P.O.V. Liam.
Hacía unos minutos que me encontraba algo más relajado, con los ojos cerrados y la mente en blanco. Los trucos de mi psicólogo al final iban a tener sentido.
Mi paz y tranquilidad se vio interrumpida por el chirrido de la puerta al abrirse. Decidí no abrir los ojos porque pensaba que lo más probable que fuera Louis. Y con ese pensamiento pensé que era un buen tiempo para agradecerle todo.
-Menos mal que te tengo a ti, Lou. -Susurré aún con los ojos cerrados. -No sé que hubiera hecho si no me hubieras calmado como lo has hecho. Te quiero mucho, ¿sabes? -Y entonces decidí abrir los ojos para mirar a mi mejor amigo.
Mas no era él el que tenía delante, sino a Zayn. Mirándome muy serio. Yo ya no podía aguantar su mirada así que se la aparté e hice como si no existiera.
-Así que ahora lo quieres a él. -Gruñó con un tono celoso. Sonreí de lo hipócrita que se había vuelto.
-Sí, adoro a Louis. -Esta vez me levanté para enfrentarlo y acorté las distancias para tenerlo cara a cara. -Él ha sido mi apoyo y yo el suyo, ¿tienes algún problema con eso?
-¡Pues sí! -Gritó cual niño mal criado que ni come ni deja comer.
-Entonces jódete, Zayn. Porque yo no te debo nada. -Y entonces me dirigí hacia la puerta del baño, chocando mi hombro con el suyo al pasar por su lado.
Tenía que pedirle a Louis que nos fuéramos cuanto antes.
P.O.V. Louis.
Decidí observarlo como reprimenda de lo que había estado haciendo mientras trabajaba.
Entonces caí en la cuenta, este era mi momento.
-¿Qué te pasa, Styles? -Llamé su atención haciendo que me mirara a los ojos, lo cual no me hizo retroceder. -¿Tienes que tener a alguien de apoyo para tener huevos para hablarme? Porque para estar mirando cada movimiento que hago en el trabajo bien que no necesitas a nadie.
-Yo... -Hizo una mueca y me apartó la mirada, como avergonzado.
-Déjame adivinar. -Dije llevándome la mano a la barbilla para darle más énfasis a mis palabras. -Tienes huevos para dejar a alguien que te quería con toda su alma, de destrozarlo, de dejarlo mal delante de toda una universidad para que se rían de él, de mirarlo como un acosador, de preguntarle si tiene vida sexual después de ti. Pero luego no tienes huevos a dar la cara cuando te encuentras a solas con él. -Aplaudí mientras fingía una carcajada. -Maravilloso.
-Yo lo siento muchísimo Louis... -Finalmente murmuró jugando con sus dedos.
Aquellas cinco palabras lograron colarse dentro mía haciendo que no pudiera articular palabra durante unos minutos. Pero finalmente volví a coger coraje para contestarle.
-Te diré dos cosas Harry. -Señalé con mis dedos lo que decía. -La primera es que llegas un año tarde para una disculpa y la segunda que esa frase de mierda no significa nada comparada con el infierno que me hiciste pasar. -Prácticamente gruñí aquellas palabras como lo hacía Liam. -Eres un cabrón, por tu culpa tuve que irme con Liam a su pueblo para que dejaran de acosarme. Así que te puedes meter tu disculpa por el culo, bonito. -Y con esas palabras me levanté llevándome algunas miradas al hacerlo y justo Liam volvió del baño, me cogió del brazo y salimos de aquella dichosa boda.
Nunca me había sentido mejor conmigo mismo.