Un día.
Un día entero.
Desde que Luna Loud.
Se corrompió.
Lo que no sabía es que Luan estaba igual.
Luna no era nadie sin Luan. Sabía que la iba a odiar y que ya nunca la apoyaría como siempre lo hacia. Que ya no tendría a nadie a su lado. Además todas las hermanas la odiaron por lo que causó. Sentía que todo era su culpa. Que ya no valía nada.
En un momento de soledad total, la castaña estaba recargada en la pared del pasillo por la noche. Frente a ella, había un recuadro de todas ellas juntas, tomada por la cámara de Lisa antes de la tragedia, junto a la científica que las crió.
Definitivamente esto es mi culpa...¿porqué no puedo alejar mis manos de las cosas?...es que ella es tan...linda...es perfecta...ella es mi todo...yo sé...*risas* que ella me ama...sólo me lo oculta...ella golpeó a Lisa por amor...lo sé *risas*...nunca me haría daño...*sume sus mocos* *mira la fotografía* esto es culpa de ella...*con un marcador rojo tacha a Lisa de la foto, dibujando un corazón sobre ella y Luan* ...no te preocupes Luan...voy a desaparecer a Lisa, y por fin estaremos juntas...como siempre quisiste...lo prometiste...lo prometí...te llegó la hora, mocosa...TE LLEGÓ. LA. HORA...