Capítulo 12

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Mis manos se deslizaron tiernamente por las telas que conjuntaban mi vestido. El vestido era del color verde de la naturaleza, este era más ligero de llevar que el vestido que habíamos usado para la fiesta, era de tirantes, por encima de las rodillas dejando las sandalias con tiras de ramas y flores recorriendo mis piernas hasta el límite de mis rodillas, mi pelo estaba recogido en una coleta alta y mis pendientes de lágrimas brillaban llevando la atención a ellos.

Salí de mi habitación con mi mochila y se la deje al primer sirviente al que vi con la misión de que la llevase a los carruajes.

Al final del pasillo me encontré con Fayra, que llevaba un vestido diferente, pero del mismo color que el mío, nos saludamos con un asentimiento de cabeza y esperamos a los demás.

El tiempo que habíamos pasado allí no había conseguido que nos formáramos como un equipo, con la única persona con la que había tenido un buen acercamiento era Dhara y a lo mejor podría contar a Calix, aunque era muy confuso. Fayra siempre se había mantenido distanciada de todos, con nosotras simplemente cuando era necesario y ya. Nunca entenderé porque Abu quiso que tuviésemos un vínculo, recordaba aquella lección que me dio una vez sobre el trabajo en equipo.


- Debes de saber que tener un vínculo fuerte con alguien con quien trabajas no es fácil. Ante pondrás el trabajo a esa persona- dijo Abu con las manos entrelazadas por encima de su escritorio.

- No lo entiendo- le contesto la niña inocentemente.

- Aerilyn, mírame a los ojos.

La niña le obedeció.

- Si ahora te mandaran a un trabajo a conseguir una gema, la más bonita de todo el lugar, es un trabajo importante en el que debes sacrificarlo todo. Yo te acompaño, soy tu equipo, somos un equipo y luchando por ella, me clavan un puñal en el pecho. ¿Qué harás? ¿Acabaras el trabajo o iras a socorrerme sabiendo que perderíamos la gema?

La niña no tuvo que pensarlo.

- Te ayudaría.

- Respuesta incorrecta.


Aquella respuesta que le había dado una vez, seguía pensando que era la más sensata, aunque Abu intentara que me la quitara de la cabeza, era la que al final me hacía sentir mejor.

Theon vino por el pasillo con las manos delante de él, su pelo castaño estaba hacia atrás, pero dos mechones se le ponían en la cara los cuales bufaba para que se fueran.

- Hola Theon- dije intentando encontrar conversación.

- Hola Aerilyn- sus mejillas se tiñeron de rojo- y hola a ti también Fa-Fayra- tartamudeo nervioso.

Fayra asintió en modo de saludo y siguió ignorándonos. En pocos segundos dos voces nos hicieron girar hacia el pasillo por ahí venían Dhara y Daryl discutiendo, Dhara estaba molesta mientras que Daryl portaba una sonrisa engreída en su rostro.

- No, no y no, está claro que no usaremos nuestras habilidades y conocimientos para robar- decía Dhara.

- Le quitas lo divertido a la vida- contesto Daryl sonriendo.

Cuando llegaron hasta nosotros dejaron su conversación y cada uno se puso a un lado del pasillo. Calix se acercó tres minutos después con su característica amargura.

Empezamos a avanzar todos juntos hacia la puerta que daba hacia la sala del trono, la cual no estaba abierta para personas que no fueran la familia real o algunos sirvientes. Nos dijeron que teníamos que esperar a las órdenes de uno de los organizadores, así que nos quedamos allí.

- Bueno...- empezó Dhara.

Nadie dijo nada.

- Cuando acabe esta noche tendremos que volvernos un equipo ¿eh?- y río nerviosamente.

Intentaba mantener una conversación y yo le seguí el juego.

- Eso parece. ¿Qué es lo vuestro? Lo mío la puntería- pregunté.

- El combate cuerpo a cuerpo- contesto Dhara.

- Si, venga seguro que no matas ni a una mosca- le dijo Daryl picándola.

- Avísame cuando quieras uno- le sonrió esta engreídamente.

- A mí la fuerza- siguió Daryl.

- El conocimiento- se adentró en la conversación Theon.

- El sigilo y el camuflaje- contesto Fayra.

Entonces miramos al único que quedaba por responder.

- Escalar lugares y entrar en sitios cerrados- contestó Calix.

Y sentí como si aquello ya lo hubiese escuchado antes pero no sabía de qué.

La Última de las MelodíasDove le storie prendono vita. Scoprilo ora