Soñando Contigo

By urantiana63

60.8K 1.2K 359

Revive la historia de amor entre Can y Sanem, en "Soñando Contigo " More

Cap 1o
2a Parte
3o parte
Cap 2o
2o parte
3a parte
Cap.3o
2a parte
3a parte
Cap. 4o
2a Parte
3a parte
Cap 5o
2a parte.
3a parte
Cap 6o
2o parte
3a parte
Cap 7
2a parte
3a parte
Cap 8o
2a parte
3a parte
Cap 9o
3a parte
Cap 10
2a Parte
3a parte
Cap 11
2a Parte
3a Parte
Cap 12
2a Parte
3a Parte
Cap 13
2a Parte
3a Parte
Cap 14
2a Parte
3a Parte
Cap 15
2a Parte
3a Parte
Cap 16
2a Parte.
Cap 17
2a Parte
Cap 18
2a Parte
Cap 19
2o Parte
3a Parte
Cap 20
2a Parte
3a Parte
Cap 21
2o Parte
3o Parte.
Cap 22
2a Parte
3o Parte
Cap 23
2a Parte
3a Parte
Cap 24
2a Parte
3a Parte
Cap 25
2o Parte
3a Parte
Cap 26
2a Parte
3a Parte.
Cap 27
2a Parte
3a Parte
Cap 28
2a Parte
3a Parte
Cap 29
2a Parte
3a Parte
Cap 30
2a Part
3a Parte
Cap 31
2a Parte
3a Parte
Cap 32
2 Parte
3a Parte
Capítulo 33
2a Parte
3a Parte
Capítulo 34
2a Parte
3a Parte
Capítulo 35
2a Parte

2a parte.

369 9 8
By urantiana63

Al creer que Sanem estaba coqueteando con el hijo de la señora Remide, Can, se pone celoso y este le pide cabreado que lo acompañe a su despacho. Mientras, por otro lado, Leyla llega al barrio en un taxi y Osman, la esta esperando.
--Es aquí, hemos llegado.
--Bienvenida--le dice Osman, al abrir la puerta del taxi.
--Hola cielo. Qué tal?
--Ah...te echado de menos. Te llevo, las maletas.
--Vale. Bueno.
--Bueno, y que tal?
--Lo he pasado, fenomenal. Me han dicho que un potencial para ser una empresaria de éxito.
--Claro, que sí. No hace falta que te lo digan unos desconocidos.
--Aayy, Osman. Siempre tan agradable. Y eso, que es?
--Aahh, son albóndigas veganas. Se las traía a tu madre, pero seguro que a ti también te van a gustar.
--Anda. Albóndigas veganas, que buena idea. Oye, tienes mucha iniciativa, sabes?
--Bueno, no creas. Había pensado en crear mi propia marca, o al menos, intentarlo.
--Me parece una idea genial. Mi innovación en Ankara era crear ideas y marcas, y si quieres, te enseñaré lo que he aprendido.
--Pues sí. Por mí, encantado.
--Gracias hombre. Para eso están los amigos, no? Y más después de lo que hiciste por Sanem.
--Claro, para eso están los amigos. Quizás luego, te apetecía tomar algo. Esta noche.
--Ay, me gustaría mucho, pero es que tengo mucho trabajo y seguro que llegaré tarde. Pero si quieres, podemos quedar mañana, o el sábado. Podríamos tomar algo y charlar, mm?
--Aamm. Perfecto, claro Podríamos quedar mañana, eehh?
--Estupendo. Te veo, superilusionado, eehh? Muy bien, si señor. Muy bien.
--Toma esto.--dijo dándole las albóndigas venganas.
--Gracias.
--Aaayyy.
--Muy bien, Osman.
--Adiós.
--Adiós. Muy bien Osman. Muy bien. Lo conseguiste--se dijo, ilusionado.

--Señor Can, me ha llamado?--preguntó Gollit.
--Gollit, el otro día vi que te habías preparado un buen desayuno. Me puedes hacer uno igual, por favor? Y...si puede ser con zumo de naranja, mejor.
--Por supuesto.
--Es que hago ejercicio por las mañanas y necesito reponer energías.
--Hoy está de muy buen humor. Que ha pasado?
--Vamos, vamos.
--Vale, está bien. Ahora le traigo el desayuno. Que aproveche--dijo después de llevárselo.

--Muy bien. Un trabajo, estupendo--dijo Leben.
--Gracias, muy amable--dijo, Embre.
--Luego voy a ver a Can, para la parte creativa.
--Perfecto. Está en su despacho.
--Muy bien. Hasta pronto.
--Hasta pronto. Adiós.--Dime Aylim.
--Embre, porqué no coges el teléfono? Es que no te interesa, lo que tengo que decirte?
--Ahora no puedo hablar. Tengo mucho trabajo y no lo entiendes? Te pedí tiempo para considerarlo.
--Está bien. Pues usted, perdone. Pues vas a saber tú, lo que es esperar--se dijo.

