Capitulo veintisiete: "Cuatro años"
Severus POV's
-Tres años han pasado-susurré-¿Cuándo volverá?-alzó la voz y me paré bruscamente-¡¿Cuándo?!
Estaba en mi viejo salón de clases, en el escritorio, calificando varios trabajos de Gryffindor, era algo extraño el saber que su hermana tenía clases conmigo y que yo seguía esperando a su hermana, siempre a Celaena, la amo, y cada día deseo que regrese, pues desde esa noche nada volvió a ser igual, bueno en mí, me sentí peor que cuando Lily murió, me sentía muerto, volví a dar clases en Hogwarts, de pociones, a veces ayudaba en DCLAO, y me la pasaba atormentando a todos los alumnos.
-¡No pueden hacer un trabajo bien!-grité a la nada como si me pudieran escuchar.
-Hijo, cálmate-dijo Albus.
Él y mi mamá siempre estaban conmigo, desde ese día apoyándome y diciéndome que pronto regresaría, Minerva era una buena directora, pero no tenía la costumbre de saber todo de todos en el colegio, no era chismosa.
-Querido, han pasado tres años, y aún no regresa...-la voz de mi madre sonaba triste y cortada- sé que la amas, lo sé y me alegra tanto que hayas vuelto a amar y sonreír, pero tal vez es hora de buscar a alguien más.
Pero... ¡Qué mierda!, pensé para mí, esto no era real, mi ceño se frunció más haciendo más notorias las arrugas.
-Tu madre tiene razón, sabes que te he querido como un hijo y siempre lo serás, a pesar de que sea un retrato-soltó una risa ese viejo loco-pero es momento de ver a alguna otra bruja.
Los miré tan seriamente, que juro que los remate, no era posible que me dijeran algo así, y menos que mi propia madre me lo recomendará. De Albus lo creo, pero mi madre, eso no lo puedo soportar.
-Anda quita esa cara, que los mataras. Ya no tardan en llegar-dijo mi madre.
-Me toca Slytherin, quinto año... ¡Joder! Me toca con su hermana, esa bruja rabiosa.-Negué repetidamente con la cabeza-es odiosa, no entiendo cómo es su hermana.
En menos de lo que hubiera deseado, el aula estaba llena de alumnos de quinto año, Slytherin y Ravenclaw, así es... odioso, y no los de mi casa, bueno no todos, aunque siguen siendo unos idiotas.
-Cada uno hará pociones diferentes, todo aparecerá en el pizarrón, la mitad de las serpientes harán el filtro y la otra mitad el remedio, y de la misma forma con los Ravenclaw. ¿Quedó claro?-dije con voz fría y potente a la vez que movía la varita para que todo apareciera en la pizarra.
Poción Wiggenweld
La Poción Wiggenweld Puede es el único antídoto para el .
Ingrediente:
Metal mágico
Monedas de oro
Miel pura
Pétalos de rosa blanca (opcional)
Preparación:
El metal mágico, agregarlo en un caldero número 1 mientras se agrega una mezcla de miel pura y monedas de oro. Revolver 400 veces en el sentido del reloj y 3 en el inverso. Si la mezcla resulta pegajosa agregar pétalos de rosa blanca. Dejar al sol 2 días y 3 noches. En esta última, beber.
Filtro de Muertos en Vida
Es un somnífero muy potente, enviando al bebedor en un sueño mortal.
Ingredientes:
Los ingredientes necesarios son: ajenjo, asfódelos, raíces de valeriana, pereza cerebral, judía soporífera y el jugo de 12 granos de sopó foro. La poción debe ser similar a una pasa de color liso, negro líquido en la etapa intermedia, sino que debe entonces dar vuelta un tono claro de color lila, entonces claro como el agua, después de revolver la poción a la izquierda en siete ocasiones. Sin embargo, revolviendo la poción a la izquierda y a la derecha siete veces, una vez, como lo indica el príncipe mestizo, había al parecer un efecto mucho más fuerte.
-Profesor... -dijo la voz de Romanov, su hermana.
-Cállate muchacha y has la poción. –Dije con veneno
Celaena POV's
-Estamos en paz... al fin-susurré con alegría con la mirada al mar.-en paz.
