Pero...No... No lo comprendo. Yo lo mate, yo lo devolví al lugar al que pertenece, yo lo vi desintegrarse ante mis ojos. ¿Que debo hacer? Lo vuelvo a enfrentar y me arriesgo a perder la vida, o pongo a salvo a la joven que ahora me abraza como si la vida se le fuera en ello. Esto no debería pasar, ¿que debo hacer? Advertencia: Deben leer Samantha para poder entenderla.