Había algo que Angelo no lograba encajar entre todos los sucesos, y ese algo era Eric.
Lo había conocido hace dos meses ya, y hasta ese día había un hijo de puta con el.
Pero fue ese día donde había algo distinto, y es la forma en la que se acerco a el y que le haya saludado.
-¡Anshi! -el castaño lo abrazo por la espalda, Angelo se desconcertó por la voz de quien lo hizo y le dio un golpe en sus... partes, que lo hizo caer- ¡Auch!
-¡¿Que mierda te pasa, subnormal?! ¡No me toques! -el ruso había reaccionado de mas, lo que Eric había hecho le recordó a Sasha, y le dolió-.
-¿Estas bien, Anshi? Pareces deprimido y como si no hubieras dormido por días -el tono de Eric había sonado preocupado, y eso era demasiado raro-.
-Ni te me acerques, escoria.
-¿Peleaste con Ian de vuelta, verdad? -Angelo se altero-.
-¿Que? ¿Pero por que...? -ahora estaba atonito- ¿Quien sos y que hiciste con el hijo de puta?
-¿Ah? ¿Dormiste bien, Anshi? -el pelinegro dio un paso para atrás, tenia miedo, ¿era esto una pesadilla?-.
-A.. ¡Aléjate de mi!
Y salio corriendo, dejando un muy confundido Eric detras.