Mi vida en Trelliyian había sido fantástica, en esto trescientos años, todo había ido mejorando, conmigo misma, y con mi pueblo, con mi mundo.
Arelian me tuvo que explicar muchas cosas, y aún no podía creer varias de ellas, era impresionante y fantástico el poder que tenía aquí.
El tiempo aquí es diferente, 75 años pasan en Trelliyian, mientras que en Londres, bueno el mundo, apenas pasa un año. Había madurado más por la guerra que enfrenté en el país, mi aspecto era muy distinto, tenía el cabello más corto, ahora me llegaba a los hombros, mi piel ya no era tan blanca, tenía un tono dorado muy bello, a pesar de no parecer tan distinta, así lo era.
También me explicó que yo era heredera de una inmensa fortuna con un gran reino y mucho poder, tanto físico y monetario como mágico.
En estos años me había entrenado para la guerra teniendo una gran destreza en la espada, había aprendido pociones, hechizo y sobre la geografía, la flora y fauna de mi país, a pesar de ser Romanov, yo era por así decirlo hija de Arelian, porque la Luna, mi gran diosa lo había designada, cada dos mil años, llegaba una nueva o nuevo heredero y era mi turno.
-Has aprendido bien-dijo Arelian en un forma humana muy bella, él tenía tres mil quinientos veintinueve años, y su barba era larga como la de Albus, sus ojos eran plateados y su piel era rosa, un hombre viejo y sabía, un gran dragón.
-Gracias a ti y a Kysha.
Kysha es un legendario unicornio, que muere y renace, me ha guiado y enseñado muchas cosas de las que ahora sé.
-Es hora de cumplir mi palabra-dijo Arelian.
Un nudo se hizo en mi garganta, y esa llama que había mantenido prendida pero a fuego bajo crece sin importar si me quemo, lo único que pienso al igual que cada día de estos trescientos años es "Severus, MI SEVERUS", no lo evito y unas lágrimas resbalan por mis mejillas, verlo y besarlo, pero a la vez me aterra el pensar, que me olvido, que tiene a alguien más, oh algo peor.
Miro con emoción a mi viejo maestro, me da una sonrisa sincera, y una mirada dulce y paternal.
-Irás de nuevo a tu lugar, al lugar al que perteneciste. Pero volverás, y te seguirás haciendo cargo aquí de todo, no puedes solo abandonar tu reino. Ten en claro que el tiempo es diferente y pueden pasar cientos de cosas mientras tú haces una cosa haya-me mira con seriedad y solo logró asentir lentamente.
-Solo tienes que abrir los portales como te hemos enseñado-continua.-Y ten cuidado de lo que hagas, ha pasado poco tiempo, pero no tardes, solo ten en cuenta que el tiempo apremia, y aprovéchalo.
Me da un fuerte abrazo y sé que con eso se despide, desaparece caminando hacia el mar, me quedo observando a la nada, y mi único pensamiento es él.
Me paro frente a la nada, y repito las palabras que memorice hace unos años, "Portraitus Reitem" y una energía no visible aparece, me acercó caminando a ella, y mi pensamiento es Bosque Prohibido.
Si mis planes y cuentas son correctos, él debe de estar trabajando en Hogwarts, y esta es una buena forma de llegar a verle.
***
Camino por el bosque, con los ojos cerrados, pero por una ruta hacia una cabaña, que está cerca de los recintos del castillo.
Llego y es ahí cuando reparó en mi vestimenta, es un vestido largo color azul, con mangas largas, al estilo del reinado del rey Arturo y de Merlín, mentalizo algo de ropa más acorde al año... 2003.
No tengo idea de que usar, así que me quedo con mi vestido, mi corona ha sido desaparecía por ahora, sé que está en mi mundo. Toco la puerta con cautela, las luces están prendidas, y el humo sale por la chimenea, escucho unos ruidos fuertes y pesados, y la puerta se abre, dejando ver a un semi gigante, con una barba negra.
-Hola... Soy Celaena Romanov, y vengo a ver si...-no logro terminar mi frase porque el gran hombre ya me hizo pasar a su cabaña, es grande y hogareña, un tanto grotesca por algunos desastres pero igual tiene un toque hogareño, sonrió.
-Me llego Hagrid-dijo el hombre de barbanegra-¿eres hermana de esa Lillyan Romanov?-Me mira con atención.
