Allí se encontraba él, buscando en su pequeño closet que se iría a poner para aquella cita, a la cual, estaba muy nervioso de ir. Su pequeño y menudito cuerpo se movía de un lado a otro asaltando su closet de arriba abajo, encontrando después de media hora su atuendo perfecto, el cual consistía de unos pantalones blancos que se ceñían a sus lechosos y apetecibles muslos, una camisa azul a cuadros que le quedaba un poco ancha y unos adidas que le regalo baekhyun para su cumpleaños blancos con negros. Luego de vestirse se acercó a su escritorio donde tenía un espejo mediano, donde se podía observar desde sus hombres hacia arriba, comenzó a alisarse el cabello, luego a untarse un poco de polvo y al final aplicarse un poco de bálsamo en sus rojos y bonitos labios. Al ya estar listo se encamino a la salida de su hogar, sentándose en el banco que se encontraba a un lado de la puerta principal.
Luego de veinte minutos llego Jong in, en su hermoso Camaro, en el cual ya se había montado antes y le seguía encantando, aparcó a un lado de la acera, bajándose y rodeando el auto para encontrarse con un ansioso Kyungsoo, quien se abalanzo a sus brazos desde que lo tuvo cerca. Kyungsoo no se equivocó cuando dijo que Jong in se vería mejor que él, el menor llevaba una camiseta blanca ceñida a su torso, una chaqueta de mezclilla y unos pantalones negros ajustados a sus formadas piernas, se veía realmente sexy.
Te ves hermoso hyung- alago Jong in, acariciando la mejilla de kyungsoo antes de montarse en el vehículo
Lo mismo va para ti innie- su mano se encontraba en la mejilla del menor mostrándole una bonita sonrisa de corazón
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Llegaron a un parque de diversiones que habían instalado cerca de la universidad del mayor, ambos bajaron del auto dirigiéndose al puesto donde vendían las taquillas, mientras Jong in las compraba, kyungsoo se dispuso a observar a su alrededor, se sentía como un niño pequeño en aquel divertido lugar, mientras algunos chicos lo observaban por lo tierno y coqueto que se veía, otras mirada se encontraba en su pequeña anatomía, viéndolo con ojos lujuriosos y malévolos. Jong in se acercó a un distraído Kyungsoo y lo tomo por la cintura asiendo que el mayor pegara un chillido muy agudo para un hombre
Me asustaste innie- reprochó el mayor mientras hacía un tierno puchero y bajaba su rostro ocultando sus sonrojadas mejillas, tierno
Lo siento kyung kyung, solo quería sorprenderte- se disculpó el menor asiendo una pequeña reverencia y agarrando las mejillas de un sonrojado Kyungsoo- te he dicho que te ves hermoso cuando te sonrojas- alago, realmente le encantaba ver a su hyung sonrojado por su culpa
Eres un tonto innie- el mayor se paró de puntitas y depósito un pequeño beso en los abultados labios del menor. Aquello ya era normal en los dos, desde hace un mes que aquellos pequeños besos estaban presente, comenzando todo por pequeños "accidentes", los cuales no pasaban desapercibidos por sus amigos, quienes se empeñaban en hacerle la vida de cuadrito tanto a Jong in como a Kyungsoo, alegando que ya debían dar el gran paso, algo que jong in aún no quería hacer si Kyungsoo no estaba preparado, el podría esperar por su hyung.
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Ambos chicos ya se encontraban haciendo fila para subir a unas de la atracciones del lugar, sintiéndose realmente excitados y con la adrenalina al máximo al darse cuenta que ya serian los próximos en subir a uno de los carritos. Al ya estar todos sentados, y con la barra metálica ya abajo como modo de seguridad, el joven se dedicó a presionar unos cuantos botones y el juego comenzó. Jong in realmente no era amante de las alturas, pero lo podía soportar con tal de ver esa bonita sonrisa en el rostro de su hyung. La montaña rusa era enorme y monstruosa, mientras el carrito iba subiendo, Kyungsoo se emocionaba más y más, las caídas aún no llegaban y él ya quería gritar como loco.
Al bajarse de la atracción Kyungsoo dirigió a Jong in a los carros chocones, subiéndose cada uno en un diferente auto, regalándose sonrisas o carcajadas cuando sus autos chocaban, realmente se estaban divirtiendo.
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Ya iba entrando la noche y los jóvenes seguían divirtiéndose en el lugar. Iban saliendo del martillo cuando el estómago de Kyungsoo gruñó hambriento, el joven bajó la cabeza avergonzado regañándose mentalmente al no comer nada antes de salir de casa, Jong in lo miro con una pequeña sonrisa y lo guió al área de comida, dejando a Kyungsoo sentado en una mesa para alejarse a comprar algo de comer, no sin antes dejar un beso en los carnosos labios de su hyung al ver como un grupo de chicos lo miraban de arriba a bajo.
