—¿Por qué tomas cerveza?— le pregunto a JiMin.
—¿No puedo tomar acaso?
—¿No te bastó con lo de anoche?
Sin responderme algo se acerca a mi rostro dejando solo un pequeño espacio entre nuestros labios.
—No— dice con una sonrisa ladina.
Sé a que se refiere este niño y me gusta la idea pero tengo a mi novia esperando en casa así que lo mejor será dejar la tentación de lado e ir a consentirla a ella.
—Me tengo que ir— le aviso.
—¡No! quedate conmigo.
Con un lindo gesto me trata de convencer, cosa que no funciona. Tomándole de los muslos lo cargo hasta su habitación, tratando de robarme besos no lo dejo.
Cierro la puerta tras nosotros para dejar a JiMin sobre la cama.
—Sueltame JiMin.
Aferrándose mas a mi cuello logra darme un casto beso, le dije a mi novia que no tardaría y aquí estoy con un JiMin que parece un bebé con ese comportamiento, ya me está poniendo de mal genio.
—No me quieres— dice triste.
Bruscamente le quito los brazos de mi cuello y piernas, dejándolo ahí en la cama camino hasta la puerta para por fin irme.
—Vendré por la noche— le digo antes de salir.
…
—Fue un idiota conmigo TaeHyung— me abrazo mas al cuerpo de mi amigo.
—Tranquilizate que tu amigo ya va llegar.
—¿Se arruinó mi maquillaje?
—No cariño, estás hermoso.
—Dile que venga aquí cuando llegue.
—De seguro y van a hacer cochinadas.
—Si, ya sabes— digo alegre.
Acomodando mi ropa dejo que TaeHyung se vaya para recibir a mi invitado especial. JungKook se comportó muy mal conmigo así que porqué no tener a alguien que si me quiere poner atención.
...
—Déjame entrar TaeHyung.
—No JungKook, vete de aquí.
Ya cansado de la situación suspiro varias veces tratando de tranquilizarme, mi novia ya no está, ahora vengo a buscar a JiMin y su amigo me sale con que no quiere verme, que soy un patán y más cosas.
Con fuerza empujo a TaeHyung para que no me siga obstruyendo el paso, no me gusta ser así de brusco pero si toca, toca.
Trato de cambiar mi semblante para darle una mejor impresión a JiMin, golpeo la puerta de su habitación para que me abra, cosa que no hace haciéndome desesperar. Girando la perilla de la puerta la empujo fuerte haciendo que golpee contra la pared
sorprendiendo a los dos personajes dentro de la habitación teniendo sexo.