La llamada del secuestro. (RE...

By lauramisteriosa1311

331K 13.7K 1.1K

Finalista de los Premios Watty 2014 en la categoría Misterio/Suspenso: En ascenso <3. La vida de Luk... More

Advertencia/aviso.
La llamada del secuestro.
1)Me he equivocado de número.
2)Me acusan de algo que no hice.
3)¿Están todos locos?
4)La diversión está empezando para mí.
5)La oficina de correos, la floristería y el callejón.
6)Definitivamente mis sospechas son ciertas.
7)Mary está de los nervios.
8)En el cementerio hago una nueva amiga.
9)Mi hermanastro me defiende ante mis padres.
10)¿Verdades a medias? En busca de la pista.
11)Casi todo.
12)Ya han vuelto.
13) ¿Juicio?
14)Primero la nota amenazante...
15) ...luego la desaparición de Rose...
16) ...y finalmente, la mía.
17)¡SOS!
18)Si falto a la fiesta de nochevieja me matan.
19)Me encuentran.
20)Llego justo a tiempo para los preparativos.
21)Todo tiene su lado bonito aunque esté oculto.
23)Nos salvan, preparan una huida y la quinta pista.
24)"El hombre" me toca las narices.
25)Sigo sin amarte.
26)Rose, Mary y yo investigamos.
27)Libertad.
28)Una fuga arriesgada.
29) Una sorpresa inesperada.
30.Quiero que todo esto acabe.
Finalista premios watty 2014.

22)Cada vez me meto en más líos.

6.2K 345 16
By lauramisteriosa1311

22)CADA VEZ ME METO EN MÁS LÍOS.

Lo mío no es conducir. Una vez lo intenté y por poco no tengo un accidente grave. Me da terror conducir y pensar en que algún gilipollas de turno puede chocarse conmigo en algún momento y adiós Emilie. Aunque más miedo me da si tengo compañía a mi lado, porque me preocupo más por su seguridad que por la mía y entonces me pongo más nerviosa. Pero esta vez no me ha quedado más remedio, ya que Rosette no quiere conducir. Le duele el brazo. al parecer se dio un golpe muy fuerte mientras corría hacia mi casa.

—¡Cuidado con ese coche! —alza la voz y hago un giro brusco, rozando un todoterreno que venía directo hacia nosotras—. Sí que debe ser cierto que lo tuyo no es conducir...

—¡No tengo ni el carnet! —hablo, nerviosa, y respiro hondo varias veces—. ¿Por qué crees que fue Josh quién condujo antes de ayer el coche? ¡Él lo tiene y yo no!

—Bueno, estamos cerca, tranquila —dice mientras saca la cabeza por la ventanilla y el viento le remueve el pelo—. Y no vienen coches por ahora que intenten adelantarnos como el todoterreno.

—¿Cerca? ¡¿Cerca?! —alzo la voz—. ¡Más te vale! Me debes un favor muy grande. ¿Sabes qué hora es? La una de la mañana, ¡yo quería dormir un rato!

—¿Por qué? —pregunta, metiendo la cabeza dentro. Echa su asiento para atrás, acomodándose—. ¿Es que vas de escapada romántica, princesa?

—No me van esas cosas —protesto mientras arqueo una ceja, agarrando con fuerza el volante—. Y tampoco me va el rollo de princesa, así que por favor, no lo digas más.

—Entonces vas a quedar con un rollo —ríe y la fulmino con la mirada—. Oh, vale. No es eso. Gira a la izquierda.

—¿Cómo pudieron aguantarte Luke y Toby? —cabeceo y giro hacia la carretera de la izquierda, pasando por chalets.

—¿Cómo sabes que estaba con dos chicos llamados así? —me mira estupefacta y trago saliva ignorándola, pero ella no me va a dejar calladita tan fácilmente—. ¡Respóndeme!

—Porque hablo todas las noches con ellos, bueno, salvo ayer...—murmuro—. Es lo que intenté decirte en la biblioteca sobre "el hombre". Sé quién es por ellos.

La he cagado. No quería que supiera que los conocía por el simple motivo de que ahora me preguntará cómo los conozco, y qué tengo que ver yo con "el hombre". Lo único que yo quería decirle ayer en la biblioteca era que de vez en cuando me llegan notas suyas, nada más.