--Me gusta, planificar el día--dijo Leben.--levantarme, reunión, almuerzo...lo tengo todo, planificado en mi agenda.
--De...verdad? Todo?
--Sí, lo llevo todo. Y tú?
--Bueno... yo impreviso sobre la marcha y han caído bastante a mi aire, sabes?
--Venga. Ya llevo aquí 20 minutos y ya es hora de hablar de trabajo. Vamos allá.
--20 minutos, ya?
--Sabes que llevo el producto orgánico de nuestra empresa.
--Lo se, lo se. Sí, claro.
--Queremos abrir una tienda, dedicada a ello. Fue idea tuya.
--Mm.
--Para ser preciso, creo que fue idea de Sanem.
--Así es. Se le ocurrió, a Sanem.
--Le voy a encargar, de supervisarlo. Voy ha echar un vistazo y voy. Tranquilo, no te entretendre.
--No. Puedes estar, el tiempo que quieras..
--Mi madre querria que hablar también con Sanem. Por cierto, quien es Sanem? Está, por aquí?
--Aamm. Con permiso. Los cafés-- interrumpió Sanem.
--Muchas gracias.
--Que aproveche.-- Señor Can, el suyo sin azúcar. Como siempre, aquí está.
--Y esto?
--Como usted dijo que el café se lo trajera Geygey, pues yo lo he traído. Ya lo he probado, está muy rico. A veces es bueno, hacer cambios. Se lo recomiendo.
--Sanem, te pasa algo? Tienes algún problema?
Leben, casi se atraganta.
--Aahh, ella es Sanem?--preguntó.--precisamente, hablamos de ti. Encantado, me llamo Leben.
--Encantada, señor Leben.
--Podemos reunirnos los tres, si es posible?
--Disculpe? Porque...de que, se trata?
--Es sobre el producto orgánico, de Galila. Soy el hijo, de la señora Remide.
--No me digaa!!
--Mm.
--Claro, por supuesto. Ahora mismo, voy. Voy ha dejar la bandeja. Voy ha coger una libreta y enseguida voy.
--Bien.
--Vale.
Can, la miraba un poco celoso.

--Can.
--Mm.
--Una pregunta.
--Dispara.
--Por qué, ha traído ella el café?--dijo-- creo, que le gusto.
--No...de verdad. Lo dudo.
--Yo, creo que sí.
--No...que va.
--A mí, me da igual.
--Pero vamos...que no.

--Leyla...hija, estás aquí?
--Sí, papá. Estoy arriba.
--Ya voy, ya voy. Cariño mío.
--Papi...
--Hija...cuanto te he echado de menos. Me daba miedo, no volverte a ver.
--Yo papá también, te extrañado mucho. Creo que tienes algo, que crea adición.
--De verdad? Tu también. Ahora vengo ahora mismo, a ver a tu madre. Está todo el día, Leyla, Leyla. No te imaginas, lo pesada que está.
Aayy papá, ya me lo imagino. Me llamaba a todas horas y todos pensaban que era mi novio que me llamaba todo el día.
-- Jajajaja.
-- Me ha dicho que vaya a la tienda, así que iré a la tienda.
-- Venga vamos, los dos.
-- Es qué antes quiero darme una ducha, y cambiarme.
-- Claro, claro. Anda, ve.
-- Por cierto. Qué hace mamá en la tienda, y tú, aquí?
-- Es qué dice que es empresaria. Se ha adueñado de la tienda, y yo soy amo de casa.
-- Mezquive. No os puedo dejar solos. Me voy unos días, y todo está al revés.
-- Ya. Dímelo, a mí. Todo son sorpresas. Ohh, que sucias están las ventanas.-- se dijo.

-- Señorita Aylim, llaman por el pago. Al menos debemos darle una fecha-- le dijo, la secretaria.
-- No lo cojas. Si pudiera dar una fecha, ya lo hubiera hecho, no?
-- Hace el trabajo, desde casa. Ha llegado el correo de la empresa de coches, y ha subido su proyecto. Quieren trabajar, con nosotros. Es una buena oportunidad. Aceptala.
-- No puedo. Para un cliente tan grande, necesitaría, mucho dinero. Para ganar dinero, necesito clientes grandes y es complicado.
-- Entiendo.
-- Un momento. Es personal. -- al sonar el teléfono.
-- Claro.

-- Sevil, di algo bueno.
-- Lo siento. No te han concedido, el préstamo. La cantidad es pequeña y al no disponer de pagos, se lo han denegado.
-- No puedo ser. Además, iba ha pedir, un préstamo mayor. Gracias, de todas formas.

-- Hola. Hola, señor Leben. Como sabe, a todos nos ha gustado este proyecto. -- ensellaba Sanem mirándose al espejo. -- quieres dejar de hacer el tonto ya?-- se preguntó. -- sabe, en el 40 aniversario de la agencia...-- sabe,sabe? Es que no se te ocurre, otra palabra? -- preguntó. -- como sea así, se marchará pitando. No. No saldrá bien. No puedo. "Sanem, puedes hacerlo. Puedes hacer, lo que te propongas-- le dijo, la voz. -- cómo? " Eres fuerte, eres inteligente, y tienes talento. Ya has conquistado, a Can? Ahora conquista el corazón del albatros."

