[En proceso de corrección]
Tyler borró la foto y se dio media vuelta. No había pasado ni un segundo y el chico se desesperó al no tener aquella caja negra de compromiso.
-No te preocupes, no le voy a decir a Josh que tenías esa foto-. Se rió Sophie, agachándose para poder tomar la caja y revisar lo que contiene. -¿Es por esto que has estado actuando extraño últimamente?
A Tyler le palpitaba el corazón a mil, sonrojándose al no poder aguantar el susto que le había dado su amiga de la infancia.
-Algo así -. Tyler respondió algo desanimado, obtenido así el objeto que traía la contraria.
-Siento haber aparecido de la nada, pero es que estabas tan solo, que no me resistí a acercarme y revisar como estabas -. Sonrió la chica, tomando asiento en un asiento próximo en donde estaba el del castaño. -¿Está todo bien?
-Muy bien...-. Se sentó otra vez y le dio otro sorbo a su cerveza.
-¿Si?- Dudó Sophie-Porque verte tomar cerveza me indica todo lo contrario -. Rió la mujer, observando como el hombre encargado del bar se aproximaba donde ellos. De forma inmediata, la rubia le pide un agua con gas y el empleado se lo entrega al instante. -Muchas gracias -. Dijo, para luego dar un primer sorbo al vaso. - ¿Tiene que ver con Josh, no? por algo tienes una caja de compromiso.
-¡Shh!-. Tyler pidió silencio y la chica rodeó sus ojos con fastidio mientras bebía un poco de su agua.
-Como si la gente nos escuchara entre gritos y música a máximo volumen-. Miró atentamente a su amigo justo en que volvió a darle un sorbo a esa lata de cerveza. -¿Se pelearon?, ¿Tuvieron alguna discusión? -. Sophie no quería ser tan entrometida, pero el hecho de ver al castaño con aquel semblante en pena, no soportaba la acción de cruzar los brazos y hacer nada al respecto.
-Si, pero no es nada grave -. Tyler no paraba de jugar con la caja nupcial, abriéndola y cerrándola las veces en que le llegaban ataques de ansiedad. -Fue una discusión estúpida provocada por un suceso incomodo, por lo que es mejor no detallarlo.
-Entiendo -. Suspiró la mujer. -Todas las parejas tienen momentos muy especiales, tanto alegres como tristes; pero siento que Josh y tu son un dúo muy especial -.De inmediato, la chica ría al ver como Tyler bajaba la mirada y seguía jugando con el artefacto. -Hay veces en que Michael y yo nos tomamos un día para salir a donde queramos sin la dependencia del otro. No digo que lo hacemos a menudo, pero nos hace bien distanciarnos para darnos cuenta que nos necesitamos del uno al otro.
-No lo sé, pero me da miedo que pase lo mismo con Debby- Habló Tyler y su amiga está a todo oídos en cuanto escuchó ese nombre. -Ella quería mucho a Josh, sin embargo, producto del trabajo y delas agotadoras horas de estudio, ellos no pudieron mantener su relación.
-Pero también llegaste tu -Rió Sophie.
-Touché-. Ambos sonrieron, dejando una alegría en la chica al percatarse de que su amigo había cambiado esa cara de melancolía.
-El trabajo es lo de menos. Michael trabaja todos los días y siempre lo recibo con una rica cena para recuperar sus ánimos. Se sabe que es difícil todo esto este proceso del matrimonio, pero yo decidí en formar una familia con Mich porque yo creo en mis capacidades de poder ser una muy buena esposa y ser feliz al lado del hombre que arrebató mi corazón en la secundaria. Yo di ese paso gracias a la seguridad, puesto que, para uno, es un gran cambio que afectará la vida de dos almas enamoradas, uniendo, así, sus corazones hasta que la muerte los separe -. Entre ese lapso de tiempo, la chica toma la mano de Tyler y le arrebata la cerveza. -Ahora en verdad quiero que me mires-. Habló seria y el castaño por fin la miró. -¿Estás seguro de tu decisión?
Tyler se quedó con una expresión plana y pensativa. Nunca en su existencia había experimentado un sentimiento como este, superando cualquier barrera que beneficiaba a los nervios de su subconsciente y cuerpo.
