Más vale tarde que nunca... o eso dicen. Siento la demora, no voy a poner excusas que no llevan a ningún lado. Simplemente espero que la espera haya merecido la pena y que os guste este capítulo.
Como siempre muchas gracias por comentar, por votar y por seguir leyéndola.
-Hola mamá.-
-Hola Lena, siempre tan puntual.- contestó Lilian admirada porque su hija hubiera cumplido con el trato. –No las tenía todas conmigo.-
-Ya te dije que vendría.-
-Tienes razón. ¿Lo has traído?-
-Sí.- dijo señalando otro maletín al que también se había esposado.-¿Vosotros habéis cumplido con mis requisitos?- preguntó ansiosa.
-No tan deprisa hija. ¿Has puesto la bomba en el DEO?-
-Ha sido fácil engañarlos.- Lena miró el reloj impasible. –No tardará en hacer explosión.-
-Sabes que si me mientes lo sabré. Tenemos a alguien infiltrado.-
Lena se sorprendió con aquella confesión, si bien un coche de CADMUS la había esperado cerca del edificio del DEO, no había sopesado la posibilidad de que estuvieran tan implicados, simplemente creía que conocían su localización, así que cada vez entendía menos su rol en aquella ecuación absurda.
-Si tenéis a gente dentro, ¿por qué me has obligado a poner una bomba?, ¿por qué has permitido que me expusiera a que me descubrieran?- preguntó molesta.
-Si solo te dijera que era para comprobar tu compromiso te mentiría. La verdad es que las medidas de seguridad del DEO son tan metódicas que era imposible que mi agente infiltrado pudiera entrar con una bomba. Suponía que si alguien podía hacerlo eras tú, aunque nunca creí que aceptarías esa parte del trato.-
-No me quedaba otro remedio si quería que vosotros cumplierais con vuestra parte.-
-Pronto probaremos si todo va conforme a lo acordado.-
Lilian invitó a su hija a sentarse en una de las sillas que vestían aquel pequeño despacho y ella hizo lo propio con la que se encontraba detrás de una pequeña mesa.
Lena se sentó, puso el maletín encima de la mesa y miró el reloj con ansiedad, esperaba que todo saliera bien y no tardase mucho en hacer explosión la bomba que había configurado en su laboratorio. Todo había sido planeado en poco tiempo y había sido fácil manejar los hilos de la gente de su alrededor, sobre todo teniendo de su parte a una figura como Supergirl. Pero ahora pocas cosas quedaban sujetas a su control, confiaba en que a su madre le quedara algo de cariño por ella y no la traicionara de la peor de las formas. Pronto lo sabría, suponía que en cuanto la bomba explosionara empezarían las negociaciones o las imposiciones, simplemente esperaba que fuera lo primero.
-¿Seguro que has puesto la bomba?- preguntó Lilian impaciente.
-No hubiera venido hasta aquí de no ser así.-
El móvil de Lilian empezó a vibrar encima de la mesa, indicando que alguien la estaba llamando.
-Ahora lo comprobaremos.- admitió descolgando. –¿La bomba ha hecho explosión? ¿Heridos? ¿Alguna baja? Sí, gracias, manténgame informada de lo que ocurra a partir de ahora.-
Lilian colgó y miró a su hija con cierta admiración, por fin escuchaba sus palabras, por fin podían luchar juntas contra un enemigo común, por fin podía considerarla como la hija que siempre había pretendido que fuera.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXX
Un pitido comenzó a hacerse audible en el laboratorio mientras Winn frenaba las manos de Supergirl que iban a coger inmediatamente la bomba.
-Déjame examinarla un minuto.-
-No tiene temporizador, puede explotar en cualquier momento.-
-También puede hacerlo si la tocas, creo que hemos activado algo al abrirla.-
Supergirl la examinó con su visión, mientras Winn hacía lo propio con un scanner portátil. El mecanismo parecía sencillo, pero no lograban descubrir qué accionaría su detonación.
-Winn, deberías salir de aquí y asegurarte de que todo el mundo ha seguido el protocolo de actuación, que han destruido la información sensible y que se encuentran en los bunkers junto con todos los discos duros.-
-Está bien, dame un minuto antes de movilizarla. Pero ponte esta cámara con scanner y mantén enfocado el dispositivo en todo momento, si podemos evitarlo prefiero que no explosione.-
-Date prisa.- insistió preocupada.