-- Sanem, que haces tú aquí? -- le preguntó Aderen, al verla-- No habías dimitido?
-- Vaya. Como tampoco le había visto a usted, creí que se había ido.
-- Sanem, te pregunto, que que haces aquí?
-- Tengo una reunión, en el despacho del señor Can.
-- Pero que reúnion, es esa?
-- Ptegunteselo a él. Está al tanto, de mis idas y venidas. Buen día.
-- Oh, oh. Será, posible?

-- Muy bien, pues son, 45 liras-- decía Mezquive.-- ten, el cambio. Ven cuando quieras, para charlar.
-- Claro que sí, Mezquive.
-- Ya sabe, donde estoy. Qué tenga, un buen día.
-- Gracias.
-- Uuuhhh.-- dijo, sentándose en la silla. -- Ooohh, Leyla-- dijo al verla.
-- Di, que sí.
-- Aayy, mí niña. Aayy, mis ojazos. Cuanto te he echado de menos, de menos. Mi niña-- decía, mientras le tocaba la espalda. -- pero si estás en los huesos y porqué, te has vestido de negro? Estás, de luto. Estás, deprimida?
-- No mamá, este es mi estilo de color. Es más formal y más adecuado, de una mujer de negocios. Jajajaja.
-- Jajajaja. Mí chica, es la más guapa del mundo.
-- Qué tal, Mezquive?-- interrumpió Nihad.
-- Muy bien. La tienda, como la seda, yo, encantada.
-- Pues me alegro. Quieres, un te?
-- Vale. Y tú, quieres uno?
-- No, gracias. He pasado, solo por verte. No quiero, llegar tarde.
-- Te hemos echado mucho de menos.
-- Sí. Mucho, de menos. Sobretodo, tu madre.
-- Gracias. Volveré pronto a casa.  Adiós.
-- Adiós, hija.-- A ver, salte por la calle. Quédate, ahí-- le dijo, Mezquive.
-- Por qué?
-- Estás mucho mejor, fuera. Te dará, el aire.-- Radmy, dos tes, por favor.
-- Ooff. No hace calor, pero la humedad, es terrible-- interrumpió, Musafer -- tengo unos sofocos, que para que. Pues nada ya hemos repartido las albóndigas, por todos lados. Que éxito, vamos ha tener con ellas.
-- Muy bien hecho, Musafer. Yo también, las he repartido., todas. Pues vamos otra vez,  donde Osman.
-- Eso, Osman! 18 horas al día conél, pero vamos a ir otra vez.
-- No íbamos, ha tomar un té? -- preguntó Mezquive.
-- Tómatelo, tú-- dijo Nihad.
-- Y tú, tienes que pagarme, el agua-- dijo Mezquive.
-- Una cosa es la amistad., y la otra, la de pagar.

-- Oye, donde se ha metido, Sanem? Tengo, otras reuniones-- dijo Leben.
-- Ya sé, que eres muy puntual. Tranquilo. No creo, que tarde.
-- Señor Leben. Disculpe-- interrumpió Sanem-- he tardado, porque me estaba preparando para la reunión.
-- Cuidado, cuidado.
-- Con esto aquí, y este otro, aquí. Ya está. Ya podemos,  empezar.
-- Aahh. Creí,  que sólo íbamos a hablar. Pero así, vamos avanzando. Muy bien, muy bien. Venga.
-- Bien.
-- Sanem ha dicho, que podemos empezar. Así que vamos a ello,  pues.

-- Aderen, que pasa?-- le preguntó Embre, al asomarse al despacho de Can.
-- Ese es Leben?
-- Sí.
-- Lo sé. Esta mañana, le vi con Aylim. Estaban comiendo juntos.
-- Y eso?
-- Aylim, quiere robarnos otro cliente. O la campaña, de los productos orgánicos. No lo sé, exactamente. Pero algo, hay algo tramando.
-- Lo sabe, mí hermano?
-- No. No me han invitado, a la reunión. Y tú no puedes decir, porqué? Qué hace ahí, Sanem?
-- No lo sé. Entra tú, y lo sabrás.

