En el mundo, la humanidad esta dividida por razas, desde hermosos omegas, hasta los mas poderosos alfas.
En mi caso, soy un debil omega, sin voz, sin sentimientos, como una muñeca de porcelana,que sus facciones parecen inreales tan hermosas y puras, pero muertas por dentro, sin sentimiento alguno.
Asi es mi vida diaria en este lugar, que es igual a una "casa de muñecas" donde hermosas y hermosos omegas, son prostituidos para el placer de esos asquerosos alfas, cuando la luna se va, y los primeros rayoz de luz salen, todos esos hermosos omegas, toman el mismo rol que una muñeca para jugar a la casita feliz, como si todo estuviera bien, pero cuando la noche cae todos vuelven al dolor y sufrimiento ocasionado por los placeres de la piel, el placer de la lujuria.
- y ese es nuestro castigo por ser omegas -
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espero les guste
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