Después de la llegada del grupo a Alexandria, tu relación con Rick se había distanciado, apenas se veían y se hablaban. Mientras que él estaba con la seguridad junto a Michonne, tú estabas recolectando con Daryl y Aaron siendo estos dos los que te ayudaban dándote ánimos y convirtiéndose en los más cercanos que sabían tu problema.
Deanna y los Monroe habían hecho una fiesta de bienvenida al grupo que recién se estaba integrando, y es gracias a la fiesta que todo se fue a la mierda.
Jessie la adorable rubia que le había cortado el pelo a Rick, se encontraba conversando junto a él en un rincón de la casa de los Monroe, sin que esté se diera cuenta de tu presencia. Te habías vestido sólo para impresionarlo a él y con la ayuda de Maggie y Rosita habías conseguido tener un perfecto atuendo para la noche y así tal vez arreglar la relación con el ex sheriff.
Observaste con la rubia dejaba un beso en la comisura de los labios de Rick y se quedaba más tiempo de lo esperado ahí, luego de separarse con una sonrisa, él levanta la vista, haciendo que su cara pase de asombro a una de arrepentimiento.
Saliste de la casa de los Monroe lo más rápido posible seguida de Rick y de tu grupo que eran como tu familia.
-______, espera no es lo que tu imaginas.- decía mientras venía corriendo detrás de ti, al alcanzarte te voltea y te observa detenidamente buscando un signo de compasión en tu cara.
-No puedo seguir con esto Rick-musitaste apenas, sentías la mirada de tu grupo que estaba detrás de Rick y es que lo único que querías era encerrarte en tu casa con tu amigas y llorar.
Viste como detrás de ellos salía Daryl con Aaron de la casa del ultimo, apenas te vieron sabían lo que pasaba.
-¿Te rendirás tan fácil?- dijo con una risa sarcástica.- pensé que me amabas más ______.- soltó su agarre de tu brazo, y eso era lo que faltaba, que te culpara a tu cuando él la había cagado.
-¡NO!.- gritaste mientras llevabas las manos a su pecho y lo empujabas.
Sabías que estaban armando una escena, pero es ese momento ya no te importaba, el enojo y la impotencia eran más grande.
-No me culpes a mi cuando tu eres el primero en saltar a los brazos de otra mujer Rick, estoy harta de esto.- dijiste señalándolos.-estoy harta que culpes al resto cuando tu eres el que la vive jodiendo.- lo señalaste.
Daryl, Maggie, Tara y Rosita se acercaban para poder llevarte a casa y es que en ese momento no había nada más que agradecía a tus amigos que poder sacarte de ese lugar.
Mientras te ibas alejando junto a ellos, te volteaste para acercarte de nuevo a él.
-¿Sabes que es lo peor?, La observas como me observabas a mi Rick.- musitaste mientras ahogabas un sollozo, sentiste la mano de Daryl en mi hombro y te llevo a la casa que el arquero compartía con Carol, Maggie, Glenn y Tara.
Apenas cruzaste la puerta de entrada sentiste los brazos de tus amigos rodearte mientras llorabas, soltando todo lo que tenias guardado.