𝐀𝐌𝐎𝐑 𝐌𝐀𝐋𝐃𝐈𝐓𝐎; 𝘻𝘦...

By Mar_GD

436K 41.8K 11.7K

❝ 𝐃𝐈𝐂𝐄𝐍 𝐐𝐔𝐄 𝐒𝐈 𝐂𝐎𝐍𝐎𝐂𝐄𝐒 𝐀 𝐋𝐀 𝐏𝐄𝐑𝐒𝐎𝐍𝐀 𝐂𝐎𝐑𝐑𝐄𝐂𝐓𝐀 𝐄𝐍 𝐄𝐋 𝐌𝐎𝐌𝐄𝐍𝐓𝐎 𝐄�... More

━PRÓLOGO━
𝐀𝐌𝐎𝐑 𝐌𝐀𝐋𝐃𝐈𝐓𝐎
━━O1
━━O2
━━O3
━━O4
━━O5
━━O6
━━O7
━━O8
━━O9
━━10
━━11
━━12
━━13
━━14
━━15
━━16
━━17
━━18
━━19
━━20
━━21
━━22
━━23
━━25
━━26
━━27
━━28
━━29
━━30
━━31
━━32
━━33
━━34
━━35
━━36
━EPÍLOGO━

━━24

10.8K 1K 647
By Mar_GD

POR TI

• • •

Observaba la mirada perdida que Zeldris tenía, maldecia en sus adentros al saber que los diez mandamientos fueron derrotados por completo por los siete pecados capitales.

Ahora solo quedaba él después de que los antiguos reyes de dos diferentes  clanes les dieran la espalda entregando sus decretos.

──¡Muy bien! ¡Puedo manejar todo esto por mi mismo! ─exclamó elevando su poder incrementando su marca demoníaca. ──¡¡Les mostraré a todos ellos quien es el más digno para convertirse en el rey demonio!!

──¿Humh? ─pellizque su nariz. ──Incrementas tu poder sola para decir estupideces. ─ante mi mala mirada él volvió a como estaba antes.

──Lo siento, cariño. M-me emocione. ─cerré mis ojos alejando mi mano.

──Tsk. ─cerré mis ojos soltando un suspiro.

──Puedo verlo bien. La imagen de usted reinando desde el trono del rey demonio. ─escuchamos una voz caminar a nosotros. ──Por favor, permita nuestra fuerza sea usada por usted de algún modo.

Entre cerré mis ojos al volver a ver a ese viejo bastado bigotón. 

──¿Ustedes son...? ─Zeldris miraba a los dos hombres llegar al frente suyo. ──¡¡Cusack!! ¡¡Chandler!!

──Tsk. ─me cruce de brazos mirando a otro lado.

──Ha sido un largo tiempo, príncipe Zeldris. ─se arrodillo.

──¡¿Ustedes dos son libres?! ─preguntó al saber sobre el sello.

Ignore por completó sus palabras sobre como lograron escapar del sello y su estúpido discurso de disculpa sobre que escucho la conversación que tuvo con su padre.

Solté un suspiro pesado al escuchar los lloriqueos de Chandler sobre su pupilo que supuestamente fue secuestrado por Elizabeth.

──Bueno, bueno... no llores así, demonio diminuto. Puedo entender como te sientes... ¡¡de verdad!! ─sentí su mala mirada.

──Ahórrame mis ganas de golpearte y deja de matarme con la mirada, estúpido demonio. ─lo mire de reojo.

──Diosa asquero...

──Cusack. ─Zeldris lo interrumpio antes de que terminará. ──No permitiré ninguna falta de respeto hacía ella.

──Mil disculpas, príncipe Zeldris. ─a pesar de ello sentía odio hacia a mi y lo más probable es que buscará la forma de matarme.

──No preocupes por eso, Zel. ─lo abrace de su brazo. ──Cusack y yo tenemos una hermosa relación de odio a muerte. ─él solo soltó un suspiro al saber que es cierto.

──¡¿Qué crees qué haces?! ¡Aleja tus asquerosas manos del príncipe Zeldris! ─Cusack parecía enojado a más no poder.

──Oh... ─una sonrisa maliciosa se poso en mis labios. ──¿Dices que quieres que lo abrace más? ─pasé mis manos por su pecho mirando a su maestro enojarse más.

──¡Tú pequeña insolente...! ─solo me limite a reír ante su cara al rojo vivo de la furiosa que sentía al ver como tocaba a su pupilo sin descaró alguno.

──Amaris... ─Zeldris miró a otro lado sonrojado. ──Aquí no. ─susurró.

Solté una leve sonrisa alejando mis manos de su pecho ignorando los gritos/lloriqueos de Chandler sobre su pupilo.

