"No reniego de mi naturaleza, no reniego de mis elecciones, de todos modos he sido afortunada. Muchas veces en el dolor se encuentran los placeres más profundos, las verdades más complejas, la felicidad más certera." - Frida Kahlo
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Esta es mi frase favorita. Me encanta. Me hace reflexionar mucho. Y justo hoy me pasó algo que me llevó a querer ser escuchada.
Saben, este año aprendí mucho. Mucho de libros, mucho de amistad, mucho de amor, mucho de amor propio.
Aprendí que la maldad de las personas no tiene límite, pero que YO PUEDO. Esa maldad que nos hace flaquear, que nos hace llorar, que sentimos que nos rompe por dentro, puede anularse. Se puede vencer.
A principios de año, en enero, me senté frente a ustedes y dije "ESTA SOY YO" con mis estrías, mi celulitis, mi gordura. Esta soy yo, la que se ríe todo el día, le gusta repartir amor y es fan de los abrazos. Esta soy yo, la que llora muchísimo, escribe poemas tristes y cartas de amor.
Este año pensé mucho. Pensé en todas las cosas difíciles que me tocó vivir, todo lo que guardé y todo lo que no logré sacar aún. Pensé. Lloré. Y transforme.
Est año aprendí a quererme. Aprendí a mirarme al espejo y sentirme hermosa. Aprendí a anular a la gente que busca hacerme mal. Aprendí a rodearme de buenas energías y amor.
A muchos quizá les suene tonto mi saludo final diario, pero en verdad les deseo todas mis buenas energías. Podemos hacer del mundo un lugar mejor. Podemos aportar con amor, respeto y buena onda.
No soy perfecta. Soy compleja, a veces cerrada, a veces mal humorada. Muchas veces miedosa, cobarde y callada. Pero de a poco se puede. Voy tirando uno a uno esos ladrillos que pesan. Me voy re-educando. Cuesta. Es difícil. Muy difícil. Pero se puede.
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