En el instituto Waisheet habían desperecido 5 profesores. la conmoción llenaba los corazones de quienes estudiábamos ahí. Las clases debían continuar, por lo se convocaron cinco sustitutos. Mas ellos no eran como yo, o como quien lea estas letras, eran distintos. Pero a pesar de su extraña diferencia, ninguno era mas extraño que ella. Fue entonces cuando decidí escribir mi historia...aunque en el fondo quise que fuera nuestra.