Vuelves (TERMINADA) // Warmi

By gameee0verrr

70.9K 2.7K 184

Después de 2 años tras una fuerte discusión Ana y Mimi se vuelven a reencontrar. Los 16 tienen que hacer una... More

2 Años Antes Del Reencuentro
El Reencuentro
La Cena
La Verdad
Nuestra Canción
El por qué
El Beso
Nochevieja
Año Nuevo
Primera vez
Gira War
OT Tenerife
¡Tú No!
Los Ángeles
Sorpresa
La mismo de siempre
Siempre Igual
Hogar
Impulsos
Entendernos
Detonante
¿Pesadilla o realidad?
Miedo
Más vale tarde que nunca
Pasado pisado
Festival
Redes Sociales
Se acabó
Incidentes
Familia, amigas y felicidad
Futuro juntas
Epílogo

Canarias

2.7K 100 5
By gameee0verrr

Eran las 9 de la mañana cuando me desperté, a penas había dormido 4 horas no me gustaba estar así con Ana y menos después de todo lo que nos había pasado. 

Cuando me giré la pude ver en el balcón fumando. Ella y su maldita manía de fumar. 

Me levanté y cogí una manta para echárnosla por encima de los hombros. 

- Hola. -- dije echando la manta por encima nuestra. 

- Hola. -- Dijo girándose para mirarme. 

Se le notaba que no había dormido a penas durante esa noche. 

- ¿Desde que hora llevas despierta? o mejor dicho ¿cuánto has dormido?

- Tres horas -- le dio una calada  su cigarro - aunque tu tampoco tienes cara de haber dormido mucho más. 

- Una hora más que tú. Ya sabes que no me gusta estar así contigo y menos después de todo lo que nos ha pasado.

- A mi tampoco Mimi. 

- ¿Entonces, por que no me dijiste que estaba allí?

- Porque lo supe dos horas antes del concierto.

- ¿Y eso es motivo para no decirme que estaba allí? 

No quería sonar dura con ella, pero es que aún no entendía porque no me dijo nada. 

- Porque no quería que te enfadases antes del concierto ni nada, quería que disfrutases del concierto y luego contártelo.

- ¿Pero enserio creíste que era mejor ocultármelo y que luego en el escenario me quedase con una cara de tonta que no se la cree nadie?

- Mimi, no tenía ni idea de que iba a pasar eso. 

- Pero es que eso da igual Ana. Me lo tenías que haber contado desde un primer momento y no te lo tendrías que haber callado, porque al final la cosa fue peor que si me lo hubieses contado desde un primer momento.

- Ya lo sé, pero en ese momento pensé que era mejor la otra forma.

- Después de lo que nos había pasado esa forma era la peor de todas y lo sabes de sobra Ana.

- Hice mal y soy consciente de ello. 

- Pero es que con eso solo no me sirve Ana. Voy a irme a Madrid y tu te vas a quedar aquí una semana más con conciertos y con tu familia y no me quiero ir de aquí así y no quiero estar esta semana entera contigo mal.

- Yo tampoco quiero que te vayas y estemos así. Sé que fui tonta por no contarte aquello y me di cuenta nada más lo vi subirse, en ese momento se me vino todo encima y no sabía como reaccionar y menos cuando te fuiste. Salí corriendo del escenario dos minutos después de que tu salieses y te fui a buscar. 

- Necesitaba espacio.

- Lo sé. -- Suspiró. -- Ayer en la fiesta hubo un momento en el que pensé que te había perdido otra vez. 

- ¡NO! Te quiero muchísimo Ana y lo sabes de sobra. Y a parte no fuiste la única que lo hizo mal, yo tampoco reaccioné de la mejor manera posible ayer.

- Ahora no te eches parte de culpas de ayer porque tu no hiciste nada malo, así que no tienes culpa de absolutamente nada Mimi, toda la culpa fue mía por no contarte nada de lo que estaba pasando y que de repente pasase eso. 

