En la reunión en el jardín de la casa de Can, tienen que revisar todas las ideas. Sanem, niega a ir allí, pero al final no tiene más remedio que hacerlo. Al llegar, ella se hace ver que es muy importante y espera que él le diga que pase, pero él, la ignora y al final es ella quien cierra la puerta.
Poco después, Geygey descubre que están juntos y descubre que ella le tutea.
Ahora Ayham, le está sirviendo a su hermano un vaso de te, para celebrar el éxito de su anuncio.
--Muy bien. Traigo un te, para mi hermanito. El anuncio, ha quedado estupendo. No puedo decir, otra cosa. Oh, antes has estado muy bien, con Leyla. Por cierto, es la primera norma del amor. Ignorar al otro, para que te haga caso. Y funciona. Bravo, es una buena táctica.
--Qué dices? Yo no he usado, ninguna táctica.
--Ah, no? Pues a que viene, tanta frialdad?
--Me he rendido. He perdido, la esperanza. A Leyla, no le gusto, y con razón. He he esperado mucho tiempo, sin hacer nada. Si guardaba alguna esperanza, la he perdido. Sshh. No pongas esa cara, que le vamos a hacer? No pasa nada. Hay que seguir, adelante.
--Pero no quiero verte triste, vale? Prometemelo.
--Lo prometo.
--Aayy. Mi hermanito...lo importante es, que estés bien.
--Me voy a ver, el partido.
--Osman. Esperame un momento, espera. Hermano, hermano. Emm. Es que quería preguntarte una cosa, antes de ver el partido.
--Tu, dirás.
--Quería saber, que sentías.en esos días en que estabas enamorado de Leyla. Es decir, notar algo especial, o no? Te sientes enamorado, si sientes algo distinto?
--Pues al principio, los sentimientos, llegan de repente y estas muy inspirado y te sientes muy feliz y entoces sientes de roto y cuando se va, te sientes vacío y se echa de menos y cuando se va, se echa de menos.
-- y, luego?
--El resto, ya lo sabes.
--Sí, claro.
--Ah. Un consejo de hermano, que puedes aplicarse. Si me vuelvo a enamorar, no pienso esperar nada. Le empiezo a mirar a los ojos y le diré lo que siento, directamente.
--Di que sí. Nada de tácticas, hay que ir, de frente. Jajaja.
--Por cierto. Creo que a Geygey, le gustas.
--Como dices? De que? De dónde, has sacado eso? Anda ya. Como le voy gustar, a Geygey? Que va...eh...somos amigos. Hablamos mucho, pero no me interesa en ese sentido, ni yo, a él. Entre nosotros, no puede ver nada. No hay ninguna posibilidad. Qué dices?
--Ayham. Sabes que te quiero, más que nada. Si te hace daño, se lo haré, yo a él.
--Anda ve a ver el partido, como sino me conocieras. Parece mentira. --Mientras, ella lo llama, Geygey vuelve a la casa chorreano, lo cual le cuelga el teléfono.--No te atreverás a ignorarme. Eh, Geygey?--se preguntó.
-- Qué haces? Vamos? -- preguntó Mezquive a Nihad. --Hija, un mensaje. A versi es de los proveedores.
--Es un email, de la oficina. El sonido es diferente. Llega cada 2 minutos. No voy a estar mirando todo el rato. Como quieres, que te lo diga? Cuando llegue, te lo diré. --dijo Leyla.
--Ay, hija. Tienes un sonido diferente, para cada cosa. Yo no entiendo nada.
--Es un teléfono, inteligente.
--Mezquive. Mira, ya he exprimido todos los limones, para la ensalada--dijo Nihad.
--Oohh. No me digas.
--Verás que ricas, quedan.
-- Di qué sí. Riquisimas.
--Calla.-- dijo al sentir, la puerta de la calle.
-- Hola familia. Qué tal, el día-- interrumpió ella.
-- Hija. Sanem, mira en tu teléfono, si han llegado pedidos. Llevamos todo el día, esperando una novedad. Miralo, anda.
-- Mamá. Te vamos que tener que comprar un móvil, para que lo consultes tú y dejes de preguntar y dejes de preguntar cada 2×3.
-- Hija. Primero tenemos que pagarte la boda. Es mucho más importante que comprarle un teléfono móvil, a tu madre. No crees?
-- No te preocupes. Te la iré pagando, mes a mes.
-- No...gracias. Pero...lo que tu madre quiere decir es que no necesitas una carga.
-- No hace falta el dinero. Cojo lo que quiero de la tienda. Como el tenedor del jardín, que más quiero?
-- Eso papá, lo pago yo.
