Aún después de esos caminos tan largos por los que he andado, explorado e imaginado, he logrado aclarar mi mente poco a poco enlazando cada punto hasta hacerlo creíble y que esta historia tenga sentido de lo común. Todo lo que me encontraba y hallaba de vez en cuando ᅝeran no más que recuerdos de aquel ayer que uno siempre intenta olvidar pero no puede o no quiere, con paso vacilante fui paseando entre los caminos de ese bosque tan profundo y tan apacible que podría irme a vivir allí en cualquier momento, las lágrimas desaparecían de vez en cuando, los recuerdos que tanto me estrujaban el alma se han puesto tan blandos que ni he de sentirlos ahora, su nombre que tanto me dolía pronunciar sé ha esfumado con el viento, todo ese pesar que tenía sobre mi cuerpo sé ha desvanecido hasta no quedar ni una sola gota, un suspiro grande de alivio fue lo que alcanzo a escaparse de mis labios mientras una pequeña sonrisa sé asomaba de entre mis labiales.
Esos días tan oscuros sé convertían de poco a poco en días llenos de colores puros y energéticos tanto que me aliviaban el alma con tan solo mirar el cielo azul, repleto de diminutas nubes de algodón las cuales podría comer en un solo un instante, con seguridad podría afirmar que mi sonrisa en estas ocasiones era la más sincera que hubiera regalado nunca. Esas hojas que caían con frecuencia de los árboles me alegraban aún más este maravilloso día, ¿será he le he dejado ir? esa pregunta rondaba constantemente por mi cabeza poniendo al revés la misma ya que era una cuestión sumamente interesante, durante tantos días me he preguntado lo mismo, ya no dolía cuando le recordaba, ya no volvían más recuerdos cuando me imaginaba su rostro, todo sé volvía tan blando que me era difícil creerlo, este cambio tan repentino sentía en mi cuerpo y en mi ser me comenzaba a extrañar, ya que era algo sumamente extraño sentir este tipo de sensación en cuerpo pero sin duda era el anuncio de un nuevo comienzo en este tipo de mundo llamado vida.
Durante todos estos años han cruzado millones de personas en mi mente que me era imposible recordarlas cada una, el tiempo pasaba y me resultaba aún más difícil rememorar a cada uno de mis alrededores, aunque de cierta manera cada uno de ellos dejo una huella especial, un recuerdo inolvidable, personas que sé que nunca volveré a conocer, son tiempos del todo ilógicos y sin sentidos; pero comunes, en algún punto. Esta energía que emanaba se mi persona sé había convertido en una sumamente pura y leal ante todos, comenzaba a sentirme con menos peso sobre mi espalda, ese peso que sientes cuando tienes algo que te agobia, te lastima, te duele durante una larga eternidad pero cuando menos te lo esperas ese gran peso sé desvanece de tu vida.