- Pues no sé Ana, pero es que también estoy harta de esta situación que estamos viviendo, está todo perfecto pero tiene que aparecer ese tío y cuando no es ese tío es la prensa que no tiene ni idea de la vida de nadie y no paran de joder sabiendo que pueden hacer daño a terceras personas.

- ¿Qué quieres decir con que estás harta de todo esto? 

La cogí de las manos diciéndole que se relajase que no iba por donde ella se estaba imaginando que iba.

- No pienses que te quiero dejar ni nada de eso eh -- suspiró de alivio -- con todo esto quiero decir que estoy harta de que te relacionen cada dos por tres con un Miguel Ángel sin tener ni idea de nada, de no poder ir por la calle y cogerte de la mano o besarte cuando me apetezca, que eso pues mira aún aún porque entiendo la situación pero eso no quita que no este harta de todo eso, aunque al fin y al cabo cuando empezamos sabíamos perfectamente lo que nos esperaba si empezábamos a salir juntas.

- Amor, yo también quiero eso, pero sabes perfectamente que aceptamos que tendríamos que estar así hasta dentro de un tiempo, no quiero que la gente se piense que estoy jugando contigo.

- ¿Jugando conmigo?

- Sí, por desgracia aún hay gente que piensa mal o que no tienen otra cosa que mejor que hacer que meter mierda de los demás. 

- No entiendo aún lo de estar jugando conmigo. 

- Pues que la gente no pararía de decir: "mirar a esta, termina su relación con MIguel Ángel y a la semana siguiente está con Mimi"

- ¿Pero eso no es así, verdad?

- Claro que no Mimi. Ni se te ocurra pensar que estoy jugando contigo porque eso es mentira. ¿Confías en mi?

- Claro que confío en ti Ana, pero en el que no confío es en Miguel, no tardará mucho en hacer una de las suyas seguro.

- No sé si va a volver a hacer na de las suyas o no, pero esto que tenemos tu y yo es más fuerte que todo lo que pueda hacer ese tío por intentar romper lo nuestro.

- Es eso de lo que estoy harta Ana. 

- ¿De qué?

- De estar midiendo a la perfección todo lo que hacemos, ojalá todo esto se acabe pronto y les demos una alegría a las locas del coño estas -- dije esto último con un poco de risa -- bueno y a mi también y poder hacer con mi novia lo que yo quiera sin ir midiéndolo todo con lupa.

- ¿Con esto estás queriendo decir de hacer público lo nuestro? 

- Por una parte sí y por la otra no.

- ¿Por que parte sí?

- Darte un beso cuando a mi me de la gana, poder salir a comer y a cenar por ahí contigo siempre que queramos, que te dejen a ti vivir tu vida con quien quieras ¿tan raro es que Ana Guerra esté saliendo con una chica o que esté sola?, es que no entiendo a la prensa y a algunas personas de twitter o cualquier red social. Ir a tu casa y que estés siempre con una sonrisa y no muchas veces cagándote en la gente que no te deja vivir tu vida y poder buscar tu nombre en google y que me salgan tus dos discos, tus discos de platino, de oro... todo lo que has conseguido con la música y que no me salga tan solo con quien te juntan o con quien no, estoy harta de todo eso y tu ya ni te cuento o eso creo. 

- Sabes perfectamente que tengo ganas de todo eso, pero... -- la interrumpí.

- No es el momento. 

- No, no lo es. 

- Y lo sé, y espero que ese momento llegue pronto.

- Y yo Mimi, pero sabes de sobra que ahora mismo no es el mejor momento para esto.

- ¿Ana , prométeme que si vuelve a ocurrir algo de esto me lo vas a contar? -- Dije mostrándole mi dedo meñique. 

- Te lo prometo. -- Dijo cogiéndolo.

- Anda y ven aquí. -- Le extendí la mano. 

- ¿Qué?

- Que me des un abrazo. 

Le estiré del brazo para que me abrazase, estaba tardando demasiado. 