-- Y como ve...
-- Toda la campaña, no nos va ha servir. Necesitamos más alternativas. No nos podemos, arriesgar.
-- Hola-- interrumpió Aderen.
-- Ella es, Aderen. Nuestra directora creativa.
-- Encantada de conocerle. No tenía el gusto, señor Leben.
-- Lo mismo, digo.
-- Que casualidad. Estaba repasando la campaña de Galila, y estábamos repasando, algunos detalles. Encantado, de verle.
-- El caso es que he venido, a tratar otro tema y la señorita ha dicho que nos reunieramos, y me he quedado.
-- La señorita Sanem, sabe mucho de este tema-- dijo Aderen.
-- Gracias, Aderen.
-- En la campaña del proyecto Galila, estamos repasando unos detalles orgánicos. 
-- Perfecto, el momento para contarle mis ideas.
-- Yo quiero conocer las ideas., de la señorita Sanem.
-- Verás. Aderen, es nuestra empleada, más valiosa y tenías que escucharla, antes de irse.
-- Si tú, lo dices? Sigamos.
-- Aamm. Bueno, tengo una idea más. He pensado que si dividimos la producción orgánica en dos, se podría vender mas al consumidor. Empezaré, por el organico. Huevo reciclado, huevo, que vuelve.
-- Yo tengo una idea, bien distinta-- dijo Aderen-- tiene que ser una marca diferente. Que no sea de Galila. Se instala en la producción de productos orgánicos. La estancias, las instalaciones, los clientes, todo será independiente y así el cliente, no se equivoca con las dos marcas.
-- Una nueva, marca.
-- Can, Can-- llamó Aderen, en voz baja.
-- Mm?
-- Aylim. Le he visto, con Aylim. No le enseñes nada, seguro que quiere robarnos la campaña otra vez.
-- Te has reunido, con Aylim? -- preguntó él.
-- Sí, estoy pensando en sus diseños, para la reproducción orgánica.
-- Entonces, llevale el proyecto a ella. Será mejor.
--  Como dices?
-- Recopilar toda la producción orgánica, fue idea de Sanem. O nos das todo el proyecto a nosotros, o se la das a Aylim. Tú decides.
-- Tu si que sabes, Can. Está bien, me quedo con vosotros. -- Aderen, y Sanem,  chocaron los puños.-- Pues lo que quería mí madre. Entonces, llamaré a Aylim.
-- Llámale. Llama, avísale, sí.

-- Sí, Leben. Si estás libre, podemos quedar. Entiendo,. No, no pasa nada. Otro día, será. Buenos días.

-- Pues nada, en la siguiente reunión, ahondaremos los detalles.
-- Señorita Aderen, gracias por su contribución.
-- Ha sido, un placer.
-- Señor Leben, espero que se haya ido satisfecho con la reunión.
-- Como no. Tienes muy buenas ideas, Sanem. Perdón, señorita Sanem.
-- No...puede llamarme Sanem. Todo el mundo, me llama Sanem.
-- Quería decirte algo. Tú cara, me resulta algo familiar. Creo que te he visto antes.
-- Quizás en la fiesta, del 40 aniversario de la agencia. Asistió?
-- Claro, del 40 aniversario de la agencia. De ahí, te recuerdo. Asistí.
-- De verdad?
-- Claro.
-- Y estuvo, en un palco?
--Sí. Estuve, en un palco. Y tú?
-- Más, o menos.
-- Ya...ya veo, lo que está pasando. Ya lo veo, claro. El palco, el palco, el palco. Como no. Ahora entiendo, claro. Ahora lo entiendo todo. Si por casualidad, viste si llevaba barba. Intenta recordarlo. Ya llevaba barba? Creo, que no. Llevabas,  barba, entonces?
-- Sí, llevaba.-- decía Leben.
-- Qué no, llevabas-- decía él.
-- Tenía barba, pero no así.
-- Qué no llevabas y punto. Que no llevaba barba.
-- Señor Can, el dice,que llevaba barba-- dijo Sanem.
-- Bueno, quizá no recuerde. No pasa nada. Quizá no lo recuerde. Está bien. Ya esta. Llevaba barba.
Can, hacia todo lo posible, para que Leben no se quedara con Sanem.
-- Entonces, vamos a ver la tienda juntos, porque yo no conozco el local y los inmuebles. Que me dices? Nos pasamos, mañana?
-- Mañana, es sábado-- interrumpió, él. -- los fines de semana, no trabajamos. Sanem, tampoco.
-- Para mí el trabajo, es lo más importante. Puedo ir mañana, sin problema.
El intentó evitarlo, con disimulo, pero fue en vano.
-- Vale, Leben. Mañana a las 1 del mediodía día.
-- De acuerdo, entonces, me voy.
-- Eemm. Adiós, señor Leben.
-- Puedes tutearme. Hasta mañana.
-- Adiós, Leben.
-- Can.
-- Mm?
-- Nos vemos?
-- Sí claro. Hasta mañana.
-- Adiós.
-- No la llebava. Estoy seguro. Se habrá hecho un tratamiento, o vete a saber que. Estoy, segurísimo-- dijo  él, celoso.-- no llevaba barba, estoy seguro.
-- Si hemos terminado, me voy--dijo ella.