Winn se quitó el delantal plomado y las gafas y miró a su amiga que tenía la cara desencajada.
-No es culpa tuya, Kara.- la besó en la mejilla y salió corriendo inmediatamente.
Supergirl se quedó absorta en sus pensamientos durante unos segundos, no entendía lo que estaba pasando pero aquella frase de Winn seguía revoloteando entre sus pensamientos.
Quedaban cinco horas para hacer el intercambio con su hermana y todo se había ido al traste por su culpa y por su total falta de precaución al hacer las cosas. Había confiado tan ciegamente en Lena, que ahora la caída era mayúscula y no lograba mantenerse entera por mucho que la situación lo requiriera.
Por su mente pasaron todos los instantes que ambas habían compartido, tanto siendo Kara como siendo su alter ego, y nada hacía presagiar el golpe de gracia que les había asestado. Las había manipulado a las dos a placer mientras Kara se sentía terriblemente culpable por estar escondiéndole una parte importante de ella.
Una punzada de dolor recorrió el cuerpo de Kara empezando por sus entrañas y llegando a todos los poros de su piel. Había recordado los besos y las caricias, pero sobre todo había recordado las palabras de Lena intentando que Kara se abriera a unos sentimientos correspondidos. Por mucho que Lena hiciera esto contra el DEO o contra Supergirl, tenía que saber que tendría repercusiones con Kara, así que no era muy difícil discernir que absolutamente todo había sido una patraña.
-Supergirl.- Winn la sonsacó de sus pensamientos. –El edificio ha sido evacuado y se ha formado un perímetro de seguridad alrededor de la base. Enfoca la bomba y ten cuidado al movilizarla.-
Supergirl respiró hondo intentando tranquilizarse y una vez más obvió las intensísimas ganas que tenía de llorar. Por mucho que los agentes se hubieran resguardado fuera de la central o en los bunkers, no sabía la potencia de la bomba y aquellas vidas seguían en peligro.
Cogió la bomba con cuidado y nada pareció cambiar, solo se oía un pitido con una cadencia imperturbable que indicaba que la bomba seguía activa.
Comenzó a encaminarse hacia la salida y solo cuando se elevó ligeramente el pitido comenzó a acelerarse casi imperceptiblemente.
-Supergirl, no noto cambios en la configuración de la bomba, pero está claro que la desestabiliza hasta los más ligeros cambios. Creo que no te dará tiempo a salir por la puerta.-
Kara estaba de acuerdo con Winn, tenía que coger el camino más rápido y ese siempre había sido una línea recta. Comenzó a elevarse más rápidamente y empezó a atravesar los muros de hormigón que se alzaban ante ella, mientras el pitido se hacía cada vez más rápido. Tomó más velocidad hasta conseguir salir del complejo, por suerte no había detonado en el recinto pero necesitaba más altura, aún seguía demasiado cerca.
-Espera Supergirl.- gritó Winn por el comunicador.
La cámara se cortó y una neblina inundó la pantalla. Oyeron un estruendo y las paredes chirriaron ante una pequeña sacudida que había producido el cuerpo de Supergirl al ser expelido por la onda expansiva y haber vuelto a traspasar de nuevo varios pisos del DEO.
-¿Supergirl?- La llamó Winn preocupado aun sin obtener respuesta. –Supergirl, contesta.-
XXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXX
-Me acaban de informar de que la bomba que pusiste en el DEO ha explosionado.- informó Lilian. -Lástima que haya sido justo cuando Supergirl la sacaba del edificio.-
-No tenía muy claro lo que me iba a costar salir de allí, ni tampoco quería una gran masacre. No quise arriesgarme con un temporizador escaso.-
-Tus intentos de querer seguir siendo compasible con todo el mundo me descolocan. Aun así, entre lo que han tenido que destruir, la onda expansiva y los destrozos de Supergirl, la base ha quedado prácticamente inutilizada. Has hecho un gran trabajo Lena.-
Lilian alargó la mano hacia su hija y ésta le correspondió acercando la suya y acariciando su brazo a modo de agradecimiento por aquellas modestas palabras que pocas veces había oído de su boca. Lilian la miró sorprendida y siguió alargando el brazo hasta el maletín que Lena seguía sujetando fuertemente. Lena se dio cuenta de lo absurdo de su alegría interna y apretó los dientes mientras notaba como de nuevo su madre la despreciaba una vez más.
