« Su amor se había convertido en uno de mis mayores tormentos. »
Meses.
El tiempo se escudriñaba en nuestras manos.
¿Cómo detenerlo? ¿Cómo evitar que ciertas cosas pasen? ¿Cómo no rompernos en el intento de sobrevivir?
Me detuve a mirar la lluvia al borde de los grandes vitrales. Inhale y exhale con la mayor profundidad que mi cuerpo permitía. El cielo era oscuro como el pronostico en esta época gélida del año.
Los relámpagos brindaban una bella luz natural.
Podía predecir las caídas sobre la faz de la tierra contando los segundos por los sonidos de los truenos.
Y sabía que aquel rayo que abatiera sobre el territorio dejaría secuelas.
— Uno...dos...tres.—susurre para mi mismo. Y el estruendo acuño mis oídos.
¿Cómo podía hacer para predecir del mismo modo qué sucedería para así salvar a Taehyung?
— Jungkook.— me llamó.— Vamos.
Mire en sus ojos quitando mi vista de las gotas de lluvia.
Sé veía desgastado por el peso que recaía en sus hombros. Un peso que ninguno estaba preparado a recibir.
A él esto le desagradaba tanto como a mi.
Mis deseos eran idénticos a los suyos, al menos en gran parte.
¿Cuantas reuniones similares ya habíamos tenido? ¿Cuanto más discutiríamos esto? Sólo traía consigo desgracias y peleas.
Combates que poco a poco llevaban a algo mayor.
Era una guerra fría.*
— Jungkook ya ha alcanzado una completa adaptación a los cambios.—Alegó Jin. —Su estado es diez veces mejor de lo que era antes, incluso he sabido que ha supera un miedo con el que ingreso a este lugar.
Ese no era el motivo de discusión.
Mordí el interior de mi boca y respire profundo para acallar mis propios comentarios, por respeto a Taehyung.
Todo lo hacía por él.
Todo me lo guardaba y acallaba. Inclusive lo más doloroso que pudieran llegar a decir de mi. Por que después de todo el más atacado siempre era él.
—Por su parte Taehyung durante muchos años a visto de cerca los movimientos más íntimos del Rey Min, lo que lo convierte en un conocedor de primera mano de todos los detalles reales y lo pone al tanto también de toda situación de los reinados.
Mucho énfasis ponía Jin en su discurso, tanto así hablando como si nosotros no estuviéramos aquí.
— No veo que otra prueba más consistente que esas se necesiten para confirmar que sería un excelente candidato a gobernante.
— ¡Rey Min! — alzo su voz el mismo anciano que la vez pasada.— ¿Usted opina de igual modo y alega a lo que dice el Señor Seok Jin?
La mirada de YoonGi era más fría que nunca.
— Lo es.— respondió.
Su voz retumbo en la sala siendo tajante y gruesa.
No necesitaba muchas palabras para intimidar.
Así era él.
— Creo que deberíamos dejar de discutir de una vez por todas, estoy aquí en nombre del rey Kim, mientras él sirve en los campos de guerra no puede ser que no se pueda llegar a un acuerdo de una vez por todas.
— ¡Mucha charla, poca acción!— grito Jimin rompiendo la tensión.
Maldito desquiciado.
— Sólo quiero volver a casa y esperar la llegada de mi Rey en mi propio hogar, en mi tierra.— concluyo Jin.
Sus ojos se veían aguados.
Entendía su situación, pero no justificada nada lo que nos hacían.
Mire por debajo de la mesa hartado de estas infinidades de discusiones en vano.
Note cómo en silencio las manos de Taehyung temblaban incontrolablemente. Y con un sutil pero suave movimiento lleve mi mano hacia él para acariciar el dorso de su palma.
Sus ojos me miraron con sorpresa pero la calma le llegó al reconocer mi tacto y de inmediato su temblor cesó.
— Yo ya he dicho que me niego a acceder—
Intento hablar siendo interrumpido.
— Sabemos que Taehyung se niega— afirmo Jin.— Pero eso no quita que merezca ese puesto.
Continuaba hablando como si el no estuviera aquí y eso me enfermaba.
— ¿Me quieres lejos acaso Seok?— hablo por primera vez en la noche el Rey Jung.