-- Me duele un poco la cabeza. Me voy, a mí habitación.
-- Y, eso? Te pasa algo? Te ha dado, una insolación? Ha pasado algo, en casa de Can? Cuentamelo.
-- Nihad. Dejala ya. No ves que tu hija, está cansada? -- Vete a tu cuarto, descansa un poco, y luego ya verás como luego te encuentras mucho mejor. Te sentirás bien. Ya lo verás.-- Déjala. Déjala un poco, a su aire. Yo sé, de esas. Hay, como eres.
-- Ese es el mensaje, que esperamos-- dijo Nihad.
-- Ese mensaje, es para mí, papá. -- dijo Leyla.
-- No. No puede ser. Tiene que ser, para mí -- dijo, Mezquive.
-- Espera.
-- Leyla!
-- Se trabaja muy agusto en silencio. Aunque estoy, agotada. No puedo, más-- dijo Aderen.
-- Sí. Pero ha valido la pena. Hemos encontrado, un buen guión y está listo para mañana.-- dijo él.-- llama al escritor. Como se llama de apodo?
-- Pájaro Soñador.
-- Pájaro Soñador. Sea, quien sea, tiene que ser el vicario. Qué te ayude, y que te apoye.
-- Vale. Mañana, le llamo.
-- Vale.
-- Ah. Si ya hemos terminado, puedo irme.
-- Claro.
-- Can. Te lo voy a recordar por última vez, porque, sino me voy a poner incómoda. Prometiste, tomar una copa.
-- Es verdad. Siempre, se me olvida. Como, lo hacemos? Mañana, te va bien?
-- Mañana?
-- Ah...lo prometes? En serio?
-- Claro.
-- Estupendo. Para mí, es una motivación. Con lo agotada que estoy, me irá muy bien.
-- Pues vamos.
-- Tranquilo. Ya se donde está la salida.
-- Vale. Pues, nos vemos mañana.
-- Qué duermas, bien. Hasta mañana.
-- Hasta mañana.
-- Qué manos, tienes -- dijo Nihad.
-- No seas, adulador.
-- Sanem dice, que no tiene hambre, y que no va a cenar. -- dijo Leyla.
-- Ay madre. Qué esta está enamorada, te lo digo yo.
-- Qué dices? Enamorada? Qué va, te lo digo, yo.
-- Al final tu hermana, se ha enamorado, y del hombre, que no le conviene. No te has fijado? No lo cuenta.
-- Y de quién? De quién, se ha enamorado? Yo no he notado nada.
-- De Can. Se ha enamorado, de él. No trabajais, en la misma oficina? Sí hija, sí. Y lo sabías y me lo has dicho, y me voy a enfadar. Y mucho.
--Qué no, mamá. Yo que voy a saber? Sanem del señor Can? Estás segura?
--Eso es lo que yo pienso, pero no me lo digas a mí. Díselo, a tu hermana.
--No mujer. No creo que a él, le interese nuestra hija-- dijo Nihad--Sanem, sabe que su amor es imposible. Deberías haber visto, como le servía el té a Can. Sólo le faltaba tirarle...la tetera a la cabeza. Nuestra hija, es inteligente. Sabe, lo que debe hacer.
--Es verdad. A ver, el muchacho es guapo. Eso, hay que decirlo. Pero como se va a enamorar, un patrón, de su empleada? Eso nunca pasa.
--Y porqué, no puede ser verdad?--dijo Leyla--hay que ver. Además, Sanem, es guapa, es lista y tiene estilo. No tiene nada que envidiar, a esa gente.
--Tú también eres guapa, y muy lista y llevas mucho tiempo en esa empresa. Pero esa gente, es de clase alta. Lleva collares, y anillos carísimos, y nosotros somos muy dististos, hija mía. No te imaginas presentarlos a lo nuestro? Madre mía, es de locos, pensarlo. Tienes que hablar con tu hermana, y advertirselo, Leyla. Que se centre en su trabajo y que se deje de tonterías. Que se lo quite, de la cabeza. Has entendido?
--Hablaré, con ella.
--Ay, Señor. No ganamos, para sustos.
"La guerra es de la duda, y del amor--pensaba Sanem, mientras hacía sus perfumes--Para mí, es la dura respuesta. Intento alejarme de él, y no puedo. Rezo para no ver, esos ojos tan bonitos. Es cuando sufro, cuando esos ojos, no están. Lucho...contra mí misma. No puedo hacer, lo que mi corazón, le apetezca. Estoy enamorada de él. Para mí, no hay nada igual. Su voz, su valor, su personalidad, sus manos, sus ojos. No hay nadie, como el. Cuando no está, me siento vacía. Si me rompe el corazón, que lo rompa. Si hay alguien, que me lo diga, que sea el, quien me lo diga. Sólo necesito, su aroma. Ese agradable aroma, que no logró olvidar.
