Canción: Major Lazer feat. Wild Belle - Be Together
Renesmee
Estuve un rato hablando con Alec, antes de despedirnos. Me siento feliz porque el poco rato que estuvimos juntso, acordamos en seguir viendonos. Por desgracia, lo han llamado y se ha tenido que ir. Pero tengo su numero nuevo para seguir hablando. Después de desayunar, decido salir de la cafetería para volver a casa temprano. Ya que había quedado de ayudar a abuela Esme con algo de la casa pero se me estaba pasando por alto.
Voy caminando disfrutando del rocío de la mañana, a pesar de que esta nublado, cuando algo me detiene pues me llama la atención. Afuera de la dulcería, en el lado contrario de la acera, reconozco la camioneta de Jacob. El está parado afuera en la acera hablando con Seth, y una chica muy linda que no reconozco.
Seth me ve y grita para llamar mi atención. -¡Renesmee! Hola.
No puedo ignorar la situación, y seguir caminando, así que me acerco y saludo a Seth con un abrazo y también a Jacob de la misma forma.
No se si fue impresión mía pero la chica me mira mal una vez abrazo a Jacob. Luego cuando lo suelto ella cambia su expresión.
-Renesmee, ella es Emma, es una buena amiga. -Jacob interviene. -Emma, ella es Renesmee.
-Una muy buena amiga -recalca Emma. -Así que tu eres la famosa Renesmee, he oído tanto de tí. -coloca su mano en el hombro de Jacob.
Primera resolución. No se quien se cree esta chica, pero me cae horrible. No puedo decirle "mucho gusto" porque estaría siendo hipócrita. Y me alegra que ella no haya insistido en ser cordial o en darme la mano.
-Ah. Sí, la misma. -De repente me siento incomoda.
-Íbamos por algunos dulces y chucherías para hacer una fiesta en la playa en el fin de semana. ¿Nos quieres ayudar? -pregunta Seth.
-Pues, les pido disculpas en esta ocasión. Pero me esperan en mi casa.
-Será en otra ocasión -Seth me brinda una sonrisa.
-¿Quieres que te lleve? -ofrece Jacob.
-No, no te preocupes. Sigan en sus cosas. Nos vemos después. Me despido rápido y me voy caminando. Trato de ignorar lo que sentí cuando vi a Jacob con esa chica.
Por alguna razón siento que esa chica es más que una amiga para Jacob. Trato de no pensar en ello, bloqueo esos pensamientos y sigo por donde vine.
Ya en casa, pasadas unas horas, termine de ayudar a abuela Esme, y pase el resto de la tarde leyendo. No me había dado cuenta de que ya esta oscureciendo. Voy por algo para merendar a la cocina. Abro la nevera y tomo queso y yogurt. No se porqué pero últimamente estoy muy hambrienta. También cojo algunas galletas saladas. No me doy cuenta de que mi abuela Esme esta preparando algo de cenar.
-Pues parece que no puedes esperarte a la cena, ¿verdad? -pregunta con una sonrisa.
-Ah, no sabía que tendríamos una cena hoy. -Dejo las cosas en la meseta de la cocina. -¿Quién viene?
-Vienen Sue y Charlie a visitarnos, y también Jacob y creo que dijo que traería a alguien más... -Salta mi madre entrando por la puerta que da a la estancia.
-¿Invitaste a Jacob? -le pregunto a mi madre, casi a punto de un colapso.
-¿Que tiene de malo? El viene todas las semanas a cenar. -Dice mi madre muy tranquila.
-Tiene de malo... que no estamos juntos mamá. Eso tiene de malo. -Digo amargamente. -Si es verdad que dije que quería ser su amiga. Pero no estaba en mis planes tampoco verle hoy. Y más si traerá a alguien que no conozco.
La dejo con la palabra en la boca. Y me dirigo hacia las escaleras. De reojo noto que Esme mira a mi madre con desaprobación y luego sigue en lo suyo.
