No° 11. Choque.

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Al día siguiente Doble D se levantó con un fuerte dolor de cabeza. Kevin le dijo que era normal, que era culpa del vodka, y añadió un poco burlón que cuando dormía se veía adorable. Doble D no pudo evitar ruborizarse, pidiéndole que dejara de hablar así. Kevin solo sonrió y se fue a la ducha.

Una vez dejó a Doble D unas cuadras antes de la escuela, Kevin entró a clases. Para su sorpresa, Nathan estaba ahí. Curioso, se le acercó, preguntándole por qué vino si el día anterior regresó a su casa bastante tarde. Él contestó que no se quería perder la clase de educación física, pero que además tenía que contarle algo, ahora que Doble D no estaba cerca. Intrigado, Kevin le dijo que hablara. Cuidando que nadie les siguiera y llevándole a un sitio más privado, Nath le contó:

-Es sobre Eddy...

-¡Ah, no me jodas! ¡¿Ahora qué?!

-Calla y escucha: tengo la impresión de que trama algo.

El tono de Kevin pasó de ser fastidiado a interesado.

-¿De qué hablas?

-No lo sé... Tengo la impresión. Últimamente ha actuado extraño, ya sabes... Con todo esto. Y no se va a quedar con los brazos cruzados después del golpe que ayer le diste, querrá venganza.

Nathan no quería decirle lo de las fotos, sabía que solo iba a ocasionar que Kevin se enfadara más, y pasara todo el día refunfuñando.

-Bueno, si vuelve a molestar le doy un golpe y ya, ¿no?

-No, Kev... Tengo miedo de que haga algo antes de que puedas pegarle.

-¿Cómo qué?

Ahora Kevin lucía más interesado, e incluso nervioso, como si haberle golpeado hubiese sido una mala idea.

-No lo sé, Kev... Solo te digo que tengas cuidado.

El resto del día pasó lento para Kevin; clases y clases. Y no pudo ver a Doble D para hablar lo de Eddy. Sabía que si alguien que no hubiese sido Nath le hubiera dicho eso, no lo habría creído tanto, pero es que Nathan era especial con sus presentimientos, y siempre era mejor escucharlo. Aunque... tal vez lo estaba pensando demasiado... quizás lo mejor sería ignorarlo.

El resto del día se la pasó aburrido. No tuvo clases con Doble D, así que no pudo hablarle. Y en los recreos, por mucho que lo vio ahí sentado en el banco, prefirió no acercarse para no despertar muchas sospechas.

Finalmente llegó la hora de salida. Los demás corrieron en dirección a la puerta mientras Kevin buscaba a Doble D con la mirada. Lo localizó cerca de la salida, y una vez tuvo por sentado dónde estaba se dio el permiso de relajarse. Aceleró un poco el paso, deseando tomarle de la camisa para invitarlo a tomar algo a una heladería cercana, pero en cuanto lo tuvo lo suficientemente cerca lo vio detenerse en seco. Y no solo él, sino que el resto de sus compañeros también lo hicieron. Intrigado, Kevin levantó la mirada.

Eddy, maldito idiota.

Había hecho un escenario en base a cartones y cajas, y estaba parado en medio de éste, vestido como presentador. Con una mano, sostenía unos papeles, y con la otra, un micrófono barato. Estaba ahí, parado, obstruyendo la salida, y con una sonrisa socarrona que dijo a Kevin que no tramaba nada bueno.

Los murmullos empezaron a aparecer.

¿Pero qué hace ahí?

¿Qué espera que hagamos?

¿Está jugando de nuevo?

Solo son los Eds, es mejor ignorarles.

No, falta el del gorro.

You Got Something I Need. {YAOI, Español}. KEVEDDDär berättelser lever. Upptäck nu