Era un estúpido.
En cuanto abrió los ojos los rayos de sol le quemaron y la cabeza le dolió como los mil demonios.
Con mucho esfuerzo se sentó en la cama sintiendo su cuerpo doler de igual manera, su fuerza en aquellos momentos era nula, el haber sido torturado y drogado todos los días más el hecho de haber perdido a su lobo lo tenían tan dañado, sus heridas aún no sanaban, su alma estaba tan vacía y fría, era un completo inútil.
inmediatamente los recuerdos de una cabellera rubia, ojos grises y sonrisa hermosa pasaron por su mente como cascada. Sus ojos se humedecieron y por instinto quiso romper algo, lo que fuera. Ahora lo recordaba completamente, lo había olvidado y no se perdonaría aquello.
Con algo de esfuerzo se levantó de la cama para salir y tomar un poco de aire, se estaba sofocando en la habitación y también necesitaba pensar un poco, se sentía un poco abrumado y decaído con su situación, en cuanto llegó a la sala se sorprendió un poco pues no esperaba el encontrarse con Yoongi y Namjoon, ambos durmiendo en su forma de lobo.
Sonriendo un poco pasó de largo, supo que ambos alfas se levantaron y posiblemente alterados cuando cerró de un portazo al salir de la cabaña.
El sol era hermoso, hace mucho que no lo sentía así, el viento fresco golpeaba su rostro y el aire calaba en sus pulmones de manera pura y deliciosa, pues últimamente el aroma a sangre, humedad y suciedad lo perseguían, sin embargo, ninguno comparándose con el aroma a madreselva de su omega.
Nuevamente su pecho dolía y la angustia se acrecentaba en su ser. El no tener a su lobo, ni siquiera el lazo con su pareja lo volvían realmente un inútil, tanto que se lo estuvo repitiendo desde que despertó.
La puerta de la cabaña se abrió nuevamente y en unos segundos tuvo a Namjoon sobre él, tratando de ver que tan mal se sentía, si la fiebre había bajado o simplemente preguntando si estaba bien. Hasta ese momento Jungkook no fue consciente de que su cuerpo ardía y poco a poco su mente se iba nublando, jodida vida, en esos momentos debería estar yendo con Taehyung, no pareciendo una nenita.
Escuchaba escasamente el como Namjoon le hablaba a Yoongi, hasta hace unos segundos estaba relativamente bien, entonces porque justamente ahora volvía a sentirme mal.
El debía irse, no debía estar en ese lugar, no cuando su corazón le dictaba que debía apurarse y mucho más cuando el primer reflejo de su lobo de su lobo se hizo presente.
-Jungkook-Llamó Namjoon sacándolo de su ensoñación-Oye, entremos, Yoongi trajo algo para tí.
El pelinegro lo vio algo confundido, pero al final accedió, aunque, estaba más que seguro que debía irse.
En cuanto estuvo sentado en el comedor, Namjoon le trajo algo de comida para que se alimentara adecuadamente, después apareció Yoongi quien le ofreció un tazón con un liquido oscuro que olía realmente mal.
-No voy a tomar eso-Dijo el pelinegro en cuanto lo olió- Te lo agradezco Yoongi, pero eso no va a ser consumido.
Yoongi bufó un poco, aunque por dentro se sintió completamente tranquilo cuando se dio cuenta que el menor ya lo recordaba. Pero si le molestó bastante que Jungkook no se tomara el remedio que preparó, pues aquella infusión era realmente efectiva para su estado enfermo, Jimin solía prepararla mucho cuando se enfermaba.
-Vas a tomarla cachorro-Demandó el mayor.
-Huele horrible, si así es su olor entonces va a saber igual, definitivamente no- Dijo Jungkook en cuanto terminó su desayuno.
-Mira malagradecido-Espetó furioso el alfa-Vas a tomarlo incluso si Namjoon y yo tenemos que amarrarte y dartelo a la fuerza.
Jungkook gruñó leve, pero de igual manera terminó por acercar el tazón a su boca dudando un poco si era realmente necesario tomar aquello, incluso podría ser veneno y nadie lo sabría. Quiso vomitar en cuanto aquel tazón fue empujado a sus labios, haciendo que el contenido se deslizara por su boca, y definitivamente esa cosa era del diablo.