Estuvimos 15 minutos más en la terraza en absoluto silencio, con nuestras manos entrelazadas y con el ruido que las olas hacían al romperse de fondo.

- ¿Qué vas a hacer en Madrid esta semana tú sola? -- Dijo rompiendo el silencio.

- Hacer alguna coreografía nueva con las Lolas.

- ¿Sería mucha molestia que te pidiese que te quedases aquí conmigo esta semana aquí y la pasamos juntas? -- La miré como si se estuviera volviendo loca. -- ¿Qué?

- Banana la gente se volvería loca. 

- No puedo estar con mi hermana -- hizo comillas con los dedos -- en Canarias. 

- Oye ni se te ocurra volver a llamarme hermana cuando estemos solas y a parte que twitter no es tonto. 

- Venga porfi Mimi. -- Me miró con cara de bebé. -- Porfaaaa.

- La que vamos a liar. 

- Que va, yo lo tengo todo bajo control, tan solo confía en mi.

- Yo confío en ti pero con esto no. 

- Mira tengo una solución rápida y eficaz  nadie se alteraría. 

- Sorpréndeme.

- Tú pones en twitter "me voy a quedar con mi gran hermana en canarias para que me enseñe las islas perfectamente". 

- Sí y twitter me va a responder esto: "Ella tu hermana y yo tu madre" o aún peor "le va a enseñar las almejas canarias para ver si le gustan" que en verdad esta última sería la más probable de todas para que me pusiesen. -- Me reí al ver su cara.

- ¡Miriam! -- Dijo dándome un manotazo. 

- ¿QUÉ? Ni que fuese mentira Ana Alisia. 

- Eres una guarra. 

- Pero bien que te encanta que coma almejas canarias, sobre todo una especifica que es la única que quiero comer. 

- Por dios Miriam. Me voy a la ducha paso de aguantar tus idioteces. 

- No has dicho que no. 

Se levantó para irse para dentro pero la cogí de la mano. 

- Ana una cosa antes. 

- ¿Un beso? pues no. 

- Eso no era lo que te iba a decir pero que también estaría bien. 

- ¿Entonces que?

- Que si podría meterme contigo a la ducha y así probar la almeja a la marinera a ver si me gusta más. 

- Mimi para ya por favor. -- Dijo medio lloriqueando. 

- ¿Eso es un sí?

- Eso es un: como no pares te la vas a llevar. 

- ¿Mejor paro, no?

- Sí.  

- Me voy a ir con Agoney a ver si me deja probar el plátano canario. 

- Ni se te ocurra. 

- ¿No voy a poder probar nada canario o que? -- Ahora era yo la que lloriqueaba. 

- De verdad Mimi a veces te cogería y te mataría pero...

- No puedes. 

- Lleva cuidado a ver si al final voy a poder. 

- ¿Tú no te ibas a la ducha, pesada?

- Pero si no me dejas. 

- Te he dicho de irnos las dos juntas, pero has rechazado mi pedazo oferta de placer encima gratis.

- Es que sino no salimos de la ducha. 

- Eres una aburrida Banana. Me voy con Ricky que hasta dentro de dos semanas no lo veo. -- Me puse unos zapatos y unos vaqueros.

- Pero si os vais a pasar toda esta semana juntos. 

- Pero si me voy a quedar en Canarias contigo un poco difícil.

- ¿Eso significa que te vas a quedar aquí conmigo, no? -- Se asomó por la puerta del baño.

- Sí, aunque no te lo merezcas para nada.

Saltó sobre mi y empezó a llenarme la cara de besos. 

Caímos sobre la cama y bueno la cosa empezó a subir un poquito de tono.

- ¿Tú no te querías ir a la ducha?

- ¿Tú no querías que te enseñase las almejas de canarias?

- Fíjate que ahora no me apetecen. Me apetecen los plátanos del mediterráneo ahora mismo. -- Dije levantándome. 

- ¿Me vas a dejar así Mimi?

