N/A: Mil gracias por el cover para este capítulo. Esas muestras de cariño hechas por ustedes siempre alegran mi corazón. Disfruten de la lectura y comenten mucho.
**CANCIÓN SUGERIDA: "Run Away With Me- Carly Rae Jepsen"
Cause you make me feel like
I could be driving you all night
And I found your lips in the street lights
I wanna be there with you
-Lyrics "Run Away With Me- Carly Rae Jepsen"
CAMILA'S POV
"Hablar de la vida personal nunca es fácil"
Cada persona siempre tiene algún oscuro secreto que ocultar. No todas las personas somos valiente para hablar de nuestra vida sin ocultar nada y sin ningún miedo a ser juzgados. Por lo menos, yo no lo soy. Tengo miedo de hablar realmente sobre quién soy y lo que es mi vida por miedo de ser juzgada. Toda mi vida se había basado en eso.
La única hija y heredera del Imperio Cabello. La hija que debía ser perfecta y que no podía cometer ningún error. La niña que tenía que aprender a trabajar duro pero que también vivía una situación privilegiada. Es muy fácil hablar sobre el valor del dinero y lo difícil que es conseguirlo cuando no se experimenta en carne propia. No se trata de simplemente enseñarle a alguien que el trabajo duro recompensa sino también ayudar a que esa persona lo ponga en práctica. Mis padres siempre me enseñaron a valorar el dinero, pero no para que aprendiera a valerme por mí misma, sino para que aprendiera a manejar las cuentas bancarias de una empresa que yo jamás consideré mía.
Algunas personas piensan que las personas con dinero no sufren o no sienten ningún dolor. En mi caso, todos se equivocan. Yo sufría en silencio. Sentía tanta soledad en mi vida que era difícil para mí. Veía a mi alrededor tantos lujos, tantas cosas perfectas pero me sentía vacía. Las cosas materiales no llenaban ese espacio en mí. La gente me veía como una especie de chica increíble que podía tenerlo todo, pero por dentro yo cada momento que pasaba me sentía más rota. Hay un dicho que dice "El dinero no compra la felicidad". Parecerá un cliché, pero es completamente cierto. Yo jamás había sido feliz bajo los reflectores de la hija perfecta con la familia perfecta. No me gustaba esa vida y ahora tenía que afrontar el hecho que ese mismo pasado oculto al no hablarlo con mi pareja podía traer futuros problemas. Quería que mi relación con Lauren fuera sincera. Era lo más real que había tenido en mi vida y este secreto podía arruinar las cosas a largo plazo. Lauren significaba eso para mí, el futuro. Yo quería estar con ella pero no quería que al verme a los ojos solo viera una máscara de lo que soy en realidad.
Ahora estábamos allí, en su casa. Después de una noche apasionada haciendo el amor. Las dos únicamente con una camiseta y con una porción de helado de chocolate. Las dos apoyadas en el respaldo de la cama, una al lado de la otra con las piernas cruzadas mientras la música llenaba la habitación a las 4 de la mañana.
—¿Pasa algo, cariño? —me preguntó Lauren mientras bajaba un poco el volumen de la música de Carly Rae Jepsen que sonaba en la bocina junto a su cama.
—¿Por qué lo preguntas? —nos miramos a los ojos y vi en sus orbes verdes cierta duda.
—Por lo que pasó hoy en tu trabajo—me dijo suavemente—. No fue mi intención causarte problemas.
—No fue tu culpa, mi amor—le dije cariñosamente acercándome a ella—. Sé que no hablamos mucho cuando salimos porque estábamos...—Lauren me dio una sonrisa coqueta y yo dejé el helado a un lado para sentarme a horcajadas sobre ella que también dejó el plato a un lado para acariciarme la cintura. Sus manos acariciaron mi espalda bajo la camisa y pude sentir su toque haciéndome estremecer.
—Estábamos muy ocupadas haciéndonos el amor—terminó Lauren por mí y yo asentí pegando mi frente a la de ella—. Pero que me muera cada vez que estás cerca de mí o que sienta que me muero con tus caricias no quita que vea en tus ojos que algo no está bien—Lauren me acarició la mejilla—. La pasión entre nosotras es enorme, pero te conozco nena. Algo está mal y necesito saber qué es para ayudarte. Sabes que puedes hablar conmigo cualquier cosa.
—Chris mencionó algo ahora en la estación—empecé a explicar y traté de separarme pero ella lo impidió acariciando mis piernas y viéndome a los ojos intensamente.