--Qué pasa? Que hora es?--preguntó Leyla, despertarla ella.
--Son las 6. Ya no puedo dormir más. Hazme sitio.
-- Pero, porque me despiertas a mí? Podías haber ido a ver a Ayham.
-- Mamá la está volviendo loca, con el teléfono inteligente. Se ha encerrado, en su habitación.
-- Estoy agotada. No quiero ir a trabajar. No quiero ir, a la oficina.
-- No quieres ir, a trabajar? Leyla, te encuentras bien? Ya sé, que no me lo quieres contar. Pero podrías derribar ese muro, y contarmelo.
-- No puedo. Es muy largo, de contar.
-- Está bien.
-- Sanem, estoy enamorada.
-- De quién?
-- Del señor Embre.
-- Ah!...
-- Ya.
-- Pues menuda sorpresa. No sé, que decirte.
-- Me gusta mucho, pero es mí jefe. Entre nosotros, nunca habrá nada. Tengo que olvidarme de él, y ya está.
-- Eso es muy lógico, Leyla. Preciso, como las matemáticas. Yo en cambio, soy incapaz. Lo estroperia todo y otra valoraria las posibilidades para nada y al final, me llevaría el disgusto de mí vida y ya está. Llegar a decir esto, me ha costado mucho. Meses.
Ya ves
--Y que quieres que haga-- dijo Leyla, suspirando-- no puede salir bien. Solo será, para sufrir más.
-- Bueno, yo...puede que tengas razón. No puede ser correspondido. El amor, es impreciso. Hermana.
-- Mm?
-- El señor Embre, no te conviene. Es muy calculador, y no te puedes fiar. Bueno, es mi opinión. Tu estás enamorada, y no te das cuenta, porque estás enamorada.
-- Y qué, más da? Parece que estás colada, por el señor Can.
-- Nooo...
-- Soy tu hermana. Puedes contarmelo. Ha pasado algo?
-- Me gusta mucho, es cierto. Me gusta tanto, que no tengo ojos, para nadie más.
-- Sanem, estás enamorada. Porqué, no me lo me la has contado? Porqué, no has dicho nada?
-- Y qué, iba a hacer? Me lo niego, a mí misma. Además, no es correspondido. Es imposible.
-- Ay, hermanita-- dijo suspirando, Leyla. Qué vamos a hacer?
-- Aguantarlo todo, pero pasará.
-- Eso espero. Además...son hombres carismáticos, y guapos.
-- Mucho. Amm...por otra parte...Osman, no tienen que envidiarles. No crees?
-- Sí. Osman, también es muy guapo. Pero a él, nunca le he visto, de ese modo. No puedo tener así, una relación con él.
-- Pero... tú sabes, que le gustas?
-- Pues claro que sí, Sanem. Pero no puedo darle esperanzas. Somos amigos, desde la infancia. Somos como hermanos. Vivimos, en el mismo barrio. Si saliera mal, sería muy complicado, para quererle.
-- Es verdad.
-- Sí no puedes dejarlo, mejor, no hablar.
-- Oh, hermana. Eso también, es muy lógico.
-- Una mente así, me tranquiliza mucho.
-- Oh, vaya. Deberías enseñarme, a pensar así.
-- Si tú quieres, te enseño. Pero no va con tú carácter. Vomitarias.
-- Inténtalo. Quizás, me ayude. Estoy fatal.
-- Jaja. Como quieras, lo intentaré. Cómo vamos, a comparar? En que ambiente, se crió. Vamos, a analizarlo.
-- Qué tengas, un buen día-- le dijo a su hermana.
-- Lo mismo, dijo ella-- le correspondió. -- Buenos días, Geygey. Geygey pero, que te ha pasado? -- preguntó cuando le vio sus ojos.
-- Sanem, como pudiste hacerme esto? No me cuentes, esos secretos. A ver, que hago yo ahora? Recojo mis cosas, y me vuelvo al pueblo? Ya sabes, que allí no existen los secretos, porque nadie puede guardarlos.
-- Dónde está, tu pueblo? Da igual. Déjalo. Tampoco seas exagerado. No es para tanto, hombre. Vale, es mi gran secreto y nadie puede saberlo. Lamento habertelo, dicho.