-- Sólo te he dicho, que no tengas prisa. Porqué, tienes miedo? -- preguntó, la señorita de gestoría.
-- Conozco a Embre. Seguro que no quiere un tiempo. Quiere dejarme.
-- En fín. Tú sabrás. Quieres hipotecar, tú casa, no?
-- Sí. Tengo que hacerlo. Tengo que pagar a mis proveedores. Pero tengo en perspectiva, a un gran cliente.
-- De acuerdo. Firma.
-- Puedo pedirte, un favor?
-- Mm.
-- Puedes llamar a Embre, y decirle que voy a hipotecar mí casa?
-- Como dices? Llamar, a Embre?
-- Sí. Eres su gestora, personal. Le dices: Aylim, ha hipotecado, su casa.
-- No digas, disparates.
-- Por qué? No es cierto? Pues es, lo que hay. Si no vas ha mentir. Sólo quiero, que Embre lo sepa.
-- No puedo hacerlo. Lo siento.
-- Querida. Todos estos años, he hecho muchas cosas por ti. Ahora, no te puedes negar. Te he proporcionado, a todos tus clientes.
-- Esto, no es ético.
-- Sebil, llama.

-- Sebil, qué tal?
-- Bien.
-- Gracias. Sebil, no he podido contestar tú E-mail.-- Toma.
-- Gracias, señor Embre.
-- Señor Embre, en realidad lo he llamado, por otra razón. Bueno...nosé, si está bien en decírselo, pero, hay algo...
-- Qué pasa? Es importante?
-- Ha venido, la señorita Aylim, para pedir un crédito. Ha...ha hipotecado, su casa.
-- Y...eso?
-- Sí. La casa que usted, le compró. Me ha obligado, ha informarle. Lo siento.
-- Entiendo. Muchas gracias.
-- Perfecto.

-- Otra vez, Sanem? Otra más-- le dijo, enfadado, y celoso.
-- Otra vez, que?
-- Otra vez, el albatros? Otra vez, con eso? Otra vez?
-- Perdona?
-- Vuelves a sacar la historia del albatros. Otra vez y dale, con eso.
-- Aún no he perdido, la esperanza.
-- Aún, noooo?
-- Pues no. Porqué?
-- Pues por nada. Es normal, que tiene de malo? Pues nada. Pero una cosa te digo, que ese,no es tu albatros, para nada. Con el, estás perdiendo el tiempo.
-- Por qué, lo sabes? Parece ser que te molesta lo de mí albatros.
-- Ya no sé, que decirte. Qué quieres, que te diga? Bueno, sí. En realidad, que hacías anoche, en mí casa? Dime, di? Qué era, tan urgente?
-- Pues, aamm., aamm. Estaba dando un paseo. Iba pensando en mí albatros, y de repente, estaba frente a tu casa y vi las luces encendidas, y se me ocurrió llamar.
-- Te lo estás inventando. Anda ya. Eso no te lo crees, ni tú. Tenías la cabeza, llena de pájaros, y ya te has vuelto loca.
-- A sí?
-- Estás obsesionada, con los albatros otra vez. Albatros,  por aquí, albatros, por allí, y dale.
-- Pués sí.
-- Qué ha pasado, con tu novio ? A ver?
-- Os...Osman.
-- Osman, sí.
-- Sigue siendo...mí prometido. Nuestra relación, sigue adelante, pero, de otra manera.
-- Qué quieres decir, por el amor de Dios. Quieres que me vuelva loco? Qué pierda, el juicio? Y qué, vas a hacer, con el albatros, eehh?
-- Ya te lo dije. Le preguntaría.
-- Le preguntarás?
-- Pues sí. Lo haré.
-- Pues dicelo, como si yo fuera él.
-- No...es que me da corte.
-- Te da, corte?
-- Can, estás ahí-- interrumpió Polet, cuando estaban a punto de basarse. -- me llevo, el dossier.
-- Deme-- dijo Sanem, echando ha correr. -- se los traigo, cuando acabe-- Hola, Polet.
-- Hola, Sanem. Qué tal?
-- Aquí trabajando, como siempre. Bueno...os dejo, sólos.
-- Aahh, Sanem. Si quieres, luego tomamos un café.
--Sí, y leemos los pozos.-- dijo cerrando la puerta.

--Aahh, como va todo? Ha salido, bien?--preguntó él.
--Sí. Muy bien--contestó Polet-- le he traído los tableros. Si lo ves bien, me pongo a trabajar.
--Sí. Aquí estarás cómoda...tu mira. Te apetece, tomar algo? Te, cafe, o...
--Café.
--Vale.

--Hola, Sanem. Qué tal?--contestó Ayham.
--Tía. He tenido un pequeño roce con Can, y casi me da un infarto y justo en ese momento, entra Polet y creo que se han reconciliado. Pero yo...a mí me da igual, sabes? Pero basta ya, Ayham, a partir de ahora, voy a vivir sin mentiras. Voy a devolverle el anillo, al señor Embre, y que encontré, a mi albatros e irá todo bien.
--Espera? Es que no me he enterado de nada. Que es lo que has encontrado?
--Creo que ha sido, de repente. Creo que es mejor así. Todo ha salido bien. Estoy, encantada. Todo, va bien.
--Hay madre. Como que todo ha salido bien?--se preguntó, Ayham.

