Narra eli:
Llegamos a Houston y nos hospedamos en un motel como de costumbre
-bien-dijo Dean acomodándose la corbata frente al espejo que decoraba la habitación-Thomas y yo iremos a hablar con los guardabosques y ustedes-nos hecho una mirada- van a revisar el perímetro.
-Sí, esta bien-dijo Sam tomando mi mano
-¿Iremos todos juntos?-pregunté curiosa
-si, sólo que ustedes bajarán unos cuantos kilómetros antes, tenemos que disimular.-explicó
-oh-dijo Thomas con tono de voz sugerente-los puedo hacer aparecer
-eso no lo había pensado-admitió el mayor
-¡Vamos!-dijo Sam al ver que todos estábamos listos.
Salimos hacia el auto con dirección al bosque.
Al llegar Thomas apoyó sus manos en nuestros hombros y en menos de un segundo nos encontrabamos entre los árboles -¡Uf! esto de aparecerse es tedioso-murmuró el castaño
-oh vamos, nos facilitó el camino-sonreí
-tienes razón-dijo sacando del bolso verde de lona que siempre cargaban para los casos, dos bengalas, me pasó una.-el fuego mata a los wendigos-me explicó, mientras sujetaba mi otra mano y comenzabamos a caminar.
Habíamos estado más de una hora revisando y hasta ahora habíamos encontrado arañazos en un par de arboles, sin mencionar uno que otro artefacto de la familia roto.
-estoy cansada-me dejé caer a los pies de un árbol
-que exagerada-dijo divertido-vamos,recorremos un poco más y te prometo que nos volveremos con Dean y Thomas-prometió tendiendome la mano, lo miré unos segundos antes de sujetarla e impulsarme hacia arriba-¡Así me gusta!
-¡Ey!, ¿Qué haces?-pregunté al ver que comenzó a caminar-me debes algo-lo miré pícara
-¿Y qué es lo que te debo?-preguntó con una sonrisa
-¡Un beso!-mordí mi labio inferior
-ven aquí-dijo tirando de nuestras manos para luego besarme.
Seguimos caminando un buen rato hasta que dimos con una especie de cueva.
-¿Crees que este lugar tenga que ver con el Wendigo?-pregunté con mi vista clavada en la entrada del lugar
-estoy seguro de que este es su refugio-dijo mirando en la misma dirección que yo.-será mejor que volvamos.-decidió
Íbamos tranquilos aunque atentos, ya nos faltaba poco para salir del bosque, cuando escuchamos un ruido, nos pusimos alerta mirando hacia todos lados
-¿Oíste eso?-pregunté un poco asustada
-Sí, sólo mantente tranquila-murmuró
El sonido de una rama partiéndose se oyó a nuestras espaldas provocando que giráramos bruscamente apuntando al intruso
-¡Maldición!-exclamó Dean con ambas manos en alto-somos nosotros-suspiramos tranquilos, Sam le envió una mirada fulminante a su hermano
-idiota-dijo molesto-nos asustaste
-lo siento-se disculpó
-¿Encontraron algo?-preguntó Thomas.
-Sí, de hecho ya sabemos en donde esta el refugio del Wendigo-respondió Ssm
-genial, eso nos facilita las cosas-dijo Dean mirando a su alrededor-¿Les parece volver?, muero de hambre.
-estoy contigo Dean-o-dije con una pequeña sonrisa
Salimos de ahí y nos encaminamos al hermoso impala que se encontraba estacionado a las afueras del bosque.
De camino al motel compramos comida
-¡Ey!, Thommy es de los míos-dijo Dean alegre mirando la hamburguesa del rubio
-si Dean lo que digas-dijo Sam
-okey, ya entendí-rodó los ojos
....
Ya era de noche, pasada las doce, cuando llegamos al bosque todos teníamos una linterna, pero sólo Sam y Dean portaban una bengala, por lo que Thommy y yo usamos un arma
-¿Seguro que es por aquí?-preguntó Dean alumbrando uno de los árboles
-si, es por aquí-el castaño señaló con la luz un tronco con una arañazo procedente de la criatura que estábamos cazando.
Unos cuantos pasos más y ya estabamos frente a la cueva
-bueno, haber-mi cuñado se volteó para vernos a todos-Sam, tú y yo vamos a entrar, ustedes dos quédense aquí.
-no, yo voy con ustedes-dije sujetando la mano de Sam
-no, amor necesito que te quedes-sujetó mi rostro con sus manos-no me perdonaría si algo te pasa o a Thommy, lo vamos a hacer nosotros solos-junto nuestros labios en un beso, al separarnos acarició mi mejilla para luego ir dónde el rubio y abrazarlo, murmuró algo a su oído antes de volver con Dean.
Entraron a la cueva, los seguí con la mirada hasta que ya no pude verlos.
-esto es estúpido-dije mirando alrededor- deberíamos estar ahí adentro-miré la cueva
-no, es mejor estar aquí-dijo Thommy,
De repente se escucharon pisadas rápidas, los hermanos salieron un poco golpeado.