-- Creo, que me voy a volver loca. Qué voy a hacer ahora, que lo sé? Qué hago? Me lo llevo a la tumba, con ese nombre perdido? Qué voy a hacer? Qué puedo hacer? Sanem, ayúdame. Porqué, me lo has contado? La has liado, buena. Qué, pasa? -- Buenos días, señor Can-- dijo.-- Nuestra relación, está un poco tensa.
-- Cállate, callate-- dijo Geygey, que le iba a dar algo -- No digas, nada mas. Es que quietes, matarme?
-- Sanem, Geygey. Venid a la reunión-- interrumpió Aderen.
-- Ya se lo tomará alguien. Venga, vamos, espabila.
-- De acuerdo.
-- Qué te pasa? No puedes, andar? Qué, Fuerte. Venga, vamos.
-- A ver. En primer lugar, una advertencia. Llegará Aylim, y trabajaremos con ella, pero, no os preocupéis.
-- Geygey-- dijo ella, que casi se desmalla.
-- Geygey, no seas tan dramático-- dijo Aderen--no será la primera vez que la veamos. Aylim, va a presentarnos al cliente de los coches, y después, se irá. Podéis, aplaudir. Me encantan, los aplausos. Y ahora, vamos con la buena noticia. Am...anoche trabajamos, hasta muy tarde, pero mereció la pena. Porque escogimos el guión. Pero en realidad, lo elegí yo, porque...me encantó el texto. El relato ganador, es el del pájaro soñador. Sanem, se quedó sin palabras. -- por supuesto, es un seudónimo.
Voy a contar, una breve historia. Resulta de que se trata de un barrio modesto y humilde. Los protagonistas son dos chicas juntas, que relatan en sus sueños, en el que acabarán conociéndose mejor. Pero he cambiado, el carácter de la historia, que es centrándose en un coche, que es a la vez el vehículo para correr aventuras. Me encantan, las aventuras.
-- Sí. Así es.-- dijo él-- El rodaje, empieza mañana. Como no tenemos, mucho presupuesto, ah...tenemos que hacerlo, por nuestros propios medio, el pájaro soñador, vendrá llevarnos. Lo haremos todo, en un dia
--Geygey, contacta con el pájaro soñador, cuanto antes. Buscalo y llámale cuanto antes y dile que tiene que reunirse con el señor Can, cuanto antes y que llevemos un becario contratado en un,mes y que, aahh? Qué?
-- No se encuentra, bien -- dijo ella.-- ya lo haré, yo.
-- Aahh?? De acuerdo. Pero date prisa. Lo antes, posible.
-- Vale. Ya voy.
-- Qué sensacion. Señor Can?-- dijo Geygey, que casi se cae.
-- Oohh. Qué te pasa? Qué, haces?-- preguntó Aderen.
-- Ah...um...
-- Nemans, llevalo dentro.-- Bueno, poneos todos a trabajar.
-- Toma, ya!! Sanem, que pasada!!-- se dijo ella, bailando. -- Os han llamado. Os han llamado, desde arriba-- disimulo.
--Muy bien. Estimados amigos, presidentes, y demás autoredes-- se decía Musafer, gravandose con el móvil-- les vamos a firmar 4 fotos mías, personalmente.
-- Musafer-- le interrumpió, su madre.
-- Qué...
-- Ay, la familia.
-- Musafer, Musafer. Pero hijo, no ves que están llamando a la puerta? Deja eso, 5mn, y ve a abrir.
-- Estoy grabando. No grites. Musafer, esto. Musafer, lo otro. Déjame, mamá y ya me has estropeado el vídeo, y qué heces con los guantes de fregar puestos? Es es estiloso. A ver, enterate. Ahora eres la madre de una estrella. Entérate. No es mejor, usar el lavavajillas, mujer?
-- No me gusta como deja como deja los platos, el lavavajillas. Ve a abrir la puerta, hombre. No ves que estoy chorreando espuma?
-- Soy una estrella, que abre puerta. Y el vídeo, a la porra. Se ha fastidiado. Siempre, la puerta de afuera. Si tengo que de portero, de que me sirve, ser famoso?--se preguntó.--Buenas tardes, señores agentes del servicio de policía-- dijo, al abrirles la puerta--soy un leal ciudadano. Puedo hacer algo, por ustedes?
--Está Musafer, en casa?
--Musafer. Es la primera vez, que oigo ese nombre. Ah...ahora que caigo, por aquí, vivía un hombre, que se llamaba, Musafer Cayaf, pero dijo que se iba a su pueblo y que no sabía cuando regresaría a Estambul. No se nada más. Les apetece tomar algo? Te, café, zumo de frutas, o alguna infusión?
--No gracias.
