****YA CON ESTA TERMINAN LAS BIOS. LA DE LOUIS ESTA EN EL PROLOGO Y EN FINALE ****
****PÁSENSE POR POINTLESS! LE PONGO MUCHO EMPEÑO Y NI LEEN HIJOS DE LA PUERK****
Nombre: Josh Samuel Devine.
Edad: 26 años
Ciudad Natal: Los Ángeles, California.
Residencia Actual: Londres, Inglaterra.
Josh nació un 30 de Julio de 1988, en un húmedo día de verano en la ciudad de México. Su madre era nativa de allí, pero al estar casada con su padre (quien era americano), ella tenía la ciudadanía; Por eso, su familia emigró a Los Ángeles a los tres días de nacimiento del pequeño.
Josh tuvo una vida bastante normal. Era tímido, reservado y muy callado de niño, en la escuela jamás lo molestaron, pero tampoco tuvo muchos amigos. No fue hasta que cumplió los nueve, cuando descubrió la guitarra de su padre. Apenas puso las manos sobre el viejo instrumento, abandonó su silencio. A medida que crecía, el castaño aprendía a tocar distintos instrumentos.
Cuando ingresó a la secundaria, ya era conocido por tocar cualquier instrumento en los recesos. Tenía más amigos, era más social y sin duda el chico parecía muy feliz. Cuando cumplió los catorce, experimentó su primera experiencia amorosa, al recibir su primer beso.
Que fue dado por Chase, su amigo desde quinto de primaria.
Josh no se sintió mal en el momento; su madre siempre le había dicho que existían niños a los que les gustaban otros niños y niñas a las que les gustaban otras niñas, y que aquello era algo normal.
Chase fue frecuente en su vida e incluso cuando pasaron a la preparatoria, fueron novios por algunos meses.
Pero solo fue cuestión de tiempo para que Josh se diese cuenta de que no todos compartían el mismo pensamiento que su madre; sus compañeros en la escuela solían burlarse de él, e incluso lo perseguían hasta casa, amenazándole con golpearlo por ser un ''marica de mierda''.
Un día, ese grupo de chicos, golpeó a Chase. Le rompieron la nariz y, cuando Josh quiso intervenir, lo golpearon tan duro, que tuvo que pasar dos días en el hospital. Poco a poco, Josh se fue despojando de su confianza y de su autoestima; se sentía una basura, como una pieza incorrecta en todo ese inmenso rompecabezas que su vida formaba. Al pasar de los años, Josh comenzó a sentirse como una falla, como algo que jamás debió existir.
¿Por qué tuvo que nacer gay? ¿Por qué no podía ser como los demás chicos, y tener una novia? ¿Por qué era esa cosa horrenda que todos consideraban un error?
Quería desaparecer. Pero era muy cobarde para suicidarse y muy débil para levantarse y dar la cara, o para siquiera ignorar todo lo negativo y tratar de ser feliz.
Por eso, cuando cumplió los dieciocho, lo primero que hizo fue dejar a Chase, tratando de explicarle que lo que habían estado haciendo no estaba bien y que el trataría de arrepentirse.
Después de eso, le avisó a su madre que se enlistaría en la marina. Al principio, sus padres se habían negado rotundamente, pero Josh estaba muy decidido.
Quería tratar de rehacerse, tratar de moldearse y dejar de ser esa ''falla''.
Ni siquiera le importó que su madre llorara; el día en que embarco y abandonó su hogar, fue el día en que su vida comenzaría a complicarse.
Para entonces, la legislación federal de las fuerzas armadas estadounidenses aprobaron la ley Don't Ask, Don't Tell, en donde cualquier servidor a las fuerzas armadas que fuese homosexual debía ocultar su orientación sexual; cualquiera que la hiciera pública, sería destituido y expulsado de dichas fuerzas sin ningún bien o pago. Ni siquiera los superiores podían implicar o insinuar la sexualidad de sus soldados.
Josh sabía que no era el único que había acudido a la Marina para ''reeubicarse'': la mayoría de los compañeros homosexuales que estaban en su tropa, estaba allí por lo mismo.
Creyendo que si se sometían a dicha ley, podrían negar quienes eran y cambiar.