Me estoy volviendo una bocazas, y eso es un gran problema. Y si se me ha escapado con ella delante... ¿quién me garantiza que no se me va a escapar delante de Mary, o de Adam, o hasta de Josh? Debo de tener más cuidado y estar más atenta a mis palabras.

—Ya me contarás los detalles —responde borde y suspiro.

Tampoco es para ponerse así. La conocí hace dos días. Qué pretende, ¿que le cuente todo? ¡Si ni lo sabe mi mejor amiga!

Rose me hace un gesto para que pare y me sorprende gratamente.

—Pero si no hay nada...

—Para.

Le hago caso resignada y paramos en medio de la nada. Estamos totalmente a oscuras, en medio de un bosque –fuera de la ciudad –y me ha dicho que pare aquí.

¿En serio? ¡¿Aquí es dónde está su hermano!? Manda cojones.

Rosette baja las ventanillas y se asoma. Mira a todos lados, se aclara la garganta y empieza a gritar a pleno pulmón el nombre de su hermano; Noel. Me tapo los oídos ya que su voz al chillar es tan irritante y aguda que parece que los tímpanos van a estallar dentro de nada. Con lo dulce y melodiosa que es su voz, ¿cómo puede pasar de ser dulce a... horripilante en cuestión de medio segundo? Lo gracioso es, quizá, que aguanta medio minuto con el mismo tono sin cesar a coger aire. Es como si estuviera preparada para hacer estas cosas.

Pero después de cinco minutos por fin tanto vociferar sirve de algo. Un chico igual que Rosette físicamente salta de un árbol de tres metros sin hacerse ningún rasguño –como si lo hubieran preparado en el ejército, con la misma maestría –y se lleva las manos a su pelo rubio platino. Se lo pone bien y va andando, tranquilo, hasta la ventanilla del copiloto. A medida que se acerca voy comprobando que es musculoso y que además, es de la misma estatura que Rose –que es más alta que yo –por lo que calculo que también tiene que tener nuestra edad.

—¿Cuántas veces te he dicho que no vayas saltando de árbol en árbol? —dice mientras le quita una hoja del pelo—. Ponte detrás, hoy dormimos aquí.

—¿Perdona? —decimos los dos a la vez.

Tiene una voz muy grave y nada melodiosa y dulce como la de su hermana. Me mira con sus ojos grises y me analiza con la mirada. Luego, suelta un bufido y abre la puerta de atrás, la cierra de un golpetazo y se tumba quitándose los zapatos.

—¡Oye, podrías tener más cuidado! Que este coche es de mi hermanastro —digo, enfadada por el portazo.

—Lo siento —responde seco y cierra los ojos.

Al cabo de un segundo ya está roncando. Miro a Rose y se encoge de hombros.

—Deberíamos dormir. Ambas estamos cansadas.

—Está bien —digo, totalmente conforme, y echo un poco el asiento para atrás, justo como hizo Rose antes. Saco mi móvil y pongo el despertador—, pero a las cuatro os estoy dejando en algún lugar.

No responde y me da la espalda tumbándose de lado. Apago el motor y quito las llaves, pero antes pongo el seguro y cierro los ojos. Se me hace raro dormir en un coche que literalmente, he robado, y más pensando en que dentro de tres horas o menos ya tengo que estar despierta. Menuda mierda de noche. Y por desgracia ya me imagino cómo se pondrá conmigo Josh cuando descubra que su coche falta... –si no lo ha descubierto ya, claro –. Me la va a devolver con creces. Con suerte, si sueno muy convincente, me perdonará.

Al final me quedo dormida, pero antes de hacerlo escucho la hierba crujir, los pájaros volar, el viento soplar leve y las respiraciones de Rose y su hermano.

--------------------✉--------------------

El móvil empieza a sonar aumentando el sonido cada pitido y gruño. Me tumbo boca arriba medio adormilada y saco el móvil del bolsillo, apagando la alarma. Mis otros dos acompañantes sueltan un bostezo largo y veo a Rosette girarse mientras yo también bostezo.