Llego hasta mi habitación en la casa grande. Era la antigua habitación de mi padre. Solo que ahora las paredes están pintadas de púrpura y tiene detalles en color plata en las paredes. A diferencia de mi cuarto en la casa de mis padres, aquí tengo más cosas. Un librero con mi colección de libros favoritos. Mi pared de fotografías, un sillón para leer. Y claro, una cama más grande. Además está tiene balcón. Y me gusta estar aquí cuando estoy sola. Pero aveces también paso mucho tiempo con mis padres.
Me doy una ducha rápida y hago todas mis necesidades. Salgo al vestidor y tomó unas botas, unos jeans, y una blusa blanca sencilla. Me visto y me miró en el espejo al fondo de la pared. Cepillo mi cabello mojado con los dedos. Decido no colocarme maquillaje en esta ocasión. Estoy conforme en cómo me veo así que voy a buscar a Benjamín a su habitación.
El abre antes de que tocara la puerta.
-Necesito un consejo -dice a modo de saludo.
-Déjame adivinar. Es Leah. ¿Verdad?
-La bese -confiesa.
Estoy sorprendida. -¿Qué? ¿Cómo? ¿dónde? ¿qué paso? - Lo arrastró hasta su habitación de nuevo, y nos sentamos en la cama.
-Pues... la bese anoche. No pude evitarlo. Hay algo que me atrae de ella. No lo sé. Siento algo cuando estoy con ella y ella lo siente también.
-Pero... ¿Si ambos sienten cosas por el otro, cuál es el problema?
-Ella huyo. Ese es problema. Ella es muy cerrada. Cada vez que me acerco a ella parece huir.
-Leah ha sufrido mucho, realmente no me corresponde hablar sobre lo que le paso y sobre sus problemas, pero a ver... ella es cerrada. Creo que solo debes acercarte paso a paso, si en verdad ella te interesa. Porque como dije quizás ella solo tenga miedo de sufrir y salir lastimada.
-Gracias Renesmee. En verdad, gracias.
Hay unos toques en la puerta, la cuál está abierta. Esme nos mira con dulzura. - Siento interrumpir. La cena está lista.
-Gracias, ya bajamos.
Esme nos sonríe y se va por el pasillo. Luego de unos segundos, bajamos las escaleras hacia el comedor.
Saludo a Charlie y a Sue con un abrazo a cada uno. Le presentó a Benjamín a Charlie. Sue abraza a Benjamín con familiaridad. Nos vamos al comedor. Mis padres saludan a Benjamín. Todos nos sentamos en la mesa. Carlisle, al parecer esta de servicio y mientras mis tíos al parecer hicieron planes fuera. Así que al parecer estamos solos. Benjamín se va hacia la cocina. Y se sirve una copa de sangre animal, y se sienta en la mesa. Sue, Charlie, y mis padres hablan de varias cosas, en ocasiones me incluyo en la conversación haciendo comentarios breves. Benjamín está al lado de mí también se involucra en la conversación.
-Buenas noches -Jacob entra al comedor. Y se que no puedo negar lo guapo que esta. Sencillamente trato de no mirarle a los ojos aunque se que me esta mirando.
-Buenas noches Jacob -saluda mi madre.
-Buenas noches -Saluda una voz femenina.
Al mirar de donde provenía esa voz. Vi a Emma. La chica que Seth y Jacob me presentaron en el pueblo.
¿Porqué la trajo? Esa chica desde el principio, me ha caído gordo. Y por alguna razón, sentí algo entre ella y Jacob. Aunque Jacob aclaró que son amigos y realmente no debería de importarme.
-Hola Emma. -Saluda mi padre.
-¿Ustedes la conocen? -pregunto a mis padres.
-Jacob la trajo aquí cuando estabas de viaje en Egipto. -Comenta Esme acercándose a la mesa.
