TaeHyung admitiria que en un inicio no deseaba tener algo con SeokJin, pero aquel chico ganó su corazón en tan solo cinco meses, su aroma le calmaba y le hacía mucho bien, en todas esas salidas se conocieron lo suficiente como para decir que él ya le tenía afecto, SeokJin había casi eliminado por completo la barrera que TaeHyung había creado en un inicio.
SeokJin se volvió un tanto codicioso en cuanto a sus sentimientos, ya no sólo quería una simple amistad y estaba dispuesto a luchar por cortejarlo. Era sumamente feliz al tenerlo cerca, observar sus fugaces sonrisas y que decir del sentimiento que le provocaba al escuchar su canto.
Pero cuando creía que todo iba bien, una tarde de Octubre, TaeHyung comenzaría a dudar de todo, hasta de la más mínima cosa y pondría de nuevo aquella barrera entre ambos.
En esa mañana, fue de compras como siempre lo hacía, estaba de humor tarareando su canción favorita hasta que sintió la presión de una mano en su hombro.
Una chica peli negra de su edad se encontraba atras suya mirándole con una sonrisa que le provocó miedo.
-¿Cómo has estado?, hace tiempo que no nos vemos - sonrió haciéndole sentir indefenso, era una de sus amigas la cual era muy especial para él, pero no era recíproca su lealtad.
-Ah...hola - respondió nervioso - es cierto hace mucho no nos veíamos.
-¡Por eso mismo tenemos que hablar! - tomó su brazo izquierdo con cierta rudeza para así abrazarlo del mismo - ¡hay que ponernos al corriente!.
-Pero yo... - fue interrumpido por aquella chica.
-Oh vamos, termina tus compras y vayamos a aquella cafetería que está enfrente - TaeHyung asintió desconfiado de la sonrisa que mostraba, era muy extraño para él.
Y así fue, no es como si tuviera alguna opción de huir, aquella Omega no se le despegaba ni un segundo sofocandolo con su expresión facial.
Suspiró una vez estando sentado en una de las mesas mientras la chica delante suya no paraba de hablar, no le prestaba atención ya que sólo hablaba de su sueño de ser cantante, hasta que un comentario suyo le obligó a hacerlo.
-¡Sabes!, tu hermano mayor me pidió matrimonio - le sonrió mientras tomaba de su capuccino mostrándole su anillo de compromiso.
-¿Mi hermano?...oh es cierto, estaban en una relación... - desvío su mirada a un lado.
-Sí, sabes me gustaría que asistieras - TaeHyung se sorprendió, sin embargo, no le miró - además, tu familia no te guarda rencor...al menos tu madre no - se notaba su mala intención con tan solo hablar.
-¿Como están todos?, ¿están bien? - preguntó mirándola.
-Sí, tu hermana me dijo que no quería volver a saber de ti cuando le enseñé el vídeo donde salias cantando - frunció sus cejas levemente mientras miraba el esmalte de sus uñas - ya sabes cómo es - ignoró la reacción de incomodidad de TaeHyung y siguió - tu madre Omega se ilusiono de verte bien y escuchar tu talento - rió bajo con tono burlon - y bueno...tu hermano simplemente dijo que no le importaba.
-Ah - TaeHyung pensaba que era demasiada información, sólo quería un "están bien" como respuesta.
-¿Quieres verlos?.
-No creo que...
-¡Te llevaré con ellos, vamos! - jaló de su brazo con fuerza haciéndolo levantar de su lugar.
-¡Después de todo lo que dijiste de verdad no creo que sea prudente de mi parte! - habló firme una vez que salieron del lugar.
-¡Tú asistiras a mi boda y por eso debes hacer las pases! - ordenó.
-No quiero arruinar tú día así que no iré - se quejó bajo.
-¡Siempre tan egoísta Tae! - añadió un tono de voz lastimero - ¡sólo piensas en ti, siempre fue así!.
TaeHyung más que incómodo y extrañado por su actitud recordó el pasado.
-No es por ser egoísta.
-¡Quieres verlos lo sé, tus feromonas te delataron, eran de felicidad cuando hablé de ellos! - TaeHyung tocó su cuello nervioso, tenía razón, los extrañaba y quería verlos, pero no era debido - ¡no puedes hacerme esto, debes hablar con ellos! - lucia como una niña berrinchuda.
-Sí quiero verlos...pero no - ella se acercó a él de nuevo con aquella sonrisa extraña.
-Confía en mi - apretó sus hombros con sus finas manos - ¿cuando te he fallado? - Ni siquiera puedo contarlas con mis dedos - ¡no seas egoísta, te invito a mi boda con la condición de que arregles las cosas con tu familia y así me pagas, despreciandome!.