—Quédate así—me dijo con la voz dulce—. Quédate cerca de mí para que pueda tocarte y abrazarte—yo la abracé fuertemente—. Quiero sentirte cerca. Te necesito siempre cerca de mí.
Nos quedamos abrazadas unos minutos y olvidé la explicación que había iniciado no podía cuando la tenía de esa forma. Su respiración contra mi cuello y sus manos apretando mis caderas y acariciando mi espalda de arriba abajo mientras sus labios dejaban pequeños besos a lo largo de mi cuello y el lóbulo de mi oreja. No podíamos parar de tocarnos y de sentirnos. Estaba completamente perdida por ella y en ese momento sentí la necesidad de hacerle el amor. Cada minuto que pasaba me perdía más en su perfección. Mis labios besaban su cuello mientras mis manos acariciaban sus costados y luego sin poder evitarlo sus senos. La escuché gemir contra mi cuello pero eso no me detuvo para seguirla tocando. Lauren se había vuelto sin duda mi droga personal. Esa droga de la que no podía escapar aunque quisiera. Mi propia adicción.
—Princesa—le dije al oído con mi voz ronca y mis ojos cerrados con mi cuerpo cargado de deseo y pasión—. Lauren, mi amor—mi mano bajó hasta sus piernas y empecé a subir su camisa lentamente solo tenía su ropa interior la cuál moví a un lado acariciándola lentamente mientras mi respiración se volvía entrecortada en su oído y escuchaba sus leves gemidos.
—Te quiero—me dijo al oído acariciando mis piernas mientras sus manos viajaban bajo mi ropa interior apretando mi trasero—. Te quiero tanto.
—Yo también te quiero—le dije suavemente—. Te deseo. No puedo resistirme a ti—la penetré lentamente con dos de mis dedos y escuché su leve grito ronco contra mi cuello mientras su mano se dirigía a mi centro para acariciarme. Estaba lista para ella y cuando lo notó no dudo en penetrarme. Yo arqueé un poco mi cuerpo al sentirla mientras sus labios buscaban mi cuello. No nos besamanos. No nos vimos a los ojos simplemente nos dejamos llevar.
Nos hicimos el amor moviéndonos la una contra la otra. Penetrándonos lenta y profundamente. No podíamos parar de tenernos y no quería parar. Era como si el sexo con Lauren me hubiera abierto la puerta a un mundo que era desconocido. A un mundo donde podía ser yo, sin miedos. Un mundo donde me valoraban y me amaban. Sentí mi cuerpo estremecerse y supe que estaba cerca, y lo mismo podía decir de Lauren. Pegué mí frente a la de ella pero no la besé.
—Abre tus ojos—murmuré contra su boca y ella lo hizo. Nuestras miradas fueron intensas mientras nos penetrábamos. Nuestra respiración era entrecortada y la música se veía interrumpida por nuestros gemidos.
—Es fabuloso bebé—me dijo Lauren y yo sonreí y en ese momento mi cuerpo se estremeció y las palabras se volvieron imposibles de pronunciar. La pasión que compartíamos Lauren y yo era increíble. Era algo que no podía describir con palabras. Había tanta pasión y deseo...tanta cruda necesidad. Lo que compartíamos era real y maravilloso, algo que jamás había vivido con nadie más a pesar de las relaciones que he tenido en el pasado.
Las dos llegamos a un orgasmo desgarrador y nos quedamos con la respiración entrecortada viéndonos a los ojos.
—Una conversación interesante—dijo Lauren jadeando un poco y yo sonreí tratando de nivelar mi respiración. Me acerqué a ella para darle un dulce beso en los labios.
—La mejor de todas—ambas reímos y nos volvimos a besar.
—Si seguimos así vamos a morir de agotamiento—Lauren me ayudó a acomodarme entre sus piernas con mi espalda pegada a su pecho y me abrazó dulcemente.
—Vaya forma más deliciosa de morir—le dije con una sonrisa que ella correspondió mientras me abrazaba dulcemente dándome besos sobre el pelo mientras sus manos se entrelazaban con las mías en mi cintura. Nos quedamos en silencio un momento hasta que supe que había llegado el momento de hablar con ella.
~*~
LAUREN'S POV
"En su voz se escuchaba un deje de inseguridad que me tenía nerviosa"
Habían pasado ya algunos minutos desde que habíamos terminado de hacernos el amor y ninguna palabra había salido de su boca más que pedirme que me moviera un poco para poder levantarse. Cuando ella se levantó de la cama extendiendo su mano para que yo la siguiera me puse aún más nerviosa. No entendía lo que pasaba pero simplemente hice lo que me pedía al ver que empezaba a vestirse.
