WITCH SWAN| H.p y Crepusculo.

By rosiesiganoff

488K 40.2K 6.4K

WITCH SWAN| ❝ Harper, necesitas ayuda.❞ -(Fanfic de Crepúsculo y Harry Potter) -(No acepto copi... More

ACTO UNO
PROLOGÓ
01
02
03
04
05
06
07
09
10
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
ACTO DOS
01
02
03
04
05
06
07
08
09
10
11
12
13
ACTO TRES
01
02
03
04
05
06
07
08
09
10
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
EPILOGÓ
SECUELA.
Importante:

08

11K 896 158
By rosiesiganoff

¡CAPÍTULO OCHO!
No estoy muerta.

Harper observaba las personas a su alrededor, ojerosas, pálidas, despeinadas, con miradas dispersas, idas, todos drogadictas.

La única persona que parecía interesante en esa sala era Itza Feelen, la chica además de ella menor de edad en esa sala.

Itza se encontraba tirada en la silla, mal sentada, como si no le importará nada. Su pelo estaba atado en una desordenada y descuidada cola. Vestía su característica chaqueta de cuero negro.

Gilbert se encontraba sentado, observaba con una mirada estudiosa a todos en esa sala, sus rasgos, su físico, todo lo que le pudiera dar información de sus estados.

La chica británica había escuchado mucho de él, un ex drogadicto que sorpresivamente había llegado a la ciudad hace dos años con pocas pertenencias, sin donde quedarse, como si huyera de algo.

Gilbert hacía que de una manera o otra confiaras en él, lo había notado cuando sus compañeros de rehabilitación habían accedido a contarle su vida tan fácilmente, lo cual la pequeña Harpie no había recurrido a hacer todavía.

Harper miró a la mujer de siempre; Dorothy sufría de leves tics nerviosos en su ojo derecho, acompañados de su largo cabello rubio y su piel pálida.

Dorothy contaba su progreso, un poco de su vida, su voz temblaba y aveces dudaba en que decir y que no. ¿Cómo no hacerlo? Harper nunca revelaría tantas cosas que para ella eran privadas.

Harper hace una semana estaba limpia, hace una semana no se sentía segura, hace una semana no se sentía ella.

—¿Y tu pequeña Harper?—la llamó de la nada Gilbert Finnwen.

Harper no se había dado cuenta de cuando su vista había caído en el suelo como si fuera lo más interesante, sus manos habían empezado a sudar, a temblar, había empezado a respirar aire frío.

Cuando levantó la mirada, todos la miraban, sabían que algo había a mal en esa cabeza, ya como todos los que estaban en esa sala, algo mal había para que estén ahí, pero la niña de catorce parecía tan destruída, en otra realidad quizá.

—¿Eh?— preguntó sin entender la británica.

—¿Estás con nosotros aquí,  Harper?— preguntó preocupado el doctor.

La castaña se quedo callada sin saber qué decir, ella nunca estaría ahí, ella se había quedado atrás, una vez habíamos explicado que para ella el mundo se movía muy rápido y ella se movía más lento.

—Si doctor Finnwen, no estoy muerta.

La respuesta de la bruja dejo helados a los demás drogadictos en esa sala, nunca nadie había respondido así.

«No estoy muerta», aunque a los ojos de muchos esa parecía ser la realidad de la castaña, ella no estaba muerta, ella estaba más viva que nunca, sentía todo con más impresión que nunca, sentía el dolor más fuerte que nunca y por eso ella no estaba muerta.

-Cuéntanos de ti Harper, que aún no sabemos nada..

Respira, tú puedes, sonríe...

La sonrisa no salía, aunque ella lo intentara, solo muecas raras.

  —Supongo que no soy tan abierta como todas las personas en esta sala... —intentó explicarse la bruja.

—Ya pero por algo estás aquí, por qué quieres rehabilitación, recuperarte de todo eso. Por lo que tengo entendido tuviste una sobredosis...

Muchos, por no decir la mayoría abrieron los ojos al máximo, no se esperaban eso último. La niña de catorce casi se había muerto.

Harper miró los ojos del doctor, intentarnos averiguar que planeaba el con todo esto.

—Ya, estoy aquí no porque quiero, si no porque en casa de Charlie- no su padre- saben que soy un desastre, en Inglaterra saben que soy un desastre y por qué yo sé que soy un desastre.