Apretó la caja y se decidió por abrirla.
Ver aquel objeto redondeado y de color metal cobrizo lo hizo dudar demasiado. Fue justo en ese instante en que una guerra se acababa de desatar en su cabeza, siendo solo dos bandos quienes pelean por conseguir la verdad entre los arbustos.
Las preguntas contra las respuestas.
Millones de preguntas eran interpretadas como misiles que interceptaban en su cerebro, siendo aquella acción como la decisión final en que Tyler debió de ser fuerte hasta el final.
Cosa que siempre lo ha sido.
Su madre, su padre, su hermano... ¿Qué importa si no están físicamente? Ellos siempre tendrán a la vista las acciones que toma Tyler para construir su vida, porque eso es lo que debe y debió de haber hecho.
Una decisión tan importante como esa, es justamente una de las más fuertes que sentirán los difuntos del castaño, siendo todas esas respuestas que se agruparon para llegar a una simple y sentimental conclusión.
-Estoy seguro, muy seguro.
-Perfecto -. Se alegró la chica, entregándole con esa misma emoción la lata de cerveza. -Una gran decisión conlleva al cambio de un ser, aunque realmente estamos constantemente cambiando nuestras características que nos definen como persona.
-Gracias por animarme -. El castaño agradeció y le dio un abrazo a su amiga. -No me arrepentiré, te lo aseguro.
-Esa es la actitud -. Rieron, quedándose un rato sentados en el bar hasta que ambos termiaron sus bebidas. -Ahora que Michael está con Brendon, y Josh está sentado un poco más allá junto a Ryan, ¿Por qué no aprovechamos y vayamos a bailar el bote? Es nuestra oportunidad.
-¿Es una broma? -. Tyler, ya un poco ruborizado por el ambiente y por las varias latas de alcohol que se ha mandado, no tenía el entusiasmo necesario para acompañar a Sophie.
-¡Oh vamos! -. Comtradijoa la rubia. -¡No seas aguafiestas! Tu sabes perfectamente que, dentro del grupo de hombres (amigos), eres el mejor que tiene ritmo para bailar.
Tyler dudó en sus capacidades mientras aún tenía, en otra mano, la fastidiosa caja que tenía la chica en desespero.
-¡Mierda Tyler, ya me tienes harta con que juegues con esa caja! -De desesperó y Tyler lo miró con mala gana.
Luego, el castaño guardó el objeto en el bolsillo del pantalón negro y se levantó de su asiento para poder estirar los brazos.
-A las mujeres les encanta que los hombres sepan bailar, y tu eres el candidato perfecto para conquistar a personas que les fascina esa cualidad.
Tyler la ignoró y ahora estiraba todo su cuerpo despues de haber bostezado.
-Si es que llegas a estar comprometido, yo podría organizarte tu despedida de soltero, ¿Que dices? Seria en un lugar grande con todos tus amigos frente a un escenario con chicas bonitas, obviamente respetando los gustos de los héteros, ¿No? Porque supongo que aún te agradan las mujeres.
-Si, pero no gracias. La despedía de soltero de Brendon fue mucho que me dejó exhausto por casi un mes.
-Recuerdo eso -. Sophie se bajó de su asiento gracias a la caballerosidad de Tyler. -Michael llegó a vomitar a casa y estuvo por una semana con dolor de estómago. Me había enojado con él, pero luego me puse contenta porque me di cuenta que había bajado como seis kilos yendo al baño cada cinco minutos por el resto de su condición -. De pronto, en un movimiento rápido, Tyler toma el brazo de su amiga. -¿Ocurre algo?
-¿No querías bailar? -. Rió el castaño y la chica asintió de inmediato. -Entonces prepárarte, porque Joseph, vuelve a las pistas de baile.
-¡Así me gusta! -. Carcajearon los dos, siendo la chica quien fue llevada directo a la zona de festejo.
(...)
-...Y pues estuve como una semana con dolor de estómago por culpa de esa despedía de soltero, pero al menos valió la pena celebrar su anticipada unión -. Contaba Michael, compartiendo una agradable noche con sus amigos.
Josh, que está sentado al lado de este, sólo escuchaba atento hacia las historias cómicas de los demás. No obstante, el chico no se sentía del todo bien por lo ocurrido con Tyler está mañana.