Ambos se sientan y mi madre les sirve un poco de comida.
-Emma es una licántropo de las tribus de Colorado. -Comenta Jacob.
-Ah. La conociste en tu viaje. -Trato de sonar tranquila y no muy interesada en su respuesta.
-Si, así es.
-Y Renesmee, ¿entonces te graduaste hace poco? -Pregunta ella.
-Si, estudie en Londres. ¿Jacob te dijo eso?
-Me menciono algunas cosas de ti. -Dice mientras se mira las uñas.
-¿Ah sí? -Jacob me mira como si esperara mis reacciones.
-Si, puede que mencionara algo. -Comenta distraído.
-¿Y son muy amigos ustedes? - para mi sorpresa Benjamín interviene. Mira a Jacob como sí le estuviera reprochando.
A decir verdad. Esto sólo me acuerda cuando Jacob trajo a Elizabeth aquí. Y ojala está no sea la nueva Elizabeth. Espero equivocarme.
-Si, me toco ir a Colorado para resolver una situación que teníamos, y que mi padre me encomendo. Y la conocí alla. Nos caímos bien. Hemos sido amigos desde entonces. -Dice Jacob casi a modo de defensa.
-Pues, Jake es un chico estupendo. Realmente es un buen amigo y buena persona - comenta Emma mirándole con devoción, como si pudiera comérselo solo con los ojos, desde su misma posición.
Siento un apretón en la pierna, y se que es Benjamín. El me mira preocupado, esta pensando lo mismo que yo. Doy un ligero asentamiento para dejarle saber que estoy bien.
-Me alegra conocerle. Hemos viajado mucho y el me ayudó muchas veces en...
-Creo que son demasiados halagos, Em. -Le dice.
-¿Em? -inquiero.
-Me dice así de cariño. -Sonríe y sigue comiendo la pasta.
-Vale.
Respiro internamente. Esta chica lo que es una ofrecida. Como si no hubiera nadie aquí que no se diera cuenta de que a ella le interesa Jacob. Es demasiado obvio y ella no se inmuta por ocultarlo.
Solo quiero irme de aquí. No tengo ganas de seguir viendo a Jacob, con esa tipa haciéndole ojitos bonitos.
-Lamento escuchar que Jacob, y tu terminaron -comenta Emma mientras termina su plato. -Pero me alegra que sean amigos -sonríe falsamente.
Mi padre la mira sorprendida. Y Jacob escupe el trago de agua que se estaba bebiendo. Un alivio que no hay nadie cercano a él.
Miró a Jacob sumamente molesta. Estoy a punto de pararme de la silla y golpear a esta chica. Benjamín me agarra la pierna y me detiene.
Respiro profundamente para calmarme. Emma me mira divertida. No le quiero seguir dándole el gusto de verme mal de ninguna forma. Charlie y Sue tratan de intervenir y ponen otro tema de conversación. Pero yo no vuelvo a hablar.
Tomó mi celular del bolsillo de mis jeans, y abro la aplicación de mensajes. Se que lo vi hace unas horas. Y no se si me responda. Pero quiero entretenerme de toda esta situación. Le mando un mensaje de texto a Alec rápidamente detrás de la mesa. Mientras disimuladamente hablo con Benjamín de cosas sin importancia.
Renesmee: Ojala pudiéramos estar juntos ahora.
Pasan unos minutos y obtengo una respuesta.
Alec: ¿Y si cumplo tu deseo?
Sonrió al móvil. Eso sería increíble.
Renesmee: Me salvarías de una cena horrible.
Me llega una respuesta casi inmediata.
Alec: En ese caso tus deseos, son mis ordenes, mi lady.
Alec: Pasare por ti en diez minutos. Estaré afuera.
Le escribo rápidamente a Benjamín.
Renesmee: Necesito salir de aquí. Alec me vendrá a buscar. Te haré una señal cuando me vaya. Por favor cubreme.