Los primeros meses, estar en la Marina no era nada del otro mundo. Josh cumplía tareas como limpiar pisos y cubiertas, ayudar en la cocina, pelar verduras, dar mantenimiento al barco, y esas cosas. A medida que pasaba el tiempo, iba aprendiendo un poco de todo.
Incluso llegó a creer que nadie sabría jamás que él era gay, pues no hablaba casi y nunca compartía nada personal. Pero entonces una noche, un grupo de chicos invadieron los camarotes en donde Josh y algunos hombres más, dormían.
Se trataba de Quentin y los idiotas de sus amigos, quienes fueron por Josh y le colocaron una sábana sobre la cara y después lo tumbaron al suelo.
Josh gritaba por ayuda; sabía lo que era eso: era The Blanket Party. Era un maldito juego en el que se envolvía una sábana alrededor de la cabeza de la víctima y algunos lo golpeaban, a veces teniendo resultados letales. Siempre sometían a ese juego a cualquier marine/soldado que fuese homosexual. Si te salvabas de la política, no te salvabas de ese juego.
Josh se salvó esa noche.
Alguien golpeó muy fuerte, causándole sangrado nasal. Pero aquella confrontación no duró ni 2 minutos, antes de que más marines intervinieran y golpearan a los agresores.
Josh nunca supo, que todo aquel embrollo había comenzado debido a que Quentin lo había pescado mirando por demasiado tiempo a uno de los infantes recién reclutados.
Poca cosa sí, pero para alguien como Quentin, pretextos sobraban para meterse con los demás.
A Josh y al resto de sus compañeros se les aisló en cabinas separadas al resto de la tripulación, se les sometió a tareas pesadas y no les daban suficiente comida.
¿Por qué? El capitán se rehusaba a informar al cuartel sobre la pelea; si lo hacía, revelaba que había permitido que la sexualidad de un marine se revelara y él no le había expulsado. Por eso, las heridas y danos de ningún involucrado en la pelea recibieron el castigo que se merecían.
Y ahora, tanto Josh como los marines que le defendieron, eran el vivo ejemplo de como aquella estúpida política homofóbica estaba afectando el rendimiento y honor de la Marina.
Pero aunque todo aquello fuese injusto, logró fortalecer tanto el espíritu como el cuerpo de Josh; él se rehusaba a dejarse vencer. No importaba si Quentin se había salido con la suya, ya lo haría pagar después.
Unos meses después el batallón desembarcó en Long Beach. Se quedaban en unas cabañas rentadas por el gobierno y siempre se encontraban en la playa. A veces jugaban volleyball y otras tantas simplemente se tumbaban en la arena; todo aquello después de cumplir con sus tareas. Solo se quedarían una semana y media.
Un día, Josh se animó a jugar volleyball. A pesar de estar cansado debido a todas las tareas y trabajo en exceso que se le encomendaban (debido al castigo), Josh decidió relajarse un rato. Incluso días atrás, se había animado a dejarse perforar las orejas por Ronan, uno de sus amigos.
Los amigos de Josh eran unos idiotas, pero idiotas de los buenos. El castaño pasaba buenos momentos con ellos. Se entretuvo tanto charlando y hablando, que en algún momento del juego, sacó con demasiada fuerza y desvió la pelota, golpeando a un chico que pasaba con comida en las manos.
Corrió a disculparse y evitó reír al escuchar las maldiciones que salían una tras otra de aquel chico de cabello lila. Josh se ofreció a pagar su comida mientras notaba como el chico le escaneaba el cuerpo disimuladamente; lo cierto era, que Josh había hecho lo mismo. El chico (que después se enteró, se llamaba Niall) era bastante atractivo. Y a Josh le habían gustado sus ojos azules y su sonrisa de dientes blancos. Por eso, pasó los días restantes de su estadía con él; siempre se encontraban en la playa y se pasaban todo el día hablando.
El ultimo día, Josh se animó y le besó.
El beso le aclaró a Josh, algo a lo que le había estado dando vueltas en su mente todos los días, a partir de lo sucedido con Quentin: él era gay, y eso era parte de él. Y nada ni nadie iba a poder cambiarlo, ni siquiera el mismo. No quedaba más que aceptarlo y vivir su vida, sin avergonzarse. Como antes
Y por una razón rara, sentía que con Niall sería capaz de hacerlo.