Quizás debió de haberse disculpado por haber actuado como un niño en frente de su novio.
- y Debby, ¿No tienes nada que contarnos? -. Mark se adelantó con la pregunta mientras dejaba sobre la mesa redonda unas copas de vino para compartir.
-¿Algo gracioso que me ha pasado? -. Levantó una ceja. -Pues este embarazo me ha tenido bastante ocupada con mi cuerpo, puesto que no he dejado de ir al baño por el resto del mes.
-Créanle, ayer fue como quince veces a hacer del uno -. Rieron todos y Dustin juntó su mano con la de Debby, su novia.
-Que bueno que se están tomando todo esto con calma, me enorgullece -. Brendon levantó su copa y dio un pequeño sorbo. -¿y tu Josh? has estado callado casi todo el día.
El tintado lo miró por un momento y de inmediato sintió como las palmas de sus manos comenzaron a sudar.
-Estoy bien, sólo que me duele un poco la cabeza.
La verdad es que aún tenía esa inseguridad de hablar de sus pequeños problemas con los demás, sobre todo si está su ex presente.
-Ánimo amigo, de seguro el va a acercarse para bailar contigo -. Michael veía a gusto en cómo su esposa y su amigo bailaban en la pista de baile, causando unas ganas que provocaron el entusiasmo de unirse a la acción. -Permiso -. El macizo, con todo respeto, se paró de su asiento y se aproximó hacia donde está su esposa.
Fue ahí en que Josh se dio la vuelta y observó a Tyler divertirse. -No sabía que a Tyler le gustaba bailar.
-Baila cuando hay seguridad en el ambiente, si quieres puedes ir donde está el -. Habló Mark, sustituyendo su puesto con el que usó Michael.
Josh sólo se quedó callado y bebió un poco de su vino.
-Con permiso chicos, pero me toca una de las tantas sesiones en el "Wc" -.Dijo Debby con toda seguridad, siendo ella y Dustin quienes se levantaron para retirarse por unos minutos.
-Bueno, ahora que no están esos dos... -. Ryan apareció de la nada y le susurró unas cuántas cosas a su esposo. -¿Me harías ese favor? -. Le preguntó y el frentudo asintió de inmediato, parándose de su asiento y dirigiéndose hacia el Buffet.
-Joshua, ¿Quieres comer algo? Tu ánimo me da mucho sueño, además no me siento un muy bien amigo al no ayudarte con tu semblante caído.
-Estoy bien, no tienes por qué preocuparte -. Dijo desanimado, siendo el principal sujeto que fue atacado por las miradas de los demás.
Ryan sabía las intenciones del chico, puesto que le recuerda a su novio hace ya unos cuatro meses atrás.
El esposo de Brendon miró hacia la pista de Baile e identificó de inmediato el cambio de expresión en el castaño.
Sabía que Sophie iba lograr recomponerlo.
-Hace dos horas atrás te estabas riendo con nosotros, así que me preocupa tu repentino cambio de humor -. Ambos amigos dejaron que los demás hablarán de otra cosa mientras que ellos conversaban del tema que iba a escoger Ryan.
Josh se sintió incómodo, pero, por sobre todo, se sintió peor cuando una pregunta clave, por parte del contrario, fue dirigida como si nada.
-¿Cada cuanto tienen relaciones sexuales Tyler y tu?
Joshua casi se atraganta en el momento en que comenzaba a tragar un pequeño bocado que había en la mesa.
Golpeó su pecho para poder reponerse y al fin poder hablar. -¿A qué viene esa pregunta?, eso no te incumbe.
Afortunadamente, Ryan había preguntado en un tono bajo y respetable. -Me preocupo por ti y por su relación -. El chico tiene todas las piezas del rompecabezas para llegara dos conclusiones que están muy ligadas, es decir, que ambas se relacionan y se dirigen hacia un mismo sentido y dirección. -Es obvio que no tienen tiempo como pareja.
Joshua iba a hablar, pero sus intenciones disminuyeron cuando escuchó la realidad salir de las cuerdas vocales de su amigo.