Yoongi sonrió satisfecho en cuanto empujó el tazón y automáticamente Jungkook empezó a tomarlo, aunque escupió un poco, pero al menos más de la mitad de la infusión fue ingerida y también era suficiente para el mayor, estaba seguro que Jungkook en algunas horas estaría completamente bien.
Namjoon suspiró desde el marco de la entrada a la cocina, pues estaba consciente que debían informarle a Jungkook de todo lo que estaba sucediendo, principalmente con su omega. Chasqueo la lengua un tanto irritado por la situación, no estaba seguro de lo que iban a hacer o más bien Jungkook, sin embargo, Taehyung era prioridad en esos momentos.
Miró a Yoongi directamente, quien entendió rápidamente lo que quiso decir el peli morado. Asintió y entonces en ese momento se puso alerta por lo que fuera a pasar.
🐺🦊
Hoseok llegó dos horas después y su cara fue un completo poema en cuanto vio a la luna y a Taehyung en su casa, sin embargo, no pudo ponerse feliz de volver a ver a su mejor amigo, no cuando observó la cantidad de golpes visibles en cu cara y brazos.
Hoseok quiso llorar cuando Taehyung huyó de su toque, pareciendo tan asustado y perdido, tanto que Nara tuvo que llevarlo a una habitación dada por Minseok.
Algunas lágrimas bajaron por el rostro del alfa, pues ver a Taehyung en ese estado tan vulnerable lo llenaba de coraje, fue por eso que se decidió a cuidarlo todo lo que fuera posible, ese chico no merecía malos tratos, mucho menos de personas con intenciones tan podridas.
Nara daba suaves caricias al cabello de su hijo. Taehyung entró en pánico en cuanto el aroma de Hoseok se hizo presente, le gruñó y se escondió de el, fue por eso que decidió encerrarse en el cuarto hasta que Taehyung estuviera por lo menos un poco más calmado.
El rubio no dejaba de llorar aferrado fuertemente en su madre, la situación que estaba viviendo simplemente lo rebasaba y no encontraba la manera para calmarse, no cuando se sentía tan amenazado y atacado, su cachorro era primordial y todos eran tomados como amenaza.
-Calma hijo, por favor-Nara estaba muy preocupada por el estado de Taehyung, pues las emociones fuertes no eran nada buenas para el cachorro-Por favor Tae, no es sano para el bebé, tampoco para tí.
-No puedo, mamá no puedo-Respondió entre hipidos- Ellos... ellos van a venir y van a matarnos.
-Taehyung escúchame por favor-Le dijo la omega al borde de la desesperación tomando las mejillas del rubio para que así la viera fijamente-Cariño, ellos no van a hacerte nada, lo prometo, no estás solo TaeTae, tu madre siempre estará para tí, incluso si en el pasado cometí tantos errores contigo y con tu hermano, espero poder enmendarlos y poder verlos felices bebé, eso es lo único que espero y anhelo para ustedes dos.
Taehyung sentía su corazón estrujarse pero al mismo tiempo calentarse al escuchar las palabras de su madre, palabras que eran oportunas y siempre esperó escuchar de su parte, por lo tanto no esperó llorar incluso más al sentir los reconfortantes brazos de su madre.
-Mamá tengo miedo-Dijo el rubio tratando de calmarse al sentir el olor de su madre-Tengo tanto miedo por los tres.
Nara limpió algunas lágrimas que escaparon de sus ojos, pues recordó a un Taehyung de cuatro años, yendo a llorar a su cuarto a mitad de la noche por pesadillas y monstruos imaginarios. Lo recordó tan claramente que por un momento pensó en cuando cambió todo eso, cuando pasó de ser ella la que reconfortaba a su pequeño cachorro, a ser su hermano mayor.
Por eso y por muchas cosas más es que se reprochaba tantas cosas de su vida, pues era evidente que se alejó de sus dos cachorros cuando estos se volvieron más independientes, casi al punto de olvidarlos o dejarlos de lado para atender completamente las necesidades de la manada.
-Yo también tengo miedo Tae-Dijo la Omega-Pero no vamos a rendirnos-Dijo mirando a su hijo para después secar las insistentes lágrimas de su rostro- Tu vas a volver a la manada que te ha acogido tan bien...