Benjamín abre los ojos en sorpresa, una vez que lee el mensaje. Y me mira interrogante.
Benjamín: Promete que me contarás todo.
Cuando lo veo esta sonriendo. El es demasiado genial. Lo adoro por eso. Hago un asentamiento.
Estoy inquieta, apenas he probado bocado. Y a pesar de que Emma habla animadamente con Jacob, él me mira intentando decifrar lo que me pasa. Solo miro el reloj al fondo de la sala. Mi padre me mira como si supiera lo que hare. Y probablemente lo sabe. Tiene una sonrisa condescendiente en la cara. Para mi sorpresa no estoy molesta, porque invada mi privacidad cuando se le da la gana.
Pasados los diez minutos, me paro de la silla, camino hacia donde mis abuelos y les doy un beso en la mejilla a cada uno. -Lo siento, prometo que pasare mañana a almorzar con ustedes. Ah. Leah y Seth pueden estar ahí, llevare a Benjamín.
Sue mira a Benjamín -Si, claro.
Benjamín me mira con los ojos como platos. Como si el nombre de Leah lo hizo reaccionar de su ensueñamiento. Le guiño un ojo. Y le hago la señal que acordamos. El asiente.
Doy un beso a mis padres, uno en cada mejilla. -Los amo.
Y luego a Esme, quién esta en el desayunador. -Gracias por la cena, te adoro.
-¿Qué vas a hacer? -inquiere traviesa.
Le hago un guiño, en señal de complicidad. Hago una señal de adiós, para Jake y Emma pero no digo nada.
-¿A donde vas? -pregunta mi madre.
-Déjala -Escucho que mi padre dice.
Te amo papá. Te amo sobremanera. El sonríe tal y como me hubiera escuchado. Estoy segura de que así fue.
No respondo la pregunta de mi madre. Abro la puerta principal, salgo y la cierro. Bajo rápido las escaleras del porche. El audi negro de Alec está a unos metros. Siento unos pasos en la puerta de la entrada. Corro a velocidad vampírica y entro en el coche.
Jacob se acerca a la entrada y mira el vehículo de forma sospechosa. Cuando se está acercando a nosotros, Alec acelera y nos alejamos de allí.
-Ya veo porque estaba horrible. -Se burla Alec y luego sonríe y se le forma ese lindo hoyuelo en la mejilla.
-No te imaginas en serio. No quería verle. El... llevo a una chica que no soporto y...
-Vale, tranquila. -Dice mientras dobla en dirección al pueblo.
-No estamos juntos ya. No se si te lo había dicho. Pero mi familia, no se lo que piensan...
-Hey, tranquila -Siento su mano en la mejilla. Me da un beso rápido.
Sus labios logran en mí, el efecto deseado, ya que me calmo un poco. -¿A donde me llevas?
-No tengo nada planeado la verdad, pero creo que tengo un sitio en mente.
Luego de un largo rato el conduciendo, y yo escuchando música mientras el rie por la forma como me muevo en el asiento, Alec apaga el motor y saca las llaves del contacto, se baja del auto. Creí que me abriría la puerta, pero esta tardando más de lo normal. Escucho el sonido del maletero cerrándose.
Luego me abre la puerta. -¿Qué estabas ...
Miró alrrededor. A pesar de que esta oscuro, estamos en un parque. Y a unos metros hay una manta y unas velas entre el pasto encendidas.
-¿Y no que no tenías nada planeado? -Digo con una sonrisa.
-Digamos que se me ocurrió algo rápido.
-Es perfecto. -Me toma de la mano. Y nos sentamos sobre la manta. Luego de hablar un rato terminamos acostados.
Me acurruco sobre su pecho. Las estrellas, y las luces de las velas y las luciérnagas nos iluminan. Aveces aún en silencio, las palabras no hacen falta. El pone su brazo sobre mi cadera, me abraza y al mismo tiempo, me acerca más a él. Respiro su aroma. Quisiera quedarme toda la vida aquí en este momento. Pero se que no es posible.