--Ah. Muchas gracias, por protegernos. Sois el orgullo, de nuestro país. Gracias a los hombres grandes y fuertes, de seguridad. Gracias a ustedes, vivimos tranquilos y salir a la calle, sin miedo.
--Musafer, es su hermano?
--Ah...no, no. Musafer, es primo. El hijo, de mí tío. En realidad, no se cual de ellos. Perdió a su madre cuando era un bebé, y mi madre, se hizo cargo de él. Incluso, la llamaba mamá. El y yo, éramos como hermanos, pero un buen dia, se lo llevó a Yosga y nunca más lo volví a ver. Aunque si lo veo, se lo digo y que se presente a ustedes.
--Sí, por favor. Hable con el. Es importante.
--Dónde. En comisaría?
--Claro. Dónde, sino.
--Claro! Es verdad. Se lo diré, si lo veo.
--Buenas tardes.
--Buenas tardes. Gloria, a la patria--gritó.
--Jajajajs.
--Ah, Musafer. Te han encontrado--dijo su madre.--ay, mi niño.
--Mamá, tranquila.
--Mi niño, mí amor.
--Sueltame, Sueltame. Esta bien. Tranquilizate. No te das cuenta, del pedazo de actor que soy? Mi actuación, ha sido impecable, mamá. He burlado, a la mismísima policía. Les he hecho creer, que soy Misifuz, y no Musafer Cayaf. Ahora soy, una persona distinta. Hala, que busquen a Musafer. Hasta luego.
--Eso espero, eso espero.
--Por favor. No llores, mamá. Tranquila.
--Jajajajs.
--Can! Eso no me lo habías contado. Luego, que pasó?
--Bueno, esto te lo contaré otro día. Esto, ya pasó.
"Que conversación, tan animada--pensó.
--Se me ocurre, otra cosa. Mejor, salgamos esta noche, para tomar algo juntos.
--Que, pasa?
--No pasa nada. He llamado al soñador, y dice que no puede venir y de hecho...quiere solucionarlo todo por el teléfono.
--Como que no puede venir? El contrato, ya está listo, y sólo quedan 2 días. Una de preparación, y otra de rodaje y además, como becario. No puede, venir?
--No lo sé. Dice que le va má, y que vive. Muy lejos.
--Como tan lejos? Tampoco, puede ser tanto.
--Pues, Anatomía.
--Está en Comia En el más remoto, de los rincones.
--Famosa, por su carne.
--Es verdad. Está...deliciosa.
--Sí. Sé dónde está Comia. Y que vamos a hacer, ahora?
--Sanem. Llámale otra vez. Intentaré convencerlo.
--No quiere hablar, con nadie--dijo ella.
--Pues dame, el teléfono. Lo hago, yo.
--No quiere que le des su número a nadie. Es muy rara. Pero si quiere, le digo, que le llame.
--Es una mujer? Vale, que me llame.
--Bien.
--Pues el señor Can...
--Habla.
--Pues el señor Can, es...nuestro jefe. Nuestro jefe, sí. Nuestro jefe, nuestro jefe...dijo Geygey.--Es...es...que ha pasado algo, muy malo.
--Dónde está, Geygey?-- preguntó Gollit.
--Allá. Le ha dado, otro ataque de pánico.
--Esto es increíble...de verdad...veras.
--Geygey--interrumpió Ayham.
--Aaaayham. Que haces, aquí? Dime la verdad. Cuál es la razón, de haber venido aquí? Así que, cuentamelo. A que has venido, a mí? Cuentamelo, de una vez. No lo aguanto, más.
--Pero hombre, qué te pasa? Vale, te diré...porque he venido. Am...resulta que Sanem, quiere hablar conmigo. Es urgente.
--Ayham. Que haces, tu aquí?-- preguntó ella.
--Ah..hola Sanem. Me has llamado. No te acuerdas? Querías hablarme, de algo importante.
--No he pedido, que vinieras.
--Salid de aquí, y dejadme en paz--dijo Geygey, nervioso--Sanem. No me digas nada. No quiero, saber nada. Me voy. No puedo soportar, esto. No me hagáis, esto. Vete, vete.
--Pero...que le pasa?--preguntó Ayham.
--No puede ser. No puedo procesar, tanta información. No quierooo. No me cuentesss...no, quiero, no quiero.
--Geygey, calmate. Tranquilizate--le decía ella.
--No puedo, más.
--Tranquilizante, hombre. Ayham, también lo sabe--le dijo, mientras a él le costaba respirar.
--Que es lo que sabe? Que el señor Can, en el cumpleaños de la señorita Polet, dejó la fiesta, se puso esmoquin, que me echó de la opera, para besarte en un palco?