Un eco de la risa nerviosa de Jin se escucho en la sala.
— Se que les convengo fuera, pero soy tan e igualmente poseedor del trono como él.— observo a Taehyung de reojo y mi piel se erizo.
Él sólo contacto visual de Taehyung con aquel hombre me ponía en alerta y hacía hervir mi sangre.
Mi ceño automáticamente se frunció y en su rostro vi una sonrisa dedicada a mi.
Taehyung apretó mi mano debajo de la mesa.
— Se que eres igual a mi.— pronuncio.
Todo lo que nos rodeaba entro en un bullicio.
— ¡Lo saben! ¿No es así? — vocifero.— Él es como yo, ese muchacho pertenece al clan. Nuestro antiguo clan.
— Lo sabemos.— pronuncio a mi sorpresa YoonGi.
¿Qué?
— Siempre lo hemos sabido y eso sólo avala que con la compañía de Taehyung son un dúo perfecto para poseer el reino.
¿Cuánto saben de mi?
— ¡POR EL AMOR A DIOS!— grito el sacerdote, el ministre mayor.— ¿Un vampiro y un sangre sucia? ¿Un mestizo y un miembro del clan que casi destruye los reinos? ¡JAMAS! Ellos jamás reinaran, son sólo un peligro para la humanidad de reinado.
¿Mestizo y sangre sucia?
Todos los hombre vestidos de blanco se levantaron con brusquedad moviendo sus inmaculadas túnicas para macharse.
— ¿Como sabes tu de mi?— balbucee atónito.
— Yo sé quien eres.
Antes de cruzar la puerta el sacerdote hablo.
— Si debe tomarse una decisión será de manera rápida y concisa. El monasterio no aceptara jamás un mestizo, son demasiado peligrosos, hemos llevado años tratando de eliminar de la tierra a criaturas que han sido un error divino como ustedes.
Mi garganta se secaba mientras él hablaba.
¿Porque Taehyung era más peligroso que un vampiro de sangre pura?
— Dejaremos que ustedes se maten entre sí para decidir sobre el reinado, por fuerza quien gane reinará. ¡No dictaremos más palabras! ¡Que corra su sangre por su propia mano y justicia!
Antes de cerrar su boca se persigno ante todos nosotros.
— Dios proveerá.— dijeron.— Y si no lo hace, nosotros los mataremos.
Anunciaron su veredicto y se marcharon.
Dejándonos bajo una sola ley:
Mátense entre ustedes y el vencedor reinará.
— Muy bien Taehyung — sonrió Ho Seok.— Es hora de ver de todo lo que eres capaz.
— ¡Podemos hablar esto Jung!— grito Jin.
— Pelear me parece bien.— susurro YoonGi. Tan calmado que daba escalofríos.
Sostuve con fuerza la mano de Tae mientras los que quedábamos en la sala nos mirábamos de reojo.
¿Quien estaba del lado de quien? ¿Alguien nos defendería?
— ¡Discutiremos esto! Cálmense todos.
— Tengo un nuevo cuchillo que se vera PRECIOSO EN TU GARGANTA JUNG ¡¿QUIERES PROBARLO?!
— ¡Jimin!— ordeno Min y el cuerpo del mismo tembló bajo su voz.
Mire a Taehyung.
Entre aquel espantoso debate busque en sus pupilas para encontrarme a mi mismo como siempre hacia.
Vi en sus ojos miedo y desconfianza.
Sabía, yo sabía de su fuerza. Y más aún debía de confiar en que por alguna razón todos temían a él. O algo en él.
Sabía que Tae no era un monstruo, ni mucho menos, pero si ellos querían ver un verdadero monstruo tendrían que enfrentarse a mi entonces.
Me jure en ese instante que no permitiría que nadie osara a tocar un sólo pelo de su cabello o dañara un sólo centímetro de su piel.
Me refleje en sus ojos, me miré allí y tuve miedo.
Por que me vi a mi mismo cubierto de sangre... y no supe ver si aquello era propio o ajeno.
Pero mataría, o incluso moriría por él.
Esto era ser su destino.
Amarle se me había convertido en el mayor de mis tormentos.
— Discutiremos esto en mi reino. No hay lugar mejor para batallas que el origen de ellas, donde nacen y mueren, donde empiezan y se terminan, donde se celebran las más grandes. NamJoon llegará en dos días, los esperaré allí y terminaremos de una vez por todas.