- ¿Así, cómo? Yo te veo perfecta, no se que quieres. 

- Te odio muchísimo. 

- Sé de sobra que no. 

- Muy creído te lo tienes. 

- Porque quiero y porque puedo. Ale, hasta luego Banana. -- Le di un beso en la frente. 

- Eres una orgullosa, que lo sepas Miriam Doblas. -- La escuché decir cuando estaba cerrando la puerta. 

La verdad es que tenía ganas de hacerlo con ella, pero después de lo que me había dicho antes se lo merecía -- eh, pero tranquilos que por la noche se lo recompenso -. 

Llegué a la habitación de Ricky.

- Mariconaaaa. 

- Ricardoooo. 

- Supongo que tu y la War ya lo habéis arreglado. 

- Supones bien Ricardo. 

- Y también supongo que lo habéis hecho.

- Eso ya no lo supones tan bien. 

- Pues tienes una cara de haber follado. 

- La he dejado con las ganas. 

- ¿Qué te está pasando, Miriam Doblas? 

- A mi nada. 

- Tú dejando a la War con las ganas y aguantándotelas me resulta muy extraño. 

- Pues ya ves, he preferido estar contigo porque hasta dentro de dos semanas no nos vemos. 

- ¿Cómo que hasta dentro de dos semanas no nos vemos?

- Me quedo aquí con Ana. 

- ¿Pero si tenías que montar una coreografía con tus lolas, no?

- Ya, pero seguro que si les doy la semana libre no tienen queja. 

- ¿Bueno, me vas a contar como lo habéis arreglado o me tengo que esperar dos semanas?

Le conté la conversación que había tenido con Ana, quitando la parte de los plátanos y las almejas claramente.

Estuve en la habitación de Ricky hasta que tuvo que irse para poder coger su vuelo a Madrid. 

- No folléis mucho y aún menos os peleéis. 

- Le de no pelearnos te lo prometo, pero lo de no follar eso va a ser imposible. 

- Tampoco te lo tengas tan creído rubia, que la War te tiene bien cogida. 

- Ya, pero soy irresistible para ella. 

- Tampoco te lo creas tanto Mimi. -- Dijo una tercera voz. 

- Hablando de la reina de Roma, aquí está. 

- ¿Pensabas irte sin despedirte de mi? 

- Te estabas duchando y no me apetecía verte desnuda. 

- Ni que no me hubieses visto ya. 

 FLASHBACK

Sonó el timbre de mi casa como unas ochenta veces en un minuto. 

- Que ya voy. 

- Joder maricona veinte años para abrirme. -- Entró en mi casa. 

- Hola Ricky, ¿que tal?, sí claro puedes pasar sin problema. 

- ¿Por qué no me abrías?

- No sé Ricky, ¿porque a lo mejor estaba haciendo el amor con mi novia?

- Que oportuno soy. 

- La próxima vez no te abro que te quede claro. 

- ¿Mimi, era el repartidor? -- Dijo Ana saliendo desnuda. 

Habíamos pedido la comida para así poder aprovechar la mañana. Era normal que saliese así, pero cuando se dio cuenta de quien era verdaderamente, cogió la manta que había en el sofá y se enrolló en ella rapidamente poniéndose al instante roja. 

- Ricardo, los ojos están arriba, eh. 

- Mimi, creo que me acabo de hacer hetero. -- Me miró con preocupación.

- Sí y yo soy hetero. 

- Yo mejor me voy a cambiar. -- Dijo yéndose. -- Que vergüenza. -- Dijo en un intento de susurro. 

- Que fantasía, acabo de ver a Ana Guerra desnuda. 

FIN DEL FLASHBACK

- Que susto me llevé pensando que me había vuelto hetero. 

- A ti a maricón no te gana nadie mi amor. 

Estuvimos cinco minutos más hablando hasta que llegó el taxi de Ricky.

- Os quiero muchísimo chicas, en dos semanas nos vemos. 

- Y nosotras a ti. -- Cogí a Ana por la cintura.

