Pasaron algunos días, y era un tarde tranquila en el la cafetería Domino, y sus administradores esperaban que en un par de horas hubieran más clientes.
-¿Joey no contestaras tu celular? Lleva ya un rato sonando-
-Ignóralo Yugi, no es importante-
-Si quieres yo puedo contestar por ti, seguro es una de las clientas que consiguió tu número- apunto de tomar el celular fue alcanzado por el rubio
-Noooo... no contestes Yugi-
-E-está bien Joey, pero...-
-Yo contestaré, no te preocupes- dijo el rubio un poco agitado
Sonó de nuevo el celular, Joey se alejó un poco para poder contestar la llamada
-¡¿Y ahora qué quieres, cretino?!-
-Espero que eso no haya sido para mí, Wheeler- amenazo el castaño
-Claro... que no, estaba ocupado por eso no contestaba-
-No me interesa, tu decidiste el castigo y por si no ha quedado claro te recuerdo que ¡Tú eres mi esclavo y tu prioridad soy yo no tu pocilga! ¿Quedo claro?-
-"malnacido, quien te crees que eres"-
-Pregunte algo, Wheeler-
-S-sí, quedo claro A-amo, "juro que algún día me vengare, ya veraz cretino"-
-Ya no te necesitare en la oficina, así que te espero en el despacho de mi mansión, Roland irá por ti y espero que puedas "atenderme" adecuadamente-
-¿Adecuadamente?-
-Vaya que eres lento, pulgoso-
-¿Qué has dicho?...diga...diga... ahhh me colgó ese cretino me colgó-
Pasaron un par de horas, y hace poco que un sujeto entro a la cafetería para esperarlo "ese debe de ser Roland". Joey no quería dejar solo a Yugi, esperaría que llegara Yami para poder irse.
Unos minutos más tarde apareció Yami, vestido muy elegante. Esta era su oportunidad de escapar, si llegaba tarde ese castaño seguro lo fastidiaría más.
-Chicos me voy, se divierten-
-Espera Joey, a donde... se fue-
Abordo el auto que te indico Roland y se dirigieron rumbo a la Mansión Kaiba, Joey estaba nervioso, sería la primera vez que va a ese lugar conscientemente. Una vez que llegaron Roland lo llevo y le indico cual era el despacho de Kaiba.
-Sr. Kaiba hemos llegado- Roland abrió la puerta para darle el paso a Joey y pudiera entrar, una vez dentro él cerro la misma para dejar a los dos solos
-En el sofá está el uniforme que te pondrás hoy, no quiero verte con esas pintas de pordiosero-
-Que has... "tranquilo Joey, sólo hazlo y que todo termine" bien- tomo la ropa que estaba sobre el sofá
-Puedes cambiarte por allá- señalo una puerta
-Listo-
El traje estaba un poco ajustado, eran dos piezas de color moka, un pantalón y un chaleco con dos bolsillos en cada lado y una camisa de manga larga color blanco, le daba un toque elegante y juvenil al rubio
-Nada mal, ahora si pareces una persona y no un perro callejero-
Kaiba examinaba con la mirada a Joey, ese color le sentaba muy bien, además de que ese traje con corte para donceles hacia que su cadera y su cintura fuera visible
-...Sólo te me vas a quedar viendo o me dirás para que me hiciste cambiarme-
-Sin modales como siempre-
-...-
-Hoy necesito un buen mesero que pueda servir y darme un buen (recorrió con la mirada al rubio) trago- disimuladamente se relamió el labio inferior
Pasaron varios minutos, un par de tragos, papeleo y un rubio con traje ajustado estaba frente a él, el rubio miraba con atención los libros que estaban acomodados en su despacho, esto lo estaba aburriendo y necesitaba distraerse.
-¿Te gusta lo que ves, Wheeler?-
-¿Ehh?-
-Aghhh... sírveme otro trago y sirve otro para ti-
-¿Qué?... Ah, no, yo no bebo... no soy muy bueno con la bebida- confeso inocentemente el rubio doncel
Y ahí estaba, una oportunidad, una que Kaiba no dejaría pasar
-No fue una pregunta, rubio. Fue una orden, además no creo que pase algo por un simple trago o es que acaso ni eso aguantas-
-Ja, si claro. A mí no me hace nada una simple bebida-
Error, fue un error pensar eso, después de beber de un solo trago su copa sintió un calar recorrer su cuerpo, su garganta ardía y su rostro se sentía caliente, se mareo un poco.
Kaiba no necesito mucho para retarlo (convencerlo) de beber un poco más, cosa a la que el rubio accedió, así pasaron algunos minutos y al parecer el resultado que buscaba Kaiba estaba cerca.
-Vees... si puedo beber y-y sin problema jaja-
-Eso veo rubio, porque no me sirves otra copa- Joey se levantó de donde estaba para acercarse y servirle un trago a Kaiba, se mareo y tropezó cayendo sentado en las piernas de castaño.
-jaja lo siento, es que creo que tembló un poco- Joey quiso levantarse pero fue sujetado por Kaiba. Y es que vaya que el rubio supo caer con estilo, de un sentón puso ese bello trasero justo en el punto clave entre las piernas del castaño
-No te muevas, que podría traer consecuencias-
-E-ehhh pero ya no te voy a servir- dijo el rubio mientras hacia un ligero puchero, sus ojos estaban brillosos y sus mejillas rosadas, simplemente exquisito
-Servirme, claro que puedes pero no alcanzo mi copa así que tendrás que servirme de otra forma-
-¿Otra forma? yo..hip..yo no sé cómo-
-Tú serás mi copa, así que toma un poco de la botella sin derramarlo o beberlo y te acercarás-
-No creo que eso este bien, mejor...hip... tomare de..-
-¿Que no puedes hacer eso?-
-No hay nada que Joey Wheeler no pueda...hip hacer...- el rubio sujeto la botella y con la boca abierta vertió un poco de whisky, bajo un poco la botella y pego más su cuerpo al del castaño
Seto sujeto su rostro y lo inclino lo suficiente para acercarlo a su rostro sin derramar una gota, acerco su boca a la del rubio queriendo beber ese amargo y dulce trago. Sus labios se sellaron y bebió poco a poco lo que el rubio le ofrecía.
Joey se sentía mareado, la cercanía del castaño lo sorprendió pero de alguna forma le gusto y ser su copa no estaba... siendo tan malo. Cuando sintió que ya no quedaba nada que beber se percató que algo estaba jugando con su lengua se sentía bien, muy bien.
Kaiba aprovechó el momento en el que termino de beber su dulce whisky y decidió jugar un poco. Su lengua empezó a recorrer aquella cavidad del rubio quien poco a poco iba dejándose llevar y respondiendo torpemente.
Hacía calor, mucho, demasiado quizás, su corazón se sentía acelerado, le costaba respirar y no podía pensar bien, al parecer se estaba...
-Ahghh...aghhh... y-yo no podía r-respirar- el rubio se apartó jadeando entrecortado mientras intentaba controlar su respiración. Sus ojos estaban un poco cristalinos casi parecían a punto de derramar un par de lágrimas, sus mejillas sonrojadas, sus labios se veían brillosos y deliciosos con ese pequeño hilo de saliva en ellos.
-Wheeler, sírveme otro trago-
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Puff.... esto ya se prendió.... jajajaj 7w7
Me disculpo por actualizar apenas pero he estado ocupada con cosas del trabajo y la universidad.... T-T
Intentare actualizar más seguido, espero que este cap sea de su agrado.