--Pues sí.
--Aahh. Aja. Que agusto, acabas de dejarme. Jaja. Entonces, porqué la has llamado...eh? Porqué, la has hecho venir? Habéis tramado, algo. Queréis libraos de mí? Ayham, es tu amiga, de la infancia. Confías en ella, pero no, en mí. Qué hacéis? Me vais, a estrangular? No,no,no.
--Calmate, calmate.
--Ve a la policía, me van a investigar y se llevarán a mi pipa, y mi cadáver.
--Geygey, Geygey. No digas, más bobadas--le dijo Ayham--Sanem, no me ha llamado. Vale? He venido, por mi cuenta. Vale?
--Ha sido, por propia iniciativa.
--Es eso. Quieres deshacerte, de mí. Quieres deshacerte, de mí. Claro, ya lo entiendo.
--Tranquilo.
--No me toques.
--Tranquilo, tranquilo.
--No me toques, más--gritó.
--Geygey, Geygey, Geygey.
--He venido, a verte, a ti--dijo Ayham.
--A verme, a mí?
--Sí.
--Lo dices, en serio?
--Claro, que sí.
--Ah.
--Amm. Ayham, será mejor, que te lo lleves--le dijo, ella.--Esto es muy importante. No se lo digas a nadie. Tengo que ir a Comia, ahora mismo.
--La madre de Comia, es de 42. Me está viniendo a la mente, informaron innecesaria. No me cuentes más secretos, vale?
--Geygey, Geygey. Calmate. Sh,sh. Eh...respira hondo, vale? Eso es, muy bien. He venido, porque no cogidas el teléfono, quería hablar contigo. Recuerdas que el otro día, hablamos de amor?
--Sshh. Cállate. No digas, esa palabra. No puedo. No puedo, soportarlo más. No puedo escuchar, las historias de amo de los demás. Así, que imagínate, la mía. No estoy, tan fuerte. No estoy, bien. Que me pasa? Mis ojos, ah. Los veo cuando el día que me tiré a la piscina. No veo, estoy ciego. No veo, nada. Que me pasa? No veo...
--Geygey!--gritó Ayham, al verlo caer--Geygey, Geygey.
--No veo. Que le pasa, a mis ojos? No veo.
--No pasa nada. Tranquilo. Respira hondo. Estoy aquí, contigo. Geygey, Geygey.
--Me pellizcas y me lees los posos de café--dijo Osman.
--No hay, problema.--dijo Gollit.
--Tranquilos, tranquilos. No es molestia. Dejamelo todo a mi--decía Leyla.
--Pues me alegra, haber venido--dijo Osman.--y eso, que quiere decir?
--Ve pasando. Voy por un café.
--Vale. Hasta ahora.
--Jaja. Con esa sonrisa que tienes, puedes hacer anuncios, para pasta de dientes. Te lo digo, yo-- digo, yo.
--Gracias, pero...estoy contento de carnicero. No tengo pinta, de ser actor.
--Me parece estupendo, pero quedaste genial, en el anuncio.
--Gracias.
--Jaja.
--Osman, hola. A que has venido, por aquí? Quieres algo?--interrumpió Leyla.
--Sí. He venido haciendo cobrar el trabajo, del otro día. Pero...al parecer está todo un poco alborotado.
--Mm si, es normal. Tienes que ir, a contabilidad. Te acompaño.
--Eemm. Es que...aun no he terminado, el café. Luego me acompaña, Gollit.
--Oh, está bien. Pero recuerda, que Osman fue el ex novio de Sanem. Le podría sentir mal, si os ve juntos por aquí.
--No, que va. Ya lo hablé con ella, y dijo que no le interesaba. Ay, perdona. Que estabas, aquí. Espero que no te hayas molestado.
--Ah, no. Ella tampoco me interesaba a mí. El compromiso, fue un montaje. Tranquila. Oh, te apetece, un café? Gollit, sabe leer los posos. Quieres que te lea, el futuro?
--No. Muchas gracias. Tengo mucho, que hacer. No puedo perder tiempo, con adivinas. Pues nada, ya te ayudará Gollit. Nos vemos.
--Mm.--Bien, sigamos. No he terminado. Qué aún, nos queda, el plato.
--Ovidie automoción, puede parecer, un cliente complicado. Son meticuloso y controla los detalles--decía Aylim--pero con el tiempo, os habréis acostumbrando.
--Controla, los detalles. Bien--dijo Embre--estoy acostumbrado, a eso.