--Aahh. Ya estoy harto de tomar té. Hasta me sabe mal--dijo Musafer.--Anda, que vaya día llevamos. Ni un cliente. Porqué no echamos una partida de blakyamon, eehh?
--Noo, yo paso--dijo Osman.
--Yyy, que hacemos?--preguntó Nihad.--Osman, si quieres, podemos limpiar la tienda.
--Venga. No hace falta, hombre. De eso, me ocupo yo. Usted tranquilo, pero gracias por ofrecerte.
--Como quieras.
--Que aburrido. Hemos repartido, un montón de albóndigas, y ni un solo pedido--dijo Musafer.
--A ver, el comercio es así--dijo Nihad--verás como vendrán los clientes por pedidos. Ajá. Ya vienen. Lo ves?
--Diga? Sí, soy Osman. Le han gustado?
--Oye mira, el mío también está sonando--dijo Musafer.
--Diga?
--Repartimos a diez.
--Bueno, lo llevaremos.
--Bueno...de momento, estamos empezando. Pero podemos hacerlo, más considerado.
--De acuerdo. Muchas gracias. Que le aproveche.
--La carnicería, de Osman?
--Sí. Todo de carne y totalmente, legal.
--Dos kilos, y medio?
--Sí. Garantía total.
--Tenemos, de sobra.
--Se lo enviaremos, en seguida.

--Que haces, Geygey--preguntó Sanem.
--Y...tu Sanem, que haces? Que estás haciendo, eehh? Porqué, vas a las reuniones de los jefes? Que estás tramando? Que estás haciendo, tu? --te has despedido tú, y ahora, trabajas aquí. Es que no me entero. Te vas y es que vienes como perro por su casa.
--Un mensaje, de Ayham--dijo Sanem.
--An...da Ya Sanem. Que sepas que no me gustan esos aires que te das. Vas a acabar, mal.
--Oye, quien es esa chica que te busca? Pero me da que vas a necesitar ayuda.
--Que, que chica? Que, que dices? No...no se de que narices, me estás hablando. Que...dices? Que...chica, dices?
--No lo sé. Pero seguro que me vas hacer pedir ayuda.
--Sanem, se te está yendo la pinza. Pues te centrados, Sanem. Reflexiona. Que a esta Sanem, no la conozco.
--Ah! Te cuento, un secreto?
--Un secreto? No, no. No quiero saberlo. Prefiero, que no me lo cuentes. Prefiero, no saberlo.
--He encontrado, el albatros.
--Donde? Donde?
--Ahí, ahí.
--Donde?
--Es...
--Quien.
--Es el señor Leben. Sí. Estuvo en el 40 aniversario de la agencia, y estaba en un palco. Los leí, en los pozos.
--En los pozos, del café?
--Lo pudo adivinar. Así que lo sabe, todo.
--Mañana...probare otra vez. Tendré que besarle.
--Bueno, pues ya me dirás. Porque me he dejado 100 liras y como no sea una falsa los demando. Jajaja, que los demando.
--Jaja Jaja. Yo perdí, 20 liras, y tú, 100?.--dijo Sanem.
--Hay que fastidiarse. Siempre me sacan el dinero, a mi. Bueno...a lo mejor eran por cinco lecturas, y por eso me pidieron 100.--dijo Geygey.--puede ser, no? Tú, que crees?
--Puede ser ya mismo,p puede ser, por mucho tiempo.
--Claro. Ya mismo, o dentro de mucho tiempo. Vamos a ver, que dice? Aquí pone...
--Uuhh.
--Aahh--gritó Geygey, del susto.

--Can.
--Mm?
--Una cosa. Tú trabajas mañana?
--Hoy es sábado, pero tengo una cita, a medio día. Porqué?
--Me han hablado de un local nuevo que está muy bien, pero dicen que tengopagarla con 6 meses de antelación, pero tengo un amigo que es técnico.  Podemos hablar con él, si te apetece.
-- Sí, claro vamos-- decía como si fuese un robot.
-- Vale! Voy ha llamarle.
--Sí, llama, llama.
-- Can -- interrumpió Aderen.
-- Mm?
-- Quería preguntarte un par de cosas, sobre los diseños.
-- Hola! Aderen!
-- Polet?
-- Sí.
-- Polet, que sorpresa,  pero Can no había  comentado, que tenías pensado venir.
-- A él también, le sorprendí. Como te va? Estás estupenda, como siempre.
-- Qué va. A ti no hay quien te haga sombra. Divina, a más ha poder. Y...qué tal, en el laboratorio? No  habrás pensado, en mudarte?
-- No, cariño. Sólo pienso quedarme aquí, unos días.
-- Pués te sienta bien, cambiar...
-- Aderen-- interrumpió Can--mm?
-- Aahh. Quería decirte, que tenía pensado cambiar los diseños de la página web.
-- Aahh. Eso ya está encarrilado. Se encarga Sanem. Podrías hacer, otras cosas. Mañana voy con Sanem  , a ver otra cosa.
-- Vas a ir, con Sanem.
-- Mm. Voy a ir, con Sanem.
-- Muy bien. A  ver que pasa esta vez.
-- Con ella, todo irá bien.
-- Sí. Si estás, cerca de ella, seguro.