-Te sugiero dos cosas. Una, que viajes con Tyler a donde quieran, puesto que necesito que ambos se concentren y despejen sus mentes para concentrarse en lo que realmente vale la unión de ustedes dos. Dejen sus trabajos por un tiempo y enmarquen la felicidad y la alegría en sus almas, no les cuesta nada; y dos, si en verdad quieres salir de la misma rutina, todo será diferente en cuanto liberes esa ansiedad que te ha estado presionando desde que comenzó la ceremonia. Solo enséñale ese afecto con esa pequeña acción, yo te ayudaré.
Josh se sintió un poco apenado, sin embargo, en cuanto miró a Tyler divertirse y sonreír en la pista de baile, a este le entró una seguridad desconocida que se hizo expandir por su sistema sensorial. -Gracias Ryan, pero no necesito de tu ayuda-. Joshua se para rápidamente, llamando la atención de todos sus amigos que están presentes alrededor de la mesa.
Todos lo miraron con extrañeza, siendo ahora el pelirosa quien se alegraba por haber tenido una pequeña visión de todas las cosas que ha hecho con Tyler desde que lo conoció esa vez en que cruzó la puerta de su antigua casa.
-¿Todo bien, Josh? -.Preguntó Mark y el teñido asintió con seguridad.
-De maravilla -. La mayoría tenía una preguntaba que se les había formulado por el repentino cambio de Josh. "¿Acaso este tipo es bipolar" -Ryan, gracias.
El susodicho cambio su extrañez por una sonrisa. -De nada, Joshu...
-Ahora respondiendo a tu pregunta -. Josh lo interrumpió. -No habíamos tenido relaciones sexuales desde hace ya dos semanas, así que hazte una idea de lo cansados que estábamos por nuestros asuntos.
Ryan, un poco sorprendido por la inesperada respuesta, no pensó que su amigo hubiese obtenido tal seguridad de corresponder su pregunta "falsa". Ahora solo veía a un Josh caminar con mucho ánimo hacia la pista de Baile y, por otro lado, a una mujer embarazada y su novio acercarse nuevamente a la mesa.
-¿De qué nos perdimos? -. Preguntó Dustin, ayudando a Debby a tomar asiento.
-De nada Dustin, de nada...
(...)
-¿Y ya escogiste al chico quien pueda reemplazarlo?- Preguntó Jenna, riéndose de su pobre amiga y sus problemas amorosos.
-No, porque nadie puede reemplazar a mi hermoso profesor -. Se excusaba Valeria.
La chica había llegado a un punto en que sus amigas, Jenna y Verónica, estaban hartas de los argumentos estúpidos que hacia contra la pareja de Josh y Tyler, sin embargo, la "enamorada" no pudo aguantar el deseo de acercarse hacia el tintado en el momento en que este se había puesto de pié y se dirigía hacia la pista de baile.
-Es mi oportunidad -. Apretó su puño en un acto de seguridad, pero Verónica le tomo del vestido y la trajo otra vez a su asiento.
-Madura, por favor - Decía Verónica, convirtiendo esta pequeña escena en algo serio. -Jenna y yo hemos estado aquí contigo todo el tiempo gracias a tu "pequeña" calentura provocada por un hombre seis años mayor que tú. Ahora por favor, te pido con amabilidad, que parémonos de estas estúpidas sillas decorativas y vayamos a divertirnos.
Valeria miró hacia el piso y cerró los ojos.
Siempre tuvo ese sentimientos estacando con Joshua Dun en el momento en que lo vio aparecerse en el sala de música. Ella tenía tan solo 16 años cuando lo conoció y, desde aquel día, nunca dejó de pensar en su hermoso rostro.
Fue un profesor muy joven con una poca experiencia laboral, mas no pudo dejar de estar sorprendida por la alta amabilidad que tenía Josh con todos sus alumnos.
Valeria respiró hondo y botó todo el aire acumulado. -Tienen razón -. Se puso de pié y extendió una mano para señalarle a sus amigas que la acompañasen. -¿Vayamos a divertirnos?
Verónica y Jenna se miraron mutuamente y sonrieron.
-Vayan ustedes, yo debo de esperar a alguien que no tarda en llegar -. Dijo la chica de ojos azules.
-Ya y, ¿De quien se trata? - Preguntó interesadamente Verónica.
