Mikaela, un estudiante sobresaliente ha estado trabajando por sí mismo alcanzando sus metas a costa de sus sueños, rechazando la compañía de conocidos ajenos a él. Es decir, hasta que un día, a regañadientes (podría agregar sin otra opción) aceptó la compañía de un extraño gato por una vez, y solo esa única vez. Yuuichirou, que ignora su deber y se deja guiar por su corazón, escapa con la fuerte voluntad y el deseo de explorar el mundo humano. Va completamente en contra de las reglas de su mundo con la firme creencia de que, como guardián, debe proteger y ayudar al único humano que aprecia en la tierra. Por pura casualidad, ambos aprenden sobre una forma de vida completamente diferente mientras se ayudan mutuamente a alcanzar sus propias metas y sueños. Pero con la familia de Yuuichirou pisándole los talones, literalmente, tanto Mika como Yuu deben encontrar una manera de resolver los problemas y sentimientos conflictivos a los que se enfrentarán. A pesar de la creencia impopular de su propia conciencia Mikaela se encargará de proteger lo que ahora es suyo.