-Ya nos puedes entregar el isotopo.- se levantó nerviosa.
-Primero haz lo que me prometiste.-
-Llevará un tiempo, no sabíamos hasta que punto estabas comprometida con nuestra causa.-
-Ya no tenemos prisa, ambas podemos permitirnos el lujo de esperar.-
Lilian miró furiosa el maletín, podían esperar, pero ya estaba cansada de hacerlo.
-Mamá, por si te lo estás preguntando yo también he tomado mis medidas de seguridad, si alguien ajeno a mí intenta abrir este maletín se producirá una pequeña explosión radiactiva.- Lena se fijó en la mirada tensa de su madre. -Cuando te llamé para aceptar el trato por fin te arriesgaste a descubrirte ante mí, y entonces me di cuenta de que todo lo que me decía Supergirl sobre ti y sobre CADMUS era verdad. Así que ahora no puedes culparme de ser precavida.-
-Es curioso que lo veas de este modo y que según tú todo te pillara de nuevas. Aunque no lo quisieras admitir lo sabías, siempre has sabido a lo que me dedicaba y de qué manera lo hacía. Sino no me hubieras llamado con esta extraña petición.-
-Al final decidí creer a Supergirl, que no tenía necesidad de mentirme y usaros a vosotros, que no tenéis necesidad de pedir explicaciones.-
-Sabía que eras una mujer de recursos, pero siempre creí que éstos eran limitados.-
-Ya ves que no.-
Lilian se tranquilizó y se sentó de nuevo detrás de la mesa mientras hacía una serie de llamadas.
-Ya está todo en marcha, no creo que mis hombres tarden mucho.- Lilian parecía ansiosa. -¿Qué quieres hacer mientras esperamos? Nos vendría bien alguien más en el laboratorio.-
-Preferiría ver a Alex Danvers.-
-Cierto, me había olvidado de la agente Danvers. Supongo que estarás deseando verla.-
Lena miró a su madre sin entender a que fin venía aquel comentario, pero se limitó a levantarse y a seguirla por las instalaciones mientras intentaba absorber toda la información de los sitios por los que pasaban.
XXXXXXXXXXXXXXXxXXXXXXXXX
-Supergirl ¿me oyes?- Winn no conseguía contactar con Kara y empezaba a estar algo nervioso.
Un crujido resonó por todo el bunker mientras los agentes veían con asombro como la puerta se doblaba sobre sí misma y era extraída de cuajo por Supergirl.
-¿Estáis todos bien?- quiso saber Supergirl.
-Sí. He contactado con los diferentes grupos y nadie parece herido. Además he chequeado el sistema y no hay excesivos daños estructurales.- comentó Winn visiblemente afectado. –¿Tú cómo estás? Me estaba empezando a preocupar cuando vi que no contestabas.-
-La cámara y el auricular se hicieron añicos con la explosión. Estoy algo aturdida por la polvareda, pero nada grave.- Supergirl se sacudió la ropa que aún seguía cubierta de escombros. –Debemos avisar a Hank, terminar de desalojar el recinto y asegurarnos de que no hay heridos.-
-Primero necesito que me traigas los restos que puedas encontrar de la bomba.-
-¿Para qué los quieres?-
-Debo comprobar una cosa. Antes de la explosión me pareció ver algo en el scanner, si descubrimos el tipo de dispositivo detonante que tenía podremos saber si Lena aún seguía cerca o no y quizá así localizarla.-
Supergirl salió del complejo y se aseguró personalmente de que no hubiera ningún agente herido. Investigó la zona y recuperó todos los restos que habían caído esparcidos, por suerte había explotado en sus manos y una parte parecía intacta, así que esperaba que Winn pudiera hacer las averiguaciones pertinentes para localizar a Lena.
Estaban como al principio o incluso peor. No sabían las intenciones de Lena, no sabían si era algo personal, o si estaba involucrada con CADMUS y lo peor de todo es que no sabían cómo iba a afectar eso a la situación de Alex.