-¡Vamos!-dijo Sam tomando mi mano, para poder correr, una cosa negra paso velozmente a nuestro lado y perdí el equilibrio tirando mi arma, la cosa se paró frente a nosotros, era una horrible no parecía que eso hubiera sido una persona, se acercó a mi arma y la sujetó apuntandonos, Thomas corrió hacia el wendigo para posarse a su lado y apoyar su mano en su cuerpo provocando que comenzara arder, no sin antes que un disparo de escuchara, giré sintiendo el afloje de la mano de Sam, tapé mi boca mirándolo había recibido un disparo
-¡No!-dije acercándome a él, había caído por el dolor-¿Sammy?-pregunté acariciando su mejilla-¡Dean has algo!-pedí viendo a mi cuñado
-Thomas ¿Tú puedes curarlo?-preguntó mi cuñado
-si-se agachó y apoyó la mano en la herida, pero nada pasó, frunció el ceño-que raro, nunca había pasado esto.
-¿Y ahora?-pregunté.
-voy a quitar la bala-respondió Dean para luego tomar del bolso el botiquín, tomó un rollo de gaza-muerde.-ordenó y Sam obedeció, levanté la camisa para facilitar el trabajo, se me formó un nudo en el estómago al ver la herida, Dean agarró alcohol y unas pinzas para luego extraer la bala, ya listo lo vendamos y ayudamos a que se parara para poder avanzar
-¿Estás bien?-pregunté
-lo estoy-murmuró con dolor-al menos por ahora.
Caminamos un poco más , el problema es que había que parar por que Sam comenzaba a sentir dolor
-debemos buscar un lugar para pasar la noche, quizás deberíamos hacer una fogata y dormir en el suelo-sugirió Thomas
-no creo que sea bueno para Sam-dije mirando el susodicho
-¡Miren!-Dean llamó nuestra atención a su izquierda se veía una vieja cabaña, llegamos y entramos, el lugar obviamente no estaba en buenas condiciones, pero encontramos un par de faroles que encendimos, luego de acomodar a Sam para que estuviera cómodo, me fijé que su venda ya estaba manchada demasiado, perdía sangre.
-Sam, no quiero perderte-admití tomando su mano que no se encontraba presionando la herida
-no lo harás, lo prometo-apretó el agarre
-¡Te amo!-dije para luego besarlo
-¡Yo también te amo!-sonrió debil.
...
Narra Thomas:
-¿Mamá puedo ver a papá?-pregunté
-¿Estás seguro?-asentí-uh... ¡Está bien!, solo iré a acostar a Bella y vamos-dijo tomando la mano de mi hermanita, bajé las escaleras hasta llegar al ante último escalón y me senté a esperar con mis codos en las piernas mientras sostenía mi cabeza con las manos, suspiré mirando la puerta principal.
Mi madre no tardó en aparecer tras de mi, me pare tomando su mano para luego ir al living, en el sillón se encontraba mi papá, con todo lo que pasó no lo noté.Me solté de mi mamá y con pasos tímidos me acerqué hasta el mueble, mis ojos se llenaron de lágrimas, no aguante por lo que lo abracé mientras dejaba salir todo el dolor que sentía, pensé en que quería tenerlo de vuelta en que desearía poder revivirlo, solté un fuerte sollozo al tiempo que sentía a mi mamá tomarme desde atrás , me volteé abrazandola.
-¿Por qué se fue, mamá?-pregunté entre hipidos.
-por un estúpido demonio-murmuró
-¿Qué?-me separé un poco para verle el rostro
-nada, solo decía que no lo sé-limpió mis mejillas-¿Vamos a la cama?-preguntó con una pequeña sonrisa triste
-esta bien-dije desanimado,giré a ver a mi papá para darle un último abrazo.
-¿Quieres dormir conmigo?-preguntó tomando mi mano luego de separarme del cuerpo de mi papá, asentí, rascando uno de mis ojos,estaba muerto de sueño.
Al otro día me desperté encontrandome en un lugar que no era mi habitación, fruncí el ceño pensando como llegué aquí, hasta que lo recordé, todo lo pasado ayer me golpeó con fuerza, me levanté echándole una última mirada a mi mamá que se encontraba durmiendo, antes de bajar las escaleras, llegué al living y me llevé una gran sorpresa al no encontrar el cuerpo de mi papá en el sillón, escuché un ruido en la cocina y con mucho cuidado de no hacer ruido fui hasta aquella habitación, me asomé, mís ojos se abrieron más de lo normal al ver a mi papá preparando el desayuno, estaba vivo.
-¡¡¡Papá!!!-grité feliz corriendo hacia él, me tomó en el vuelo alzandome, lo abracé muy fuerte.
-¡Ey!¿Campeón por qué tanta alegría?-preguntó separándome un poco de él
-¡Estás vivo!-sonreí
-si, eso parece-dijo confundido
-¿No recuerdas lo que pasó, anoche?-pregunté
-pues si, pero... -me miró unos minutos-no importa
-vamos con mamá y Bella, de seguro estarán felices de verte-estaba muy emocionado
-¿Sam?-giramos encontrando a mi mamá en la cocina con Bella en brazos
-¡Papi!-dijo mi hermanita feliz
-¿Estás bien?-preguntó acercándose a nosotros
-¡Lo estoy!-afirmó
-¡Abrazo!-dije rodeando a mi mamá y a mi papá con mis brazos.
-¡Thommy!-miré a mi mama
-¿Qué pasó?-pregunté mirando a mi papá que se encontraba acostado en un viejo colchón
-no lo sé... te dormiste, pero estabas llorando-acarició mis mejillas, la miré unos segundos para luego abrazarla, ella me correspondió casi al momento
-esta bien-murmuró tranquilizandome
-ya pasó esto una vez, creo que Crowley y sus secuaces lo mataron-expliqué al separarnos-pero pude revivirlo
-¿Y por qué no pudiste ahora?
-no lo sé-dije sinceramente