-¿Saben algo de la supuesta hermana de Mordred?- cuestionó el hombre en traje a los personajes que lograron capturar al vil villano.
-Sabemos que el mismo día del robo al internado por parte de Black Hat una de las reclusas logró escapar- respondió la hermosa mujer con antifaz -Sospechamos que puede ser ella.
-¿Saben en donde puede estar?
-Tal vez Black Hat la ayudo a escapar y ahora sea parte de la organización.
-Vigilen muy de cerca a la organización, saben lo peligroso que puede ser que tengan a una aliada como ella- les hizo una seña para que salieran de la oficina.
-No se preocupe señor. Ya tenemos un plan.
Freya. Ese era el nombre de la hermosa, inteligente y carismática heroína que había logrado capturar (y asesinar) al villano Mordred. Una joven de no más de 20 años de edad, rubia, alta, delgada, de ojos azules cristalinos, prácticamente perfecta que gozaba con los poderes sobrenaturales de volar y controlar el hielo a su antojo. Había entregado su vida a la protección de su ciudad natal, y como ya se había deshecho de uno de los peores villanos ahora solo tenía que evitar que su hermana buscara venganza y si es posible destruir la organización Black Hat y a todos los involucrados en ella.
Ese era su único objetivo en la vida.
¡Ah! y conquistar a cierto científico para convencerlo de unirse al lado bueno y trabajar con ella.
......
Un día como cualquier otro en la mansión de Black Hat, Flug se encontraba muy emocionado, nervioso y muy asustado por algo que estaba a punto de hacer.
-Jefecito... ¿Puedo hablar con usted?- se asomó temeroso por la gran puerta negra gótica.
-¿Que chingados quieres ahora?- para el mayor esa era señal de que si podía hablar con él. Tímido entro lentamente y cerró la puerta detrás suyo.
-Vera... sabe que busco citas por Internet, ¿No?- jugó con sus dedos sin mirarlo a los ojos.
-Ajá- no respondió más, sabía que esas citas siempre terminaban siendo un completo y rotundo desastre y que las chicas siempre terminaban por botarlo.
-Pues... bueno.. una de ellas quiere conocerme en persona y bueno... ¿Puedo ir?- preguntó temeroso. Black Hat lo miró de mala manera y solo se limito a asentir con la cabeza.
-¿La niña sabe?
-¿Cúal niña?... ¡Ah! ¡____!, si, le eh estado contando de ella y esta completamente de acuerdo- dijo algo animado.
-¿En serio? Que extraño, podría jurar que esta enamorada de ti- hizo una expresión de asco.
-¿Eh? N-no, no lo creo- negó con la cabeza -Solo esta agradecida, eso es todo... no creo que se haya "enamorado" de mí.
Black Hat lo miró de arriba a abajo -Que complicados son los humanos, como sea, suerte en tu dichosa cita- le hizo una señal para que se fuera y no le quitara más tiempo.
-Gracias Jefecito- salió de la oficina casi brincando de alegría. Y adivinen quien quiso que fuera la primera en enterarse de que tenía el permiso de papi Black para salir con una desconocida. Así es, ____.
Bajó rápidamente al laboratorio, sonriendo aunque no se notara, tomó a la chica de los hombros y la agitó suavemente -¡____! Black Hat me dio permiso de salir con Helena, ¿No es genial?- dijo más emocionado de lo normal, normalmente solo hablaba así cuando explicaba como funcionaba algún invento suyo y de como lo había hecho.
La otra sintió una horrible punzada en su pecho -¿Que? ¿Black Hat te dejó salir? ¿Así nada más?- sentía como los celos se le subían.
-¡Si! Creo que confía en que volveré... y si no vuelvo él mismo irá a buscarme -rió incómodo al tan solo pensar en lo que Black Hat sería capaz de hacerle si se atreviera a huir -¡Pero pasare tiempo con Helena!.
"No, por favor no vallas con ella..."
-Uy, si, que emocionante- intentó ocultar su enojo haciendo una falsa sonrisa. Flug lo notó.
-¿Estas bien?- giró un poco su cabeza. No le gustaba admitirlo pero sospechaba algo de la chica.
-Ha si, muy bien- volvió a falsificar su sentimiento -hijodetuputamadre- susurró para que el otro no la escuchara.
-¿Segura?- quería negarlo, por supuesto que quería, pero no era tonto y sabía que detrás de ese supuesto agradecimiento y admiración había algo más. Pero no estaba seguro.
-Ay si, no pasa nada, sabes ha de ser el calor, voy arriba a ver que esta haciendo Demencia- se dió la vuelta y salió de ahí.
-Bueno, no hagan muchos destrozos- le pidió antes de que se fuera -¿Segura que no te molesta algo?- preguntó con toda la intención de hacerla confesar -¡Nope!- gritó la otra desde el pasillo mientras caminaba en busca de su amiga.
Hacía ya un mes y cacho que ____ se había fugado, ya estaba muy instalada como asistente personal y amiga de Dr. Flug en la más malévola y temible organización de villanos del país. A pesar de que sufría constantemente por la pérdida de su hermano y por algunas palabras hirientes que Black Hat le dedicaba cuando no hacía algo como él quería, ella era feliz pues su maestro y amigo siempre estaba ahí para darle un poco de ánimos y sacarle una sonrisa.
Y pasó lo inevitable.
Ella se enamoró de él.