Entregó todos los restos a Winn y se dirigió al punto de contacto para volver a inspeccionar la zona una vez más, nada había cambiado, todo parecía seguir la rutina diaria de los que pasaban por allí.
Supergirl estaba bloqueada, no sabía que podía hacer, no tenían con quien contactar, no tenían el isotopo, no tenían a Lena y estaba perdiendo todo por minutos.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXX
Lena y su madre entraron en una sala más pequeña y mal iluminada, en una esquina estaba Alex, seguía con los brazos hacia atrás, atada a la misma silla metálica con la que la habían torturado para realizar el video y con la mordaza que empezaba a agrietar sus secos labios.
Alex levantó la mirada y un suspiro de alivio salió de sus pulmones al ver que Lena había aparecido. No creía que cediera ante el chantaje de Lilian, pero ahí estaba, con un maletín esposado a su muñeca. Lo que no entendía era el plan que iban a seguir a partir de ese momento, ni cuánto tiempo tardaría su hermana en aparecer en escena.
-Si hubiera sabido antes que me entregarías el isótopo de motu proprio me hubiera ahorrado el secuestrar a tu novia.- Lilian miró a Alex mientras pronunciaba esas palabras y se recreó en la expresión de sorpresa que vio en ellos. –Sí.- afirmó acercándose a su secuestrada. –Tu novia ha puesto una bomba en tu querido DEO y me ha traído muy gustosamente el isótopo que tanto necesitaba.-
Alex no entendía nada de lo que estaba ocurriendo ahí, ¿acaso era todo una trampa para confundirla con no sabía muy bien qué propósito? Llevaba casi dos días en aquella posición, apenas le habían dado de beber y el entumecimiento de sus músculos junto con la garganta pastosa hacían que no razonara con claridad. Pero todo se volvió más claro con la siguiente frase de Lena.
-¿Mi novia?- preguntó Lena confundida.-No es mi novia. ¿De dónde has sacado algo tan absurdo?-
-Mi hombres me dijeron que...-
-¿Me has estado vigilando?- le interrumpió.
-Me preocupo por mi hija y por las personas con las que te relacionas.- se justificó torpemente.
-No te preocupará tanto, cuando has visto que Peter se ha vuelto a involucrar en mi vida y no has hecho nada por evitarlo.- le encaró furiosa.
-Ya lo voy a hacer.-
-Solo porque hicimos un trato. Yo te daba el isotopo y destruía la central del DEO y tú te encargabas de asustar más que convincentemente a Peter para que me deje en paz y no vuelva a acercarse a mí. Sé que seréis explícitos en vuestros métodos, más de lo que mi ética me lo permite.-
Lilian obvió esa última frase de su hija y sopesó el siguiente paso a seguir, con la confesión de Lena y el conocimiento de la torpeza de sus hombres, todo había cambiado, ya no necesitaban a la agente Danvers y lo peor de todo era que no tenían ninguna razón para mantenerla con vida.
-Tanto trabajo para nada.- espetó furiosa ante la idea de tener que matar a una importante agente del DEO por un fallo de sus hombres.
Lilian retiró con fuerza la cinta que cubría la boca de Alex haciendo que la herida que le habían producido se abriera y volviera a sangrar profusamente.
–Has sabido interpretar un gran papel. Pero solo ha servido para retrasar lo inevitable.-
Alex la miró impertérrita, el labio le palpitaba de dolor y notaba el sabor metálico de la sangre que se colaba en su también maltrecha garganta.
-Lleváosla.- Ordenó Lilian.
-Espera.- le frenó Lena. -¿Qué vais a hacer con ella?-
–Sabe demasiado, solo hay una manera de asegurarnos que no hable.-
-No. No más muertes. No sabe vuestra posición, y el isótopo estará listo y disponible lo más pronto posible, incluso hoy mismo podréis utilizarlo. Retenedla hasta el lanzamiento, luego ya no podrá impedir nada. Por favor mamá, no más derramamiento de sangre.-
Lilian miró a su hija con decepción, seguía siendo débil y no entendía que el fin justificaba los medios, pero le haría caso, por lo menos de momento, debía asegurarse de que todo salía bien y eso pasaba por tener contenta a Lena.