-- Hola, Geygey. Qué pasa? -- preguntó Ayham, por el ordenador.
-- No pasa nada. Como estás?
-- Aquí, trabajando. Estoy bastante liada.
-- Quedamos?
-- Qué sí quedamos? Si nos acabamos de ver.
-- Cierto. Te llamo, porque han leído los posos del café por una aplicación.
-- Aahh. Los posos del café. Que interesante, y que te han dicho?
-- Es qué no lo he entendido bien. No sé qué de del cine mudo y el destino me llamaba. No sé, que quiere decir esto. Podrías, ayudarme?
-- Creo que quiere decir esto; que en su día pasarán  cosas nuevas, pero todas de forma silenciosa. Eso creo.
-- Ah, claro. Sólo quería,  cerciorarme. Ya entiendo.
-- Aamm. Tú trabajas mañana?
-- No.
-- Pues si quieres, te hago una sesión, de forma muda. Nos miraremos a la cara, para intentar entendernos. Es muy importante para mí trabajo como guía.
-- Hablarnos, con la mirada.
-- Con la mirada? Qué mirada?
-- Pues de observar. Mirar, observando. Vale, perfecto. Pues mañana, nos vemos.
-- Vale.
-- Vale.
-- No cuelgas?
-- Ay, cuelga tú. Ha colgado. Ay, está chica, es una caja de sorpresas-- se dijo.-- anda! Si he llegado, hasta la salida, Jajajaja. Ay. 

-- Señor Embre, ya no la necesito. Aquí, la tiene.-- dijo Sanem, entregandole el anillo.
-- Gracias, por todo. Sanem, tienes dos minutos? Digiste que te irías. Qué te ha hecho cambiar?
-- Le molesta, que haya vuelto?
-- No, no. Me siento, avergonzado. Se que necesitas, éste empleo. No quiero que la pierdas, por mí culpa.
-- Y además, le debo, 40.000 liras.
-- No digas bobadas. Olvidaré, la deuda.
-- No quiero deberle, ni una lira. Pagaré mil deuda, sea como sea. No sé preocupe.
-- Sanem.
-- Sí?
-- Está bien. Así será. Se que lo prometiste, pero estás muy unida a mí hermano. Se lo vas ha contar?
-- Tranquilo. No le voy ha contar al señor Can, la clase de hermano que es. Si se lo dijera, se  llevaría un gran disgusto. Lo destrozaria. Este secreto, se quedará entre nosotros. Algo más?
-- No, gracias.
Pero al darse la vuelta para irse, se topa con él.
-- Aahhhhuu. Aay, jolin.
-- E..so. jolin.
-- Salgo pronto.
-- Vale. Te recojo a las 12 de la mañana, y vamos a la tienda.
-- Vale.
-- Vale.
-- Pero como, Polet ha vuelto, podía pensará...yo puedo ir, por mí cuenta. Tranquilo.
-- Deberíamos? Qué, dices?
-- Hazlo. Tú mismo. Aamm, parece que se ha curado, la herida. Me devuelve, mi pañuelo?
-- Este pañuelo, no es el tuyo. Me lo  encontré en la playa y por casualidad No es tu pañuelo. No es tan sencillo.
-- Pero, es que,..
-- Sanem, por favor. Te digo, que este es mío. Ya vale. Te voy a hacer una pregunta, tu se sincera. Tú crees, que me queda,  bien, eehh? No, no,mejor no digas nada. Entiendo. Sshh, no digas nada. Tranquila. Da igual. No tiene gracia. Venga, hasta mañana.
-- Preguntas, y no me dejas contestar. Como eres-- se dijo.

-- Embre, que haces aquí? -- preguntó Aylim.-- Qué sorpresa.
-- Tenemos, que hablar.
-- Pasa.
-- Deja eso, y siéntate. Qué querías, con Leben? Vas ha robarnos, mas clientes?
-- No robo clientes,  estoy intentando, mantenerme a flote. Mi empresa pasa por un mal momento, y necesito, clientes. Por eso, me reuní. Con Leben. Qué tiene, de malo?
-- Sigues igual. No has cambiado, nada. Es que no hay, mas clientes en Estambul?
-- Llevaba meses, en contacto con él, sabes? Pero tú hermano, lo fastidió todo. Ahora, no se, que hacer. Mi situación, es delicada.
-- Lo sé. Sebil, me ha llamado. Me ha dicho, que has hipotecado la casa.
-- Qué? Pero, como ha podido? Qué, falta de respeto. Se va a enterar.
-- A ver, calmate. Cómo yo te compré esta casa ha creído oportuno decírmelo. No es, para tanto. Porqué no me has dicho, que necesitabas dinero?
-- No me coges el teléfono, y me ignoras. Como voy ha pedirte, el dinero? Como si no supiera, bastante.
-- Cancela, la hipoteca.
-- No. Tampoco significa nada, sin ti. Quizás, la venda. Me alquilare un piso, en el edificio. Estoy mal, pero,  se me pasará.
-- Aylim.
-- Qué, quieres? No quiero, tu compasión. Hasta ahora, me me has apoyado, pero ahora, sin ti.
-- No dije, que no quisiera verte, sino que nos diéramos tiempo. Ir más despacio.
-- Te conozco bien. Se bien, lo,que piensas.
-- No es así, como quería dártelo, pero, no lo deseo más. Es el llevaba Sanem. Toma. Vendelo, o has lo que quieras. Sí lo ve mí hermano,  se complicaran las cosas.
-- Yo esperaba que cambiases este anillo, por otro. Más daño, no has podido hacerme, Embre. Puedes quedartelo. No he caído, tan bajo.
-- Vete, por favor.
-- Aylim.
-- Embre,  vete por favor.
--Está bien. Llámame, cuando te calmes y hablamos. No puedo, dejarte así--le dijo, dejándole otra vez, e anillo--sólo necesito, tiempo.
Cuando se fue Embre, Aylim, no lo pudo soportar.