--Sí. Eso parece, y es normal que estén preocupados por su nuevo anuncio-- dijo Aderen--también para nosotros, es un concepto nuevo y si teníamos dificultades, en exponer ideas en las redes sociales y aunque la historia, de pájaro soñador, es una auténtica maravilla.
--Y de que va, ese guión?--preguntó Aylim.
--Eso es secreto profesional. Ya verás, cuando lo lean.
--Aderen...no exageres. A ella, puedes contarselo, que no se te ha ido el cliente--le dijo él.
--No. Cuando termine esa reunión, para mi Aylim, será una persona cualquiera.
--Da igual, Can. No me importa. Ya miraré otras, que me sorprenda.
--Ha recibido, algún encargo de Fabryk?--preguntó Aylim--porque después del último proyecto, no a vuelto a contactar conmigo.
--No. Solo ha hecho 8 proyectos.
--Y luego será, su propio perfume. Se lo llevaremos, nosotros. Me da la sensación, de que no tienes mucho trabajo. Nos visitas, muy a menudo--le dijo Aderen.
--Garina, y Orgate, son mis clientes principales.--dijo Aylim--ya lo sabis. Por eso, os he pasado este cliente. A mi no me importa. Me viene grande, la verdad. Pero...perdi a mi equipo. Ahora trabajo, con agentes Grylans. Es lo que puedo pedir. No se cuanto más, podré ir aguantando.
--Lo siento. Espero, que las cosas mejoren.
--Gracias, Can.
--Ah...bueno. Vamos a repasar el presupuesto--dijo Embre.--el cliente, llegará enseguida.
--Vamos.
--Perdón--dijo el, al sonarle el teléfono.--Hola, número oculto--dijo.
--Buenas tardes, soy pájaro soñador. Tengo la voz, un poco tomada. Lo siento-- dijo ella.
--Hola, pájaro soñador. Donde estás--dijo el, sabiendo, que era ella.
--Pues...en Comia.
--Cuál es el prefijo, de Comia.
--Ah...um. No lo sé. Estoy hablando, desde un teléfono móvil.
--Y la matrícula, de Comia?
--No lo sé...porque no tengo coche y si quiera se, las calles de Comia. Es que no soy de aquí. Me escapé de casa y vine, para acá.
--Y cuando vas a seguir huyendo, pájaro soñador?
--No lo entiendo.
--Escucha. Tu guión, es una maravilla. Porqué ocultas, tu identidad?
--Porque...ya se lo he entregado. Le cedo, todos los derechos de autor. De acuerdo? No le reclamare, nada.
--No puedes hacer eso. El autor del guión, tiene que estar en la reunión. Te espero en mi oficina, en 10 mn. Pájaro soñador.-- y Sanem, fue descubierta.
--Porqué nada me puede salir nada bien?-- se preguntó.
--Señor Can.
--Ven, que te voy a contar, un secreto-- le dijo él, a Gollit.
--Que es, que es?
--Ven. Quieres saber, quien es pájaro soñador?
--Sí, quien?
--Sanem. Sí.
--Queeeee??? Aaahhh???
--Cuentalo.
--Escuchad todos. Pájaro soñador, es Sanem. Nuestra querida, guionista!! Bravo, bravo, bravo!!
--Enhorabuena, Sanem.
--Gracias.
--Enhorabuena!!
--Gracias.
--Que, sorpresa!!
--Bien. Qué pasa?-- interrumpió Aderen.-- he oído, aplausos. Quiero saber, que pasa?
--Señorita Aderen, resulta que pájaro soñador, es Sanem.-- Bravo!! Aplausos, chicos. Más aplausos!!
--Vaya!! Me has vuelto a sorprender. Escribiste un guión, con un seudónimo. Incluso...podias habermelo dicho.
--Aamm. Si, pero era obligatorio, un seudónimo, para esconder los derechos de autor.
--Es verdad. Yo puse, las normas. Muy bien, entonces...no tengo más que decir al respecto.
--Puedes caligicarme, por ejemplo--dijo ella.
--Sí. Enhorabuena. El guión, es muy bueno, sí.
--Quiero que sepa...que me hace mucha ilusión, que lo haya elegido usted. Muchas gracias.
--Así es. Yo lo elegí, hoy--dijo triunfante.--es un guión estupendo. Va a tener, mucho éxito. Enhorabuena. Poneos, a trabajar.
--Venga, más aplausos. Enhorabuena--gritó Gollit.
--Vamos Sanem, de verdad. Has hecho, una buena obra.
--Que pasa aquí? A que vienen, tantos aplausos--interrumpió, Leyla.
--Resulta que pájaro soñador, es tu hermana-- dijo Gollit.
--Eso es, verdad?