-Incluso podríais convertirla en un activo.- continuó diciendo, viendo como su madre no quedaba satisfecha con esa explicación. -Yo tengo bastante información sobre ella y sus allegados, el chantaje siempre surte efecto.-
Alex abrió la boca para objetar, pero decidió que debía seguir callada, era importante ser inteligente y ver toda la situación en perspectiva.
-Está bien.- cedió. –Dame toda la información y nosotros nos...-
-No.- rechazó Lena. –No me culpes por no fiarme de vuestros métodos, pero no quiero una muerte sobre mi conciencia, así que sabré ser convincente. Confía una vez más en mí mamá.-
Lilian sopesó la franqueza de su hija, quizá era buena idea tener a la agente Danvers de su parte... además, siempre tendrían el control y podrían poner fin a la situación de una manera más eficaz.
-Haz lo que prefieras, Lena. Pero luego tendremos que fijar su nueva afiliación con medios más expeditivos.- Lilian sonrió a su prisionera.
-Lo entiendo.- admitió su hija con cierto fastidio.
-Tengo que irme a ultimar ciertos detalles. Te dejo aquí para que me demuestres que lo que pretendes puede tener alguna salida. Aunque no creo que la agente Danvers vaya a ser tan colaboradora como tú piensas. Suerte a las dos.-
Alex asintió levemente en silencio. Lena sabía cosas sobre ella, pero estaba convencida de que todo era fachada, además, si intentaba dañar a Kara se las tendría que ver con Supergirl, así que aun podía jugar con algo de ventaja.
Lena sacó la llave del maletín y se quitó las esposas. Estaba cansada del roce del acero y además su madre ya sabía que no podían manipularlo a placer, así que se dio un respiro y lo dejó con cuidado encima de una mesa. Cogió una silla mugrosa, la acercó a Alex y se sentó frente a ella.
-Tu mirada de autosuficiencia me indica que piensas que tienes alguna posibilidad de engañarme. Crees que no sería capaz de hacer daño a tu hermana y que eso te podría dar una ventaja. No voy a negarte que quizá tengas razón, pero no necesito chantajearte con ella y ¿sabes por qué?- Lena no esperó respuesta alguna. –Porque tengo algo más efectista y que no me atañe a mi.- Se levantó levemente y le susurró en el oído. –Agente Maggie Sawyer.-
Alex intentó mantener a raya su rostro e impidió que un atisbo de rabia se manifestara ante Lena.
-¿Sigues callada? No importa.- Lena volvió a acercarse al oído de Alex. –Sé que es agente de policía, sé que estaba siguiendo a Peter, sé la comisaría en la que trabaja y donde vive... pero lo más importante es que sé que estáis saliendo juntas.- Lena se retiró satisfecha y por fin vio odio en los ojos de Alex.
-Sabía que no podíamos confiar en ti. Sabía que tarde o temprano mostrarías tu verdadero rostro.-
-No te confundas Alex, aunque no te guste admitirlo, os he engañado como a colegialas. La bomba en el DEO lo demuestra.-
Alex sacó fuerzas renovadas, logró levantarse sobre las puntas de sus pies e intentó derribar a Lena con el peso de su cuerpo y el de la silla. Lena pudo sortearla a tiempo y evitó que cayera sobre ella, haciendo que el rostro de Alex golpease fuertemente sobre el duro suelo.
Un par de hombres abrieron inmediatamente la puerta, se aseguraron de que Lena estuviera bien y levantaron a Alex que intentaba escupirles y pegar cabezazos a modo de defensa. Lena se acercó rápidamente al maletín para evitar que cualquiera de aquellos hombres tuviera la tentación de cogerlo, mientras esperaba a que Alex se tranquilizara.
-Te mataré Lena. Te juro que te mataré.-
Uno de los hombres lanzó una descarga contra Alex, sus músculos se tensaron y el cierre automático de su mandíbula hizo que se mordiera el labio por dentro.
Lena miró la escena desde lejos y esperó a que los guardias se alejaran de Alex. Pasó entre ellos y se sentó en la silla mientras se quedaba pensativa, en silencio y flanqueada por los guardias que parecían estar esperando algún tipo de directiva.
-Pueden dejarnos de nuevo a solas, no creo que logre repetirlo hasta dentro de un rato.- ordenó como si tuviera potestad sobre aquellos hombres. –Gracias.- sonrió y dulcificó su rostro.
