WITCH SWAN| H.p y Crepusculo.

10

—¡CAPÍTULO DIEZ!
En familia se caza mejor.

Harper bajo de la vieja camioneta de Theodore. Miró a los dos adultos, quienes también estaban vestidos de negro y con chaquetas de cuero, era extraño, tenía curiosidad de porque le habían dado esa ropa para esa ocasión. Itza levantó las gafas de sol negras y observó con sus ojos claros a su pareja y a la chica, se agachó a su altura.

   —Bien, entramos, comemos y salimos, no hay más ¿Okay?—Itzaes parecía decidida.

Harper asintió. Theodore tomó la mano de su novia y hizo movimientos circulares en señal de apoyo. El chico de chaqueta de cuero, remera pegada negra de cuello de V y jeans pegados negros revolvió el cabello de Harper, en señal de unión, ella era parte de su manada.

Harper sonrió. Llevaba una chaqueta de cuero negro, un vestido del mismo color corto con tablas y unas medias por las rodillas combinando con todas las prendas.

Estaba nerviosa, era la única que no conocía a la familia Feelen, era la única nueva ahí.

La Banshee miró la entrada del lugar, un restaurante que parecía de buen servicio y con precios caros pero con la peculiaridad de que parecía cerrado y sin clientela.

   —¿Aquí es?— preguntó Theo.

   —Si «Shimontelle».— leyó el cartel en letras doradas y negras sobre la entrada.

  Harper observó la calle desconfiada, está estaba desolada, no le inspiraba nada bueno. Centró su mirada en la entrada, luego miró a los adultos, que parecían nerviosos.

   —Uff... Harp, quiero que sepas que las personas que están ahí a dentro, no van a significar nada para nuestro futuro, porque no son nadie en nuestra familia.—Itzaes parecía sincera.

¿Nuestra familia? Eso, dos palabras, que podían cambiar la situación con un giro drástico, porque ella era uno de ellos.