-¿Porque te fuiste así y me dejaste sola en el Cairo? -Pregunto.
El se tiesa bajo mi piel y su expresión cambia. -Te escuche hablar con Benjamín.
-Lo que sea que haya pasado entre Benjamín y yo, no fue más que un beso. El estaba triste y confundido pero solo somos amigos. -Le miro. Sus ojos negros se oscurecen aun más si es posible.
-Creo que si me hubieses dicho la verdad, en aquel momento, quizá no hubiera hecho lo que hice. ¿Fui una misión?
-¿Escuchaste eso?
El asiente en respuesta.
-Pues. Quería ayudar a los padres de Benjamín. Estaba preocupada por tí. Jane me había advertido que si Aro te encontraba primero podría matarte por tu desobediencia, y no quería que nada te pasara. No podía permitirlo. -Se me quiebra la voz. Estoy a punto de llorar.
Una lágrima traicionera rueda por mi mejilla. El se da cuenta y la limpia con el dedo. -Tranquila ... -susurra.
-Pero tu volviste y... -Le rectifico señalando lo obvio.
-No se estar sin ti. -Sonríe.
-Yo no quiero estar sin ti tampoco -me dejo llevar de lo que siento, levantó la cabeza un poco y le miro. Alec tiene sus manos en la espalda, me acaricia lentamente encima de la ropa, y no puedo evitar erizarme.
-Dime por favor... -cierra los ojos unos segundos. -Dime por favor que de verdad vamos a estar juntos Renesmee, no quiero ilusionarme de nuevo - Su toque se detiene. Y me mira a los ojos de nuevo.
-¿Crees que para mi eres un juego?
-No puedo evitar pensar eso en ocasiones. No lo se. No quiero volver a...
-Lo se, lo se. Escucha... quiero estar contigo. No eres un juego Alec. Quiero darnos una oportunidad. -Busco su mano y la uno con la mía.
-Renn...
-¿Qué? -miro su boca. Apenas nos separan unos centímetros de aire.
-Eres hermosa. -Su mirada se alterna entre mis ojos y mis labios.
Separo la distancia que nos separa. Le beso. Alec me corresponde de inmediato. Nos besamos lento, separa nuestras manos y sus manos las esconde en mi espalda por debajo de mi blusa. Me estremezco mientras beso su cuello.
El gruñe para luego separarnos y colocarme a horcadillas sobre el. Le ayudo para que ambos estemos al mismo nivel, nos besamos con más ansiedad. El coloca sus manos entre mi cabello, y un gemido escapa de mi boca. Eso provoca que me bese con urgencia. Siento abajo su entrepierna y no puedo evitar sonrojarme. También estoy excitada y caliente. No puedo evitar necesitar más de él. Mis manos viajan por su espalda. Le ayudo a quitarse la chaqueta que tiene. Siento su toque frío en mi espalda. Y cuando nos separamos un poco, no puedo evitar pensar en la sensación de que algo me falta. El me mira con curiosidad.
-¿Tenemos que irnos? -le pregunto angustiada. No quiero irme aun.
-Pues ¿quieres irte? -pregunta aun acariciándome la espalda.
-No quiero regresar a casa todavía. -Le hago un mohin.
-Bien, como tu quieras. -Me da un beso en los labios, pero más breve y menos intenso que el anterior.
Nos paramos, le ayudo a recojer la manta el y el recojer su chaqueta, y le ayudo a colocarsela. El me abre la puerta del automóvil y le doy un beso rápido en la mejilla en agradecimiento. El resto de la noche nos paramos en un restaurante de comida rápida y Alec me compra un sándwich y una soda. Después de que termino de comer, el me pasa una bolsa de sangre.
Le miro intranquila.