—¿Eso quiere decir que estás aquí por voluntad propia? Por qué quieres cambiar por las personas que te esperan en Inglaterra.

Harper no dijo más, por qué no tenía que decir.

* * *

Lukas observó las chicas de la planta cuatro con atención, todas pequeñitas, pálidas, ojerosas, desnutridas, esqueléticas, en estados deplorables. En su cabeza no pudo evitar pasar una imagen de una persona que engancharía perfectamente con esas características para estar junto con esas chicas: Harper.

Harper ya salía de su consulta del grupo de apoyo, vestía unos jeans negros rotos y una playera de Nirvana amarilla. Su pelo estaba desordenado sin importancia alguna, pero para Lukas eso no era importante ahora.

Apreciarla así parecía raro para el, pero el opinaba que las playeras de bandas le daban ese toque interesante a esa chica británica.

Cuando se presentó a su lado, dispuesto a llevarla junto a su hermano y su hermana y cuñada Bella, Harper no pudo evitar sonreír un poco, aún que su sonrisa decayó al ver un detalle curioso, los ojos del chico ya no eran del color del carbón, eran unos hermosos avellanas dorados como el de todos sus hermanos y padres.

—Saliste rápido hoy ¿Paso algo?—intentó hacer charla Él por primera vez.

Eso sorprendió a la bruja, Él nunca hablaba y ella tampoco, eran los dos de pocas palabras y lo entendía, era bonito el silencio, aunque su voz no era para nada desagradable.

—Muchas preguntas incómodas, hablar sobre mi vida privada, no es lo mío...

Y Lukas no podía estar más de acuerdo, sabia lo incomodo que era el hablar sobre tu pasado o tu vida con otras personas.

Avanzaron por los pasillos y cuando llegaron al estacionamiento y pasaron por las ambulancias, Harper pudo sentir como la capa de frío la golpeaba, no se acostumbraba a eso.

En el Volvo de siempre se encontraban Bella y Edward abrazados, esta pareja cada vez la sorprendía más, se dijo la castaña.

Los esposos, quienes los habían escuchado salir, los habían olido y sentido, fingieron recién sentir su presencia al estos pararse frente a ellos, sonriéndoles abiertamente.

Dentro del hospital Gilbert Finnwen guardaba sus últimas pertenencias, un hombre de 30 y algo ya de años, había llegado a Forks hace dos años.

De sus pertenecías sobresalió de una libreta una foto, en ella se veía a una adolescente de quince años: Pandora Bowcoll lo observaba con ojos soñadores, usaba una pequeña falda de colegiala a cuadros de colores rosas y morados y un suéter rosa pastel. Su cabello castaño caía en dos coletas a los costados y su cara miraba a la cámara con un puchero.

Gilbert extrañaba a su Pandora, por qué era suya y solo suya. Claro que Pandora no había entendido esto así que...

El juraba que no había querido hacerlo, pero ella no le había dejado opciones ¿Verdad? Eso se repetía el.

Lagrimas cayeron de sus ojos claros, agarro la foto entre sus manos, lo único que le quedaba de ella, puesto que había tenido que dejar Chicago y mudarse a Forks para compensar una vida nueva luego de todos los sucesos.

Oh pequeña Pandora... Cuanto te extraño.





















VOTA - COMENTA - SÍGUEME

Pregunta: ¿Cuál es su personaje favorito de Harry Potter? Yo diría que Draco Malfoy ¿Y el suyo? Déjenlo en los comentarios.

@RossieSFF

Continue Reading

You'll Also Like

686K 88.9K 63
"Y si no eres el amor de mi vida diré que me equivoque de vida y no de amor" Cuando Izuku observó como Kacchan le decía que sería padre, supo que en...
96.4K 10.2K 64
Charlotte Beckett es una joven policía de 27 años; hace 2 años asesinaron a su hermana, un conocido asesino serial Red John, a tratado de olvidar el...
85.4K 8.7K 41
Basada en la serie de Netflix "Sandman". - Podre no ser la original, pero el creador me escogió por algo... 》》》》》 - Soy su he... 》》》》》 -Te lo adviert...
605K 81K 46
Una sola noche. Dos mujeres lesbianas. ¿Un embarazo? ¡Imposible!