-Ahí verán -. Se sonrojó a propósito, recibiendo pequeñas risas por parte de las contrarias.
Minutos después, Valeria y Verónica se habían marchado hacia la pista de baile para aprovechar el momento. De repente, a una de las jóvenes le comenzó entrar sed, por lo que Valeria, la afectada, decidió ir a la barra por algo de beber.
Entre que la chica iba a buscar los refrescos, Verónica se dirigió donde está Jenna, provocándole sorpresa al ver con quien se encontraba.
Al acercarse, Jenna y el hombre con quien se encontraba, se separaron en una desesperación repentina.
Ambos estaban a punto de besarse.
-Comprendo, ¿o sea que no me ibas a revelar este secretito tuyo? -. Preguntó Verónica en una risa, sonrojando a la pareja con tan solo unas carcajadas de aprobación.
-Ehh pues... El es Jordan Dun, mi novio de hace unos días.
Verónica abrió los ojos como platos al escuchar ese apellido otra vez. -O sea que el es herm...
-Si, lo soy -.Rió el muchacho, pasando un brazo por los hombros de su novia y atrayéndola más hacia su cuerpo. -Ella ya me contó todo lo vivido con el novio de mi hermano, por lo que no tengo mayor drama con establecer una relación con esta maravilla de ángel -. Se miraron mutuamente y juntaron sus labios en un corto beso.
-Que tierno los dos -. Aplaudió la chica, pidiendo permiso para alejarse y no interrumpir el momento de la pareja.
Entre que eso sucedía, Tyler y Sophie bailaban al ritmo de la canción, exponiendo sus acciones durante una celebración periódica y sin cansancio.
-¿Estás cansada? -. Preguntó Tyler sin detener sus movimientos que matan a cualquiera, metafóricamente claro.
-Para nada, ¿y tu? -. Vuelve a preguntar lo mismo que el castaño pero con otras palabras, segundos después Tyler niega con la cabeza.
De repente, la música cambia su género y temática, teniendo ahora una melodía suave, lenta y romántica. Por ellos, ambos amigos se detienen y se miran cómicamente.
Parece que les arruinaron su momento de diversión.
De pronto, una mano se posiciona en la cadera de la chica, alertándola y haciendo que esta se diera la vuelta para poder ver a la persona que había hecho ese gesto atrevido.
-Mi dama, ¿me concede esta pieza? -. Dijo Michael, sonrojando al instante a la chica la ver ese rosto hermoso con las mejillas levemente rojas que tanto caracterizan a su esposo.
-Pero por supuesto, esposo mio -. Entrelazan sus manos y comienzan a bailar al compás de la música romántica.
Tyler se rascó su corto cabello y rió ante la escena.
Sintió vergüenza por un momento, pero la aproximación de Josh hacia el hizo que cambiase cualquier característica que tenga que ver con un inicio de soledad.
-Hola -. Dijo el tintado al sentir en como su corazón empezaba a acelerar su ritmo, siendo, incluso, mucho más rápido que el de la música. -Yo ehh... siento haberme comportado como un niño esta mañana, en verdad no quise que esa pequeña pelea sucediera. Lo siento Tyler -. Ahora Josh era quien se rascaba su cuello, siendo su cuerpo el que sintió la acción tierna del castaño.
Tyler lo había abrazado. -No importa, Joshua, yo también actué indebidamente.
El teñido sonrió y correspondió el gesto de cariño de su novio, tambaleando sus organismos junto a la romántica melodía que se expandía por el ambiente.
Dos personas unidas demostraban el amor puro que tienen, expresando, otra vez, a todos los invitados que,su amistad y amor, es lo más fuerte que se puede presenciar en esos instantes.
Quizás la idea de Ryan de poder viajar junto a Tyler no era para nada una pésima opción, pues, en estos minutos, lo único que quiere es estar junto a la persona que lo hace feliz y crea esa sensación de mariposas en el estómago.
Dejar de lado el constante y arduo trabajo equivale a unas vacaciones excepcionales. Todo ser humano necesita de ellas, puesto que sería inhumano ver a una persona no disfrutar de la vida y utilizar los recursos y maravillas que hay en el planeta.
