Mi vida cambio cuando mi madre me obligo a llevar a mi hermanita a ese centro comercial a conocer a santa Claus, lo que nunca se me vino en la mente fue que ese pervertido viejo con barba me miraba con un solo objetivo. Mis ojos lo miraba como si estuviera loca a verlo sonreírme como si escondiera algo realmente, un mundo lleno de secretos y un lugar que se destruida conmigo...llamado polo norte, el verdadero, se encontraba a frente mío y me encontraba siendo una esclava sexual de la verdad que se encuentra atrás de ese traje. una vida llena de guerra, pasión, deseo, pero nunca amor