A promise is a promise

capitulo 31(siempre quiero verte feliz )

Dos semanas  después...

[POV Omnisciente]

Freen ha pasado dos semanas  de lo peor, desde que su hijo le dijo que la odiaba y que Kendall le dijo que Becky estaba intentando algo con ella (cosa que no fue cierta) La ojinegra se la ha pasado bebiendo, y pensar que a su esposa e hija perdió por culpa de ella

Freen se encontraba en el gran sofá que se encuentra en su casa, todo en esa casa era un desastre total, botellas de alcohol vacías por todos lados, su cocina era un caos. La ojinegra se encontraba bebiendo su botella de vino blanco recién abierta cuando escuchó la puerta de su casa abrir. Ella rodó los ojos al pensar que era su madre  quien la visitaba pero no, no era Lisa

—¿Qué mier...—dijo Irin al ver el estado de su amiga— Freen.—se acercó a la ojinegra quién la ignoró por completo para sí darle un trago al vino—¿Cuántos días llevas así?

—No lo-lo sé... No sé ni qué día es hoy.—dijo la ojinegra y la de cabello azul negó al verla así

—¿Qué pasó? No me digas que es por Becky...—la ojinegra asintió y comenzó a llorar—Pero... ¿qué pasó? El domingo todavía hablamos y me dijiste que Sam y tú iban a ir al cine y después ibas hablar con Becky. Pero desde ese día no me respondes mis llamadas.

—¿Y que no er-ra más fácil que vinieras?—habló la ojinegra —De-de seguro te estabas re-revolcando con una tipa ¿No...?— Irin negó

—Fui a Japón porque mi prima enfermó y eso no importa en estos momentos. ¿Qué pasó?—le preguntó pero cuando la ojinegra iba hablar ésta la interrumpió—Vete a dormir un rato, después te das un baño y hablamos.

Irin ayudó a su amiga a subir por las escaleras, la acostó en la cama, pero en ese momento la ojinegra la abrazó

— Freen sueltame.—habló la chica de cabello azul

—Duerme conmigo.— Freen estaba borracha y no sabía lo que decía

—No  Freen .—logró safarse de los brazos de su amiga—Estás borracha. Mejor duerme, lo necesitas.—la ojinegra instantáneamente quedó en profundo sueño

Irin bajó a la planta baja, miró e hizo una mueca de fastidió al ver todo el desastre que hizo Freen, rompió varios floreros que adornaban la casa, incluso una silla de su comedor. La chica notó que no había nadie que arreglará todo eso. Así que buscó las cosas de limpieza y comenzó arreglar todo.
Botellas, botellas y más botellas de alcohol vacías y llenas tiró a la basura, Freen si sigue así se meterá en problemas, se metería en un alcoholismo 

—Listo.— Irin suspiró aliviada

Después de casi tres horas de asear la casa de la empresaria la dejó agotada

Por otro lado tenemos a Becky quién estaba con su pequeño hija haciendo su tarea.
Becky no ha sabido nada de Freen desde el domingo que fue a regresar a su hija a su casa, era extraño de la ojinegra que se desapareciera por mucho tiempo, ella hablaba cada día con Sam y de paso Becky aprovechaba para sacarle información a su hija para ver cómo estaba Freen, si estaba bien

—Hija, ¿Sigues molesto con Freen?—la madre le preguntó a su hija. Simplemente ella se encogió de hombros y siguió haciendo su tarea—Sam...—la llamó su madre y la pequeña la miró—¿Seguro que no quieres ver más a Freen?

—No sé, yo no quiero tener un hermanitos que sea de otra señora. Y además mamá fre te mintió y te trató mal.—a Becky le dolió lo que dijo su hija.