-Y tú vas a venir conmigo-La interrumpió el rubio-Tu... tu también vas a venir y podrás ver a Jiminie y entonces vamos a iniciar de nuevo los tres.
Nara sonrió entre lágrimas, pues todo parecía tan bonito, el poder pasar tiempo con sus hijos, que la perdonaran por sus errores no sonaba tan mal, era una segunda oportunidad y no la iba a desaprovechar.
-Claro que si cachorro, tu y yo nos vamos a ir de aquí.
Taehyung creía fervientemente en que podría volver a su hogar, con sus hyungs e incluso volver a sentir el calor de su alfa.
La noche pasó siendo una incertidumbre completa para ambos omegas, quienes no pudieron pegar el ojo en toda la noche, pues aunque lo intentaron y lo lograron siendo al menos una hora de sueño, la amenaza constante no dejaba que estuvieran alerta a cualquier movimiento en la casa.
Todo el tiempo Taehyung estuvo acariciando su vientre, pues ese tiempo lo usó para terminar de interiorizar la idea de que iba a ser padre y un cachorrito crecía en su vientre.
Un nudo se instaló en su garganta al imaginar si las cosas hubieran sido diferentes, pues a pesar de que la idea de un cachorro siempre la imaginó lejana, habría estado demasiado feliz de enterarse, tampoco podía imaginar a reacción de Jungkook, pero estaba seguro que su bebé seguramente habría sido recibido de una manera amorosa.
Entre pensamientos y suposiciones recibió la mañana, su madre lo seguía abrazando pues aparentemente ya estaba calmado, pero la seguridad de los brazos de Nara era lo que lo mantuvo a raya toda la noche en la que se desveló pensando.
-¿Estás bien?-Preguntó su madre en cuanto lo sintió separarse de sus brazos, Nara a diferencia de Taehyung quedó dormida dos horas antes de que amaneciera completamente- ¿Tienes nauseas?
Taehyung sonrió un poco y negó levemente, solo quería estirar un poco su cuerpo, ademas, al contrario de lo que su madre le decía tenía mucha hambre, el día anterior solo almorzó debido a que su madre solo pudo subirle eso, le preocupaba que eso también pudiera poner en peligro a su bebé, pues desde hace mucho que no se alimentaba debidamente y los últimos días si a mucho una sola comida al día.
Nara entendió que su cachorro tenía hambre debido al sonido de su estómago que avergonzó al menor, pero que podía esperar, estaba embarazado y comer era esencial para el desarrollo del bebé.
La omega salió del cuarto dejando a un Taehyung un poco asustado, pero al final solo se calmó, estaba en casa de Minseok, un omega que podía considerar un amigo, aunque se sintió un poco mal por su anterior en la noche, más sin embargo no pudo evitarlo, pues tener que enfrentar a un alfa más los sucesos anteriores solo hicieron que su sentido de supervivencia hiciera que todos a parte de su madre se vieran como una amenaza. Realmente debía disculparse, mucho más con Hoseok, pues ver la mirada de tristeza de su mejor amigo no era algo que quisiera volver a presenciar.
Las manos le temblaron en cuanto tomó el pomo de la puerta, pero lo creyó necesario, no quería vivir con miedo.
Se dirigió a la sala y entonces tomó con fuerza los costados de su camisa cuando su vista se cruzó con Hoseok quien ponía algunos platos en la mesa. Se recordó que era su mejor amigo y no era una amenaza, ni para el y su cachorro, al contrario, estaba seguro que solo iba a ayudarlo.
Respiró con fuerza y se acercó lentamente bajo la mirada del contrario, quien parecía un poco nervioso, pues no estaba seguro de que hacer. Estrecharlo en un abrazo no se veía como una posibilidad, mucho menos viendo los golpes que poco a poco iban tomando un color morado.
Le partió el corazón ver como la alegre mirada del rubio se había convertido en una tan asustadiza.
-Tengo el desayuno TaeTae-Dijo bajo para no asustarlo-Ven y come un poco pequeño.
Taehyung tragó un poco antes de responder, supuso que sus ojos volvían a ser verdes, así que prefirió no decir nada, solo se acercó y se sentó bajo la atenta mirada de Hoseok, quien se veía dubitativo, y le incomodó aquello, porque ambos siempre se tuvieron la confianza suficiente para saber incluso los secretos más íntimos del otro.