Esperó a que salieran y sujetándola por el pelo levantó el rostro caído de Alex hasta que sus miradas se encontraron.
-Si vuelves a hacer una tontería como esta dejaré que mi madre haga contigo lo que quiera.- gritó con furia. –Tu diminuto cerebro aun piensa que puede ganar, pero mira allí arriba.- levantó un poco más la cabeza de Alex, que seguía sin tener fuerzas para hacerlo por ella misma. –No te creía tan estúpida como para no darte cuenta de que tienen todas tus acciones grabadas.-
Lena soltó el rostro de Alex y se sentó en la silla acercándola de nuevo. Sabía que sería un hueso duro de roer, pero tenía que intentar que cediera, si tenía que ayudar a su madre, por lo menos quería hacerlo bajo sus propias condiciones.
Esperó pacientemente a que Alex recobrara las fuerzas y pudieran volver a dialogar, necesitaba que entendiera que era lo mejor para ella.
Las pequeñas descargas residuales iban desapareciendo con la misma velocidad con la que Alex era consciente del dolor de todo su cuerpo. El sabor metálico de la sangre raspaba al contacto con su garganta, intentó escupir, pero su boca estaba demasiado seca y le fue imposible.
Parpadeó varias veces, necesitaba despejarse un poco y tener la mente lúcida, sabía que no estaba siendo inteligente, pero no le quedaba nada más que la rabia y estaba dispuesta a usarla contra Lena.
-¿Qué haces?- preguntó a Lena mientras la veía inmóvil cerca de ella.
-Estaba esperando a que te despejaras para poder seguir hablando contigo.-
-No tengo nada que decirte. Solo espero que el perder a todas las personas que alguna vez habían creído en ti, merezca la pena. Te mereces estar sola y te mereces la madre que tienes.-
Lena apretó levemente la mandíbula, se levantó y volvió a cubrir la boca de Alex con la cinta adhesiva.
-Si no tienes nada que decirme, mejor te la tapo, no quiero que sigas derramando sangre.-
Alex se revolvió un poco, pero aún le duraban los efectos de la descarga y apenas tenía fuerzas para defenderse. Lena se sentó a su lado y comenzó a mirar el reloj impaciente. No tenía pensado que todo fuera tan lento, tenía ganas de acabar cuanto antes con todo aquello.
El silencio reinó durante la siguiente hora, ninguna de las dos había hecho nada por intentar comunicarse con la otra persona y no parecía que fuese a cambiar.
Lena pensaba en cual debía ser su siguiente paso a seguir y Alex cabeceaba intentando combatir el cansancio acumulado.
La puerta se abrió lentamente y Lena se levantó rápidamente y volvió a esposarse al maletín.
-Su madre quiere verla.- comentó de mala gana uno de los agentes que antes había entrado para retener a Alex.
-Ahora voy. Gracias.-
Lena se acercó a Alex y le dio una patada a su pie para desperezarla.
-No me eches mucho de menos. Cuando vuelva seguiremos donde lo hemos dejado y si te portas bien, te traeré agua.-
XXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXX
Lilian había predispuesto todo tal y como imaginaba que querría su hija.
Varios ingenieros y técnicos estaban esperando recibir el isótopo para poder comenzar a trabajar con él. La parte teórica era clara y la pruebas en diferentes razas de alienígenas habían sido exitosas, los nano robots entraban a formar parte de su ADN de forma natural, ahora solo faltaba saber si el radioisótopo cumpliría su función y mutaría el ADN hasta hacerlo incompatible con la vida.
-¿Ya está mamá?- preguntó entrando a otra habitación diferente.
-Sí. Secuestrado, maniatado y educado a golpes.- Lilian encendió un monitor y apareció Peter sentado en una silla, con la mirada confundida y restos de sangre en su cara camisa.
Lena dedujo que sería una mezcla de sangre proveniente de la nariz, el pómulo, los labios y la ceja derecha. El estómago se le revolvió con aquella dantesca visión, en su imaginación había sido una buena idea recurrir a su madre para darle una lección a Peter, pero la realidad era cruda y la transportaba a un presente que no sabía muy bien si quería.