Aquella chica era Omega, pero a pesar de eso tenía un aura tan dominante, con ella siempre se comportó pasivo ante sus órdenes cumpliendolas al pie de la letra, siempre hizo sus tareas, siempre le ayudaba y ella no lo hizo cuando más la necesito, su aura dominante volvía a hacer presencia en él.
-E-está bien...haré lo que me pidas - ¿qué podría salir mal?.
Más tarde, después de dejar las compras en la casa que compartía, en el auto de la chica se dirigieron a la nueva dirección donde vivía su familia, comenzó a sudar de sus manos como si se tratarán de fuentes de agua.
-Bien, baja - ordenó sonriente - toca, ahí están.
-¿No me acompañaras? - preguntó viéndola.
-¡Claro que no!, ¡no me incumbe! - viró los ojos con fastidio y abrió la puerta donde se encontraba TaeHyung - ¡sal!.
TaeHyung frunció su ceño bajando del coche para posteriormente cerrar la puerta.
Suspiró con pesadez y se dirigió a la puerta marrón.
Dudó, pensó que podría correr y evitar esta situación por ahora.
Mientras estaba en sus pensamientos, la peli negra llegó corriendo tocando la puerta con fuerza para después esconderse a un lado mientras TaeHyung le observaba con miedo.
La puerta fue abierta por una joven menor de diecisiete años.
En su rostro podía observarse la impresión que tenía al igual que TaeHyung.
Ambos quedaron en silencio mirándose.
-¿Quién es hija? - la voz de una señora mayor les hizo reaccionar.
TaeHyung intentó mirar más allá de su pequeña hermana pero ella reaccionó antes moviéndose de un lado a otro para evitarlo.
-¡Uno de mis amigos, ya vuelvo! - salió cerrando la puerta tras suya.
La chica de pelo azul marino fulminaba con la mirada a TaeHyung quien solo le miraba con cierto temor.
-¿Qué demonios haces aquí? - preguntó totalmente enfadada.
-Yo... - observó por el rabillo de su ojo como "su amiga" se escondía tras un pequeño árbol que se encontraba más lejos.
-No te quiero volver a ver por aquí - ordenó.
-Yo solo quiero disculparme con nuestras Madres Hana, ¿me dejas? - rogó y su hermana rió.
-Nuestra madre Alfa murió por tu culpa - TaeHyung abrió sus ojos por la sorpresa - se frusto tanto que enfermo y murió - habló con enojo - Mamá quedó muy triste y también enfermo al poco tiempo de su muerte, si no la quieres matar, vete.
-Por favor solo déjame pedirle perdón, ¡déjame hablar con nuestro hermano! - trató de no mostrar que tan afectado se encontraba por la noticia.
-No grites - ordenó con tono bajo - vete ya y no vuelvas, no me interesa que te pase por todo lo que has ocasionado, por tú estúpida adicción - reclamó - no sólo mataste a nuestra madre, ocasionaste que nuestro hermano trabajará perdiendo sus estudios y de paso a mí, ¡ya no podré huir de esta estúpida ciudad y tener un futuro mejor! - cruzó sus brazos - vete ya - entró rápido a la casa asotando la puerta dejando a un TaeHyung dolido por sus reclamos.
La Omega se acercó a él y el la miró.
-¿Qué demonios sucede contigo? - preguntó al ver la sonrisa de aquella chica.
-Así que ocurrió tal y como pensé - chillo de felicidad aplaudiendo con sus manos - ¡Si que estas jodido! - rió con descaro.
TaeHyung rió sin ganas - eres la misma cabrona de antes, fue estúpido confiar en ti - la chica le miró ofendida haciendo una mueca.
-Pará qué aprendas qué yo seguiré siendo tú sombra - se acercó a él - siempre buscaré la forma de joderte, ¿acaso no te lo advertí?.
TaeHyung miró al suelo.
-Siempre estaré ahí - rió - ya que te encontré, buscaré la forma de joderte, ¡de que no seas más importante que yo!.
-¡¿Todo es por cantar?!.
-¡Sí!, ¡maldición siempre hablan de ti a donde sea que vaya!.
TaeHyung se harto, cerró sus puños con fuerza dándose la media vuelta alejándose de aquel sitio.
Llegó por la noche a su hogar, daba gracias de que sus amigos aún no llegarán para así poder estar solo, desahogandose en su llanto repitiéndose cuanto se odiaba a si mismo.
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𝐏𝐞𝐫𝐝𝐨́𝐧,𝐧𝐨 𝐬𝐞 𝐦𝐞 𝐨𝐜𝐮𝐫𝐫𝐢𝐨́ 𝐧𝐚𝐝𝐚 𝐦𝐞𝐣𝐨𝐫 𝐪𝐮𝐞 𝐞𝐬𝐭𝐨 𝐲 𝐦𝐮𝐜𝐡𝐨 𝐦𝐞𝐧𝐨𝐬 𝐮𝐧 𝐭𝐢̄𝐭𝐮𝐥𝐨.