Prólogo

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Las imágenes no son de mi propiedad, créditos a sus respectivos artistas<3

💫💫💫💫

Ambos estaban tomándose de las manos. Un castaño con los brazos rodeados de vendas, aun si no estaba herido realmente, y un joven de cabellos grisáceos, este ultimo con los ojos llorosos. Sin embargo, lo que mas llama la atención es lo que esta justo frente a ellos.Una bola enorme de luz, pareciendo que esta lista para devorar a cualquiera que se atreva a tener el mínimo roce de contacto, alrededor de esta podemos ver chispas voraces, todo en esta figura da a entender que algo malo sucede. Y si, es así. Por algo los hermosos ojos heterocromáticos de uno de ellos, estaban cristalizados, aun si su acompañante mantenía una suave sonrisa.


—Dazai-san, aun puede-


—Está bien, Atsushi-kun, está bien... —seguía manteniéndose firme en su decisión, aun si cualquiera temblaría cual niño ante tal misión, la mano que apretaba la suya le daba la suficiente fuerza para seguir adelante —Gracias por acompañarme hasta aquí, y- no, por favor no lo digas. Yokohama esta en peligro, es correcto que si lo que se necesita para regresar a todos de a la normalidad es que alguien anule esta habilidad, yo sea quien lo haga.


—¿Realmente no se arrepiente? Si podríamos encontrar otra forma-


—No, no tengo ningún arrepentimiento. Solo que no podre seguir molestando a Kunikida-kun, tal vez~ —mentía. No exactamente sobre molestar al hombre que antes había sido un estricto profesor de matemáticas, si no que realmente se arrepiente de irse así, sin decirle dos palabras que se han mantenido en lo profundo de su ser, listas para ser dedicadas al chico a su lado. ¿Pero de que servía ser egoísta? No iba a dejarlo así, ¿Qué sentido tenía confesar su más culposo secreto si estaba por morir? Seria condenarlo y no podía, no podía irse sabiendo que dejaría a ese gentil chico con la culpa de sus revoltosas emociones. —Es hora —ni siquiera quería alargar más su despedida, solo le daría mas tiempo de darse la vuelta, así que avanzo, pero fue sorprendido por un fuerte agarre. Atsushi se mantenía aferrándose a su mano con sus ojos cerrados.


—Qu-Quisiera decir... Decirle... —susurro intentando contener sus sollozos, su voz podía escucharse quebrada, pero no permitía salir las lágrimas. Debía permanecer fuerte —Muchas gracias por haberme salvado aquella tarde. Gracias por guiarme, por su apoyo, por sus consejos cuando más sentía que no merecía ni estar vivo, pero... me he vuelto mas fuerte, mucho mas de lo que en algún momento creí. Y todo eso, es gracias a sus palabras, nada de lo que diga seria suficiente para expresar todo lo que siento, la familia, el chazuke, las risas, todo... Aunque usted no lo crea, es alguien increíble que ha hecho lo posible por ayudar a otros, sus métodos siempre son extraños, pero nunca he dudado de ellos, porque se que es una buena persona. Nadie va a cambiar mi opinión de eso, ni siquiera su pasado. —entonces levanto la mirada, cruzándola con los ojos marrones sorprendidos —Conocerlo es lo mejor que me ha pasado, gracias.

Diablos, no digas eso ahora. No me hagas querer quedarme.

—Atsushi-kun... Eres tan amable -su mano libre solo atino a acariciar la cabeza contraria con gran cariño —Nunca había conocido a alguien como tú, tan transparente con tus emociones e intenciones, debería ser yo quien agradeciera.


—"¿Transparente"? Pero que cosas dice, no me haga sentir culpable —ese había sido su límite, ahora las lágrimas acariciaban sus mejillas mostrando una expresión adolorida, aun cuando eso había sido un cumplido parecía que el chico lo tomaba como insulto. Incluso el mayor estaba confundido, ¿por qué tenía un mal presentimiento? —Solo quería decirlo al fin. Dazai Osamu, debe vivir, jamás se rinda, por favor.


Bien, esto era cada vez mas sospechoso. ¿Qué no él iba a morir justo ahora? Sus neuronas intentaban entender las palabras del chico tigre, sin embargo, otras le marcarían, estas lograron hacer que sus pensamientos se alinearan.

—Lo siento.

Fue entonces que sintió como la fuerza del tigre tomaba posesión del chico frágil que hace segundos estaba frente a él, las manos de aquel habían apretado fuertemente el brazo del que antes solo agarraba su mano, para después alejarlo de el con un empuje. Dazai estaba sorprendido, pero mas que eso, aterrado ante la imagen frente suyo. Tras el impacto de la fuerza que aplico, ahora aquel estaba cayendo, hundiéndose en aquella bola de luz, con una encantadora sonrisa y sus lágrimas cayendo como fuentes. Osamu aun podía ver los dulces labios de la persona que amaba seguir diciendo "lo siento, lo siento", hasta que fue completamente absorbido. Nunca pensó que esa misma sonrisa que le había encantado, podía causarle tanta frustración como ahora. Mientras alrededor escuchaba a la ciudad festejar, el sentía sus rodillas contra el pavimento aun sin lograr reaccionar correctamente.


Tanto Atsushi Nakajima como aquella luz destructora, habían desaparecido ante el en cuestión de segundos

Tu Primer Mentira - DazatsuWhere stories live. Discover now