Cabizbaja y destrozada camino hacía la cocina, dondé imaginaba que podría encontrar a su única amiga haciendo algún desastre. Y como había predicho, ahí estaba, intentado lavar los platos sin romperlos, parecía una tarea sencilla, pero para una chica tan hiperactiva como Demencia era algo realmente complicado.
-Demencia- llamó la de bata blanca a la chica híbrida -Me gusta Flug.
-No, ¿Apoco?- respondió sarcasticamente -¡Hasta que lo aceptas! ¡Gracias!. ¿Y como para cuando el bodorio?.
La otra suspiró tristemente, aproximándose a una silla para tomar asiento en aquel comedor -Pero yo no le gusto a él.
-¿Como sabes?
-Todas las noches busca citas por internet, y últimamente ha estado hablando con una tal Helena y creo que pronto saldrá con ella.
-Si, pero sus citas siempre terminan mal, así que no te preocupes por eso, seguro tendrás una oportunidad- le dijo sonriente, sin querer un plato se le resbaló de las manos y cayó al suelo, rompiéndose en mil pedacitos -ups..- se agacho a recoger las pequeñas porcelanas.
-Espero que si... tu sabes lo horrible que se siente ser rechazada, ¿No?
La sonrisa de la otra se borró en unos instantes y su mirada se calló -Por su puesto que lo sé... sabes todo lo que hago para que Black Hat se fije en mí aunque sea un poco ¿Y que recibo a cambio? Su desprecio- tomó otro plato y lo azotó contra el suelo como muestra de su enojo. En ese momento 5.0.5 entró a la cocina donde las dos jóvenes estaban hablando, al verlas tan tristes intentó animarlas haciendo graciosadas con sus patas, pero Demencia se negaba a estar feliz -Ahora no oso... acabo de romper otro plato y esta me deprimió.
-Me gustaría arruinar su dichosa cita- susurró la otra chica mientras apretaba sus puños. La de cabello bicolor sonrió maliciosamente y se acercó rápidamente a ella -Osea que... ¿Quieres hacer algo malo?- zizeo de forma seductora.
-Si arruinar una cita es algo malo, entonces si, quiero hacer algo malo- la miró a los ojos, convencida de sus palabras.
-Mm, es un buen inicio- Alzó los hombros y le sonrió ampliamente -Con eso de que según tú quieres ser una villana vengativa...
-Si quiero- golpeó la mesa con sua puños, pero no con la fuerza suficiente para intimidar a la chica.
-Ay, eres demaciado linda para serlo- le acarició la parte superior de la cabeza. No podía considerarla como una amenaza.
-Ya lo se- cerró los ojos fuertemente y dejo caer su cabeza sobre la mesa -Auch...- cosa que le causó dolor -Por eso no le gusto a Flug.
-¿Porque eres torpe?- preguntó ingenua Demencia.
-¡No! Bueno... seguramente si- se resignó a aceptarlo -¿Me ayudarás a arrinuarle la cita?
-Podría jurar que eso se arruina solo, pero sería divertido molestar al doctor- mostró sus afilados dientes en una sádica sonrisa -¿Nos ayudas oso?- él lo dudó un segundo, luego asintió con la cabeza, en realidad no sabía el significado de la palabra "arruinar" -¡Cool! Ya somos tres, y si convencemos a Blacky seremos cuatro- alzó su puño triunfal.
-¿Que? yo pensaba solo pedirle permiso de ir... y ya...
-Ay vamos, será más divertido si él nos ayuda- quien sabe como, la chica reptil la logró levantar de su silla y arrastrarla por toda la mansión hasta la oficina central del jefe.
-Toc toc, ¿Black Hat?- abrió la puerta sin siquiera tocar.
-¿Y ahora que?- dejó de hacer lo que estaba haciendo para hacerle una mueca de desagrado acompañada con un tono voz notablemente molesto, cosa que a Demencia le dio mucho por igual y de todas formas se acercó al escritorio para sentarse sobre él -Nos enteramos de que Flug iba a ir a una cita pero acá a estrellita le molesta mucho y quiere pedirle permiso para ir a molestarlo- él se alejó de Demencia y volteó a ver de la misma forma a ____ -¿Porque presentía que esto iba a pasar?, ah ya se, porque tú no sabes disimular tus asquerosos sentimientos- la señaló, la menor tragó saliva y miró sus pies avergonzada -Pero solo así podremos ver tu nivel de maldad, si es que realmente tienes ¡Vayamos a destrozarlos!- sonrió.
-¿Que?- se sorprendió por la afirmación de su jefe.
-Eh humillado muchas veces a Flug, pero jamás eh visto como lo humillan en público y verlo seguramente será malvado- frotó sus manos mientras continuaba sonriendo.
-Entonces ¿Contamos con usted?- sonrío un poco la otra, él asintió -Bien, este es el plan; los seguiremos hasta donde estén, dejaremos que pasen una bonita tarde para que no sospechen y cuando menos lo esperen llegaré y golpearé a Flug, le diré que es un maldito y que me engañó y luego, cuando la chica este lo suficientemente asustada...
-¡La matarás!- interrumpió Black Hat mientras su rostro se deformaba y sus dientes se afilaban aún más.
-Eh... no precisamente...
-¡La quemarás viva!- Demencia intentó adivinar.
-Es básicamente lo mismo, no..
5.0.5 hizo unos sonidos melosos y enredo sus patas alrededor de su propio pecho.
-No 5.0.5, tampoco la voy a abrazar ni darle ningún tipo de amor... solo voy a hacer que hulla.