-Sí, soy algo así como su hermana-le hago saber con un ademán en las manos. Su mirada se endurece y supongo que algo le hizo esa niñata, me apresuro a contestar-no soy como ella, yo soy distinta y amiga de los Weasly.
Sonríe ya más tranquilo, platicamos y me dice sin pensarlo, que Snape es un ogro, y yo río porque eso me hace saber que no ha cambiado tanto, me invita a pasar la noche ahí y mañana escoltarme al castillo, yo acepto con agradecimiento y me quedo ahí, imaginando cómo será estar otra vez con él.
La luz que se cuela por las grandes ventanas me hace saber que ha amanecido y es hora de volver a ver a mi profesor favorito.
-Buenos días, Hagrid-digo cuando lo noto despertar.
No tarda en decirme, que me llevará al castillo, para desayunar y conseguir algo diferente de ropa, le agradezco nuevamente y caminamos por el pasto verde, huele bien y sé que es primavera, lo siento en el viento y en las plantas, ellas susurran cosas que no todos sabes escuchar... Más pronto de lo que imagino nos encontramos, entrando por un corredor, directo a la oficina de la directora.
La contraseña era "Caramelo de Limón" algo digno de tributo al viejo de barbas blancas.
-Profesora-Dijo Hagrid-le presentó a Celaena Romanov.
-Oh gracias Hagrid... puedes retirarte, hay mucho que ver con esta jovencita.
Reí sin querer, al escuchar "jovencita", después de todo tengo 321 años.
-Hermana de la joven Romanov-asentí- su hermana es muy mala, tanto en calificaciones como comportamientos y...
-Mire profesora, no tengo interés por saber de ella, eso se los dejo a sus padres-dije interrumpiendo-solo vengo a saber sobre Severus Snape, y visitar el retrato de Albus, no tengo mucho tiempo.
-Bien, esto es interesante... no se preocupa por su hermana-negué y reí.
-No es mi hermana, no hace mucho, bueno unos años, me enteré de que fue adoptada, y eso, pero no es mi hermana y dudo que ahora parezcamos eso. ¿Puedo ir a visitar al profesor Snape?-pregunté impaciente.
-¿Con esas ropas?-se acercó a mí, eh hizo un hechizo sencillo para desvestirse, asearse y después hizo aparecer ropa-así está mejor.
-Sí- me miré, era una blusa color blanco, muy bella y con bordados de hipogrifos, una falda larga de color negro, era bello.
-Oye Minnie... ¡Santo Merlín! Creí que no regresarías muchacha.-dijo el retrato mirándome con sorpresa.
-Hola...
-Tengo que decirle a Ellien que estás aquí.
-Espera, no, quiero que sea sorpresa.
-¿Dónde estuviste?-preguntó
Minerva hizo un ruido con la garganta para recordar que estaba aquí.
-Bien, bien-dije-iré a su oficina ¿mazmorras?-asintieron ambos-y luego les contaré....
Salí con dirección a lo que suponía serían las mazmorras. Caminé por varios pasillos, hasta que la temperatura se hizo fría cada vez más, recordé vagamente que me señalo la que fuese su antiguo salón, así que me acerque y respire profundamente, me aterraba su reacción, o lo que pudiera ver.
No toque la puerta, la abrí y rechinó en respuesta, comencé a caminar por la puerta y esta se cerró sola, camine y de pronto su voz se escuchó, era igual a como la recordaba, pero no lo veía.
-Insolente, nadie te permitió pasar, le restare muchos puntos a tu casa...-no terminó de hablar.
Salió de un cuarto pequeño y cuando sus ojos se cruzaron por los míos, me sentí feliz y sonreí en respuesta, no hablaba... me miraba de pies a cabeza sin dar crédito a lo que veía.
- ¿Ce... Celaena? -preguntó con voz quebrada.
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¡Holas! Capitulo nuevo, yey, soy feliz, por que subí capitulo y triste por lo que viene en la novela :c:
¿Les gusta el cap? ¿Que sucederá? ¡¿CÓMO REACCIONARA MI ESPOSOS SEVERUS?!
Bueno por favor una estrellita así re sensual y un comentario re violable 7u7.
Byes. Besos XOXOXO
-Abby