—¡CAPÍTULO CINCO!
Mientras más normal, más creíble.
Harper analizó al chico frente a ella, alto, delgado, pálido como ella, ojos oscuros y un gran matorral de pelo oscuro. Parecía el chico perfecto, como si fuera una divinidad. En su pecho una tarjeta en letras rojas indicaba su nombre en grande; «LUKAS».
—Oh tú debes ser Harper.— Una voz la llamo desde detrás.
Al darse la vuelta de encontró con un hombre alto también, rubio y pálido, de ojos dorados. Vestía con una bata con las palabras: «Dr. Cullen» bordado en su pecho. Supo que era el padre de Edward Cullen.
—Si, encantada de conocerlo doctor Cullen, soy Harper Di Cleardio.— Le sonrió al rubio.
—Dime Carslile, veo que ya conociste a Lukas, mi hijo menor.— Le sonrió al castaño el doctor.
Harper entendía perfectamente el parentesco; los dos al igual que Edward parecían ángeles. Miró devuelta al chico de rostro serio detrás de ella y le sonrió al rubio.
—Claro Carslile. Bella y Edward me hablaron mucho de usted.— Quizo sonar educada.
—Lukas te llevará a la siguiente actividad. El es voluntario en el hospital así que si necesitas algo puedes pedirnos a cualquiera de los dos. Yo me tengo que retirar solo pasaba a ver que todo haya ido bien.
—Oh si, todo perfecto, gracias.—Sonrió, de manera quizá muy fingida y surrealista pero sonrío.
—Bien los dejo que tengo que volver a guardia.— Se despidió de su hijo revolviendo su pelo.— Encantado de conocerte Harper.
—Lo mismo digo Carslile.— Se despidió la bruja.
Lukas se sentía nervioso, es como si hubiera sentido la magia que Harper emanaba: sin saberlo su nerviosismo era por eso, aún que el pensara que era su extraño olor atrayéndole.
—¿Te pasa algo?
Harper nunca fue de muchas palabras o de ser la primera en hablar, pero la situación lo ameritaba, el chico estaba temblando, pensó.
—Si.—Contestó simplemente en un tono que descolocó hasta a Harper.
Empezó a caminar solo por un largo pasillo solo sin voltear a mirarla, a lo que ella se quedó congelada en el lugar sin saber qué hacer. Cuando ya iba más de medio pasillo se dio vuelta a mirarla a lo lejos.
—¿Me sigues? Si te quieres quedar ahí parada no entiendo para qué viniste a rehabilitación.— Susurró lo último, pero la castaña igual lo escucho.
Harper llegó a su lado unos segundos después, caminaron por largos pasillos. Lukas parecía haberse olvidado que no estaba solo, como si estuviera en su mundo, eso pensó Harper hasta que el volvió a hablar frente a ella dándole la espalda, sin mirarla.
—¿Sabes que todos los días veo chicas como tú? Digo no por su estado físico... mmm pero si chicas que pasan por lo mismo que tú, solo que quizá más grandes, a lo que iba, no eres especial, no eres única, hay mil como tú...— La corto ahí.
—¿Qué quieres decirme? Odio las personas que no son directas.— Resopló la británica para la sorpresa de Lukas.
—Yo también las detesto... en fin que si todas ellas pudieron irse, espero en unos meses no verte más por acá Di Cleardio.— La miró de reojo por primera vez desde que habían empezado a hablar.
Lukas no podía negar que al ver a Harper sentía cierta curiosidad.
Harper Jules Di Cleardio era parecida a todas las chicas con las que trataba todos los días, sin embargo había algo en ella que le paraba los pelos: quizá era su edad, era la primera vez que alguien menor a 16 o 17 pasaba por ahí, o quizá era su aspecto, tan deteriorado, tan destruido, dan esquelético y frío. No lo sabía, pero algo había ahí que no le agradaba.
En cambio Harper miraba al chico de 16 o 17 años extrañaba ¿Cómo con esta edad estás siendo voluntario en algo así? No le dio más vueltas, después de todo no era su vida.
Cuando llegaron a una sala de espera Harper maldijo internamente: sabia perfectamente donde estaba, la sala de espera de un hospital. ¿Ya había dicho que odiaba los hospitales?
—Te llamarán en unos minutos por tu apellido para un chequeo. Yo tengo que ir a ayudar en las actividades de otros. — Se fue sin despedirse.
Harper le dio igual, estaba más nerviosa por otras cosas: sabia que seguramente sus resultados de hoy llegarían a manos de Carslile y así a Bella y Charlie, pues claro ella todavía era menor de edad.
Miró al techo expectante, su pie contra el suelo empezó a hacer un ruido, sincronizado, un zapateo nervioso.
Pronto Harper se sentía observada, por todos, sentía como todos la miraban y la juzgaban, como se reían y burlaban de ella, sentía que todos se reían de su enorme cuerpo o de su ridículo estado. Se sentía vulnerable y agobiada.
Empezó a respirar agitadamente. Le sudaban las manos que había apretado tanto al encajar las uñas en sus palmas dejando los muñones blancos.
Pero cuando volvió a la realidad, nadie la miraba, nadie en esas sala la miraba o se reía de ella. ¿Había sido su imaginación? Sentía que estaba en una botella llena de agua, ahogándose con su contenido.
—Di Cleardio.— Llamó una chica que parecía latina.
Harper se acercó a la mujer de bata, tratando de respirar normal y metiendo las manos en los bolsillos de su sacó y intentando sonreírle a la mujer. Mientras más normal más creíble, se repitió la adolescente.
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Pregunta: ¿Cuál es su crush chico de Crepúsculo? En lo personal soy súper Team Jasper, más me interesa saber sus opiniones en los comentarios.
@RossieSFF