Despierto al sentir los inminentes rayos del sol tocar mi rostro, estos sin piedad provocan ardor en mis ojos, por lo que los cierro mientras los restriego. Miro mi cuerpo y encuentro una polera grande, no es la que solía utilizar ya que esta se encuentra muchísimo más limpia, además de no ser de mi talla, miro a mi alrededor encontrando al mismo payaso que recordaba en mis sueños, le miro unos pocos minutos hasta que reacciono buscando mi cuchillo que no se encontraba en el lugar en donde suelo dejarlo.
"¿buscas esto?"
De su mano colgaba el mediano cuchillo que fue un obsequio de mi abuelo, le miro furiosa y con un poco de fuerza en mis piernas me impulso a toda velocidad, chocando mi cuerpo con él, tirándolo al piso y yo encima suyo. Me siento sobre su abdomen con mis piernas a un lado de él y tomo la cuchilla para alzarla sobre mi cabeza.
"Mueve un musculo y tu cabeza no se encontrara pegada a tu cuerpo"
Siento como mi pelo cae por mi espalda y todo vuelve a ser más lento, siento algo filoso en mi cuello y un aura muy tenebroso tras de mí. El payaso silva y ríe de una manera loca, siento como retiran lentamente lo que sea que se encuentre en mi cuello y procedo a levantarme pero siento unas manos en mi cintura impidiendo mi acción.
"Vamos mujer pervertida, quedémonos unos segundos más en esta posición y dejémonos llevar por la pasión"
Dejo la cuchilla anclada en mi pierna y le golpeó la cabeza con mi mano, me levanto y sacudo rápidamente la prenda con la que visto. Observo que el mismo pelinegro de mis sueños se encuentra frente a mí, toco mi cuello y siento un líquido viscoso, observo mi mano y veo aquel rojo carmesí recorrer mis dedos.
"No sé si les conozco pero es de mala educación hablar con alguna persona sin conocer su nombre, me disculpo por mi comportamiento indebido y espero que podamos comenzar de nuevo. Erin Okanishi, para servirles"
"Vaya, pero si tiene modales. Mi nombre es Illumi Zoldyck"
Le examino el rostro y nada, ningún sentimiento, me acerco lentamente, mis pasos son silenciosos, mi aura se ha ocultado a pesar de estarle mirando directo a los ojos, cuando ya me encuentro frente a frente a este inmenso hombre estiro mi mano hacia su cara tocándola, dejándome sentir su duras facciones ante mi tacto y dejándome apreciar su mente.
"Así que fue tu mano"
Su rostro cambia completamente y siento que alguien me toma del hombro lanzándome al piso mientras que un cuerpo se interpone, el nen de Illumi inundo toda la habitación y miro el piso encontrándome una que otra gota de sangre. Vuelvo en mí y aprecio la escena, el payaso me ha lanzado evitando que el brazo de Illumi se incrustara en mi abdomen.
"Eres muy interesante Erin Okanishi, pero te recomendaría aprender a leer las situaciones de tensión y evitaríamos estos pequeños problemas de amistades"
Luego de unos minutos Illumi se calmó y su nen disminuyó considerablemente, los pájaros dejaron de lanzar alarditos grotescos y ahora un silencio se hizo presente en el pasillo.
"Ahora, mi nombre es Hisoka Morou, el día de hoy iremos a tomas el examen del cazador para poder obtener las licencias. Si decides acompañarnos tendrás que mantenerte alejada de nosotros y actuar indiferentes, como podrás haber notado Illumi es un asesino de primera clase y cualquier movimiento un tanto extraño podrías llegar a no contarla."
Miro fijamente a Hisoka y hago exactamente lo mismo que en un principio hice con Illumi pero este sonríe y toma mi mano acercándola a su rostro, el pelinegro me miraba con seriedad, podría apostar a que trataba de descifrar mi poder pero este ya es bastante obvio, solo con un poco de nen una persona podría hacer esto.