-Lo siento Hobi-Dijo bajito
Hoseok negó con una sonrisa.
-No tienes porqué disculparte Tae, entiendo, pero por favor deja que Minseok cure esas heridas ¿si?
Taehyung suspiró pero terminó aceptando, al fin y al cabo ellos eran los que en esos momentos les daban la mano a su madre y él.
Prefirió dejar de lado la charla para dedicarse a deleitar la deliciosa comida de Minseok, cada bocado le supo a gloria y no reparó en nada hasta que el plato estuvo limpio. No estaba seguro de si estaba seguro ahí, al fin y al cabo tarde o temprano los terminarían encontrando y lo que menos quería en esos momentos es que sus amigos estuvieran en peligro por su culpa.
Después de un desayuno silencioso Taehyung se acomodó en uno de los sillones de la sala, viendo como Minseok traía el botiquín que anteriormente vio, pero que no fue capaz de usar.
-Dime si te duele mucho ¿si Tae?
El rubio simplemente asintió, viendo hacia otro lado, sabiendo que terminaría gruñendole al omega si lo veía muy cerca.
Se estremeció cuando el alcohol hizo contacto con su piel, su rostro hizo una mueca en cuanto e ardor se hizo presente.
-Taehyung ¿puedo hacerte una pregunta?-Minseok trataba de no decir mucho, pues con solo mirar los ojos del rubio se dio cuenta que en cualquier momento iba a tirarsele encima.
Taehyung lo pensó un momento, al final solo le dio un asentimiento de cabeza.
-¿C-cómo llegaste aquí?
-Se puede decir que me secuestraron, aunque intenté escapar al comienzo, al final simplemente jugaron conmigo hasta que al parecer terminé desmayandome muy cerca de aquí.
-T-tu alfa, el no...
-A estas alturas creo ya no tener alfa-Interrumpió el rubio- Jungkook y yo no hemos tenido buena suerte este ultimo tiempo.
-Eso es...
-Es triste, pero no me queda más que tratar de escapar de aquí, no voy a dejar que ese desgraciado le haga algo a mi hijo-Dijo Taehyung, tratando de convencerse a sí mismo que lo lograría.
Minseok boqueo sorprendido, no esperando que el rubio estuviera en estado, pues no percibía ninguna señal. Eso era realmente malo, ellos debían irse pero era casi imposible teniendo en cuenta la seguridad. Minseok se encontró en un debate interno para tratar de ayudar a Taehyung.
-Bien, ustedes van a estar aquí hasta que encontremos la forma de sacarlos-Dijo Minseok haciendo que los ojos de Taehyung se humedecieran.
-No deben hacer eso, eso les va a traer más problemas a ustedes, Jin Hwan no los va a perdonar y va a ser su fin así como el nuestro.
-Lo sé, pero, prefiero morir sabiendo que pude hacer algo a solo esperar.
-Solo confía en nosotros Taehyung-Dijo el mayor tomando sus manos.
Y Taehyung por más que lo intentó no pudo hacerlo, porque estaba seguro que dentro de poco irían por ellos y era allí cuando la verdadera tormenta se iba a desatar.
Sin embargo, solo asintió para dejar tranquilos a los demás.
-Bien-Sonrió el mayor- Entonces es mejor que regreses al cuarto, tus heridas ya terminé de tratarlas y hace un rato pude ver a muchos soldados moviéndose por la manada, así que es mejor que estén escondidos.
Taehyung se tensó al escuchar lo último, era obvio, iban a someterlo.
En cuanto llegó al cuarto solo pudo acostarse y esperar a que algo sucediera, entre más rápido mejor pensaba, pues así, su muerte no sería tan dolorosa.
[...]
Se quedó dormido, fue ahí cuando supo que no debió hacerlo, pues en cuanto abrió los ojos la imagen de su madre desesperada le hizo entender todo.
Con rapidez se paró sintiendo un mareo que lo hizo sostenerse de la pared para no caer.
-¿Que pasa?
-Están registrando todas las casas-Dijo angustiada su madre-Minseok me pidió no salir, pero ellos vendrán al cuarto y nos llevarán, al parecer quieren darle una lección a los habitantes sobre obediencia.