--Restaurante, Nonfy, 5 kilos--decía Musafer.
--La familia esa tan ruidosa, ha pedido, 3 kilos--dijo Nihad.
--A ver, unos quieren 3 kilos, y otros quieren 5 y el tiene un pedido, de 10 kilos. Como vamos ha proveer, a todos--preguntó Musafer--todo el comercio, es malo, pero este es peor.
--Pero no te estreses, hombre. Porqué? Aquí tienes a un comerciante con experiencia. Abriremos, otra tienda.
--De verdad?
--Ampliaremos el negocio.
--Eso es genial.
--Y...para, que?-- preguntó Osman.
--Abriremos una tienda, de albóndigas venganas.
--Venga hombre. Eso no puede ser. Donde encontraremos un local, y como lo pagaremos?
--De eso, me ocupo yo. El local os va a salir, totalmente gratis. Pero, antes tengo que hablar con mi madre, y haber si la convenzo.
--Aahh.

--Ven. Vienes? El agua está buenísima--dijo Polet, que se estaba dando un baño.
--No, gracias. Yo estoy, leyendo. Refrescate, yo estoy bien. Te pasa, algo?
--Me pasa, que te quieres venir.
--No me, apetece.

Mientras Sanem colocaba la ropa en el armario, encuentra el papel con la contraseña del ordenador y recuerda lo que le dijo.
"La contraseña, No la pierdas.
"Seguro que es Polet.

--Sanem, Nihad, Leyla.-- dijo Mezquive--a cenar. La mesa, ya está puesta.
--Ya bajo, mamá.

--Prueba esto. Está rico.
--Buenos días--interrumpió Embre.
--Buenos días--respondieron, los dos, al unísono.
--Menudo desayuno. Este Rifad,, es una joya.
--Es verdad, chicos. Ya veis la suerte que tenéis con él-- dijo Polet.
--Pues voy a hacerme un té.-- Tu quieres?
--Pues si, por favor.
--Antes, voy a abrir la puerta.
--Vale.--Y...que tal todo? Cómo, te va?

--Aylim.
--Hola, Can. Está Embre?
--Sí. Pasa.
--En realidad, quería hablar contigo.
--Vale. Pasa, y...hablamos. No vamos ha quedarnos aquí.
--No quiero, molestar.
--No molestas. Pasa. Por aquí.

--Rifad siempre nos compra los lácteos, en una granja--decía Embre.
--Mm
--Buenos días-- interrumpió Aylim.
--Aahh. Oh,oh. Aylim, buenos días.
--Que aproveche.
--Siéntate Aylim, Embre, te traerá un té--dijo él.--y otro para mí, por favor, ya que vas. Ve a por los tes, y también, sacale un plato.
--Como estás? -- preguntó Polet.
--Bien, y tú?

--Pues bueno, ya hablaremos.-- dijo Mezquive--adiós. Uuff. Te juro que los sábados, son totalmente agotadores.
--Sabes que hora es?-- preguntó Leyla.
--Las 12.
--Ah. Aún es pronto. Sabes que? Es que he quedado con Osman, para contarle mi seminario. Quiere hacer, su propia marca.
--Y tu padre también. Imaginas?
Osman.
-Jajaja. Siéntate.
--Aahh. Estoy hecha, una verdadera pena. Esto de ser empresaria, es muy duro.
--Aayyy, mamá.

Continue Reading

You'll Also Like

128K 8.4K 110
Que pasaría que el día que se conocieron uno de ellos lo vería con rabia al pensar que se cree mejor que el cuando es lo contrario
3K 99 19
un ser llega a la tierra despues de una batalla en los cielos y llega a un mundo que es parte de los 8 mundos lo que nadie sabe es que esa persona es...
70.8K 10.5K 23
El joven maestro Llyod es tan desagradable, tiene un rostro tan feo, una personalidad malvada. es un estafador, manipulador, un oportunista y un lame...
37K 3.5K 38
• El? Se fue de su provincia para seguir su sueño. Ella? quedó desbastada después de su partida prometiéndose a ella misma odiarlo el resto de su vid...