Ser famoso y vivir de lo que uno sueña a veces es la mayor mierda que puedes sufrir en tu vida. Después de tener un enorme éxito en solitario, me planteé que ese mundo era demasiado para mí y que necesitaba que la música pasara a un plano diferente. Decidí usar la guitarra no para subir al escenario sino para enseñar a aquellos que no saben tocarla, porque solo deseo una vida tranquila. Pero como siempre, las cosas no salen como una espera y cuando el mayor de tus fans se topa contigo, a veces no te apetece darle una patada en el culo.
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