¿Por dónde debería comenzar? Si trato de explicar esto de una manera, sería desde que sentí una irremediable fuerza de atracción que nunca en mi vida había experimentado y tuve tanto miedo en ese momento que traté con todas mis fuerzas de negarlo y lo único que logre fue conseguir que esa fuerza se hiciera más fuerte, más real a un punto casi desesperante en el que ya no podía sacarla de mi cabeza, ni a la maldita e irremediable fuerza de atracción, ni a ella.