──La orden es rescatar a Meliodas. ─comunico Zeldris sorprendiendo a el demonio que dejo de llorar. ──Viene directamente de mi padre, el rey demonio.

──Tsk. Ese viejo bastardo mal parido. ─me cruce de brazos mostrando mi desprecio hacia su nombre.

──¡¿En serio?! ─dejo caer su bastón.

──Se te cayo el bastón. ─el viejo ignoro a Zeldris de lo feliz que estaba.

──¿El rey demonio ordeno qué...? ─preguntó Cusack con sorpresa. ──Aunque sea su propio hijo, esta siendo demasiado complacido, ¡¿no crees...?! Bueno, supongo... que aun sigue pensando en él como su hijo. ─sonrió con dulzura mirando a Zeldris, si bien sabia que él lo miraba como su hijo.

──Quien sabe. Nunca puedo entender lo que mi padre traen en la mente. ─se cruzo de brazos mirando a otro lado.

A los minutos miramos a Chandler salir volando en dirección con su amado pupilo después de que Zeldris le dijera que ellos se encontraban cerca de Camelot.

──¿Pero porqué el rey demonio piden que rescaten a Meliodas justo en este momento? Incluso dejando mis propias preferencias de lado, aún no hay nadie más digno que tú para convertirse en el próximo rey demonio, príncipe Zeldris.

──¡¡¡Claro que no!!! ─expresó con su ceño entre cerrado en forma de enfado.

Sabia que por dentro estaba sufriendo por ello, tenía la leve idea de convertirse en el próximo rey demonio para romper mi maldición. Pero su padre prefirió a el traidor de su hermano para el puesto.

──Hey, tranquilizate. ─tome su rostro juntando nuestras frentes. ──No ganaras nada si te enojas.

Al sentir mi tacto suavizó su mirada relajando su gesto, tomo una de mis menos depositando un casto beso en mis nudillos.

──Supongo que tienes razón. ─sonreí al sentir como deposito un beso en la punta de mi nariz.

──Pequeña insolente... ─Cusack bufaba de enojo.

──Hey, hey... ─me estremeció escuchar esa voz. ──Están siendo bastantes crueles. Dejando de lado a su otro hermano mayor de esta manera. ¿Qué tipos de proyectos tan divertidos están planeando?

──¡Estarossa! ¿Haz recuperando la conciencia?

Mi mirada se oscureció y unas ganas de matarlo me invadieron. ¡Ese bastardo asesino a mi hermano! Sentí los brazos de mi amado abrazar mi pequeña cintura al saber mis intensiones las cuales eran ir y matarlo.

Lo único que podía hacer era apretar mis puños y cerrar mis ojos para no lastimar a Zeldris para que me soltará.

No me quedó de otra que ignorar por completo su estúpida platica.

──Príncipe Zeldris. ─esté miro sobre su hombro a el demonio. ──¡Te protegeré aunque me cueste la vida!

──Quizás puedas retroceder ese exceso de protección solo un poco. ─pidió.

──¡Sí, señor!

──Y una cosa más. ─lo miró. ──No intentes nada en contra de Amaris, ¿quieres? ─él hizo una cara de disgusto.

──No prometo nada. Pero si usted me lo pide... lo intentaré.

Una vez que Zeldris dejo de mirarlo, este me miró asesinamente mientras yo lo hacia enojar más al darle un beso en la mejilla a su pupilo. 

「🥀」

Podía sentir la furia batalla que los sietes pecados capitales tenía con el maestro de su capitán. Estaba preocupada un poco por ellos, algo extraño de mi, seguramente es porqué ya no los veré más después de que muera osea dentro de tres días.

Me sorprendí de ante mano dejar de sentir a Chandler seguir peleando.

──Así que fueron capaces de derrotar a el mago Chandler. ─comentó Chandler sirviendo el té a una de las taza. ──Los siente pecados capitales son una banda de gente un tanto poderosa. Pero incluso con su fuerza incompleta, fue capaz de ser una amenaza fatal para ellos.

──¿Qué intentas decir anciano? ─pregunté mirando de reojo a el mayor. ──Sólo escupelo de una vez por todas sin tanto parloteo, bigotón.

──Ellos deberían dejar ir a Meliodas y dejarse ser asesinados de una vez. ─entre cerré mis ojos mientras que él le daba el té a Zel. ──Ese es mi consejo, diosa insolente.

Miré a mi amado beber un sorbo de ese té, solté una leve risa al ver su expresión de disgusto.

──Terrible. ─expresó.

──Mi querido Zeldris, te estabas refiriendo al té que hice... o a lo que le conteste a su amada. ─sonrío esperando a que la respuesta sea la segunda.

──Ambos. ─cerré mis ojos soltando un leve suspiro.

