- E-espera...
- No te muevas Yami
Noté las manos del chico rubio pasar por debajo de mi camiseta, eran cálidas y suaves, me estaba acariciando posesivamente y eso me hacía sentir deseado e impaciente
Alcanzó mi pecho y sin aviso pellizcó uno de los dos botones rosados que por primera vez descubrí que eran tan sensibles, eso me arrancó un gemido
No puedo creerlo, ¿cómo hemos llegado a estar tan cerca?
Los ojos color rubí de Katsuki me miraron fijamente, quedé preso de su mirada incapaz de decir nada, yo estaba nervioso pero no quería huir de él
Entonces comenzó a acercarse y sabía que me iba a besar, nuestros labios por fin se juntarían, lo deseaba tanto que no me iba a negar
Cerré los ojos con fuerza y en ese momento escuché algo que me alarmó: el sonido de una cremallera
Suena como si se fuera a quitar los pantalones ¿¿De verdad vamos a llegar tan lejos??
- E-ESPERA KACCHAN!
Alargué la mano para pararlo y abrí los ojos encontrándome solo en mi habitación. La única respuesta que obtuve fue la del despertador que me estaba dando los buenos días y me di cuenta de que todo había sido un sueño
Me costó unos segundos reaccionar, la cama a mi alrededor estaba hecha un lío y yo dentro. Paré el despertador y miré la hora: tenia justo para levantarme, tomar una ducha y vestirme
Me quedé sentado reflexionando que acababa de ver, ese sueño tan vergonzoso y mi primer movimiento al recordar la escena fue mirar con asombro debajo de la manta y como supuse, estaba empalmado
Realmente estoy enfermo.....
Sentía que mi cara ardía en señal de vergüenza así que no esperé ni un segundo más y me puse en pie, corrí al baño y me di una ducha de agua fría
Incapaz de evitarlo no dejaba de pensar en el sueño, estaba confuso y mis sentimientos se habían hecho una bola que no paraba de girar dentro del pecho
Era la primera vez que me ocurría algo como eso, un sueño así, incluso un pensamiento era impensable. Era cierto que había visto alguna escena de contenido x pero para nada me ponía, al contrario, no sentía nada. Incluso no sé como el tema salió una vez en mi casa (supongo que mi padre sería el responsable de hablar sobre ello) y hasta mi madre me miró con cara de sorpresa cuando aseguré no ver ese tipo de cosas en internet. Mi padre por su parte se burló y en lugar de llamarme nenaza como hacía siempre solo dijo que era un bicho raro y que seguro que había salido defectuoso, asexual o como según dice él: estupidas personas que lo que les hace falta es un polvo para saber lo que les gusta
Pero desde que conocí a Katsuki ya nada se sentía igual, era como si estuviera descubriendo una nueva parte de mí
¿En algún momento me atrayeron las chicas? ¿Realmente me gustan los chicos o es solo Katsuki el que me ha gustado?
Me hacia todas esas preguntas mientras terminaba de ponerme la ropa
Por el camino mis pensamientos poco a poco fueron cambiando de tema, dejando a un lado aquel sueño ficticio y me centré en el mundo real
Pensé en el encuentro con Katsuki, su voz, su mirada que se fijó en mi varias veces, las emociones desconocidas que vi en sus ojos, su preocupación por haberme visto triste, una vez más quería saber sobre él, quería conocerle, que me contara todo lo que le preocupaba, saber que escuchaba
Quería saberlo todo
Cada vez estaba más seguro: Katsuki me gustaba. Mi madre tenía razón, me había enamorado y no había puesto impedimentos. Tan solo me sentía inseguro, pero eso no evitaba que soñara con acercarme más a él, me preguntaba como sería que yo le gustase
Pero sobretodo deseaba haber continuado aquel sueño
¿Cómo se sentirá el tacto de sus labios?
¿Sus manos son tan suaves como las sentí?