Pero a pesar de revelarse aquello, no dejó de tener miedo a no estar decidido y por eso, se fue. Se fue y le prometió a Niall que si su destino era estar juntos, la vida encontraría la forma de volverlos a juntar.
Y vaya que lo hizo.
Pasó un mes; Josh cumplía su castigo. Hasta ahí todo bien. Tenía a sus amigos, se divertían en sus ratos libres y no se metían con nadie, ni nadie se metía con ellos.
Pero un día Quentin comenzó a molestarle nuevamente y Josh decidió que ya había tenido suficiente; Fue en un día en el que el mar estaba comenzando a agitarse, fuertes vientos llegaban azotando el barco y el cielo se encontraba nublado. La mayoría de la tripulación se encontraba en cubierta, resguardando las armas y almacenando los alimentos. Josh se encontraba cargando sacos de papas cuando Quentin dio un puntapié a la parte posterior de su rodilla, haciéndole caer. Las papas salieron rodando para todos lados, mientras Josh se levantaba, adolorido por la caída. Quentin comenzó a gritar insultos y a tratar de exponerlo frente a todos los presentes. Josh fue más rápido que su lengua, pues su puno golpeó a Quentin repetidas veces, logrando tumbarle algunos dientes.
Cuando los superiores intervinieron, Josh gritó que estaba harto de esconderse de aquella manera, que él era gay y que estaba orgulloso de servir a su país.
Al exponerse de esa forma, fue inmediatamente destituido y expulsado de la Marina, sin ningún bien ni beneficio.
Los años siguientes, Josh estudió la universidad, tomando un curso de Música y especializándose en Ingeniería de sonido y Técnico en Iluminación. Trabajo en varias producciones musicales estadounidenses por tres años, hasta que un día en una cita con el médico, notó un artículo en una revista: hablaba sobre Maison de Poupées, un esplendoroso cabaret operado por un solo hombre.
Josh decidió que sería bueno contactarlo y preguntar si podía contratarle, pues que un solo hombre se encargara de montar un espectáculo por si solo, era una tarea bastante estresante.
Y así fue, como viajo a Londres, conoció a Liam en persona y consiguió el empleo después de pasar un show de prueba.
Y cuando Niall llegó allí, cargando algunos hilos y telas, bueno, Josh sabía que el destino estaba de su lado.
Pasaron cuatro años en una relación antes de que un quince de Mayo, Josh se colocara en una rodilla y le propusiera matrimonio al chico de sus sueños. Niall y él se encontraban en un viaje a Six Flags en Estados Unidos, y acababan de salir de una montaña rusa cuando Josh se lo preguntó. Recitó el discurso completo que el agente le da a Sandra Bullock en ''Miss Simpatía 2'', haciendo que Niall riera mientras lloraba y aceptaba.
La ceremonia fue sencilla, ambos se casaron unos meses después en California. Organizaron una comida a su vuelta a Londres, en donde festejaron acompañados de todos sus amigos.
Algunos años después, llegaron la casa, la rutina, las noches de trabajo, las tareas, las peleas y reconciliaciones. Y mucho después, llegó Theo.
Y la vida de Josh finalmente estaba completa.
Hobbies: Tocar la guitarra, coleccionar monedas y joder a Niall la mayor cantidad de veces posibles en un día.
Cantante favorito: Bono y Bon Jovi.
Color Favorito: Azul.
Algo que odia: Cuando Niall llora, el olor a pólvora y cuando las cuerdas de las guitarras revientan de repente.
Algo que ama: El mar, la música, a Niall, a Theo y Bea.
***
Estaba revisando mis archivos de s(he). Y encontre el capitulo que escribí el dia de los inocentes (no sé, creo que solo los readers viejos lo recuerdan). Lo iba a subir, pero me dio pena esta super estúpido y la mitad de los users incluidos creo que ya no existen jajajaja, bue, era todo. Los amo.
PÁSENSE POR POINTLESS! LE PONGO MUCHO EMPEÑO Y NI LEEN HIJOS DE LA PUERKx2
Y también por mis otros fics :3 hay mas tesoros escondidos ahi, ahq.
Cuando termine Pointless y The soles, habrá fic Yoonmin, esperenlo.
Pedo y fuera. x