Quiero dormir más. Mi mente y mi cuerpo me lo piden, pero el hermano de Rose –que es quién está más espabilado de los tres –pone su boca en mi oreja, y sopla fuerte, espabilándome totalmente. Le miro sin saber si agradecérselo o replicarle, pero al final me quedo callada. Pongo bien mi asiento y me froto los ojos. Rose hace lo mismo que yo y su hermano se sienta, acomodándose mientras baja la ventanilla.

—¿A dónde os llevo?

—No hay tiempo. Has quedado a las cuatro y media, ¿no? Pues son y cuarto y aún queda rato para llegar a casa de tu amiga —dice Rose con tono adormilado—. Te has puesto el despertador un poco tarde...

—Mierda —bufo, y enciendo el motor—. Puse mal el despertador... Tendréis que venir conmigo, ya le diré alguna mentira a Mary. Además, nos serviréis de ayuda.

—¿Para? —pregunta Noel, que ha sacado su móvil para, seguramente, ver mensajes.

—Ya lo veréis. Supongo que tú también estás metido en este asunto si estabas en un bosque donde no hay... nada, solo, esperando a tu hermana. En marcha.

Y mientras conduzco para dirigirme a casa de Mary, pienso. Pienso todo lo que el sueño me permite. En las notas de "el acosador" a veces se me menciona, y "el hombre" implica a Rose en esto. Vamos, es una cadena. Secuestra a Luke, "el acosador" se puso de acuerdo con "el hombre", quién debe de ser su amigo, para que le ayudara a elegir a alguien como su "séptima víctima" y este eligió a Mary. Luego voy yo, descubro lo de Luke, "el hombre" intenta culparme y conozco a Rose, quién anteriormente estaba siendo acosada también por él, y la secuestran pero escapa y viene en mi busca. Tiene sentido. Todos de alguna forma u otra estamos metidos en el mismo saco. Cómo me gustaría ser Josh, o Adam, quiénes al parecer no tienen nada que ver con esto...

"Si algo es muy lioso, si se unen las piezas del rompecabezas se acaba completando el enigma". O eso diría mi padre si siguiera vivo. Y poco a poco lo estoy resolviendo, aunque me siento como si en realidad no avanzara nada. Luke sigue encerrado con Toby. A mí me siguen culpando de cosas que no he hecho. Mi madre en tres días –ya dos, teniendo en cuenta que es de madrugada –me quiere llevar a España para ver de nuevo al psicólogo. Incluso mi relación con Adam no avanza, es más, cada vez se me hace más raro pensar en el cómo mi novio, pero eso es algo que me he callado. Le noto seco, no está a mi lado como un novio debería estarlo, y... no parece él. No parece mi mejor amigo. No parece el mejor amigo de Mary.

Aunque prefiero no darle vueltas al tema.

Solo espero que encontremos el cuarto lugar hoy. No me gustaría volver a colarme en algún lugar con gente mirándome, ya que las noticias aquí corren como la pólvora, a pesar de ser una ciudad muy grande.

--------------------✉--------------------

Llegamos milagrosamente a casa de Mary –mientras pensaba en todo eso, he estado a punto de chocarme más de seis veces con coches o camiones –y pito el claxon, saliendo una Mary cabreada de su casa y haciéndome un gesto en señal de que pare, de que voy a despertar a sus padres. Lo hago y no puedo evitar sonreír leve. Salgo de la zona del conductor y me pongo detrás, junto a Noel. Mary ocupa mi puesto y pone una mueca mientras mira a Rose y a Noel.

—¿Quiénes son estos? ¿Y por qué conducías tú si no sabes?

—Porque a Rose le duele el brazo—la señalo—. Se dio un golpe muy fuerte. Y bueno, él es su hermano, Noel.

—¿Qué hacen aquí? —pregunta, desconfiada.

—He tomado una decisión...—digo, mirándola a sus ojos azules, y ella arruga la frente sin entender. Hago un gesto con la mano indicándole que luego le explico.

Solamente espero no equivocarme.

Le voy a contar todo, y entre Rose, Mary y yo vamos a intentar unir las piezas más fácilmente, pero primero tengo que contárselo a Mary a solas, vaya a ser que no quiera...

