Pasé mi vida entera creyendo en un príncipe azul, los chicos que pasaron por mi vida fueron insignificantes porque siempre tuve la esperanza de encontrar a aquel hombre con el que siempre soñé. A mis 17 años en la preparatoria que siempre soñé, lo conocí, era todo un sueño, con sus ojoz hazel, sus brazos fuertes, su cabello dorado... todo un sueño, jamás pensé que sería un hijo de puta, pero como me pone, como me gusta, me vuelve loca.