"Que triste pasado y horrible presente, buscando un motivo para vivir es realmente admirable pero lo despreciable es querer acabar con eso, ni una amistad verdadera puedes forjar con Illumi... ¿Qué es lo que realmente deseas hacer aquí Hisoka?"
Acaricie tiernamente su rostro mientras que su expresión facial se suavizo unos instantes para después negar con la cabeza y enderezarse, le observo detenidamente sin desviar la mirada, logrando que volviera su vista a mí.
"Deseo encontrar a alguien que pueda con mis expectativas."
"Yo puedo cumplirlas, tengo suficiente poder para derrotarte"
Su mano se posa en mi hombro y trato de no volver a reaccionar, necesito esta respuesta y si reacciono no podré seguir.
"No podrás cumplirlas, eres muy ingenua y tierna como para poder luchar seriamente contigo. Dime... ¿Cuántos años tienes Erin?"
Ha desviado el tema, tomo una bocanada de aire cerrando los ojos para luego sonreír y volver a mirarle con más entusiasmo que antes, tomo la parte posterior de la prenda apretándola.
"16 años"
"¿Formaras un lazo con esta niña?"
Miro a Illumi con seriedad, ¿formar un lazo?... Pues eso ya se había hecho en el mismo momento en que me trajo a este hotel, y en el preciso momento en que llevo la prenda de cualquiera de estos hombres. Un lazo que no podrá ser roto fácilmente.
"Formar o no formar un lazo ya no va al caso Illumi, esta niña es especial... podría cambiarle el sentido a mi vida"
Quito el cabello de mi cara notando unas cuantas lagrimas caer por mis mejillas, tiene grandes expectativas en mi... no podré soportar tanta presión.
"Hisoka, piensa sobre ello, nos podría retrasar e incluso llevar a la muerte, no necesitamos amistades débiles."
"Entonces te demostrare que no soy débil, pasare ese examen y tendrás que admitir que te has equivocado"
Mis ojos se encuentran firmemente sosteniendo su mirada, negros contra cafés, esta determinación crece rápidamente mientras que coloco mi mano agarrando la polera frente a mi pecho.
"Si no logro pasarlo me alejare de ustedes y les dejare a su criterio si es necesario eliminarme o dejarme con vida"
Limpio mis lágrimas y la mirada de Illumi en ningún momento cambia, se mantiene con esa expresión indescifrable pero su mirada dice que le han complacido mis palabras. Hisoka aplaude levemente atrayendo nuestra atención.
"Con esto aclarado deberíamos partir al examen o llegaremos tarde"
Miro mis atuendos colgados por la ventana a la espera de que el agua se evaporara, me acerco tomándolos y me dirijo al baño. Cambio mis vestimentas y salgo mientras arreglo en una cola alta mi cabello evitando que sea un estorbo. Camino a un lado de estos hombres mientras que platican sobre sus nuevos rivales y negocios. Llegamos a una casa donde vendían ramen y a un lado hay un gran edificio, Illumi se va a otro lugar con su disfraz un poco raro ya que se ve completamente distinto a cómo son sus rasgos faciales. Miro a Hisoka que luego de unas palabras con Illumi entra en aquel sitio mientras que le sigo con una sonrisa, veo que habla con el encargado que nos mira con seriedad para luego indicarnos en que habitación entrar y esperar. Entramos a un tipo de ascensor que descendió rápidamente sin dejar perder otro segundo más a Hisoka.
"Erin, quiero que en estas pruebas no te separes mucho de mí, a Illumi no es necesario que te le acerques ya que podría matarte. Si estas en problemas no dudes en pedirme ayuda, haz amigos y te estaré esperando cuando terminemos estas pruebas. Ah, no mueras tan fácilmente"
Le mire un tanto extrañada por sus palabras y el solo sonrió, el ascender se detiene marcando el número 100, me levanto de mi asiento y camino a la entrada, antes que se abran las puertas miro a Hisoka de lado.
