__________ respiró mientras arreglaba su cabello.
Rubén la esperaba tras la puerta pensando en que decir al verla.
Hasta que por fin salió.
—Apartate.
—Vamos __________... No lo haré. Por favor confía en mí.
— ¿Qué te hace pensar que confiaría en alguien como tú?
—Por favor... Jamás he rogado, sólo lo hago porque sé que jamás sería capaz de hacerte daño.
—Mira idiota... Si no te alejas. Juro que te golpeo el rostro y te dejo sin dientes.
Él rió.
—Vamos. Tus poderes no están funcionando.
__________ apretó fuerte su puño, sentía rabia, sabía que de algún modo esto no terminaría bien.
Se acercó a él.
—Te dije... Que quiero... Que te apartes. —Tomó su camisa y lo lanzó hasta el piso.
Rubén en el suelo a pesar de quedar bastante sorprendido, sintió algo que jamás había sentido, volvió a levantarse y a ponerse frente a ella.
—Bien. Bien, escucha. Sólo escucha.
________ Suspiró.
—Te escucho.
—Joder __________. Tienes que saber algo... Yo... estoy... loco...por ti.
—Corrección, estás loco y no creo que yo sea la razón.
—Vamos ___________.
—Creo que deberías irte.
Rubén apretó su puño y tomó con fuerza su brazo.
—Basta. Si yo me voy... ¿No lo entiendes? Te van a lastimar.
— ¿Quiénes? ¿Tus amigos? Es obvio, já.
— __________ hazme caso, Joder.
—No. Si tú y tus amigos quieren hacerme daño, pues os espero aquí.
Rubén a regañadientes aceptó y se vistió bien para estar ya en la puerta.
___________ en el fondo no quería que él se fuera, así que lo miró con sus ojos llenos de lágrimas y tragó saliva.
—Adiós...
—Espera.
Se le acercó y dejó un pequeño beso en sus labios.
Rubén sintió escalofríos y negó mirándole mal, después de eso para salir dando una fuerte cerrada, por jugar de ese modo con su mente.