Eran las cuatro de la mañana. El clima estaba un poco fresco así que me abrigué y también le di un abrigo a ella ya que estábamos en mi casa. Al terminar de vestirnos me quedé de pie observándola sin saber muy bien que decir. De un momento a otro las cosas habían cambiado muchísimo y no entendía nada de lo que estaba pasando.
—Amor...—le dije suavemente y ella me vio y noté en sus hermosos ojos un deje de temor—. ¿Qué es lo que pasa?
—¿Te gustaría dar un paseo en bote conmigo? —mis ojos se abrieron con sorpresa y noté que ella suspiraba—. Hay algo que quiero mostrarte.
—Son las cuatro de la mañana, mi vida—ella asintió tomando mi mano.
—Si no te lo muestro ahora posiblemente pierda el valor y aunque podemos ir en coche el bote nos va a permitir observarlo todo detalladamente. Estaremos allí justo al amanecer.
—Pero...—Camila suspiró—. No entiendo nada Camila.
—Por favor solo confía en mí—yo la vi tiernamente—. Sé que no hemos dormido pero podrías dormir en el bote. Llevemos sábanas y todo lo que necesitamos para abrigarnos. Podemos comprar algo para desayunar si quieres.
—Acabamos de comer—le dije observando los tazones con helado derretido que estaban en las mesas de noche—. No hablo de comida. No entiendo que es lo que pasa. Hace unos minutos estábamos bien y...todo cambió.
—Quiero hablarte de mi familia—me dijo ella y yo me senté a la orilla de la cama pensando en lo que decía—. Hablarte de mi infancia y de una parte de mi vida de la que no he sido completamente sincera contigo.
—Okay—dije tratando de entenderla—. No hablas mucho de tu familia pero sé que trabajan en un periódico. No entras mucho en detalles cuando se trata de ellos.
—Lo sé—ella se acercó a mí—. No hablo mucho de ellos porque son una parte de mi vida que no me gusta discutir, pero creo que ha llegado el momento en que tú la conozcas y siento que si no lo hago ahora posiblemente luego no tenga el valor de hacerlo.
—Quiero entender bien esto, Camila—le dije y sentí como ella se sentaba a horcajadas sobre mis piernas. Yo le acaricié la espalda tiernamente y vi en sus ojos temor.
—Hay muchas cosas que aún no sabes de mí, amor—pegó su frente a la mía—. Hemos vivido las horas más intensas y hermosas de mi vida y creo que mereces saber quién es la persona con la que compartes la cama.
—Pero pensé que ya sabía quién eres—dije sin entender—. Me has hablado mucho de ti y aunque no mencionas mucho a tu familia sé las cosas básicas así como tú sabes de la mía. Obviamente, sabes que me gustaría que los conozcas eventualmente.
—Quizás no he sido del todo sincera—ella bajó la mirada y yo traté de procesar lo que decía alzando su rostro para que me viera a los ojos—. Hay cosas de mí que aún no sabes y eso es lo que quiero mostrarte. Hoy le dije a todo el mundo que estoy saliendo con otra chica y...es probable que mis padres escucharan mi programa.
—De acuerdo...—le dije yo tratando de mantener la calma y entendiendo un poco lo que decía—. Esto se trata de tus padres y el hecho de que sales con otra mujer. ¿Ellos no saben que también te gustan las mujeres?
—No—dijo Camila y yo suspiré—. Nunca había salido con una mujer antes. No puedo definir mi sexualidad así que mis padres no saben nada.
—¿No crees que lo tomen bien? —Camila desvió la mirada.
—No conoces a mis padres, Lauren—me dijo con tristeza—. Sinceramente no creo que aprueben del todo nuestra relación pero eso a mí no me importa. Jamás he necesitado su aprobación para hacer algo.
—Pero te afecta—le dije acariciándole la mejilla—.Te he notado tensa desde que salimos de tu trabajo y creo que los comentarios que hizo el idiota de tu jefe te afectaron. Yo sé que jamás habías salido con otra mujer y puedo entender que te preocupa lo que digan tus padres. Si no te sientes cómoda no tenemos por qué decirles nada aún. Podemos esperar un poco aunque si quieres que hable con ellos yo estoy dispuesta a hacerlo.