Kyungsoo al encontrarse solo soltó un largo suspiro, realmente se había sentido nervioso desde que había llegado al parque, su coranzocito latía demasiado rápido cuando Jong in le dedicaba una bonita sonrisa, o cuando sus manos se juntaban, y no hablemos de cuando lo besaba. Kyungsoo comenzó a desarrollar sentimientos hacia Jong in hace un mes atrás, le ponía nervioso la simple presencia del menor, realmente no quería llegar a pensar que Jong in simplemente lo besaba porque en ese momento no tenía pareja o solo porque eran amigos, cuando pensaba en aquello se sentía agobiado. Quería tener el valor y declararse hacia aquel moreno de fieros ojos, pero no podía, que pasaba si Jong in no sentía nada por él, lo terminaría cagando y arruinaría su amistad, no podía decirlo, no aún, o tal vez cuando el moreno muestre alguna señal de que está enamorado de él.
Luego de un rato de estar absorto en sus pensamientos el menor llego a la mesa con dos bandejas en mano, siendo ayudado rápidamente por kyungsoo a acomodar todo. El mayor al ver la deliciosa comida sintió su estómago gruñir con más fuerza, y sintiendo como su boca se aguaba al percibir los deliciosos aromas del kimbap, tteokbokki, sundae y unos deliciosos hotteok, acompañados de dos botellas de sparkling.
Innie, no crees que esto es demasiado- pregunto algo penoso por todo el dinero que de seguro gasto el menor
Nope, todo sea para que mi lindo kyung kyung coma bien- el moreno le regalo una sonrisa perlada y prosiguió a coger uno de los pequeños recipientes donde estaba el sundae y con mucho cuidado de no ensuciarse con la salsa, llevo un pedazo de carne a los rojizos labios de Kyungsoo
Pero innie, de seguro gastaste mucho dinero y yo no he aportado nada- realmente se sentía tan apenado, Jong in lo había invitado a salir y había pagado todo por él, pero realmente no tenía que hacerlo, los dos andaban juntos, entre los dos tenían que aportar, y aunque kyungsoo no fuera millonario como Jong in sus tres trabajos le permitían tener dinero suficiente para comprar o pagar algunas cosas
No soosie, ni siquiera gaste la mitad de lo que debía pagar por todo, solo bastó un par de wons y dos autógrafos- hablo orgulloso el menor regalándole una sonrisa encantadora a Kyungsoo
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Ya habían termino de comer y se dirigían a la salida del parque. Jong in llevaba a Kyungsoo agarrado de la mano, como ya está acostumbrado. Antes de pisar la salida alguien choca con la espalda de Jong in, haciendo que trastabillara un poco, aparentemente molesto se giró y encaró a la despistada persona que iba por ahí chocando a todo el mundo. Una chica un poco más bajita que él pero más alta que kyungsoo hizo una reverencia pronunciada, su cabello rubio callo a los lados de su cabeza, llevaba unos pantalones cortos negros y un suéter crema con diseños de maquillaje en el
Lo siento no me fijé por donde iba- la chica hablo mientras levantaba la cabeza y miraba al joven frente a ella- Jong..Jong in?- pregunto un tanto sorprendida inspeccionando el rostro del contrario
Krystal- el joven se veía tan sorprendido como la chica, sus ojos inspeccionaban de pies a cabeza a la chica- qué haces aquí- pregunto curioso, he inconscientemente soltando la mano de kyungsoo, el cual no dejaba de ver la escena con ojos curiosos
Llegue ayer, mi hermana se va a casar y vine a ayudarla con los preparativos... no has cambiado nada- la joven se acercó un poco más a Jong in y con su fina mano le acarició la mejilla, recibiendo una pequeña sonrisa que no pasó desapercibida por kyungsoo, no sabia por qué estaba comenzando a sentir un terrible dolor en su pecho y unas incontrolables ganas de gritar que ÉL también estaba allí
Tú tampoco has cambiado mucho, sigues igual de hermosa que siempre krysKrys- y esa fue la gota que colmó el vaso, Kyungsoo sin aguantarse la ira se alejó de allí rápidamente, se sentía realmente dolido y molesto con todos, con Jong in y consigo mismo. Realmente se sentía patético al creer que Jong in sentiría algo por él, por una persona tan patética y problemática. Su pequeño cuerpecito se estremecía ante la gélida ventisca de otoño, seguía caminando por la acera en busca de una parada de autobús, pero sus ojitos cristalinos no ayudan mucho.
Cuando estuvo dentro del transporte miro por última vez el parque de diversiones que se alzaba atrás de él, en esos momentos solo quería llegar a casa y acostarse en su camita con su cobija favorita, quería gritar y desahogarse en la oscuridad de su habitación. El realmente estaba celoso.
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