— Ya he dicho que no deseo esto, no tienen por qué hacerlo.
— Lo siento Taehyung, eres mi sobrino pero a pesar de cuanto te quiera aquí ya no importa tu opinión, reinar no es algo que se elige o no. Es algo que se hace.
Taehyung rió con amargura.
— ¿Soy tu sobrino ahora no?¡Eh YoonGi! ¡¿Acaso me quisiste realmente alguna vez?!
Jamás tuve una familia antes de Taehyung, pero si la hubiera tenido habría deseado que no fuera una como esta.
Me sentí agradecido por no pertenecer a nada ni nadie más que él en este mundo.
— Vaya, vaya... — Ho Seok carcajeo muy fuerte.— Creo que hay algo interesante aquí Min, ni tu sobrino esta de tu lado— miro a Taehyung y a mi.— ¡Niños!
— ¡No somos niños!— refute.
— Sera mejor que te calles y escuches con atención ¡MIRA A TU ALREDEDOR! Observa y piensa ¿Quienes están realmente de su lado?
— ¡Cállate Jung!— grito Jin.— No intentes confundirlos.
— ¿Yo confundirlos? ¡Cuando son ustedes los que se disfrazan de contención y de familia amorosa sólo para aprovecharse de ellos! MIREN A SU ALREDEDOR Y DÍGANME CON CERTEZA QUIENES ESTÁN DE SU LADO Y QUIEN ES EL ENEMIGO.
— ¡¡¡CÁLLATE DE UNA VEZ!!!
Y Jimin estaba sobre él con una navaja sobre su cuelo.
El pequeño hilo de sangre corría.
Lo sentí, sentí el latido de mi corazón retumbar al ver esas gotas de sangre.
No ¡No! No podía ser.
No podía volver, él no estaba ahí.
El miedo...él había desaparecido...
¿Qué hacia aquí de nuevo robándome el aire?
Mi visión estaba sumergida en la espesa carmesí que brotaba de él aún sin matarlo. La escena paso con rapidez, él Rey Jung se defendió con implacable fuerza sobre la demencia de Jimin deteniéndolo.
YoonGi sujetaba a Jimin y Ho Seok la herida de su cuello con un aterciopelado pañuelo brindado por Jin.
El blanco óleo de la tela manchado en sangre.
Y yo estaba inmóvil frente a la escena.
Taehyung tomo mi mano para sacarme de ese lugar, sin antes irnos pronunciar lo siguiente:
— Sé muy bien de que lado estoy y quien esta conmigo.— su mano apretó la mía y sus ojos me devolvieron a la realidad.— Hay una única persona que me acompaña y en la cual confió mi vida, e incluso mi muerte, y esa misma persona sostiene mi mano justo ahora.
¿Cómo?
¿Cómo podrías confiar en mi si ella volvió?
Ella, la fobia. El miedo.
Si ya no era mi sangre a la que temía por asociarla al placer, ¿Cómo podre protegerte ahora? que temo a la sangre ajena.
O quizá temo a la idea de que sea tu sangre la derramada.
Lo único cierto además de tu voz esa noche fue la incertidumbre:
¿Quien esta de nuestro lado? ¿Quien es el malo en esta historia?
*Guerra fría: Lucha entre naciones que no llega al enfrentamiento armado, aunque puede dar lugar a actos violentos.
Hola♥
Yo no sé si a ustedes les gustan las actualizaciones los días entre semana pero son los días que se me hace más fácil actualizar.
La facultad así me tiene: ಥ_ಥ llorando lágrimas de sangre, ahre.
En fin, hoy les deje en el Cap un "glosario", es decir marque una palabra con un (*) para que al final de la lectura sepan a qué me refería con el término.
Lo hice porque ya en Caps anteriores usé un lenguaje demasiado raro, con palabras no muy comunes y no especifique a que se referían.
Supongo, y quiero creer, que tenemos la confianza suficiente (sí, la tenemos♥) para que ustedes se sientan cómodxs de preguntarme lo que sea referido al Fic.
A menos que quieran spoiler, eso no, osea ಠ_ಠ
Bueno eso, nos leemos la próxima, los amo mucho♥