──Yo me encargó. ─tomé la taza de sus manos.

──Este es un hombre que vive fingiendo la parte vieja de su naturaleza pensando solamente en su pupilo, Meliodas.

Escuchaba las palabras de Zeldris mientras me dedicaba en hacer un té nuevo para él.

──Pero si se da cuenta de que no será capaz de recuperar a su pupilo, entonces su verdadera forma será revelada. ─serví el té en una nueva taza. ──Entonces no habrá alguien capaz de tocarlo.

──Qué problemático suena eso. ─murmuré dejando el té al frente suyo. ──Te hice una taza de té. ─él tardo en tomarlo entre sus manos. ──Y no me importa si te gusta o no, te lo tomas todo.

──E-entendido, cielo. ─me cruce de brazos mirando como no hacía ningún gesto de disgusto. ──No es tan malo. ─susurró pero lo escuche.

──¿Humh? ─ante mi mirada se empeño en solo beber sin decir nada.

A los tres nos estremeció sentir ese inmenso poder venir a nuestra dirección. Zeldris estaba sentado en el trono conmigo encima suyo mientras que Cusack me mataba por enésima vez en su mente mientras se encontraba a un lado nuestro.

Y entonces las grandes puertas fueron abiertas de una patada dejando ver a Meliodas junto a Elizabeth y Chandler.

──Hey, Zeldris. ─llamó con su mirada en nosotros.

──Amaris... ─por los ojos de Elizabeth ahora sabia que las dos moriríamos en tres días.

──Grandes agallas para venir a el territorio enemigo, traidor. ─habló Zeldris abrazando con firmeza mi cintura.

──¡Además, traes otra diosa sucia de todos modos! Demonio malvado, ¿qué significa esto? ─yo solo lo ignore por el echo de que no me importaba.

──¡Estoy en contra de esto también! ¡Las mujeres deben ser manejadas lo antes posible! ─exclamó a la defensiva.

──¡Silencio, Chandler! ─ante la voz de Meliodas se quedo callado. ──Es simple. ─prestó su atención a Zeldris. ──Vine aquí para ser el rey demonio.

──¡El que será rey demonio seré yo! ─expresó Zel comenzando a enfadarse.

──Porqué no lo tomas de todos modos. ─los presentes miramos a el dueño de esa voz caminar a nosotros. ──Somos solo tres hermanos en este mundo. Honestamente, no me importa el trono del rey demonio, pero si luchas por él, me uniré también.

──Todavía estás vivo... Estarossa. ─habló Meliodas viendo a el platinado.

──Sí, ¿por qué hermano? ─no podía dejar de verlo con odio. ──Hermano, también te ves saludable.

──Tsk. ─chaqué mi lengua.

Su vista cayó en la mía después de ver a Elizabeth, por una extraña razón se sorprendió de vernos.

──¿Eres Elizabeth? ─dijo mirando a la susodicha. ──Y tú... ─me miró con una sonrisa. ──Eres Amaris, ¿cierto?

Zeldris me envolvió en sus brazos frunciendo su entre cejó.

──Por... ¿por qué sabes nuestros nombres? Esta es la primera vez que te vemos, ¿no? ─yo solo entre cerré mis ojos afirmando eso.

──No lo sé... tampoco entiendo. ─se llevo su mano a su cabeza. ──Oigan, cambie de opinión. ─tanto Meliodas como Zeldris lo miraron. ──No voy a luchar con ustedes por el trono del rey demonio. A cambio déjame tener a Elizabeth. ─esta vez solo miro a Meliodas.

──¡¿Qué?!

──¡Perfecto!

──Oye, espera... ¿por qué no a la otra diosa?

──No estoy para una charla fraternal. Pero dejemos dos cosas claras aquí. ─las miradas pararon en el rubio. ──Yo soy el que se convertirá en rey de los demonios. Y nunca dejaré a Elizabeth en tus manos.

Y con eso sentí sus brazos dejarme sentada en el trono mientras él junto a su hermano iba directo atacarlo.

──No trates de ser codicioso cuando solo eres un tonto.

──¿Crees que solo te dejaré estorbar mis ambiciones?

Y en un milisegundo los dos estaban contra el suelo gracias a la materia oscura de Meliodas.

──¡Zeldris!/¡¡Lord Zeldris!! ─exclamamos tanto Cusack como yo, la única diferencia es que no fui tan estúpida como para tratar de ir directo a él.

──¡Quédate quieto, igual tú Amaris! ─él lo ignoro y siguió avanzando.

Eso ocasiono que la materia oscura lo traspasará haciendo que se estrellara contra la pared.

──Este no es tu problema, mantente fuera de esto. ─le advirtió

──Ah, entonces... si te mueves pierdes tu vida. ─murmuró Peronia.