Me detuve, había llegado a mi usual posición, justo tras el muro que me separaba del instituto y de Katsuki
Como bien tenía calculado, él se aproximó pocos minutos después y yo le continué mirando a hurtadillas como días atrás, mentiría si dijera que no lo echaba de menos
Narra Katsuki
Desde el encuentro con aquel chico, Yami, no dejé de darle vueltas a mi forma de vida, me sentía responsable por mi maldito comportamiento que llevó a Sero a terminar en cama. Algo debía cambiar, no estaba bien, no era capaz de domar mis emociones
Cuando Yami se fue no lo culpé por ello, estaba acostumbrado a que todo el mundo se fuera, ya que yo era el responsable de que nadie quisiera estar ahí. Pero, ¿de que servía alejarlos a todos si acabaría dañándolos por falta de autocontrol?
Por un momento algo me empujó a dar un cambio, quizás llevaría tiempo, pero quería hacerlo
Será lo mejor para mí y para ella
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Un día más me levanté, llevaba despierto desde que amaneció, castigado por todos los aquellos pensamientos que no me dejaban descansar
¿Por dónde debería empezar?
Miré el cuarto y decidí que una buena idea como comienzo sería ordenarlo, pero lo haría en la tarde
Tomé el camino al baño, me miré al espejo y advertí unas ténues ojeras bajo unos ojos cansados que adornaban un rostro vacío. Incluso con ese aspecto apagado seguía viéndome intimidante, no sabía si ese caracter nació conmigo o si el paso del tiempo y la experiencia habían formado esa faceta que me acompañaba a todos lados. Fruncí el ceño, otra manía, sabía que no se iría tan fácil pero quería probar hasta que punto era capaz de controlar malos hábitos, así que me relajé suavizando la expresión
Antes de salir de casa cogí la ropa sucia y la deposité en la lavadora, pronto comenzó a dar vueltas aportando un sonido sordo a la que era una habitual silenciosa vivienda
Cuando vuelva me encargaré de esto
Con el propósito de un cambio drástico salí por la puerta, miré los auriculares y los coloqué en su lugar correspondiente y encendí el reproductor. No quería apartarme de esa rutina auditiva, todavía no estaba preparado
Narra Yami
Entré en el aula rodeado por el habitual barullo de mi ruidosa clase y fui a mi lugar, el cual había "elegido" cuando comenzó el curso
Mi mirada se posó rápidamente en Katsuki, disimuladamente vi como se acercaba a su mesa, ese era el único instante en el que podía ver su cara ya que durante las clases le tenía de espaldas a mí
Noté algo diferente en él, se veía cansado y distraído
¿Se habrá ofenfido por mi pasada huída? No, seguro que algo más le preocupa
Llegó la hora de descanso y tomando la pizca de voluntad que tenía me uní al grupo de chicos que Sero me había presentado
- Hey Yami~ Ayer no te vimos el pelo - Denki fue el primero en recibirme
- T-tenía algo que hacer - me escusé
- Me alegra que te animes a venir con nosotros - Kirishima me dedicó una sonrisa
Rápidamente me sentí integrado y las inseguridades desaparecieron. Pasados unos minutos parecía haber despertado de un trance cuando al levantar la cabeza vi a Katsuki
Es extraño verle pasar por aquí
Se detuvo en una mesa vacía y se sentó dejando la mochila sobre ella, después se apoyó encima. Entonces algo se encendió dentro de mí
¿Katsuki no tiene un grupo o simplemente prefiere estar solo?
Se suponía que Kirishima era su amigo a pesar de las diferencias que habían tenido, así que no entendía por qué no se juntaban. Recordé que Sero quería hablar con él y animarlo a venir con nosotros pero eso fue antes de que tuviera que irse a casa durante una temporada
Tomé una decisión y me puse de pie. Caminé con paso decidido hacia la solitaria mesa y hablé(un poco menos nervioso de lo que creía que sonaría)
- ¿Quieres venir a nuestro grupo?