—Bueno —responde, encogiéndose de hombros.

Arranca el motor y nos vamos en dirección al centro comercial.

--------------------✉--------------------

Cuando llegamos y Mary aparca en el extenso parking exterior del centro comercial, Noel, Rosette, ella y yo nos bajamos para contemplarlo. Normalmente hasta las diez tiene todas las luces encendidas, pero ahora está a oscuras y nuestro coche es el único que hay aparcado.

Miro para arriba. Gracias a Dios solamente tiene una planta más la normal, así que podremos hacer justo lo que hago siempre; trepar. Es fácil, y como he podido comprobar Rosette y el hermano tienen buena condición física y saben hacer estas cosas. Mary ya sé que puede hacerlo.

—Espero que nos expliques qué hacemos aquí —dice Rosette cruzándose de brazos.

—Nos tenemos que colar ahí dentro.

—¿Por qué? —se mete de por medio Noel.

Le miro con suficiencia.

—Ya te lo contará tu hermana cuando se lo diga.

Mary me mira abriendo mucho los ojos, y recuerdo entonces que "el secuestrador" dijo que solamente podíamos ayudarla dos personas, que somos casualmente Adam y yo. Mierda. No pueden ayudarnos.

Les miro y carraspeo.

—Bueno, vosotros dos os vais a quedar aquí, en el coche, durmiendo o lo que queráis.

—¿En serio? Dijimos que te serviríamos de ayuda —dice Noel, serio.

Seguramente es de esos a los que le encanta ayudar, y cuando no se lo permiten se cabrea; metomentodo.

—Pero me he acordado de una cosa y no... Dormid, anda. Vigilad el coche por mí. Vendremos antes de que amanezca.

—Pues daros prisa. Son las cinco menos diez y amanece en menos de una hora —dice Rose señalando su reloj mientras entra en el coche—. Toma tu cuerda —me la lanza y no puedo evitar poner una mueca. Ella me guiña un ojo—. Trepé con mi cuerda. Idos ya, venga.

No le respondo. Cojo a Mary del brazo y tiro de ella hasta un rincón del centro comercial. Enrollo la cuerda como si fuera una vaquera y la engancho a un palo. La tenso para asegurarme de que está bien amarrada y le digo a Mary que trepe ella primero.

--------------------✉--------------------

En diez minutos estamos junto la tienda de chocolatinas y Stradivuarius. O bueno, casi, ya que hay un pequeño gran problema. Entre esas dos tiendas no hay otra tienda por la que podamos buscar un pasadizo, y si en la nota dice que tiremos por el pasadizo que hay entre esas dos tiendas, será por algo.

Empiezo a discutir con Mary, replicándole que ya que sabe ella todo lo que hay que hacer, que me sorprenda. A no ser que haya una tercera persona de más ayudándola y nos joda a todos. Pone mala cara y antes de que llegue a las manos saca un libro.

Lo miro atenta y se lo quito de las manos para leer toda la información que hay ahí escrita por diferentes personas. Lo leo todo rápidamente y luego le tiendo el libro.

—Tus abuelos llegaron al cuarto lugar por éste motivo. Súbete a mis brazos —me agacho para que se suba.

—¿Para?

—Hazlo, joder.

Lo hace y me incorporo costosamente. Llevo mis manos a sus pies y la sujeto como puedo.

—Bien... Ahora tantea con las manos el techo y encuentra una trampilla oculta.

Lo hace, temblorosa. Pero no por miedo, sino porque yo me muevo de vez en cuando debido a su peso. Para ser delgada, pesa demasiado.

Al cabo de un rato demasiado largo para mí y para mis fuerzas, ya que sigo cansada por haber dormido poquísimo, la encuentra, la abre, se cuelga de ella y se sube. Ni una palabra, ni siquiera una mirada. Se ha adentrado sola. Frunzo el ceño y doy saltos para intentar agarrarme al filo, pero al ser bajita no lo consigo.

Mierda.

Miro mi reloj y veo que a lo loco y a lo tonto son las cinco y cuarto.

Pasa el tiempo y Mary no da señales de vida, por lo que empiezo a preocuparme.

¿Qué está haciendo? ¿Por qué tarda tanto? ¿Le habrá pasado algo?