—A mí también me duele ¿sabes? Sé que eres muy pequeñita y aún no sabes mucho lo que realmente está pasando. Lo que yo quiero para ti es que pase lo que pase quiero verte feliz, corriendo por todos lados como lo haces, riendo y sonriendo. Quiero verte feliz y créeme que de seguro tu mamá fre se arrepiente de todo el daño que provocó, todos hemos cometido errores en el pasado pero aún así aprendemos de ellos y nos hacen mejores personas porque ya no cometeriamos el mismo dos veces.—Becky abrazó a su hija

—Yo no quiero que se separen....—Sam sollozó en los brazos de su madre

Becky la abrazó con fuerza y lloró con ella, y pensar que tan solo faltan siete días más y finalizaban su divorcio

—Te amo tanto.— Becky le dijo a su hija

—Le quiero pedir perdón a mamá Fre, yo no la odio.—dijo su hija y ella asintió

—¿Te gustaría ir a verla?—preguntó la castaña

—Sí.— Becky miró su celular para ver la hora 5:20 pm

—Quizá todavía no llegué de trabajar.—dijo Becky y Sam hizo una mueca

—Podríamos esperarla y darle le damos la sorpresa de que llegamos sin avisar.—sugirió la pequeña convenciendo a su madre

—Me parece bien.—sonrió Becky y la pequeña sonrió victoriosa

Después de una hora de que cambiarán de ropa para ir a ver a Freen.
Salieron de la casa sin decirle a los padres de Becky a dónde irían realmente, ya que ellos no soportan ni escuchar el nombre de la ojinegra.
Durante el trayecto Sam le dijo a su madre que pasaran a la repostería favorita de su madre para comprarle un pastelillo. Becky no se negó ante eso, estacionó su mini cooper y entraron al local.
Pidieron tres pastelillos uno para cada uno de ellas, pagaron y salieron para sí, ir a su casa anterior

Becky vió que no había ningún encargado de vigilancia como cuando ellos vivían, lo cual le causó  algo de preocupación algo no andaba bien. Estacionó su auto en su antiguo lugar de estacionamiento. Por suerte Becky aún conservaba su llave de acceso a la casa.

Irin estaba viendo una serie de Netflix, escuchó la puerta abrirse y se asustó al ver a una hermosa mujer y a una niña. Ninguno de las tres dijo nada. La chica de cabello azul vio el parecido que tenían las personas que estaban enfrente de ella a una fotografía que le enseñó Freen de su esposa e hija

—¿Quién eres tú?—preguntó Becky

—Soy Irin, amiga de Freen.— Becky sintió celos al escuchar "amiga de Freen"

—freen si que dijo que ya estaba cambiando.—pensó Becky

—¿Dónde está ella?—volvió a preguntar Becky

—En su habitación, está durmiendo.—Becky pensó lo peor quizá se lió con Freen

—Mami, ¿puedo ir a ver a mami Fre?—preguntó la pequeña pelinegra

Ahora Irin entendía todo, era Sam y Becky. Hija e esposa de su amiga

—No, hija no creo que...— Becky le dijo  pero ella fue interrumpida

—¿Tú eres Sam no?—preguntó Irin y ella asintió—Tu mamá Freen me ha hablado mucho de ti. Ella no se equivocó al decirme que su hija era un encanto pero nunca imaginé que tanto.— Irin de acercó a la niña

—Gracias.—sonriente le respondió la niño—¿Puedo ir a ver a mamá Fre?—le preguntó nuevamente a su madre

—No creó que sea buena idea hija, mejor esperemos a que se despierte ¿Si?

—Que suba, ella está durmiendo porque no se ha sentido bien.—Becky se preocupó a lo que dijo Irin—Anda, sube pequeña.—le dijo y la niña corrió hacía las escaleras

— Freen, ¿está bien?—preguntó Becky

—No.— Becky no sabía si era buena idea decirle lo que pasaba con Freen—¿Te llamas Becky, verdad?

— Becky Armstrong.—estrechó la mano con Irin—¿Qué pasa con Freen?

—Mira, no sé si yo deba decirte esto pero... Ella ha estado bebiendo mucho, hoy llegué de Japón y desde el domingo no me responde mis llamadas. Vine y la encontré bebiendo, esto era un caos Becky, botellas por todos lados. Un desastre. Si Freen sigue así tendrá un problema.

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Hola.

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