"Entonces... ¿puedo acercarme a ti?"
"Claramente, te protegeré desde las sombras"
Sonrío saliendo del ascensor y veo a un tipo de hombre rana que me sonríe y me entrega una ficha con el número 43, a Hisoka le entrega el número 44. Miro a mí alrededor y no veo a nadie de mi edad, todos son adultos que me miran como si fuera una presa fácil de eliminar, como un conejo en un lugar repleto de animales salvajes.
Tomo asiento en el suelo, en un rincón apartado de todos estos salvajes para evitar que sus miradas se centren en mí. Miro el ascensor notando que cada vez llegan más personas para poder tener la oportunidad de entrar, Hisoka se pasea de un lado a otro y en algunos momentos mira en mi dirección para ver cómo me encuentro. Pasa alrededor de 2 horas y ya vamos en el número 150 de participantes, siento que el sueño comienza a apoderarse lentamente de mi cuerpo cuando un señor con el número 16 se acerca contento.
"No te había visto por estos lados jovencita, ¿Es tu primera vez tomando el examen?"
Le miro un poco disgustada, estaba a punto de dormirme y viene este hombre con una sonrisa tan falsa como la amistad de Illumi. Alzo una ceja con una sonrisa un tanto burlona para proceder con mi pregunta.
"¿Es necesario fingir esa falsa sonrisa? Es muy notorio que has venido a fastidiarme de una u otra manera, de todos modos soy una veterana y no sé qué es lo que tengas planeado pero te recomendaría que conmigo no te metas"
Su sonrisa afloja unos segundos y gotas de sudor caen de su rostro para luego volver a mostrar aquella irritante sonrisa, rebusca algo en su bolso para luego entregarme una lata.
"Disculpa si os he ofendido, como muestra de arrepentimiento te regalo esta soda"
Miro con una sonrisa la soda para tomarla y luego abrirla, le estiro la soda hacia el logrando que me mire un tanto extrañado.
"Vamos, toma el primer sorbo para verificar que no tenga ningún componente dañino, podre tener cara de mocosa inocente pero la experiencia no me falta"
Muchas gotas de sudor caen por su rostro y trata de excusarse pero cierto albino se posiciona a un lado de él y toma la lata tomando un sorbo del líquido dejando al hombre paralizado.
"Viejo, esta soda está realmente riquísima, no las desperdicies con esta vieja y dámelas todas a mi"
Cierro mis ojos cansada de todo este pequeño alboroto, miro con molestia al albino y le quito la lata para darle un sorbo a la soda, me mira un poco alarmado pero sonrío para mis adentro y me levanto tomando del cuello de su polera acercándolo a mí.
"Tonpa, te he advertido que conmigo no te metieras y acabas de cometer un error fatal. Ahora no me hare responsable de mis actos y te advierto que desde estos momentos tu vida peligrara en cada examen. Por tus pensamientos sé de sobras que trataras de buscar a alguien para que me elimine antes que yo lo haga contigo, así que no me hagas perder mi tiempo con personas débiles y entretenme"
Su rostro palidece y le suelto bruscamente provocando que cayera al piso, sacudo mi cabello y miro al albino que me observa con una sonrisa de lado.
"No pensé que fueras capaz de soportar la soda, ¿Cuál es tu nombre?"
Vuelvo a sentarme y cierro mis ojos para abrirlos lentamente deleitándome con esos ojos zafiro, recargo mi cabeza en la muralla para poder mirarle bien.
"Erin Okanishi, un gusto en conocerte chico albino"
"Mi nombre es Killua Zoldyck, un gusto en conocerte Erin"
*Chan! Capitulo finalizado, no olviden dejar sus votitos que me ayuda a motivarme y sus lindos comentarios criticando o apoyando este fanfic:3 les quiero y espero seguir recibiendo su apoyo en cada capítulo<3.