Lola tiene muy claro que necesita un cambio de aires, y qué mejor que mudarse a París para estudiar allí su carrera. Lola conoce a Tere, Silvia y a Cris con las que compartirá un pequeño pisito en el casco antiguo de la ciudad. Una noche, en un pub parísino, conocerá a Alexander Laplace, un joven rodeado de rumores y unos profundos ojos verdes que volverían loca a cualquiera. Desde ese momento la atracción y la pasión envolverán a Lola en un cúmulo de sentimientos que jamás había experimentado. Y para él, ella será la vía de escape a todos sus problemas. Juntos descubrirán los imprevistos de un amor primerizo.