—No se trata de eso—me volvió a repetir—. Eso es algo que supongo que pensaremos después. Se trata de otra cosa. Se trata de que sepas en realidad quién es mi familia. Quien es en realidad Camila Cabello, y la mejor forma de que lo entiendas es mostrándotelo. Por eso quiero que me acompañes.
—¿Si voy contigo...cambiará de alguna forma nuestra relación? —le pregunté con temor y ella me vio con el mismo temor reflejado en su mirada.
—Espero que no—me respondió—. Pero todo va a depender de ti. Por favor confía en mí y acompáñeme.
—De acuerdo—asentí y ella se levantó y me tomó de la mano y unos minutos después estábamos en su coche rumbo al puerto de embarque.
~*~
CAMILA'S POV
"Ver la luna siempre me llenaba de cierta serenidad".
La luz de luna aún iluminaba Miami. Y desde el bote la podía apreciar hermosamente. Pero en mi caso, siendo una mujer tan afortunada podía apreciar a dos bellezas que brillaban esa noche. La luna y mi hermosa Lauren. Una Lauren que en ese momento iba dormida en la cubierta del bote porque no había querido dejarme sola y bajar a la recamara. Detuve el bote un momento y me acerqué a ella para cubrirla con una sábana y ayudarla a acomodarse. Como predije no se despertó así que volví a cubierta y seguí navegando. Este tiempo sola es bueno porque me ayuda a reflexionar y tengo un tiempo para ordenar mis pensamientos. El mar siempre ha sido mi confidente. Es como un lienzo en blanco en el cual voy avanzando dando pinceladas de mi más profundos y oscuros secretos. El mar muchas veces ha sido mi salvavidas. Es el lugar que sin importar lo que suceda en tierra siempre me da esa paz y serenidad que necesito.
Por esa razón había decidido ir en el bote a casa de mis padres. Por esa razón había embarcado a mi novia a las cuatro de la mañana en mi búsqueda de sinceridad. Sabía que Lauren estaba confundida. Lo había notado en sus ojos durante todo el camino hasta que finalmente se había rendido al cansancio. Lo que menos quería era herirla, y por esa razón tenía que decirle la verdad. Mi objetivo había sido ocultarlo pero después de lo que vivimos en este mismo bote unas horas atrás me era imposible mentirle. Chris Pratt, ese estúpido, había sido el detonante para saber que mi secreto nunca puede durar mucho.
Al principio, en la Universidad lo único que quería era tener una vida normal. Había ocultado quien era mi familia pero al final siempre había salido a la luz. Mi vida siempre salía a la luz y terminaba perdiendo mi estabilidad, porque odiaba ser catalogada como una niña rica y mimada. Quizás fuera una mal agradecida y algunos me dijeran que era una egoísta por rechazar el dinero que me correspondía al ser la única heredera de la familia Cabello. Pero no quería esa responsabilidad en mi vida. Me gustaba como estaban las cosas hasta ahora. Me gustaba sentir el viento en mi cara, sentir ese olor indiscutible del océano y me gustaba la radio. No tenía más responsabilidades que vivir día con día y adoraba eso. No me importaba la empresa, no me importaba nada más. Bueno...ahora existía algo más hermoso en mi vida que esperaba no perder a causa de ese pasado del que tanto huía.
No puedo evitar ver a Lauren y sentir un nudo en la garganta pensando que va a rechazarme. Mi intención jamás fue mentirle pero tenía miedo de que para ella no representara más que una niña mimada que quiere vivir la vida de forma fácil. Soy millonaria pero solo debido a mi apellido. Yo no quiero ese dinero, no lo necesito. Soy feliz en mi pequeña casa con las cosas que puedo comprarme. Soy feliz sin más responsabilidades que las que yo quiero aceptar. Mi madre siempre me dice que soy irresponsable, que vivo la vida sin pensar en nada más que no sea yo misma. Tiene razón.
En la vida muchas veces se tiene que ser egoísta en muchos aspectos porque como persona siempre debes de buscar aquello que te haga feliz. Eso era lo que mis padres no entendían. Para ellos la felicidad estaba atrás de un escritorio gobernando el mundo entero.
¿Qué iba a hacer yo atrás de un escritorio dirigiendo un periódico?
No era lo que quería para mi vida. Cada año que pasaba había visto a mis padres consumirse más y más en el trabajo. Mi padre prefería pasar tiempo en la oficina que en su propia casa. Los dos preferían los viajes de negocios a pasar tiempo conmigo.