Se dijo a si misma que se lo merecía, él había sido cruel con ella cuando tan solo era una niña, también la había maltratado y seguía haciéndolo cada vez con más éxito. Se auto convenció de que era la única manera para conseguir que Peter la dejara en paz, las palabras se las llevaba el viento, pero las cicatrices físicas eran recordatorios más eficaces.
-¿Le habéis dicho algo?- quiso saber.
-Nada.-
-¿Dónde está?-
-En esa habitación.- le indicó. -Puedes entrar, está uno de mis hombres con él.-
Lena se concedió unos segundos antes de entrar, había ensayado lo que le diría, pero ahora su mente estaba en blanco y no recordaba nada de aquello.
-Hola Peter.- saludó con dureza.
-¿Lena? ¿Tú estás detrás de todo esto?- preguntó confundido.
-No me has dejado otro remedio, debía demostrarte que hablaba en serio.-
-Puta.-
Peter no termino de decirlo cuando el agente le propinó un puñetazo en el estómago, que le dejó casi sin respiración.
Lena evitó dar un paso hacia atrás, y actuó como si esa hubiera sido una de sus directrices de actuación.
-Peter, ya no eres joven y yo tampoco. Ya no puedes hacerme lo que quieras sin tomar responsabilidad de ello. Ya no puedes amenazarme impunemente, se te acabó el chollo, cabrón.- Lena esperó a que Peter dijera algo, pero se limitó a agachar la cabeza para evitar mirarla. –Espero que tomes buena nota de lo que te espera si vuelves a molestarme. Me has subestimado por última vez, que no se te olvide que te hemos localizado y retenido sin apenas esfuerzo.-
Lena esperó algo más que silencio por parte de Peter, pero parecía que por fin se había rendido ante ella y veía que no estaba bromeando.
Lena no tenía más que decirle, el mensaje estaba claro, pero eso no le impidió salir de la habitación con cierta decepción por no ver a Peter suplicando, o por no descubrir en él algún tipo de mirada de arrepentimiento o miedo mientras el agente de CADMUS le ponía una capucha negra.
-Ahora el isotopo.- le demandó su madre nada más encontrarse de nuevo con Lena.
-Sí, claro.- Lena empezó a buscar por los bolsillos la llave de las esposas. –No encuentro la llave, he debido de dejármela en la otra sala.-
-Les diré a mis hombres que la busquen.-
-No hace falta. El maletín lo puedo abrir sin necesidad de esa llave. Necesito daros cuanto antes el isótopo, cada vez me pesa más en la conciencia.-
Lena lo apoyó lentamente en una mesa, lo abrió de espaldas a su madre para que no viera los diferentes dispositivos de seguridad y lo sacó con cuidado entregándoselo a un técnico que acababa de entrar en la sala.
-Está estabilizado, pero sobra el decir que tienen que tratarlo con el mayor de los cuidados.-
-Tranquila, lo sabemos.-
Lilian sonrió sabiendo que Lena no estaba actuando realmente conforme a su manera de pensar habitual. Cada segundo que había pasado hasta ese momento lo había vivido sin la seguridad de que Lena acabara dándoles el isotopo, pero ahora que lo había hecho sabía que Lena estaba más cerca de ella y de CADMUS que nunca.
-Voy a buscar la llave para quitarme el maletín.- Lena lo cerró y miró a su madre a los ojos. –¿Seguro que el isotopo es para neutralizar los poderes de los alienígenas?- preguntó con una sensación de desazón que no lograba quitarse.
-Claro. Puedes mirar los estudios si quieres, incluso podrías ayudarnos.- mintió, sabiendo que su hija no daría aun ese paso de involucración.
-¿Qué vais a hacer con Peter?- preguntó Lena señalando el monitor.
-Lo único sensato que se puede hacer en estas situaciones.-
Lena la miró sin entender a qué se refería, solo cuando vio una sonrisa triunfal en el rostro de su madre, entendió que se proponía.
Inmediatamente intentó entrar de nuevo en la sala pero estaba cerrada por dentro.
-No.- gritó con impotencia. –Yo no quería esto.-
-Esto debió de hacerse hace mucho tiempo.- contestó impasible.
Lena evitó mirar el monitor mientras veía como el agente sacaba la pistola y disparaba dos tiros a quemarropa contra el pecho de Peter.