--Sí.
--Ven aquí, hermanita--le dijo, abrazandola.-- No me lo puedo creer. Estoy, tan orgullosa? Que entre tantísimas historias, que nos han enviado, hayan escogido la tuya. Me alegro muchísimo. Pero considarlo, como tú primer paso hacia tu carrera de escritora. Estoy contentisima.
--Es verdad. Sois, muy amables. No hace falta, pero...tampoco hace falta exagerar.
--Bravo!! Bravo!!
--Hasta hecho, un buen trabajo.
-- Mm, je. Que ha pasado? Me han despedido?-- preguntó Geygey, al despertar en el hospital.--segúro, que me han despedido. Oohh, que bien me siento. Ahora me espera, una vida tranquila.
-- Geygey-- dijo Ayham.-- Geygey. Al fin estás despierto.
-- Ayham, Ayham. Qué pasado? Porqué, estoy yo, aquí? Estate quieta mujer. Quieres estrangularme? Me vas a asfixiar, con la almohada? Como en las películas, o retirar el goteo del suero? Es eso? A qué sí?
-- Jajajaja. No digas, bobadas. Como voy a hacer eso? Te estaba ahuecando la almohada, para que estés más cómodo.
-- La almohada, es comodisima.
-- Jaja, ya...a ver si estás volviendo en ti, Geygey, porque quiero decirte una cosa.
-- Qué me quieres decir? Qué quieres, que continúe? Tenemos un asunto, pendiente.
-- Jaja. Es que...el otro día, me hablaste de amor. Lo recuerdas?
-- Aaahhh. Sí, te hablé de amor. Y ahora me vas ha sacar ese tema, y me va a dar, otro ataque de pánico. O un infarto. Esa será, tu táctica y no quedará señal. Podías asfixiarme con la almohada. Eres inteligente. Porqué, estoy, tan tranquilo? Eh? Qué me ha pasado?
-- Estás así, porque te han puesto tranquilizantes, en el suero.
-- Aahh, fenomenal. Estoy encantado de la vida. Estoy, super agusto. Voy a tener que venir todos los días, para que me pongan esto. Por cierto, que es lo que me tenías que decir, Ayham. Sobre eso, del amor. Ya me dijiste, lo que sentirás. Yo he pensado, lo mismo. Podemos estar, como buenos amigos. Es lo mejor. No puedo tener, una relación.
-- Aahh, ja.
-- Mm.
-- Me parece estupendo. Si es eso, lo que piensas, estoy de acuerdo. Me parece genial-- dijo Ayham, frustrada.
-- La agencia, mí trabajo, Aderen. Se ma ha pasado, el efecto. Creo que me va a dar, otro ataque de pánico.
--Otra vez? Geygey, calmate. Tranquilo. Qué ya pensarás luego, en el trabajo.
-- Jajajaja.
-- Qué pasa? A ti también, te han sedado?
-- Se me ha ocurrido, una idea.
-- Qué idea?
-- Vamos a pasarle, el efecto a Ayham.
-- Porqué, has saltado, sobre mí? Me quieres, asesinar. -- dijo asustado y se desmayó.
-- Tome. Aquí tiene-- decía Musafer -- no puedo hacerle descuentos, por política de la empresa. Pero tome, una foto por mí firmada para usted.
-- Vale.
-- Venga, porque tengo que promocionarme, ante mis vecinos. Soy una estrella, y necesito, publicidad. Los números de contactos, están por detrás.
-- Pero hijo, que haces?-- preguntó su madre-- que no eres una estrella? Por Dios bendito. Qué esto, es una tienda. Además, tenemos muchos problemas. Te lo dije, te lo dije. Te han encontrado.
-- No te preocupes. Me he escapado, del peligro. Ahora, estoy, a salvo. Ahora voy ha subir, peldaño, a peldaño. Como una estrella, de Hollywood. A ver, que hacen, las estrellas? Estudiando, un guión, por ejemplo. Trabajar de porteros, de camareros, o de lo que haga falta. Pero, no se avergüenzan, de él. Yo vendo lencería, y a la vez, voy subiendo a la fama. Hazte a la idea, del que vive en el mundo de fantasía, en el que vive Sanem, y además, soñando en un mundo, como ése.
-- Qué quieres que te diga, hijo? Qué quieres, qué te diga?
-- No digas nada. Presiento, que las agencias, me van ha fichar. Sabes porqué? Porque ahora tengo fotos. He invertido, por ellas. Me ha costado, dinero y ahora soy medio famoso. Me estoy preparando, para la fama mundial. Por eso mismo, he hecho, un montón de copias.