, significa que sea correcto decirlas.

Ahora soy la reina, mamá. Y muchas veces me veo en la difícil situación de, si lastimar sus sentimientos ahora o dejarlos vivir en una ilusión.

Se lo que la pequeña Megara haría, ella no querría hacerlos sentir mal.

Pero después de todo lo que ha pasado, entiendo que no hay nada peor que un sueño roto.

Así que lo la reina Meg debe hacer, es ponerse firme y hacer lo correcto; aunque eso signifique, romperlos y luego ayudarlos a recoger los pedazos para construir un nuevo y mejor sueño.

Se que eso es lo que tu harías y espero estar haciéndote sentir orgullosa. Te mando un abrazo y nos veremos en los más lindos sueños.

Con todo mi amor, tu pequeña Megara.