-No, no, no ¿Que vamos a hacer?-Dijo viendo a todas partes-Ellos no pueden ser castigados tampoco.
-¡Hoseok!-Se escuchó el grito desesperado de Minseok desde la entrada.
Las pisadas en el pasillo los hicieron alarmar, ninguno de los dos estaba preparado para morir.
-Hijo quiero que te escondas en el armario.
-No, no voy a hacerlo.
-¡Taehyung por favor!-Rogó la omega al borde del llanto.
-¡No! ¡Hobi!, por favor, ¡no le hagan daño!-Taehyung rompió en llanto al escuchar aquello, así que sin medir sus acciones salió de la habitación haciendo caso omiso a los ruegos de su madre.
Tembló de rabia al ver como sostenían a Hoseok y lo golpeaban sin escrúpulos.
-¡Ya paren!-Gritó llamando la atención de los soldados.
Quiso correr cuando vio que se acercaban a él y soltaban a un Hoseok mal herido.
Su madre apareció segundos después encarando por él a aquellos hombres que estaban por agarrarlo.
-Ambos deben venir con nosotros-Sentenció un hombre con intenciones de agarrar el brazo de Nara.
-No se preocupen, iremos con ustedes así que les pido amablemente que no nos toquen-Dijo Nara viendo con determinación a aquellos hombres, usando toda la clase que aun le quedaba siendo la luna.
Aquellos hombres se vieron entre ellos un poco indecisos, pero preocupados, pues ella seguía siendo la luna de la manada y le debían respeto, por lo tanto solo aceptaron, escoltándolos a ambos hasta la plaza de la manada donde el líder los esperaba para nada feliz.
Taehyung pudo ver con tristeza a Minseok y Hoseok, ambos con algunos golpes en su rostro, ellos de igual manera se veían mortificados por no poder haber hecho nada, sin embargo, Taehyung sabía que eso iba a terminar así.
En cuanto llegaron a la plaza su miedo creció al ver a aquellos dos hombres, ambos no estando para nada felices y la sonrisa cínica de Minho solo le confirmó su mayor miedo hasta el momento. Iba a morir.
Las personas de la manada estaban reunidas, todos viendo con pena a su luna y a Taehyung, pues algunos ya habían presenciado y experimentado lo que su líder era capaz de hacer.
Ambos fueron puestos de rodillas frente a ambos alfas, quienes al parecer disfrutaban del castigo que estaban por dar a aquellos traidores.
-Nunca esperé que fueras sacar las uñas Nara-Inició Jin Hwan viendo con dureza a su omega-Me decepcionas incluso más de lo que ya lo hacías mujer.
La omega no dijo palabra alguna, solo observaba desde abajo las palabras de desprecio de su pareja.
-¡Observen todos!-Dijo hacia las personas que veían todo preocupados-Espero que desde hoy todos aprendan lo que es la obediencia-Apuntó hacia los condenados- ¡miren nomas! Kim Nara y Kim Taehyung han osado a revelarse ante su líder, por lo tanto también han traicionado a la manada.
Taehyung sentía las lágrimas resbalar por su rostro, estaba siendo tratado como un criminal cuando no lo era, estaba siendo humillado en público y al parecer solo estaba comenzando.
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Namjoon y Yoongi no pudieron pararlo, tampoco sabían a dónde se dirigía, pero estaban seguros que ese día iba a correr sangre.
🦊🐺
Holi ¿cómo están solecitos de mi corazón?
Nosé que pensar de lo que acabo de escribir, diganme ustedes.
Por otro lado estoy feliz por que les está gustando.
Diganme por favor lo que piensan, es importante para mí saberlo.
Por otra parte, quiero aclarar algo, en el capítulos anterior la parte en la que Taehyung y Jungkook se encuentran es un sueño, producto de la inconsciencia de kook, también es algo que le ayudó a recordar, por lo tanto pos si, era eso.
No desesperen, ya verán que se ponen felices en el otro capítulo, creo.
Sin mas que decir, pues les mando besitos y abrazos sicológicos.
cuidense mucho porfa.
también ya saben, dudas, errores lo que sea, diganme intentaré reponderé sus comentarios, los leo todos y me encantan.
saludos.💜💜
🐺solescarlata.🦊