Josh apega su barbilla en el hombro del chico más alto y cierra sus ojos en un intento de relajación. -Te amo -. Susurró en el oído de su novio, causándole un leve rubor en el rostro.
-Yo también...
Tyler frunció el ceño y despegó una de sus manos de la espalda del mayor, llevándola hacia el bolsillo de su pantalón y revisando si aún tenía la cajita con el anillo en su interior.
-Amor, ¿Ocurre algo? -. Pregunta Josh y Tyler se desespera en guardar otra vez el objeto.
-Si, todo en orden. "¿Será este el momento indicado?" Se preguntaba durante los ataques de nervios, pero el presentimiento que ejercía sobre esa decisión de hacerlo o no hacerlo corría el riesgo de no tener una seguridad alcanzable para aquella propuesta.
- ¡La puta madre, como mierda se apaga esta música! -. Brendon se había colado en el mezclador/ controlador Dj, ya que le había dado unos billetes extra al Dj para que se vaya a comprar un juguito y unas galletas mientras el hacía de las suyas con el mezclador. -Putos botones, puto amor, puto favor plan de Ryan.
Brendon apretaba cualquier botón y cambiaba la música a cada rato.
De un reggaeton lento a un jazz todo coqueto; es por eso que Ryan lo veía desde lejos con una cara de fastidio y enojo, pasando un dedo por su cuello en señal de provocación. "Brendon, te voy a destruir" se decía en sus adentros.
Entre que los invitados quedaron perplejos por el cambio constante de música, Tyler y Josh se habían despegado de su abrazo, siendo el castaño quien le dio la espalda para poder sacar nuevamente la caja con el anillo.
Se siente seguro, se siente perfecto.
Perfecto de las acciones incondicionales que haría junto a su novio.
Reguló sus respiraciones en cuanto la música paró. Esto no lo tenía planeado.
Sus manos tiritaban en un impulso de darse vuelta, mas los nervios que atacan sus huesos, durante una fría noche, lo hacía desesperarse de poder desatar este nudo en su subconsciente y garganta.
"Tu puedes Tyler, sé que puedes hacerlo"
Abrió la caja sin ningún miedo y justo las luces del lugar fueron apagadas, sin embargo, solo una era la que se enfocaba en la pareja, llamando la atención de toda la gente.
En un acto fiable, Tyler da media vuelta y se arrodilla en el piso de mármol, alzando su quijada para poder mirar a su novio a los ojos.
No obstante, las voces de ambos chicos hicieron que mutuamente se sorprendieran por su acto de cambio.
-¿Quieres casarte conmigo? -. Dijeron al unísono, experimentando la sorpresa, combinada con alegría y emoción, en una fina y pequeña lágrima que bajaba por sus rostros caracterizados e invadidos por el rubor.
-Josh...
-Tyler...
El público quedó con la boca abierta al visualizar atentamente la pareja arrodillada y mostrando, ambos, una caja con un anillo en su interior.
-Man, este no me lo esperaba -. Interrumpió Brendon gracias al micrófono que usa el Dj.
-Brendon, déjate de joder -. Ryan le dio su buena golpiza en la frente, recordando el momento en que Brendon había pedido su mano. Sin embargo, esta vez fue un tanto diferente como aquella vez.
Josh y Tyler se pararon aún con la emoción recorriendo sus neuronas, quedando completamente en un estado de "shock" por haber tenido las mismas intenciones que el otro.
-Esto no se ve todos los días -. Jenna abrazó a Jordan y levantó su pulgar en un gesto de aceptación.
-Ni me lo digas -. Contestó su novio, comenzando a aplaudir en el instante en que todos hacían esa misma acción y entre que la pareja, recientemente comprometida, hacían un intercambio de anillos de compromiso.
El anillo de color negro cabía perfectamente en Tyler, por otro lado, Joshua quedó sorprendido ante el diseño del anillo color rojo cobrizo que le había comprado el castaño.
Tyler y Josh se besaron en cuanto sus mentes volvieron a este mundo, escuchando uno que otro grito de felicitaciones.
-Gracias por todo, y obviamente acepto casarme contigo -. Agradeció Josh, colocando sus manos sobre las mejillas del contrario y atrayéndolo hasta juntar sus frentes.
-Lo mismo digo -. Guiñó un ojo, correspondido el primer beso de una pareja comprometida.