-Es sangre animal. No te obligaría a beber sangre humana. Se que no te gusta. -Dice mientras saca otra bolsa del asiento de atrás y la prueba mientras sigue conduciendo con la otra mano.
-Te lo agradezco -me bebo la bolsa bastante rápido. Mientras Alec me mira divertido.
-¿Qué me miras? -pregunto aun con la bolsa media vacía en las manos.
-Nada, eres adorable. -Me da una media sonrisa. -Tienes sangre en la quijada. -Dice. Antes de que pueda hacer algo, Alec me quita con el dedo el rastro de sangre y se la lleva a los labios. Cuando la huele, hace una mueca graciosa.
-¿De que era eso? -dice con cara de asco. - ¿Caballo?
-No, la de caballo no me gusta. Liebre.
-Sabe horrible. -Hace una mueca. No puedo evitar reírme.
-¿Sería raro si te chupo el dedo? -pregunto. Las palabras salen sin pensar. El se ríe y me mira como si estuviera loca.
-No estaba pensando en lo raro, sino en lo morboso que sería.
Coloca su mano cerca de mí. -¿En serio vas a hacer eso?
Me encojo de hombros. Me acerco y chupo el dedo. Y luego le miro. -Si, fue extraño.
-Y no olvides morboso. -Ríe. Me toma y me besa la mano.
-Eres irremediable.
-Me sale natural.
Alec me lleva a una feria que hay en Port Angeles y nos divertimos un rato. Me coloca su chaqueta cuando se da cuenta de que me estaba muriendo de frío. La pasamos bien. Caminamos un rato, nos besamos varias veces. Hasta que ya es muy tarde y Alec decide volver a su hotel pero primero me deja en mi casa.
Es tarde. Y no tengo mucha idea tampoco de que hora sea, porque a mí celular se le ha muerto la batería.
-Gracias por traerme. -Le digo.
-Gracias por llamar.
-Me encantó pasar este rato contigo.
-Créeme que a mi también.
Me besa por sorpresa, una vez más con cuidado, y dulzura.
-Buenas noches Renesmee.
-Buenas noches Alec.
Me bajo de su auto y camino hacia el porche. No entro enseguida. Miró el audi desaparecer entre la oscuridad y la niebla. Entro en la casa y llego hasta mi habitación. Cierro la puerta con una sonrisa en mi cara. Camino hacia la cama y me quito la chaqueta, y la dejo sobre esta. Corro las cortinas.
Me quito las botas y las dejo en una esquina. Me dirigo al baño pero escucho unos toques en la puerta.
La abro y sigo a donde iba. -Mamá lo siento por irme así...
Silencio.
Para mi sorpresa, Emma esta en el umbral con una sonrisa.
-¿Que haces aquí? ¿No te habías largado ya? Además es tarde. -Pregunto con desconfianza. Para nadie es una sorpresa que no la soporto.
-Tengo que decirte algo. Por eso volví y te espere.
-¿Y no podía esperar hasta mañana?
-No, no puede esperar.
-Habla y vete.
-Pues... creo que no he sido sincera contigo. -Empieza. -Creo que mereces saber la verdad sobre lo que siento por Jacob. Y porque no puede estar contigo.
-¿Perdón? -No me lo puedo creer, lo ofrecida que es esta chica.
-Lo que dije -Sonríe cínica.
-Sal de aquí ahora Emma. En serio. Solo quieres fastidiarme. ¿Porque no terminaste de mostrar tu verdadera cara en la cena?
-Por eso vine Renesmee. Nadie me quita lo que es mío.
-No creo que nada de lo que hay aquí sea tuyo. ¿Y sabes qué? No tengo interés en seguir escuchándote. -Le señalo la puerta abierta, para que se vaya por donde vino.
-Jacob y yo nos acostamos mientras estuvieron juntos. -Dice sonriendo.
Y solo esa oración tuvo el poder suficiente para quebrarme.
...
Part 1/?