El rubio levantó la vista y me observó sorprendido con esos ojos que me derretían. Después miró hacia la mesa de los chicos
- Dudo que quieran que me una
- D-dame un momento para preguntar
Regresé con ellos y me miraron con curiosidad
- ¿Cooooooomo?¿Katsuki uniéndose a nosotros? - Mineta se echó a reír
- Oe no te rías -le regañó Kirishima y después me miró- dudo que quiera venir...
- ¿Aún así os importaría si lo hiciera? -insistí
Se miraron entre ellos y al final accedieron. Yo me giré y observé que Katsuki me miraba así que le hice un gesto para que se acercara. Al momento vino y se sentó tras saludar
Los minutos pasaron tranquilamente, yo estaba en silencio analizando la situación hasta que el chico pelimorado habló
- Oye, Katsuki ¿tienes algún hobbie? A parte de buscar pelea y dejar inválidos a inocentes
La pregunta que en un principio sonaba tan inocente se tornó una llena de burla y rencor
El chico rubio de quien todos esperaban un reacción conflictiva se puso de pie, agarró su mochila y se comenzó a alejar sin defenderse
- ¡Katsuki se arrepintió y pidió disculpas!
No sé en que momento me había levantado, pero el golpe que di en la mesa con ambas manos sorprendió a todos, incluso Katsuki se detuvo
- ¿Yami qué...? - no le di oportunidad de seguir
- ¡Él en ningún momento quiso herir a Sero y yo soy testigo de que él fue a visitarle y se diculpó incluso con su familia y conmigo! -cerré los puños con fuerza- Es cierto que él comenzó la pelea con Kirishima pero sé que tuvo sus razones que por no ser escusa también se disculpó con él y NO ES JUSTO QUE SIN TENER IDEA DE NADA LE JUZGUES Y TE METAS CON ÉL CUANDO SE SUPONE QUE LE HEMOS DADO UNA OPORTUNIDAD PARA SENTARSE CON NOSOTROS
Todos estaban sin palabras, nadie se esperaba una reacción así de alguien como yo y nisiquiera les di tiempo para reaccionar porque cojí mi mochila y salí corriendo de allí pasando por delante de Katsuki y sin mirar cual era su expresión
Me sentía frustrado y ofendido por lo que Mineta había dicho, además estaba seguro de que si Sero hubiese estado allí tampoco habría permitido que se metieran con él
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Llegó la tarde y algo nervioso fui de visita a casa del pelinegro
- In-cre-i-ble -exclamó
- N-no fue para tanto...
- ¿Es una broma? !Ni yo lo habría hecho tan bien! -su mirada estaba llena de admiración- Yami, eres un amigo increíble
- No estoy seguro de si él me considera su amigo...
- Eso nunca se sabe, tuviste el valor de hablarle y quisiste unirlo al grupo para que no se sintiera solo, solo falta que os habléis más a menudo y podríais ser grandes amigos
Amigos...ser amigo de Katsuki, eso era lo que quería en un principio, aunque ahora mis sentimientos eran otros
- Sero...
-Dime
- Hay algo que quería decirte...e-es un secreto
- ¡Cuenta conmigo, soy una tumba! ¿De que se trata?
-Verás...m...me gusta Katsuki
Jugueteé con un mechón de mi flequillo muy avergonzado esperando su reacción
- ¿Enserio? Vaya, eso lo cambia todo jeje -me abrazó- ¡Pienso apoyarte de la mejor forma que pueda!
Me miró con una agradable sonrisa que casi hizo que me emocionara pero solo pude reirme
- Tú si que eres un buen amigo, Sero
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Lectura del diario
[Y esa es la historia de como me quedé sin grupo]
Eso fue lo último que escribí después de relatar todo lo que había pasado en el almuerzo. Realmente pensaba que no querrían volver a juntarse conmigo, que Mineta me odiaría y que todos se pondrían de su lado y seguirían pensando que Katsuki era un monstruo o algo por el estilo
[Le confesé a Sero mis sentimientos por Katsuki y me dio ánimos, él realmente cree en mí y piensa que soy un buen amigo. Yo tan solo hice lo mismo que el habría hecho]
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Fin del capítulo
Gracias por leer <3