De pronto, Brendon entró a escena y golpeó los traseros de ambos chicos, siendo Joshua el que se quejó en un gruñido.
-Ahora sé a quien le dieron esta mañana -. Rió el frentudo y Josh ya tenía las intenciones de agarrar un palo y destrozarle la hiperactividad que tiene.
Justo en ese instante Valeria traía los refrescos para su amiga, pero, lamentablemente, vio todo lo que pasó entre Tyler y Josh.
Percibió un dolor en su pecho. Era molestoso, pero tolerable.
Quiso sentirse deprimida, pero sería un malgasto de tiempo experimentar otra vez la misma historia. Es por eso que sol expresó una sonrisa y un pequeño suspiro.
-Me alegra que seas feliz -. Dijo, girando su cuerpo para devolverse a la barra, sin embargo, en el instante en que se daba la vuelta, una persona interrumpió acción y chocó contra su cuerpo, derramando el agua por toda su camisa gris. -¡Oh dios, perdón, no quise hacerlo a propo...! -. Al ver su rostro, esta queda hipnotizada por la belleza de aquel chico.
-No importa, fue mi culpa por haber sido un obstáculo -. El chico saca de su bolsillo una servilleta y comienza a secar la humedad sobre su pecho. -¿Y tu nombre? -. La chica se sonroja y responde su nombre. -Valeria... que lindo nombre. Me llamo Christian Urie, soy primo de Brendon, un gusto -. Chris extiende su mano en un gesto de saludo y la contraria corresponde al segundo. -Veo que eres una chica de pocas palabras, ¿No te apetece acompañarme al bar y explicarme porqué tienes esa cara de sorprendida?
"Uff, créeme que "Chica con pocas palabras" es lo que menos me caracteriza" Dijo en sus adentros, acompañando a su nuevo crush de la noche.
Ahora que todos se divierten, la noche, por obvias razones, debía de continuar, dejando cualquier rastro de felicidad por la gran habitación y un sentimiento de celebración gracias al principal objetivo de la fiesta.
El matrimonio de Brendon y Ryan.
(...)
5:06 Am
Josh y Tyler se tambaleaban por el pasillo del hotel.
Habían bebido un poco más de lo que se propusieron, pero eso no detendría el hecho de tener las energías para poder caminar con dirección a su habitación.
Las risas y carcajadas eran un problema para la gente que dormía, sin embargo, a ellos no les importaba.
La fiesta había terminado hace cinco minutos atrás, por lo que todos los invitados se fueron a sus respectiva habitaciones para descansar y acabar con los niveles de alcohol en su cuerpo. No obstante, Tyler y Josh, en cambio, tenían otros planes esa noche.
Al entras a la habitación, Tyler no pudo esperar en acorralar a su novio contra la puerta después de que esta había sido cerrada con seguro.
-¿Ves?, está cerrada -. Rieron ambos, juntando sus bocas en un beso apasionado que podría durar siglos.
-Esta vez me toca a mi -. Dijo Josh en un modo pícaro, poniendo ambas manos en los costados fornidos de su novio y lanzando a Tyler contra la cama, para así quedar recostado boca arriba y comenzar a desabrochar lentamente su camisa para provocar a Joshua.
Este, un poco desesperado, se puso encima del castaño y comenzó a plantarle pequeños besos en la zona levemente descubierta, incluso muy cerca de los tatuajes de su acompañante.
-Eres hermoso -. Josh lo miró como si estuviese contemplando a la mas preciada y perfecta obra de arte, llegando al final del rastro de besos que fue justo en los labios del contrario. -Eres lo mejor que me ha pasado en la vida, y no voy a parar de decírtelo una y otra vez.
-Quizás diga algo similar, ya que no tengo palabras que puedan expresar y describir esta situación, sobre todo si hablamos de nuestra futura unión.
-No lo sé, mas yo creo que estamos unidos desde que nuestras ojos chocaron y compartieron miradas en el instante en que nos vimos por primera vez.
Conectaron nuevamente sus labios, siendo ahora sus manos las que se entrelazaron para unir y destacar los brillantes anillos que decoran sus dedos índices.
-Te amo
(...)