──Eso es todo. ¡La dignidad de un rey! ¡La solemnidad de un rey! ¡Chandler no puede contener las lágrimas con emoción!

──Tsk. ─me levanté del trono y él lo noto.

──No hagas nada estúpido, Amaris. ─apreté mis puños al saber que en mi estado no podía hacer nada lo bueno era que faltaba algunos minutos para que fuera de noche.

──¡Bastardo! ─me sentía impotente al no poder hacer nada. 

──Esto debería de ser suficiente. ─se puso de cuclillas mirando a sus hermanos. ──Antes de nuestra discusión, ¿qué tal si nos calmamos?

──¿Calmarnos? Mira quién lo dice, él que tiene a sus hermanos contra el suelo. ─miraba a los lados buscando una oportunidad para llegar a Elizabeth. ──No me molesta que mates a Estarossa... pero es diferente cuando se trata de Zeldris. ─levanté mi mano llamando a Selene.

──Es inútil, Amaris. No lograrás hacerme una herida en tu estado actual.

──No pierdo nada intentándolo. ─di pocos pasos al frente con firmeza.

──A-amaris... quédate quieta. ─lo miré sonriendo.

──Sabes que no puedo, mi demonio. ─lo miré unos segundos.

Y con eso corrí, Meliodas cerró sus ojos sin intención de usar su materia al saber que con su mano podía pararme.

Cuando estaba a unos metro de él levante mi mano para golpearló, estiró su mano para detenerme pero lo que lo sorprendió fue pasar por debajo suyo y golpear a su amada fuertemente.

──Maldita. ─para cuando su materia se acerco a mi ya tenía a Elizabeth de rodillas con el filo de Selene en su cuello tomando su cabello con mi mano libre. ──Suelta a Elizabeth. ─su tono era de enfado.

──Suelta a Zeldris. ─mi voz se volvío fría al igual que mis ojos. ──Sabes que soy capaz de matarla. Al fin de cuentas ambas moriremos en tres días, ¿qué perdemos ahora si morimos hoy?

Entre cerró sus ojos al ver los rayos de la luna chocar con mi espalda.

Sonreí.

──En hora buena, ¿no? ─mantenido su mirada y sintiendo todas en mi, mi cuerpo comenzó a crecer desgarrando mis ropas mientras mi cabello crecía y cubría lo interesante. ──Si aprecias la vida de tu amada suelta a Zeldris. ─sentía mi poder aumentar mientras el filo de mi espada hacía presión en su garganta haciendo que un hilo de sangre manchará a Selene.

La neblina de oscuridad se esfumó, pateé la espalda de su amada soltandola mientras hice aparecer mi ropa.

Me acerqué a el azabache ignorando su mirada de odio por haber lastimado a su princesa en más de un sentido.

──Zel. ─sonreí al verlo bien. ──¿Te encuentras bien? ─me puse de cuclillas.

──No hagas algo como eso de nuevo, Amaris. ─su semblante era preocupado. ──Meliodas podía hacerte algo.

──No prometo nada si se trata de ti. ─acaricie su mejilla. ──Por ti moriría una y mil veces.

Cerré mis ojos juntando mi frente con la suya.

Continue Reading

You'll Also Like

240K 23.7K 64
𝐄𝐋𝐄𝐂𝐓𝐑𝐈𝐂 𝐓𝐎𝐔𝐂𝐇 . . . !! 𖥻 ִ ۫ ּ ִ 𝖼𝗂𝗇𝖼𝗈 𝗁𝖺𝗋𝗀𝗋𝖾𝖾𝗏𝖾𝗌 𝒆𝒏 𝒅𝒐𝒏𝒅𝒆 . . . En donde el regreso de Cinco trae co...
584K 41.4K 76
Lara pensaba que Toni era el amor de su vida, pero dejó de serlo hace mucho, después del primer golpe que recibió por su parte cuando estaba embaraza...
94.4K 11K 48
𝐄𝐄𝐌𝐂| ¿𝑂𝑑𝑖𝑜 𝑗𝑢𝑠𝑡𝑖𝑓𝑖𝑐𝑎𝑑𝑜 𝑜 𝑠𝑖𝑚𝑝𝑙𝑒 𝑒𝑛𝑣𝑖𝑑𝑖𝑎? 𝑁𝑖 𝑒𝑙𝑙𝑎 𝑙𝑜 𝑠𝑎𝑏𝑒. Yuzuki, una chica con problemas para manejar...
172K 15.1K 35
Unas pocas palabras bastaron para hacer el ridículo frente a ti, y vaya que empezamos mal. Pero, porfavor nunca te alejes de mi lado -¡Es un idiota...