Inquebrantable (en proceso)

11. Calurosa bienvenida

Hoy llegaban a Londres los participantes del "Proyecto Turismo". No estaba emocionado ni nervioso, ¿por qué lo estaría? Son jugadores de simulador, no podrían ganarle ni siquiera al último de la parilla en una carrera. Tan solo quería saber quiénes eran los "elegidos", en Austria eran 6:00 pm y solo nos llevábamos una hora de diferencia con Londres.

Veía por la televisión a los reporteros amontonándose frente a la puerta de salida de los pasajeros - No sé cómo puedes ver las noticias y hacer cálculo - la voz de Jasper me hizo girar la cabeza hacia la pantalla de mi laptop - No entiendo la número siete, va más allá de mis límites - golpeó su frente contra el libro repetidas veces y soltó un quejido - ¿Por qué quise ser mayor? Fue mala idea - solté un suspiro y fijé mi vista en el ejercicio que a mi amigo no le salía - Es sencillo solo tienes que reemplazar los valores y hacer operación de tres simple - levantó la cabeza tan rápido que temí que se hubiera descolocado el cuello - ¿Qué dijiste? - 

-Que... - mi voz fue interrumpida por el sonido de la televisión - Ahí están - en la pantalla se veía a los guardias de seguridad delante de todos los competidores, que venían en fila. Todos eran muy diferentes, muchos países en un solo lugar, como un intercambio internacional. Los reporteros comenzaron a hacerles preguntas pero ellos solo se alejaban o simplemente cubrían sus rostros por el exceso de Flashes de las cámaras, cosa de principiantes. 

Estaba por girarme ya que no veía algo interesante en ninguno de los competidores pero algo llamó mi atención. Al final de toda la cola, venían tres chicos más; bueno, dos chicos y una chica. Los dos varones se reían de algo y se veía que tenían demasiada energía, sonreí inconscientemente y pasé mi mirada a la chica, quién sonreía a lo que ellos decían, la resolución de la pantalla era clara pero la cámara del reportero se movía de un lado a otro sin dejarme ver a detalle el rostro.

-Voy a quedar ciego después de esto - Luis siguió riéndose hasta que subimos a una de las tres camionetas que nos esperaban, nos sentamos juntos y esperé a que el auto arrancara mientras Dominic y Luis hablaban de cosas que no entendía, lo decían tan rápido que a mi cerebro no le daban chance de entender las palabras.

-Agh, ¿podéis callaros? Intento concentrarme - soltó lo que entendí por su acento , una chica española - Todo el maldito viaje venís conversando, ¿acaso no os cansáis? - tenía el entrecejo fruncido, su mirada era amenazante, añadiendo la sombra que llevaba debajo de los ojos, el delgado mechón que caía de su coleta alta, se deslizaba por un lado de su frente dándole aires valientes.

-Primero que todo ¿Quién piña sos? ¿El guía? Porque si esa no sos vos, no tengo porque hacerle caso a tus pelotudeces - tragué duro entendiendo claramente lo que le había respondido Luis.

-¿Qué acabas de decir? - la chica pareció confundida al escuchar a mi amigo.

-Que no te va a obedecer - Dominic reaccionó y le di un golpe con mi codo para que la "pelea" parara. Por su parte, la española no desistió y afiló la mirada, Luis parecía relajado ante tal acto.

-Discúlpalo, es algo...tonto - intervine y la chica terminó por fulminarlo con la mirada y girarse hacia el cuaderno que llevaba en sus manos.

-Españoles, me dan asco - susurró Luis rodando los ojos, lo reprendí con la mirada y se encogió de hombros.

-Sean bienvenidos al Centro de Entrenamiento de Nissan - el "guía" nos indicó que nos adentráramos en el gran edificio - Ubicado en Londres, Inglaterra. Construido especialmente para ustedes competidores. Aquí estarán durante los dos meses necesarios antes del inicio de temporada de la categoría "Turismo". Es un gusto presentarles al hombre que logro que ustedes estuvieran aquí parados. Michael Silben - un hombre adulto, casi de cuarenta años entró por una de las tantas puertas que nos rodeaban.

-Bienvenidos a todos - comenzó a hablar con una sonrisa en el rostro - Como ya sabrán, soy Michael Silven, y soy el encargado de llevar a uno de ustedes al podio en la categoría Turismo. Les explicaré un poco sobre su estadía aquí pero primero quiero asegurarme que los treinta y cuatro estén presentes - uno de los asistentes se acercó con una bitácora, Michael la recibió con una sonrisa y alzó la primera hoja.

-Ahora que la mayoría se conoce y sabe los nombres de sus compañeros, les indicaremos sus habitaciones según su lengua en común. Tranquilos, cada uno tendrá su propia habitación, pero serán separados por secciones, para que puedan comunicarse fácilmente, en unos minutos tendrán el correo con el número de habitación, por el momento tienen la tarde libre para visitar el lugar, disfruten su estadía -

-¿Lengua común? -

-Con los que hablas el mismo idioma - explicó Luis tronándose el cuello, se fijó en mí y luego volvió a pasar la mirada entre todos - ¿Compartimos números? - entendí su frase cuando me extendió su teléfono con la aplicación de contactos abierta. Lo tomé en mis manos y tecleé mi número, se lo devolví y al instante recibí una notificación, saqué mi celular del bolsillo y vi un WhatsApp de un número desconocido - Soy yo - pronunció la y como una sh, cosa que me causó algo de risa, guardé a Luis en mis contactos y llegó otra notificación, esta vez era el correo indicando mi habitación.

-Habitación trece - habló Dominic viendo su teléfono, abrí mi correo y presioné en el que indicaba el número de habitación.

-Treinta - 

- Diecisiete - 

-¿Y por qué carajos nos pusieron tan separados? -

-Yo hablo inglés y ustedes español, no nos topamos para nada, ustedes por lo menos están a cuatro habitaciones - me encogí de hombros - Igual hablaremos por chat, iré viendo el lugar hasta encontrar mi habitación, nos vemos luego - sacudí la mano en el aire y ellos repitieron mi acción, me di la vuelta y comencé a caminar sin rumbo alguno por el gran edificio.

WASAAAAAAAAA

Por fin llegan al centro de entrenamiento, y a pesar de dormir en habitaciones separadas esos tres terminan juntos haciendo locuras en cualquier lugar. Denle apoyoooo, los quiero muchooo.

XOXO, Mafer.