—¿Mary? —alzo la voz llamándola, aunque no obtengo respuesta.

En cambio, sí que escucho ruidos procedentes del interior de la tienda de chocolatinas. Pego mi oído corriendo para intentar descubrir qué es ese sonido. Es como si alguien estuviera abriendo los envoltorios para comerse el chocolate gratis. Pongo una mueca. No estoy segura de sí será Mary o no, pero como lo sea y no me haya dado, se entera. Porque estoy hambrienta.

Escucho pasos en el piso de abajo –ya que estamos en la segunda planta, porque entramos desde la azotea –y una mueca de horror asoma en mi cara. Aporreo flojito la puerta de la tienda para darle a entender a Mary, si es ella, que necesito que salga ya.

Veo una silueta rubia al fondo de la tienda y abre la puerta de una patada, rompiendo los cristales. Pongo una mueca de horror al escuchar voces al fondo y Mary al ponerse a mi lado me da dos tabletas de chocolate Nestlé.

—¿Qué cojones hacías? —digo cogiéndolos y guardándomelos en el bolsillo.

—Tengo la quinta nota, ¡vámonos!

Empezamos a correr hasta el final del pasillo, donde se supone que están las escaleras para subir a la azotea con la puerta cerrada –la cuál hemos abierto para colarnos con una gran facilidad –y entonces es cuando ambas nos damos cuenta de que nunca hemos estado solas. Dos policías corren hablando por la radio, y le escucho a uno gritar "¡Cambio y corto señor!"

—Rápido, abre la puerta —susurra Mary mientas come chocolate y pongo una mueca.

¿Cómo puede comer chocolate ahora? Lo que no necesito es que nos pille la policía.

La abro de un empujón y corremos hasta donde está la cuerda, pero entonces, a lo lejos, vemos que el coche de mi hermanastro está rodeado de policías y a Rosette y Noel les agarran seis policías –dos a Rosette y cuatro a Noel. Sí que tiene que tener fuerza el chaval –y que la cuerda no está. Mary se lleva las manos a la cabeza guardando el chocolate y yo hago lo único que puedo hacer antes de que venga lo inevitable, comer chocolate. Mary me mira en plan, "¿qué haces?" y le replico con ganas.

—¿Qué? Tengo hambre, y tú llevas haciéndolo todo el camino.

Luego, los dos policías llegan y nos agarran con fuerza, levantándonos a ambas como si fuéramos un saco de patatas y Mary le golpea con los puños la espalda a uno, mientras yo, resignada, sigo comiendo chocolate ya que no me lo ha sacado de las manos.

—Mi amigo dijo en la nota que os lo tendríais que currar para colaros aquí con éxito —me susurra el policía mientras baja las escaleras conmigo a peso—. Princesa, te has metido en un buen lío. A mi otro amigo le va a encantar.

Le doy un puñetazo en la mandíbula que le hace perder el equilibrio pero no me suelta, y de refilón veo cómo sonríe, victorioso. Este policía es amigo de "el hombre" y de "el acosador", está claro, ¿no? Por lo de sus dos amigos.

Mierda, mierda y más mierda. ¿Ahora qué voy a hacer? Y por encima he metido en un lío a Rose y a Noel.

Esto no tenía que haber pasado. Era una trampa, pero si Mary dice tener la nota... quizá no haya sido tan malo venir aquí.


Continue Reading

You'll Also Like

4.7M 531K 57
↬Cuando te vi, una parte de mi dijo: "Es hermosa" y la otra se imaginó cómo te verías amarrada a una silla con los ojos y la boca vendados, luchando...
23.3K 1.7K 38
después de lo ocurrido en la mina MC , queda en shock respecto a lo que se entera por otro lado los chicos exigen muchas cosas a MC , pero una person...
1.5K 511 26
La historia del Sexy banquero Xiao Zhan, graduado de banca internacional, quien vuelve a casa para tomar el puesto de Gerente General del Banco de cr...
1.3M 62.3K 66
La asesinaron un 23 de octubre, y desde entonces todos se preguntan: ¿Qué le pasó a Elizabeth Parker? Venus, la protagonista, tras el reciente asesi...