Josh abrió lentamente sus ojos por un repentino dolor de cabeza. La resaca no es buena, pero es índice de que la noche anterior fue una de aquellas en que realmente todo sale bien.
Todo sale perfectamente bien
El teñido pasa sus dedos por sus ojos y luego trata de arreglar un poco su cabello con estos mismos.
Ni siquiera el sabe lo que estaba haciendo, pero al menos tiene seguridad de que está acostado en su habitación sano y salvo.
Su vista está un poco nublado, pero eso no detuvo el hecho de que levantara un poco las sábanas blancas de la cama y se fijara en la desnudez de su cuerpo.
Fue en ese entonces en que los recuerdos de la madrugada anterior atacaron su mente como algo notorio y reconfortante.
Se sonrojo y rió ante el acto, girando su cabeza hacia la izquierda para poder encontrarse con un Tyler en las mismas condiciones que él.
Duerme boca abajo y con la boca levemente abierta.
Quizás, para algunos, sean unas vistas un poco "desagradables", pero, al menos para Josh, era la escena que mas le ponía feliz por las mañanas.
Al sentarse en la cama y dejar su torso al descubierto, sintió como una brisa de invierno recorrió su piel en una reacción de escalofrío y peligro.
Por ello, este tapó la espalda de su prometido con las sábanas y luego se percató de la fuente por donde escapaba el calor de su habitación.
Sin nada de que quejarse, Joshua se dignó a ponerse de pié, cerrar de una vez por todas la odiosa ventana y, finalmente, acostarse junto a su adormilado novio.
Se quedó contemplándolo, pero su cuerpo reaccionó en un susto en el instante en que los ojos de Tyler se abrieron de golpe.
-Buenos días -. Sonrió el teñido.
-Querrás decir: Buenas tardes -. Rió el castaño, observando la extrañez del contrario. -Ya estaba despierto, por lo que hace media hora me fijé en la hora y decidí mejor no despertarte.
En ese segundo, Tyler decide mostrarle la hora de su celular e hizo que el teñido se riera.
Efectivamente.
Son las 13:48 Hrs.
-La puta madre, dormimos como gatos -. Rieron ambos.
-¿No te gustaría bajar y almorzar?, aunque por mi parte, no tengo mucha hambre que digamos.
-Yo tampoco tengo hambre -. Respondió Josh y miró a su novio con emoción. Por ello, este mismo sonrió coqueto y dijo: -Aunque yo tengo otros planes que hacer contigo.
-¿Como cuáles? -. Cuestionó el menor y Josh le susurró su plan en su oído.
-¿No te parece?
-¡Me parece estupendo! -. Tyler celebró como un niño, para así salir de la cama y buscar en la maleta el artefacto dicho por el teñido.
-Está en mi mochila, amor.
Tyler, muy desesperado por jugar, sacó de la mochila que siempre lleva Joshua en sus viajes su consola preferida de juegos.
La trajo porque es ahí en donde siempre guarda la GameCube que usaba cuando niño, puesto que, en momentos así, es muy necesararia su aparición y compañía.
Gracias a esa emoción, Tyler rapidamente conectó todos los cables del artefacto antiguo a la tele y luego se lanzó a la cama para poder pasarle a su novio uno de los controles restantes.
Escenas así son las que necesitan aquella pareja, dejando en Josh un pequeño porcentaje de logro acorde de lo que le había explicado Ryan la noche anterior.
Deja de lado un poco tu esfuerzo y gástalo en algo que si vale la pena mantener de por vida.
Tyler es su mas preciada razón de felicidad, siendo, hasta quizás, parte de la defincion (De felicidad) de un diccionario.
Trabaja duro, decían, pero aquel concepto aveces era erróneo, ya que la relajación y tiempo de ocio es lo que adquiere y necesita cualqueir ser humano en tiempos de compañía. En tiempos de compañia junto a tu prometido.
Siendo Mario Kart el juego seleccionado por ambos hombres para poder satisfacer sus horas de "aburrimiento".
-Te ganaré -. Habló Josh en desafío.
-Eso ya lo veremos -. Contestó Tyler, apretando el botón de "play" para poder comenzar la carrera.
Relacionando aquel botón como si fuese la primera acción que dio vida a un primer segundo de relación de recién casados.
Fin