Eso es lo que hace el dinero, te separa de lo que realmente importa para darte un mundo ficticio que es muchas veces algo efímero; y yo no quería esa clase de esclavitud. Quiero libertad, felicidad y sentirme bien conmigo misma. Obviamente aceptar mi herencia sería lo más fácil. Millones y millones de dólares que me arreglarían la vida para siempre, pero el dinero no era importante para mí. Jamás lo ha sido. Por esa razón debo pensar muy bien que haré luego de que Lauren se entere de que su novia, la que vive con sandalias playeras, shorts y camisas sin mangas es la hija de una de las familias más poderosas y ricas de Miami.
Lauren era una mujer de clase media como yo. Trabaja día y noche en algo que ama hacer. Es una mujer compresiva y preciosa que estaba segura entendería mi situación, o eso esperaba.
Ahora solo tenía que tener fe en que Lauren aceptaría mi situación. El dinero de mi familia no me cambiaba, pero esperaba que esa noticia no me cambiara ante los ojos que en realidad me importaban, los ojos de Lauren.
~*~
LAUREN'S POV
"He muerto y estoy en el paraíso"
Así se sentía con unos suaves besos en mi rostro y el olor a café penetrando mis fosas nasales hasta lograr que mi cerebro volviera a funcionar adecuadamente para despertarme de un profundo sueño. Abrir los ojos jamás me había parecido tan hermoso como en este momento. El momento cuando Camila está inclinada sobre mí besándome de la forma más amorosa que existe. Mis mejillas, mi sien, mi frente, mi nariz y cada parte de mi rostro tocado por sus hermosos labios. Yo me dejé querer sintiendo los leves rayos de sol sobre mi piel y recordando que estaba en el bote de Camila rumbo a un destino desconocido.
—Te preparé café—me dijo contra los labios y yo sonreí al sentir sus labios rozar los míos para terminar en un beso tierno—. Sé que no puedes empezar el día sin una taza de café y aunque solo has dormido dos horas espero que esto te ayude. Ya llegamos al lugar que quería mostrarte.
—Tú no has dormido nada—dije incorporándome y sorprendiéndome en ese momento de donde nos encontrábamos—. ¿Qué hacemos aquí? —le dije inmediatamente y Camila me observó a los ojos con añoranza.
Miami Beach
La zona más exclusiva de Miami Beach con las mansiones de famosos y las familias ricas del estado. Mis ojos se dirigieron a Camila que tenía la mirada baja hacía el café que aún sostenía en sus manos.
—Por favor toma tu café primero—me dijo y yo la observé sin entender poniéndome de pie e ignorando su petición.
—¿Qué hacemos aquí? —le volví a preguntar y vi como suspiraba poniéndose de pie y dejando el café a un lado para verme fijamente—. No entiendo nada, Camila. Necesito que me digas que está pasando.
—Este es el lugar que quería mostrarte—me dijo suavemente—. Esa casa—me la señaló y yo dirigí mis ojos a la enorme mansión que me mostraba.
—¿Qué pasa con esa casa? —le pregunté y vi como su cuerpo se tensaba inmediatamente.
—Esa casa es...mía—me dijo y yo abrí la boca pero ninguna palabra salió de ella mientras trataba de procesar lo que me estaba diciendo y vi la casa de nuevo era una casa maravillosa y enorme—. Es de mi familia.
—¿Es de tu familia? —le pregunté entrecortadamente—. ¿De qué miembros de tu familia?
—De mis padres—su voz estaba llena de temor y mi sorpresa no me dejaba ir a abrazarla al verla tan perdida. ¿Qué estaba pasando? Seguramente todavía seguía dormida.
—¿Los que trabajan en el periódico? —me giré de nuevo para ver la casa y sin duda aquello no podía ser una casa para unos simples empleados de un periódico.
—De los dueños del periódico—me dijo ella y alzó su mirada para encontrarse con la mía—. Mis padres...son los dueños del Miami Herald y ésta es la casa donde crecí.
Sentí el movimiento del bote cuando me senté de golpe y vi a mi novia acercarse a mí rápidamente.
"Los dueños del periódico" Camila era hija de los dueños del Miami Herald. La dueña de esa casa que valdría millones. Mis ojos se cerraron ante la verdad.
Dios mío.
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¡Hola!
Muchas gracias por seguir aquí apoyando este fic que tanto disfruto escribir. Sé que no he actualizado muy seguido pero tratar de hacerlo. Espero sigan apoyando y agradezco que lean mis historias.
¿Cómo creen que tomará Lauren la verdad de Camila? Espero respondan. Muchos besos y nos leemos pronto.