Cuando llegamos a la habitación, nada más cerrar la puerta Ana se abalanzó sobre mi. 

- ¿Te has levantado tu muy juguetona hoy, no?

- No lo sabes tu bien. 

- ¿Entonces voy a poder probar ahora las almejas de canarias?

- Quieres callarte y besarme que eres muy pesada. 

- Que impacien...

No me dejó terminar la frase. Me besó con muchísimas ganas, si Ana Guerra quería jugar íbamos a jugar. 

Perdí la noción del tiempo, cuando me di cuenta ya estábamos las dos cuerpo con cuerpo, sin ninguna tela por en medio que nos molestase. 

En un movimiento rápido la puse bajo mi cuerpo, así llevando el mando de la situación. Quería disfrutar de su cuerpo, recorrerlo entero, de arriba a bajo sin dejarme ningún trozo. Y eso hice, cuando noté que su respiración estaba más agitada bajé mi mano a su centro pudiendo notar lo húmeda que estaba. 

- Madre mía como estamos Anita. 

- Quieres callarte y hacérmelo. 

Subí mi mano dejando de tocar su centro y volviendo a tocar sus pechos a la vez que jugaba con sus peones con mi lengua.

- Mimi... -- Dijo jadeante. 

- Dime -- me hice la despistada.

- Te necesito dentro de mi ya por favor...

Esta vez la obedecí y metí dos dedos provocándole un pequeño gemido. Fui despacio en un primer momento hasta encontrar su punto máximo de placer. Quería que disfrutase al máximo. 

Pude notar que en nada se iba a correr. Así que saqué mis dos dedos de dentro ya. 

- No me jodas Mimi, ahora no. 

Bajé mi cabeza a su centro con una sonrisa muy pícara. Empecé a lamerle su centro, pude notar como su centro volvía a contraerse, así que introduje dos dedos más. 

- Mimi... -- gimió - estoy a punto de... 

Le puse más velocidad a mi lengua y a mis dedos por lo que en 10 segundos después se vació entera, empapándome así la mano y mi boca a la vez. 

Subí hasta ella para besarla mientras mi mano seguía dentro de ella hasta que se relajase para poder sacarla de dentro.

- Me has matado. -- Cerró los ojos con cansancio.

- Estás flojucha Banana. -- Le acaricié el pelo. 

- ¿Pero tu has visto lo que acabas de hacerme? -- Abrió exageradamente los ojos. -- Si los dedos pudiesen dejar embarazada yo ya estaría y de trillizos después de esto. 

- Eres una exagerá. 

- ¿Exagerada yo? pero si miras como me has dejado. 

- Mira tu como has dejado la cama, cuando vengan los de limpieza van a decir que nos hemos meado encima. 

- Pues no haberme hecho lo que acabas de hacerme. 

- Yo no he hecho nada.

- Que sepas que esta noche te la devuelvo porque ahora solo tengo ganas de que me abraces y nos durmamos hasta que nos echen.

- Eso está hecho Banana. 

Y eso hicimos. Ella con su cabeza sobre mi pecho, nuestras piernas enredadas bajo las sabanas y con nuestras manos entrelazadas mientras que con la que tenía libre le acariciaba el pelo y ella con su mano libre bajo mi camiseta.

Continue Reading

You'll Also Like

34.9K 2.1K 44
Miriam Rodríguez y Mimi Doblas se conocen y se hacen amigas en el casting de Operación Triunfo 2017. Ambas reciben el sobre dónde les informa que fo...
7.8K 456 5
Mimi y Miriam. Miriam y Mimi. Cinco días en Ibiza.
188K 21.5K 37
En donde Emma Larusso y Robby Keene sufren por lo mismo, la ausencia de una verdadera figura paterna.
421K 32.5K 43
Natalia Lacunza es la modelo perfecta. Alba Reche es una fotógrafa peculiar experta en desnudar a las modelos perfectas a través de su cámara. ¿Lo co...